Partida Rol por web

Con la ayuda de la cuerda, los personajes y los moribundos presos fueron pasando uno por uno al estrecho agujero. Mengüik encendío la antorcha y se la entregó a Cathan, que agachado se dispuso a encontrar trampas.

El camino parece limpio de trampas. Después de avanzar incómodamente unos metros, un desvío a la derecha abre un nuevo camino que desciende.

En vista de que llegamos a una bifurcación, lógicamente no sólo busco trampas, sino que observo detenidamente el suelo buscando rastros de pisadas, indicios de aire viciado en alguna de las sendas, algun olor característico que pueda provenir del exterior o cualquier detalle que pueda servir a mi intuición a la hora de decidir el camino mejor a escoger.
Camino en silencio y extremadamente atento al entorno.

El hedor es casi insoprtable, con el esto,mago en la boca, a punto de vomitar y con la cabeza dando vueltas sin parar, una vez he atado la cuerda a la pared, espero a que pase Cathan.
Si los demas estan de acuerdo yo entraria detras de Cathan, y despues de mi Nissa (la luz da tres cuadros. Si acaso nos encontramos algo/alguien yo podria ayudar a mi pupilo.
Dicho esto me introduzco en el ahujero detras de el mientras digo Nissa siguenos

El suelo que pisais es de tierra suelta, con lo que se pueden apreciar bien las huellas de ratas de un tamaño considerable, sobretodo hay un gran número de ellas en el camino que desciende a la derecha.

Las emanaciones de poder que provienen del pozo son tan intensas que no te ayudan a percibir con claridad más emanaciones.

en realidad isma, yo me situo el último, y retrasandome solo unos pasos, me coloco la capa, y guardo la retagardia en la sombra, sin perder de vista al resto, tengo la daga a mano, pero no en la mano

Me alzo de nuevo y, girándome hacia mis compañeros, comento mientras me limpio la tierra suelta de los dedos: se pueden apreciar huellas de ratas de un tamaño considerable... sobre todo hay un gran número de ellas en el camino que desciende hacia la derecha, tan sólo es una idea, pero... ¿creéis que podría hallarse allí su madriguera? Observo los rostros del grupo con detenimiento: De ser así quizás fuera mejor continuar recto, el suelo parece más despejado... y de no ser así siempre habría tiempo de retroceder... ¿qué opináis?

- Cabe la posibilidad de que sea esta la salida por la que entraban y salían las ratas enamoradas... Si es así, eso explicaría cualquier cantidad de huellas, pues seguramente iban y venían cada día.
Yo seguiría la senda de las pisadas.

también hay huellas en el camino recto, pero son más numerosas en el de la derecha. Por si no quedó claro.

Huellas hay en ambos caminos, hago una pausa, sólo que en el de la derecha hay una mayor cantidad de las mismas y el aire da la sensación de estar más viciado por eso he deducido que yendo por él podríamos llegar a su zona de residencia o a un lugar muy transitado por ellas, pero en una zona interior y proponía el camino recto como el más apropiado si lo que deseamos es salir al exterior... guardo silencio serenamente mientras espero la reacción de mi hermano y el resto de compañeros ante mi último comentario.

Sería muy interesante conocer la salida de la Torre. Vayamos o no vayamos a salir inmediatamente. Así que adelante, que nos guíe tu olfato, hermano.

sigo oculto por detras, vigilando que no nos sigue nada, ni siquiera opino para no hacer ruido.

solo espero que sigamos rapido para salir de aqui cuanto antes

Hago un gesto de asentimiento hacia Nissa y acto seguido me encamino hacia adelante dejando a un lado desviaciones y avanzando en línea recta sin obviar la búsqueda de detalles, rastros y trampas, por supuesto.

a veces hay que seguir el instinto. estoy de acuerdo con cathan y seguiria recto, igual me equivoco pero el aire viciado no es buena señal y no debemos permanecer aqui mas tiempo.
¿que decis los demas?
jodido es reptar por el agujero como encima cargar con este...

Después de un rato caminando en linea recta por la gruta, por fin el estrecho camino da acceso a una amplia caverna llena de estalagtitas y estalagmitas. Paralelo a la entrada por la que se incorporan los personajes corre presuroso un rio subterraneo que termina formando un precioso y cristalino lago en la pared que tienen defrente. Cruzando el río, que no cubre más allá de sus cinturas, un foco de luz natural ilumina las rocas del interior. ¡Ahí está la salida! Acceder a ella no es complicado pues las rocas se disponen de tal manera que trepar hasta ella es tarea fácil. Poco a poco van saliendo al exterior. Por la luz reinante, deducen que son las últimas horas de sol. El agujero esta camuflado entre matas y arbustos y se encuentra al pié de una pequeña elevación rocosa. Dando la vuelta a la roca, se topan con su carreta escondida. Los personajes se encuentran en el claro del bosque donde tubieron el encuentro con la rata gigante y ahí están aún sus restos calcinados. Por suerte, en la carreta habían guardado alguna provisión, lo justo para una cena para todos. Calmarían sus estómagos mientras hacián repaso mental sobre lo que habían descubierto en el interior de La Torre. Tenían muchas preguntas que contestar aún y todo por descubrir. Avathar seguía desaparecido, al igual que el padre de Bolfak y Karusse portaba consigo una maldición que no terminaba de comprender. ¿Qué pasos darían ahora nuestros aventureros?