Seguía en el suelo, podía sentir el corazón palpitante en las cienes, y un sudor frío me recorría la cara. Instantes antes de que el bandido del escudo echara a correr había intentado patearle, lo cual no fue muy buena idea viendo la cara de ira que puso entonces. Me había dado por muerto hasta que el extraño se envolvió en aquel fulgor oscuro.
Ahora me sentía aliviado pero raro. Tenía la sensación de que había conservado la vida, pero ahora le debía algo a aquel extraño. Era la primera vez que estaba en deuda con alguien; por norma era al revés, muchos son los que aún hoy me deben favores por mis tiempos de asesino.
Iba a presentarme, y a demostrarle lo muy agradecido que le estaba, pero no parecía que aquel extraño fuera la clase de tipo al que le interesan las formalidades, así que fui conciso:
- Estamos a un par de jornadas de Faris, en el camino hacia Drasenloft.
Me quedé un segundo en silencio. Quería invitarle a pasar la noche en el campamento, pero apenas le conocía, y no sabía si a August le haría puñetera gracia todo aquello. Así que decidí que por el momento no le diría más de lo necesario, y una buena forma era avasallarlo a preguntas.
- ¿Quien eres? ¿De donde vienes? ¿A donde vas?
La respuesta del Drow era cuanto menos desconcertante, Tenebrae intentaba recordar en donde se encontraban esos lugares que él le mencionaba y al final, era esfuerzo en vano. La verdad es que si hacía memoria, había viajado al sur, luego del incidente con el Templo del agua, creía que viajaron al este llegando al valle del viento, el cual parecía limitar con Vermass... Pero Faris y Drasenloft no eran lugares que él pudiera usar para ubicarse y la única certeza que tenía, era que estaba lejos de donde debía estar.
De todas formas, mientras Tenebrae intentaba mantener la calma para no alarmarse por estar lejos del campo de la confrontación que debería estar pasando en el Valle del Viento, no tardaba en escuchar las preguntas del Drow. Por unos instantes su mirada se clavó en el Drow, intentando analizar sus intenciones...
Soy Sir Tenebrae Drash de la Temple, Guerrero del clan de la Temple y Paladín del Equilibrio. Vengo del Valle del Viento y preferiría volver a ese lugar aunque me encuentro perdido ya que no puedo reconocer los nombres que me dices...
Al final Tenebrae terminaba por responder las preguntas del Drow, él no podía hacerle daño alguno ni afectar a su misión con saber todo eso a pesar que se presentaba formalmente. En esos momentos parecía estar lejos de la batalla y eso no le gustaba nada, necesitaba mantener la calma y por el momento, si no estaban cerca del valle, lo mejor sería viajar hacia el poblado mas cercano y conseguir un mapa antes de decidir que hacer.
Es posible que esos ladrones intenten buscar refuerzos para un nuevo asalto y supongo que te diriges a ese lugar, Drasenloft... Si el viaje no será demasiado largo, podrás contar con mi ayuda siempre que respondas a mis preguntas.
Faris parecía estar mas cerca que Drasenloft, pero Tenebrae se sentía tan perdido en esos momentos que prefería tomar el camino seguro y llegar antes que vagar sin rumbo por semanas. Además, aquel Drow podrá hablarle de la región y ayudarlo a saber en donde estaba exactamente o mas bien, que tan lejos esta en realidad del Valle del viento o Arisu.
Me levanté aún algo aturdido, y me rasqué la barbilla mientras pensaba cual era la opción más sensata. Llevar a aquel tipo extraño hasta el carromato no parecía muy coherente, quizás incluso fuera un peor asaltante que los otros. Por otro lado no quería mostrarme descortés con él, al fin y al cabo me había salvado la vida.
Además estaba eso del "Valle del Viento" a pesar de mis años en el camino nunca había oído hablar de ello, aunque a lo mejor August sí.
- Conozco alguien que quizás pueda ayudarte. Puedo llevarte ante él, pero deberás entregarme esas dos armas, cuando sea el momento te las devolveré.
