Caminaron durante aquel día y el siguiente y llegaron a la pequeña aldea que figuraba en su recorrido al anochecer del tercer día tras abandonar Bree. Allí la gente se afanaba en recoger rápidamente todo lo posible antes de que el sol se ocultara. Miraron a los dos desconocidos con miedo, pero al ver que no eran más que viajeros siguieron recogiendo, en cuestión de minutos el pueblo quedo desierto.
Las ventanas de las casas se encontraban cerradas a cal y canto, e incluso alguna tenía clavada unos maderos para evitar su apertura. Con las puertas sucedia tanto de lo mismo. Minguna luz se veía en todo el pueblo salvo la de la vieja taberna.
Que extraño comportamiento el de los lugareños, ¿no te parece?
Dirijámonos a la taberna en busca de información y así tendremos un lugar caliente y cómodo en el que poder pasar la noche.
Sí, me parece muy extraño, normalmente estos pueblos gozan de mucha vida por las noches. Meditó recordando su paso por allí hacía unas semanas cuando viajo hasta Bree.
Recuerdo que cuando pase hacía Bree, la gente de este pueblo estaba en la calle hasta entrada la noche, los niños jugaban por las calles y la gente se reunía en los soportales para hablar... Que extraño.. Comentó mientras caminaban hacía la taberna.
Es extraño que hayan cambiado tanto desde tu visita, creo que debemos de investigar que es lo que sucede y la taberna es el lugar indicado para empezar.
Acelero el paso para llegar a la taberna.
Cuando entraron en la taberna del pueblo, esta se encontraba tan desierta como había quedado el pueblo. Un viejo borrachin y el tabernero nada más. La taberna parecía grande y con buen espacio para mucha gente, y tenía el aspecto de que así había sido otras noches, pero está no.
Al entar el tabernero se sobresaltó y el borracho no pudo evitar reirse.
Entro y me acerco hasta la barra buenas noches tenga usted le digo al tabernero nos gustaría tomar algo para cenar y si es posible un lugar en el que pernoctar, si es posible, claro.
Claro que es posible. Dijo el hombre. De hecho pueden elegir la habitación que quieran, están todas vacias. ¿Y para cenar que desean?
¿Todas vacías, como es eso que todas las habitaciones estén libres? y otra cosa que me ha llamado la atención es que este el pueblo y la taberna desierta, ¿por que?
El tabernero intentó eludir la conversación, parecía que tuviera miedo y no quería contarles nada por si acaso decidian marcharse del pueblo poniendo pies en polvorosa, pero el borracho continuaba riendose y empezó a contarles el por que.
Hay un fantasma que habita el bosque... sí, una figura de mujer que va acompañada de un lobo, seduce a los hombres con sus ojos azules y luego se come sus almas... Continuó riendo.
El tabernero pareció resignarse.
Sí, es cierto lo que dice. Además unos hombres vinieron esta noche como vosotros y fueron a buscar al fantasma... Malditos locos. Uno de ellos era de vuestra raza... Imagino que ya estaran muertos. Si quereis un consejo lo mejor que podeis hacer es pasar la noche aquí y mañana seguir vuestro camino.
Susurro a Elendorn ¿que te parece si investigamos lo de ese supuesto fantasma femenino?
Elendorn se debatía entre la incredulidad y la prudencia, pero la curiosidad ganó la partida.
Sin duda eso explica por que motivo el pueblo esta desierto, sería una buena historia que investigar. Dijo. Aunque quizá no sea del todo incierto, las Quebradas de los Tumulos, no paran muy lejos de aqui. Recordó con voz entrecortada y temerosa.
Bueno, por hoy pasaremos la noche aquí y mañana por la mañana nos iremos e investigaremos un poco ese bosque
Mientras les mostraba sus habitaciones el tabernero no paro de decir que: "es muy buena idea por su parte y muy sensato, haberse quedado a pasar la noche e investigar o hacer lo que quieran por el día."
Pese a todo lo que les dijeron, la noche pasó tranquila y ninguno escuchó ruidos raros antes de caer en un sueño profundo y reconfortante, que les ayudo a aliviar el cansancio del camino.
Al día siguiente el gallo despertó al pueblo cuando el sol asomaba, y la aldea volvió a la vida, saliendo de su letargo.
Buenos días. Dijo el elfo cuando bajó de su habitación. Posadero, algo de fruta para desayunar si hace el favor.
Parece que la aldea ha vuelto a la vida... Comentó al ver como ahora la gente era más numerosa.
Bajo a todo correr, parece que se me han pegado las sabanas, veo que Elendorn esta desayunando y me siento junto a él buenos días digo mientras bostezo.
Cuando pasa el posadero (o la camarera) por favor, tráigame un trozo de pan y un cuenco de leche.
¡Buenos días Torin! Dijo mientras masticaba un cacho de manzana. Había sueño hoy eh.. bromeó.
Bueno,hablando de cosas serias. ¿Donde podemos empezar a investigar?
La verdad es que he dormido como un niño, hacia mucho tiempo que no dormía tan bien, creo que podríamos empezar por sacarle toda la información que podamos al posadero.
Me parece correcto. Oiga disculpe buen hombre, siento que volvamos a insistir sobre lo mismo, ¿pero nos podría contar ahora, con la luz del día, lo ocurrido por las noches?
El posadero se mostró incomodo, pero accedió finamente.
Vereis... Dijo susurrando en voz baja, la taberna comenzaba a llenarse y no queria espantar a nadie. Desde hace un par de semanas, el fantasma de una mujer atormentada vaga por nuestro pueblo, dicen que atrae a los hombres y se alimenta de sus almas, hay pruebas físicas de ello, ha robado y dejado marcas en las carretas de alimentos y en las tiendas de algunos vecinos. Va siempre acompañada de un lobo... La gente ya no quiere asomar la cabeza ni al atardecer... algún vecino ha desaparecido... y eso nos da miedo. Nadie quiere ser el proximo.
Paró de hablar al ver que entraban más clientes.
Lo siento, no quiero que se espanten, son mi única fuente de ingresos.
Se dirigió hacía los recien llegados, un tipo que parecía extranjero, del Norte quizá, de esos que llaman dunédain, vestido con una capa roja y una armadura negra, le acompañaba una mujer que parecia de su misma raza por sus rasgos, pero que vestía como si hubiese estado viviendo largo tiempo en una caverna de un bosque muy profundo ya que sus vestidos estaban algo desgastados y sus capas algo roidas y con alguna ramita colgando.
El hombre comenzó a hablar con el posadero.
-Le suena de algo el nombre de Azaghâl.- Dijo.
-Azaghâl... repitió pensativo el posadero. Pues la verdad que no, suena a nombre de enano ¿no? Hace unos días pasaron unos enanos por aquí y reservaron habitación.
-¿Sabe hacia donde se dirigian?
-Fueron hacía el este. Siguiendo el camino, mas donde les llevaran sus pasos... no alcanzo a saberlo. Respondió el posadero mesandose la barba.
¿has visto, parece que esos dos van siguiendo a los mismos enanos a los que perseguimos nosotros?, creo que deberiamos de hablar con ellos, ¿que opinas?