Creo que os estáis centrando mucho en el huevo y poco en el pedrusco XDDD
Knox sabía que no había tenido demasiado éxito con el examen de la piedra enjaulada, pero no por ello iba a dejar atrás la oportunidad de examinar el enorme pedrusco que había permanecido oculto en aquella habitación. El profesor se acercó y miró de cerca la roca. Hizo el amago de tocar la roca, pero finalmente declinó aquella idea.
Se encontró entonces en los papeles que estaban tirados alrededor de aquel enorme pedrusco. ¿Era como si sirvieran de nido? La idea de que la roca pequeña no era una roca sino un huevo, hizo que surgieran ideas extrañas en la mente del señor Makepeace. ¿Y si eso era también un huevo? Era imposible dado su tamaño, pero había presenciado tantas cosas raras en aquella casa, que ya nada le extrañaba.
Agarró los papeles hechos jirones y trató de leer algunas de las palabras escritas en éstos. Sabía que ni en un siglo podría ordenar todo aquello y juntar las piezas de aquel puzzle, pero igual podía hacerse una idea acerca de que trataban aquellos documentos antes de ser desmenuzados. Finalmente y tras un buen rato intentando aquello, se piso en pie y volvió a dirigir su atención a la roca.
Aquellos extraños símbolos parecían llamarle. La curiosidad que despertaban en él aquellas runas era muy grande. Finalmente se decidió a tocar la roca y lo hizo en el punto en el que se encontraba uno de aquello extraños glifos. Tocó con la yema de su dedo y fue recorriendo el cuerpo de aquel símbolo hasta dibujarlo con su dedo por completo.
Intento averiguar de que trataban los papeles rotos.
Creo que ninguna de mis habilidades sirve en este caso. ¿Buscar libros?
Roger vio complicado saber si aquella pequeña roca era un huevo o lo estaba viendo así influido por el comentario de su hermano.
-Toma Kenneth, creo que esto supera cualquier conocimiento de biología que pueda tener. ¿Es un huevo? Si es así no he visto un huevo igual. Para mí no deja de ser una pequeña piedra pintada. - Le devolvió la piedra a Kenneth.
Después se unió a Knox en su intento de comprender algo más del enorme pedrusco de la habitación. ¿Cómo pudo entrar esta cosa ahí dentro? Es imposible a no ser que se materializara o creciera ahí dentro, lo cual también es una autentica locura. Sin saber que hacer, Roger apoyó las dos palmas de sus manos sobre la enorme roca y acercó su oreja sobre ella. A continuación dio unos pequeños golpes para saber si la roca estaba hueca por dentro.
¿Esta hueco? XD
No hay mucho que sacar.
La mayoría de las notas son desvaríos sin sentido, en donde habla de rocas, monolitos, alienígenas, monstruos y un sinfín de locuras que no parecen tener pies ni cabeza. En realidad, de esos escritos lo que puede sacarse es que quien lo escribiese, estaba como una chota.
La roca es compacta. Nada de hueca. Es como una montaña pero en chiquitito ;)
Definitivamente aquello era una roca. Sin más. Pensó Roger mientras se separaba de la solida piedra de más de un metro de altura. Lo que más llamaba su atención, aparte del origen de la misma, eran aquellos extraños glifos que se escapaban de su entendimiento. Roger sacó un pequeño cuaderno que siempre llevaba a mano en su americana y anoto con lápiz los glifos que aparecían en la piedra grande. Después volvió a la piedra pequeña y copió en otro renglón los glifos de la piedra pequeña.
No sé si llegaremos a entender este extraño idioma, pero es posible que lo podamos buscar en otro lugar de la casa, o consultarlo con algún experto fuera de aquí.
Anoto los glifos en mi maravilloso cuaderno y los comparo por si coinciden, o quien sabe, quizás me recuerden a alguna iconografía básica que nos ilumine en el sombrío sótano de Thomas Fell XD
Perfect. Es una buena idea. Nunca se sabe cuándo os hará falta XD
- He estado ojeando los papeles del suelo... - Desveló el profesor. - No hay mucho que se pueda sacar en claro... - Dijo decepcionado. - Lo poco que he podido recopilar son fragmentos inconexos que hacen referencia a rocas, monolitos, alienígenas, monstruos y un sinfín de locuras más. ¡Es un galimatías sin sentido! Vuestro pobre padre perdió la cabeza definitivamente antes de desaparecer... - Concluyó el señor Makepeace.
Acto seguido trató de rodear la piedra en busca de algún indicio y acto seguido trató de mover la roca. No sabía muy bien con que intención, pero lo creyó conveniente.
Los hermanos Fell me habían quitado el huevo de las manos por lo que me centré en la roca del suelo. Cuando vi que el señor Makepiece intentaba moverla me acerco a ella y empujo con él.
A pesar de que empujabais con todas vuestras ganas, eso no se movía. Era como si una montaña entera se hubiese establecido en casa de Thomas, y no existiese forma humana de quitarla de allí. Por otra parte, los glifos que hay en ella se parecen a los del huevo, aunque son desconocidos para vosotros, al menos, a primera vista.
Una idea me viene a la mente. ¿Y si las dos piedras fueran como un rompecabezas? Llave y cerradura por así decirlo. Por probar no pasaba nada.
Tras coger la piedra/huevo pequeña de las manos de Roger me acerco a la roca grande y la coloca encima. No estoy muy seguro de que vaya a pasar algo. Pero por intentarlo que no quede.
- ¡Justo estaba pensando en eso, señor Cleveland! - Dijo al ver las intenciones de aquel hombre.
Juntar las piedras era una idea que se le acababa de pasar por la mente al profesor. No lo dijo, pues al fin y al cabo, le parecía una locura, pero... ¿Qué no estaba siendo una locuras desde que entraron en aquella casa?
- Pruebe de juntar los glifos iguales, si es que los hay claro... - Sugirió.
La idea parece buena y Cleveland se acerca decidido a la piedra con el huevo en la mano, y coloca los glifos de manera que coincidan.
Y algo empieza a ocurrir.
Un extraño zumbido comienza a aparecer, procedente de la roca. Cleveland nota como la superficie de esta comienza a vibrar, cada vez de manera más intensa. Además, el zumbido se hace más y más penetrante por momentos, más agudo, hasta el punto de empezar a resultar no solo molesto, sino también doloroso.
De pronto, un extraño relámpago rojo surge de la roca e impacta contra el cuerpo de Cleveland, haciendo que éste desaparezca en un cegador destello de luz blanca, ante los ojos de los demás.
Después, otro relámpago golpea la pared, como si fuese un arco eléctrico, y a Knox, que al igual que Cleveland desparece bruscamente.
Por último, los relámpagos se hacen más y más abundantes, saliendo en todas direcciones e impactando contra el resto de vosotros.
Con cada impacto, sentís como una intensa quemazón en vuestro cuerpo que os recorre de los pies a la cabeza, y un espasmo que parece que va a partiros en dos, hasta que...