Partida Rol por web

El día ha sido largo, tres reuniones por la mañana, y toda la tarde con ese dominical hasta que por fin se mandó a imprenta. LLegaste a casa justo a tiempo de ver terminar la película que tenías pensado ver, y que nunca ponen en la televisión. Sacaste un taper de la nevera, y sin calentarlo, acabaste con el par de trozos de pizza de la cena de ayer. Al día siguiente domingo, tenías el día libre, podías trasnochar y despertarte al mediodía, pero los ojos se te cerraban del cansancio. Así, con un actor que para los americanos debe ser conocido vendiendo aparatos de abdominales, y la horrible música electrónica de la teletienda de fondo, acabaste sucumbiendo al sueño tumbado en el sofá.

Pero algo suena en tu cabeza y abres los ojos sobresaltado. El ruido es el teléfono, que pita estridente desde al aldo del televisor. Entreabriendo los ojos, cegados por la luz del televisor, te levantas a descolgarlo. Mecánicamente, pues ni siquiera estas empezandoa despertarte, gruñes un ¿Si?.

Al otro lado de la línea oyes una respiracion nerviosa, y una voz de mujer pregunta:- ¿Joan Aymerich?

Me levanto sobresaltado, inquieto y algo molesto. No puedo evitar llevarme una mano a los riñones, un tanto doloridos por culpa de una mala postura en mi viejo sofá...

¿Quien demonios...? Me pregunto que hora será...

¿Si? -contesto e intento despejarme un poco la mente. Al mismo tiempo miro la hora en el reloj que cuelga de la pared del salón.

Cita:

Si...soy yo mismo. -contesto despacio, un poco desconfiado, intentando pensar si reconozco la voz de la mujer.
¿Quien es? -respondo sin ocultar un tono un tanto molesto.

- ¿Por qué me hace esto?. Le prometo que no le diré nada a nadie, pero déjeme en paz, por favor.

Oyes un fuerte ruido al otro lado de la línea, y la comunicación se corta.

¿Qué demonios?

-¿Oiga? ¿Quien es?

Espero que no se trate de una broma de mal gusto.

Un tanto confuso por la extraña llamada, consulto el registro de llamadas del teléfono para comprobar desde que numero ha sido realizada. Compruebo tambien que hora es.

Las 3 de la mañana en el reloj, el número quedará registrado en tu teléfono, y ahora parpadea ´como última llamada.

No estás seguro de si te lo decía o no a tí, es posible que sí, pero tú no sabes de nadie a quién le hayas hecho nada.

Intrigado por la extraña llamada, me despierto completamente, sin poder evitar darle vueltas una y otra vez a las palabras de la desconocida mujer.

¿Quien podria ser? Este asunto me ha quitado el sueño...Y ¿porque me hace esto es lo que ha dicho? ¿a quien se lo decia? Si me lo decía a mi no lo entiendo, igual me he metido en algun follón sin saberlo...y si se lo decía a alguien que estaba allí con ella...aquí hay tema.

Voy al aseo y me refresco la cara, luego me dirijo a la nevera y cojo una lata de cerveza que me apresuro a abrir. Vuelvo al comedor, enciendo la luz, apago el televisor.
Me planto delante del teléfono, de pie, mirandolo y pensando. Doy un trago largo a la lata.

Vamos allá...

Consulto el registro de llamadas y anoto el numero de la llamada misteriosa en mi libreta. A continuación lo anoto también en mi PDA. Mi intención es averiguar si la llamada fue realizada desde un teléfono mobil o fijo. Si fue desde un fijo, observo el prefijo para averiguar si se trata de un número de la ciudad, o de fuera. Una vez resuelto esto y anotado el numero, doy buena cuenta de lo que quedaba en la lata de cerveza, me pongo la americana, los zapatos y cojo las llaves de casa.

Abandono el piso y me dirijo a la calle. Camino hasta la esquina, me detengo y miro a izquierda y derecha. Finalmente me decido y giro a la izquierda. Camino un par de manzanas hasta que localizo lo que andaba buscando; una cabina telefónica.
Saco el papel en el que anoté el número X, inserto un par de monedas en la máquina y procedo a llamar.

El teléfono suena varias veces, y cuando estás a punto de colgar desesperado, una hermosa voz femenina, no la misma de antes, responde con autoridad.

- ¿Quién es?

Mientras van sonando los tonos telefónicos, empiezo a ponerme nervioso, y a pensar que quizás me haya precipitado haciendo esta llamada.

Mejor cuelgo y me vuelvo a casa, a dormir. Seguramente era alguien que quería gastarme una broma...Quizás se habían equivocado.

Pero demasiado tarde...

Cita:

Durante un segundo que se me antoja eterno guardo silencio, pensando en algo ocurrente que contestar, teniendo en cuenta que estoy llamando a una desconocida a su casa a las tantas de la madrugada...

-Hola buenas noches -intento parecer cordial, con un tono simpático y despreocupado, como si no supiera que son las cuatro de la madrugada- ¿Con quien hablo?

Si cuela bien, sino a pensar otra cosa...

-Buenas, habla con la inspectora Rodriguez. Podria hacer el favor de identificarse y decirme con quien quiere hablar.

¿Inspectora Rodríguez? ¿Me han llamado desde una comisaría? Ahora si que la hemos liado y bien...

-Esto... -intento pensar lo más rápidamente que puedo, desafiando al sueño y a la confusión que se apoderan de mi.

Estás llamando desde una cabina...no pueden saber quien eres...tírate a la piscina y si sale mal cuelgas y mañana será otro dia.

-Buenas noches me gustaría hablar con la otra chica, antes llamé y me atendió ella...no recuerdo su nombre...¿López era? ¿Se puede poner al teléfono porfavor? Es importante pero me gustaría tratar con ella. No se confunda no tengo nada contra usted inspectora Rodríguez, dios me libre...

Intento soltar este discurso lo más rápidamente que puedo, pareciendo nervioso, tono Ozores para entendernos.