Dije ésto último con bastante temor, no parecía el tipo de persona que le gusta andar por el mundo desarmado, pero no quería arriesgarme a que montara una escabechina en el campamento.
- ¿Y bien?
La mujer sonrie y dice:
- Si has aparecido en nuestro templo quiere decir que no eres una persona peligrosa y con tus deseos de agradecernos los cuidados estamos seguros que podras hacernos el favor, asi tu deuda quedara saldada.
La mujer comeinza a alejarse y dice cuando esta en el marco de la puerta:
- Aun asi si no deseais hacer el encargo no so preocupeis pero dejad la carta aqui
Tras esto se marcha caminando con tranquilidad sin mirar atras
Había alguien que pudiera darle mas información aunque pronto Tenebrae clavaba su mirada en aquel Drow de una forma un poco mas hostil ante aquel pedido de disponer de sus armas. Él escucho como aquel ser casi parecía dispuesto a traicionar a un supuesto mago para salvar su pellejo, podía ser una treta o todo lo contrario... Como confiar en un extraño, sobretodo en un drow, que le pedía que entregara las únicas armas que podrían servirle para defenderse.
Pretendes que entregue mis armas y me presente indefenso? Comprendo que dudes de mis intenciones y yo no siento aprecio por tu gente, pero si quisiera matarte ya lo habría hecho, incluso si hubiese querido acercarme a quien supuestamente protegías para atentar con su vida... No tengo interés en entrar en un conflicto contigo o los tuyos.
Entregar sus armas a un Drow era algo impensable, pero necesitaba las respuestas que buscaba y la ayuda que ese miserable le ofrecía. Pero dejar sus armas era algo realmente difícil de lograr, aunque recordando las palabras de otro Drow, había una pregunta mas que hacer antes de ceder ante esa petición o hacer algo mas drástico.
De donde eres? Donde vive tu pueblo?
Si no era un Drow de Nairaith puede que ceda ante ese pedido ya que por lo que pudo aprender antes de toparse con el Templo del Agua, fue que habían diferentes razas de Drows y no todos era esclavistas... La respuesta de aquel Drow era vital para evitar mas problemas o al menos, para que Tenebrae siguiera buscando ayuda en él.
- Yo pertenezco al camino, y mi pueblo vive por toda Gaya - Dije sin pensar. De pronto me envolvió una aura de nostalgia y el recuerdo de mi hogar se apoderó de mis sentimientos. Llevaba ya tanto tiempo lejos de casa...
- Perdón no quería ser descortés: Soy Ducky, vengo de una pequeña ciudad de comerciantes y mercaderes bastante lejos de aquí.
Viendo que le costaba entregar las armas decidí no darle más importancia.
- Olvídalo, pero mantén las manos lejos del cinto.
Entonces empecé a andar hacia el campamento, esperando a que Tenebrae me siguiera.
No se de donde vengo >.< Cuando hice la ficha no el dí nombre a la ciudad ya que desconozco la geografia de Gaia... A ver si a Jose se le ocurre algo, o viendo que tu controlas puedes sugerir algo tmb.
Tenebrae no sabía interpretar muy bien esas palabras, pero no se parecía a los orgullosos esclavistas que conoció y en cierta forma, eso le daba el beneficio de la duda, sobretodo cuando luego de presentarse, no insistía con el asunto de las armas. Podían llegar a un punto medio, él podría aceptar guardar la hoja de aquella espada para darle mas seguridad aunque para eso...
Espera, como veras no tengo vaina para estas espadas.
Dice luego de mirar las hojas de sus nuevas armas, ambas no parecían llegar al punto de comparación con Eliza, pero decidió quedarse con la que creía que estaba en mejores condiciones y clavar la otra en el suelo. Solo un hombre estaba tendido y solamente una vaina podría conseguir por lo que la otra, terminará temporalmente en manos de de aquel Drow llamado Ducky.
Buscaré lo que necesito de ese cuerpo y la otra espada la podrás tener para que te sientas mas seguro, aunque no te la cedo.
