Partida Rol por web

esto...

me toca a mi. Esque no me encuentro en el tablero virtual, creo que me he perido. siento ser tabn coñazo...

El humo comenzaba a disiparse y Tock pudo ver dos sombras oscuras sobre el polvo blanco, en el exterior. Elo se mantenía a su lado, agazapado. Le hizo una señal de que le cubriera y se movió hacia otra posición, donde pudo barrer más área. Tenía el arma preparada y lista para usarla. Con la otra mano activó el comunicador y dijo algo que el twi´lek no pudo escuchar.

Por otro lado, Ar-Han devoró la distancia que le separaba del hombre que le había disparado.

Vi al hombre que me había disparado.

Tenía mi sable en la mano y me cubrí con el. Preparado para otro disparo.

-Quiero habklar contigo y podemos hacerlo por las buenas o por las malas. Tu decides

- Maldito - murmuró el individuo, y levantó el arma con intención clara de atacar a quemarropa.

El disparo salió del arma sin avisar, y se estrelló en la superficie verde del sable que llevaba el hombre que lo blandía. El haz de blaster se perdió a lo alto en la lejanía sin que el espadachín apenas se hubiera movido.

Por otro lado, Elo hizo una señal a Tock indicando que parecían solos. El twi´lek tenía a tiro a los dos individuos que parecían forcejear entre el humo que aún no se había posado.

Tock no podia creer lo que acabada de ver, ¿había sucedido realmente?. Entre aquella neblina de polvo era complicado discernir lo que pasaba, pero el hombre con el sable brillante acababa de desviar el disparo de Ikoo con una facilidad pasmosa. Quizas todo fuese futo de la confusión y la adrenalina.

Respiraba con fuerza para hacer que el aire pasase los filtros de su mascarilla. En cualquier otra circunstancia esto no supondría molestia alguna, pero ahora mismo, su cuerpo demandaba más oxígeno y a mayor velocidad de lo que suele ser habitual. La sensación no era agradable, pero era mejor que estar respirando todo ese polvo.

Con el bláster en la mano, intentó apuntar hacia la figura de Ikoo, pero el tiro era complicado. Tock albergaba dudas sobre las intenciones del hombre del sable de luz y se estaba planteando el intentar escapar de ahí aprovechando este momento de distracción.

Miró a su amigo Elo y le hizo un gesto con su mano izquierda: dedos índice y corazón imitan el caminar humano y apuntan hacia el exterior.

-¿Nos largamos?- Intentó proyectar este mensaje en la cabeza de su compañero.

Elo escuchó a su compañero y miró alrededor. Asintió.

- Es mejor que salgamos de aquí, desde luego. Además, dentro de...

Se escucharon los sonidos de disparos en las cercanías. Después de la explosión, Tock pensó que ya no podría oír nada, pero le llegó claramente, tras la calma, la sensación del entorno, y se dio cuenta de que a su alrededor había varios puntos en los que también se habían establecido combates, o esa sensación daba.

Elo se movió entre los escombros.

- Esta zona es segura. Aquí hay muchos simpatizantes. No entiendo un ataque tan arriesgado. Vamos, sígueme.

El hombre se escabulló hacia atrás, dejando a los dos combatientes en su pelea particular.

Vale. Sera por las malas!!!

Miré con atención la sombra de mi rival entre el humo. Me concentré en su Blaster y ataqué con intención de partirla por la mitad.

A distancia tan corta, el blaster del contrario estaba muy expuesto, y un golpe experto del padawan fue más que de sobra para cortarlo limpiamente, dejando tan sólo la mitad de él, inútil, con un extremo incandescente.

El hombre dio un salto hacia atrás por puro instinto, y echó la otra mano hacia atrás, buscando algo en su interior. Nada bueno, sin duda.