Bien hallado Hulmar.
Sé que no me debes nada pero por la amistad que nos une tengo que pedirte como favor personal que me apoyes en mi decisión de replegarme junto a mis hombres o más bien a lo poco de queda de ellos al Colmillo del Oeste. Mis bajas son cuantiosas debido al reciente ataque que hemos recibido antes del amanecer. Una fuerza de aproximadamente dos centenares de goblins y kobolds bajo mando desconocido se han lanzado a tantear la resistencia de nuestras defensas. Si no fuese porque ha coincidido que tenía aquí a dos Xorlaii junto con dos monturas para el transporte de las mujeres, de seguro nos habrían arrollado. Por las marcas que tienen estas condenadas criaturas creemos que vienen de Infraoscuridad. Se han llevado a varios kobolds heridos para ver si podemos conocer quien está detrás de todo esto, pero a todas luces puede que se trate de esos endiablados drow que se habrán percatado de nuestros movimientos. Todavía está por verse si ellos también están detrás de la extraña enfermedad que merma a mis tropas y que hace que si no quemamos sus cadáveres se alcen contra nosotros con una fuerza infernal.
No tengo tiempo para esperar tu respuesta porque dudo que aguantemos otro par de noches aquí. Una vez ponga a salvo a mis hombres intentaré dar mi versión de los hechos al Consejo, porque sé que los Xorlaii no moverán un dedo por mi ya que ni siquiera se han dignado a contestarme sobre si seré relevado de mi mando. Sólo están interesados en las mujeres y en los huevos. ¡¡Sea Cyric mil veces maldito Hulmar no puedo sacar huevos ni mujeres de donde no los hay!!! Y lo peor de todo esto es que llevo más de diez años haciendo esto y aún no sé para qué demonios lo hacemos, maldita sea!!
Nos veremos en el en el Colmillo si es que consigo llegar.
Thekz Xakaz.
Por Loraed Amo del resucitado Miyeritar.
Quinto día de la primera dekhana de Hibernal 1378 C.V.