Le explicaba mientras se dirigía hacia el cadáver de aquel que murió por su daga, lo primero que hizo fue recuperar la misma para guardarla en su bota para luego, buscar monedas o cualquier cosa que pudiera servirle ademas de la funda de la espada.
Pues, siempre pudiste ser adoptado o,o. la verdad es que la pega con mi pj son los drows de esa ciudad, pero incluso si eres de ahi, no ve en ti un comportamiento como el de sus antiguos captores ^^. En lo personal, me gusto esa respuesta XD
Escucho ruido que se acercaba, en menos de un minuto el lugar estaría lleno de otros marineros. Si todos era igual de rudos, no podría con todos. Negó con la cabeza, mientras se arrepentía de haber tomado aquel corto desvió en la misión. Miró a las hadas, y les hizo una señal de que guardaran silencio, mientras de su mochila cogía la granada de humo. Se las llevaría consigo, quizás y podría venderlas en Drasenloft para conseguir nuevo equipamiento, o algo por el estilo. Programo la granada para que liberara el gas en treinta segundos. La arrojó, mientras tomaba las jaulas de las dos hadas que le habían llamado, la de cabello blanco y la de cabello rojo. Y corrió hacía la popa del barco. Divisó su propia embarcación no muy a lo lejos, si se esforzaba podría llegar nadando, pero antes de saltar, les aviso a las hadas
- Espero que no les moleste mojarse -
Me quedé esperando hasta que Tenebrae hubo recogido lo necesario y con un gesto le dije que me siguiera hasta el campamento. "Para ser un Guerrero del clan de no se dónde y Paladín de no se qué parece un muerto de hambre rebuscando entre los cadáveres" Recogí la espada clavada en el suelo y la mía pocos pasos más allá. "Casi me olvido de ti..."
- ¿Oye, te importaría hacer un cambio? - Sostuve ambas espadas, la mía era una espada corta, sin demasiado valor y la otra era larga y tampoco tenía nada de especial, pero quizás era una mejor opción. - Al fin y al cabo a ti te han salido bien de precio.
Motivo: Negociacion
Tirada: 1d12
Dificultad: 4+
Resultado: 5 (Exito)
No se si tengo que usar tiradas cuando hablo con otros PJs... En cualquier caso el trato no es tan malo, así que ya sabes: Din din din din.
Scire se vistió calmamente, preparandose para tomar camino. Tenía un sentimiento de desazon grande al pensar en la chica, Por otro lado cuestionaba si el tema del libro, de la chica y del bárbaro había sido un mero sueño provocado por algún accidente que la dejara sin conciencia en alguna de sus marchas.
De momento decidió apartar esas ideas de su mente, dar la carta, y si nada se le aclaraba despues de eso probablemente terminaría olvidando el suceso, o eso había determinado. Guardó la carta consigo, obviando la tentación de leerla.
No es de mucha educación fisgar en cosas ajenas...
De todas formas paso los ojos por el sello, por si había alguna forma de vulnerarlo sin que se notara luego. Se recordó a si misma su propia cita, hace mucho.
"El deseo de saber me puede. Será mi perdición algún día."
Scire examina el sello y se da cuenta que es un sello de cera, si lo quita se vera claramente que ha sido quitado, tiene un emblema familiar que por lo que puede leer esta en elfico, por fortuna tiene algunos conocimientos de este idioma y puede ver algo similar a Lionforce o Forgelion no esta segura pero no esta muy alejada del nombre, sin duda es un sello familiar y tiene que ver con un leon ya que es el elemento principal de este.
Al salir a la calle puede darse cuenta que es tarde, esta atardeciendo y esta nublado, aparentemente una tormenta estallara en no demasiado tiempo. Las mujeres le habian indicado que deberia ir a la puerta principal de acceso a la ciudad, por lo que Scire camina habia el exterior de esta, para llegar tiene que atravesar casi toda la ciudad pudiendo ver como las cosas son de color blanco, ademas hay una gran cantidad de capillas y de templos por todas partes, la guardia de la ciudad parece estar por casi todos lados y muchos sacerdotes y peregruinos pueden verse por toda la ciudad.
