Era noche cerrada y la lluvia caía sobre el empedrado arrancando extraños lamentos, o quizás solo fuera su imaginación, que ya empezaba a jugarle algunas malas pasadas. Su mente estaba tan concentrada en sus propios pensamientos que no se había dado cuenta de que estaba calada de la cabeza a los pies, y de que mañana quizás hubiese cogido una buena pulmonía.
Hacía frío pero el calor de la ira la calentaba y la mantenía funcionando....
Hacía apenas unos días que en The Cleveland Plain Dealer llegaba la noticia de la rueda de prensa que presentaba tu padre el sheriff O´Donell. Pero tu ya lo sabias, y aunque no habías sido encargada de la noticia no podías faltar, eras su hija y sabías lo importante que esto era para el. Desde que a Eliot Ness le habían nombrado director de seguridad de Cleveland, a los polis corruptos se les habían puesto las cosas muy difíciles, y aunque tu padre, un hombre honrado que sentía verdadera vocación por su oficio había hecho lo posible para seguir con su trabajo como si nada hubiera cambiado, la cosa había resultado imposible. Ness metía las narices en todo y había decidido limpiar la ciudad aunque tuviera que pasar por encima de quien se interpusiera en su camino, o al menos eso es lo que decía tu padre.
Tan orgulloso de si mismo, de haberle pasado la mano por la cara a ese engreido de ness...
De haber atrapado al asesino del torso....
Hacía tiempo que no le veías tan bien, es como si todo el stress, esa nube gris que desde hacía tiempo le ensombrecía había desaparecido sin dejar ni rastro
Pero la visita de Ness no se hizo esperar, nada más acabar la rueda de prensa y en las oficinas del Sheriff le acuso de haberle arrancado la confesión a base de palizas y de incompetencia, de no saber ni siquiera quienes eran los policías encargados del caso
-Vamos Sheriff. Que no hemos nacido ayer. Llevo haciendo de poli toda la vida, y se reconocer cuando alguien ha recibido una paliza.- El tono de su voz era frío y duro, como el de alguien que conoce las cartas de su adversario
- Ya llegó así .- No estuviste ahí para verlo, pero de haber estado hubieras visto ese temblor caracteristico en el labio inferior que se le ponía a tu padre cuando estaba nervioso.
-¿Ah, si? Me gustaría verlo. El reto de alguien que creía haber dado con el farol de su adversario
-No puede soportar que alguien le robe protagonismo.Prometió arrestar al asesino y no lo ha hecho...
Había que reconocer que Ness era un hombre que no solo sabía esperar, si no que mientras lo hacia no estaba con los brazos cruzados, así que cuando leiste el recorte de prensa, sabías que las cosas se habían complicado más de lo que hubieras creído..
Quizás por todo esto no te había sorprendido recibir un mensaje de O´Donell diciéndote que necesitaba hablar contigo a las diez de la mañana del día siguiente.
Era un día soleado, el cual contrastaba con la noche de mierda que habías experimentado. Si bien no te acordabas de lo que habías soñado, sabías que las pesadillas habían tomado como suyo tu mundo de sueños, y a pesar de hacer varias horas que estabas de pié, aun arrastrabas las consecuencias de esa noche de horror
Cuando llegaste al edificio que hacía las veces de las dependencias del sheriff, pudiste observar los coches patrulla aparcados frente a el..
El interior presentaba la misma algarabía de siempre, pero se notaba que algo no iba bien, sabías darte cuenta de cuando la tensión estaba en el aire. Si alguien sacaba una cerilla esto saltaría por los aires....