Era un día soleado, el cual contrastaba con la noche de mierda que habías experimentado. Si bien no te acordabas de lo que habías soñado, sabías que las pesadillas habían tomado como suyo tu mundo de sueños, y a pesar de hacer varias horas que estabas de pié, aun arrastrabas las consecuencias de esa noche de horror
Cuando llegaste al edificio que hacía las veces de las dependencias del sheriff, pudiste observar los coches patrulla aparcados frente a el..
El interior presentaba la misma algarabía de siempre, pero se notaba que algo no iba bien, sabías darte cuenta de cuando la tensión estaba en el aire. Si alguien sacaba una cerilla esto saltaría por los aires....
Camino con pasos presurosos hacia la comisaría. Por si no fuera suficiente motivo la llamada de O'Donell pidiéndome que fuera para allí, al leer el diario y ver el titular me ha provocado una urgencia, que casi ni he desayunado.
Durante el camino no puedo parar de darle vueltas a la pesadilla que he tenido. No recuerdo nada, pero me desperté a altas horas de la noche, con todo el cuerpo sudado y un grito ahogándose en mi garganta. Es inútil... Por mas que piense no conseguiré recordarla.
Al entrar en la comisaría me encuentro el mismo ambiente de siempre, pero... Algo cambia. La tensión del ambiente casi que se puede cortar con un cuchillo afilado. Me dirijo hacia la mesa de Susan, la secretaria del sherif. Mientras mis pasos se encaminan hacia allí, saludo con la cabeza a los agentes que conozco después de tantas visitas estos últimos años. No puedo evitar darme cuenta de la tensión que padecen...
Buenos días, Susan. ¿Se encuentra el sheriff O'Donell en su despacho? Le pregunto con una sonrisa en mis perfilados labios.
Si, ahi lo tienes, está en su despacho -Te dijo con una mirada que sabías que paecía tener rayos X. -¿ Estás bien, cielo? Pareces cansada
Sí... Me encuentro bien... Con una vaga respuesta, Margaret cruza la puerta del despacho del sheriff, dejando a Susan detrás, extrañada por su comportamiento. Antes de entrar, la joven se arregla el pelo ahuecándolo con la mano, e intenta dibujar una sonrisa algo mas sincera en sus labios. Espera no preocupar a O'Donell mas de lo que ya debe estarlo, y sobre todo cuando es por tonterías...