Scire llega a la entrada y ve algo que le sorprende, caminando con tranquilidad puede ver a dos hombres y una niña, uno de los hombres es un elfo, el otro parece un humano con el pelo de color blanco, pero lo que realmente le llama la atencion es la niña, esta lleva consigo un pesado libro y va vestida de verde con una capucha de color negro, tal vez el viento o tal vez la casualidad hacen que pueda ver el rostro de la niña y es un rostro familiar, es aquella niña, Eliza que estaba con el barbaro que mato a Kayla Tenebrae, sin embargo el no esta por ningun lado.
En orden, elfo, humano y Eliza (le he cambiado la imagen y esta es mas adecuada, pero la reconces como la misma)
Aqui te dejo la imagen de la ciudad
A partir tus turnos en la escena de este link: http://www.comunidadumbria.com/partida/el-mundo-de-gaia-nuevo-comienzo/el-reino-sagrado
¿Estamos enjauladas nosotros o estamos volando?
- Creo que nosotras no nos mojaremos. - Entonces justo en el momento en que saltó nosotras le seguimos volando para llegar a su posición dejando un rastro de polvo mágico.
Todos llegaron con facilidad, las dos hadas y el humano, este ultimo nadando con algo de esfuerzo ya que su armadura era bastante pesada como para nadar con facilidad en una tormenta con ella.
La embarcacion por fuera parecia bastante destartalada, de hecho nadie diria que podria aguantar la tormenta, sin embargo lo estaba haciendo sin demasiados problemas, y esto era debido a lo que pudieron encontrar en el interior, las hadas quedaron asombradas ya que se trataba de una embarcacion totalmente hecha de metal con toda clase de aparatos con botones y luces, ademas habia espejos con informacion en ellos escrita.
Mojados y algo cansados estaban en la embarcacion, la tormenta parecia empeorar por momentos, pero por fortuna el gran barco estaba cada vez mas y mas lejos de ellos
Frente a las hadas, se retiro el yelmo, dejandoles ver su rostro. Se acercó al panel de control de la embarcación, aún restaban unas cuantas horas antes de llegar a Drasenloft. Se quito también la armadura para que esta secase bien. Bajo ella vestía un pantalón negro, y una playera sin mangas ajustada al cuerpo. No estaba mojado, la armadura era impermeable, pero si se encontraba un tanto húmeda. Observó a las hadas, aún era algo extraño, jamás había visto una que no estuviese en un juego de vídeo.
- Esperen aquí... -
Se retiró con una expresión un tanto molesta en el rostro. Se fue hacía su camarote, para cambiar sus ropas por unas identicas, y el calzado, para luego volver unos minutos despues.
El barco se pone en marcha con un crijido, aparentemente la tormenta ha empeorado durante este tiempo y le cuesta mas al barco avanzar, sin embargo parece que la embarcacion aguanta por moemntos. Varias horas pasan en la tormenta hasta que algunas maquinas empiezan a zumbar, rapidamente Gabriel se dirige a mirar que sucede y no puede creer lo que ve, una gran ola se dirige hacia ellos, un tsunami como habia oido hablar a algunos marineros y sabe que la situaicon se complicara, por desgracia no le da tiempo a reaccionar mas alla de asegurarse a la embarcacion, segundos despues todo es agua y poco despues negrura para los tres tripulantes.
Cuando recobran la cosnciencia se encuentran en tierra, entre restos de la embarcacion, Torween y Gabriel no hay ni rastro de nadie mas, algo desorientados miran hacia su alrededor y pueden ver como un grupo de personas pasa no muy lejos hablando, se tratan de un hombre en una carreta, escoltado por un drow, dos humanos, uno de ellos con un arco y una mujer
A partir de ahora responded aqui: http://www.comunidadumbria.com/partida/el-mundo-de-gaia-nuevo-comienzo/caravana-comercial
Si hablais a los de la caravana marcad todos los destinatarios si tratais de pasar desapercibidos de ellos no marqueis ni a Tenebrae ni a Ducky
¿Sigo con mi equipo intacto tras el naufragio?