Partida Rol por web

Kris negó con la cabeza.

—¿Eso es necesario? —preguntó—. Ellos están averiguando cosas en el mercado, podemos poner las cosas en común más tarde^[1].

Sammala se tomó unos segundos para respirar profundamente, entrecerró los ojos y se ajustó la bandana de la cabeza, que le sujetaba el pelo rubio.

-Porque, si vamos preguntando por ahí, podemos acabar dándonos de morros con los Decados sin esperárnoslo, Kris. Y entonces nos vendría bien ser más de tres.

Boudicca se debatía entre una y otra posición. Por un lado, lo que decía Sammala era acertado y prudente. Por otro, al estar separados podrían cubrir más terreno en la búsqueda del Decados.

Al final, la impaciencia pudo más que la prudencia.

-Estoy con Kris... cubramos todo el terreno posible. No creo que esa rata de alcantarilla se atreva a atacarnos a plena luz del día y en un lugar abarrotado de gente. Lo suyo es dar una puñalada por la espalda en un callejón oscuro a un enemigo indefenso -el desprecio tiño sus últimas palabras, dando a entender que ya había pasado por una situación similar.