Partida Rol por web

Estaba mirándolo con atención todo el tiempo, observando que cosas copia y donde se las ponía, aunque no tenia ni idea de que era cada cosa que usaba, solo eran maquillajes de distintos colores con distintas texturas a mis ojos. Y sabia que eran maquillajes porque lo usaba para eso.

Cuando copio mi mandibulares lo mire extrañada con una ceja alzada pero en cuando paso sus dedos por distintas zonas de mi rostro cerrémoste los ojos como en un acto reflejo.

Asi que cuando sus labios llegaron a los míos se me abrieron completamente los ojos con sorpresa por un segundo antes de cerrarlos y continuarle el beso ¿Eso tambien era normal allí? Yo solo me había besado con gente que me había acostado y no mucho la verdad, evitaba bastante los besos, era... no se, parecían muy personales, eso de "un beso de amor verdadero cura cualquier maldición" sonaba tan moñas que siempre había evitado un poco los besos. Que usaran la boca en otras partes de mi cuerpo que tenia muchas.

Me relamí notando el sabor a algo delicioso en mi boca — ¿A que sabes? — Pregunte pensando que el sabor venia de el mientras me incorporaba y asentía a lo de irnos cogiendo mis cosas para ello. — ¿Aquí os dais besos a menudo? — No, no era de las que se quedaba con dudas en la cabeza, si algo me la rondaba terminaba soltando pronto.

La respuesta de la chica hizo crecer aún más, si es que acaso era posible, su perpetua sonrisa. Le había caído en gracia que pensara que ese era su sabor.

—Quedaba mejor besarte que lamerte la boca —contestó, mientras tomaba el lip gloss y le daba un lengüetazo —Es de cereza. Deben ser buenas las cerezas de verdad.

Esas sí que no las había probado nunca. Le ofreció el lipgloss, por si quería lamer ella también, y aprovechando le tomó el rostro con la misma mano para girárselo hacia un espejo.

—¿Ves qué bien te queda?

Su respuesta me dejo aun mas confusa ¿Que? ¿Como? No entendía nada de eso de besar mejor que lamer hasta que copio una de los botecitos y lo labio, uno de los que había tocado antes de pasar los dedos por mi rostro.

— Nunca he comido cerezas — Dije relamiéndome hasta que copio mi rostro y lo giro hacia el espejo donde ni me había mirado aun, entonces ladee la cabeza y eleve una mano tocando muy despacio las mejillas mas rosadas de lo que las había tenido nunca, la punta de mi nariz que brillaba un poco haciéndola mes respingona al igual que algo en mis pómulos, y mis labios, que parecían mas carnosos y jugosos, como abrir una fruta madura.

— Nunca me había puesto nada en la cara — Comente claramente satisfecha y sorprendida, dándome cuenta que apartar de ahora habían muchos nunca que iban a quedar atrás, en aquel dia ya llevaba un montonazo. 

Nunca había estado en la isla, nunca había nadado en agua salada, nunca me habían lavado la cabeza y peinado, nunca había dormido acompañada, cereza, maquillaje, besos espontáneos... Y solo habían pasado unas horas.

—Tienes muchos nunca, ¿no?

De dos frases dichas, las dos habían empezado igual. Pobre chica, no debía haber vivido nada con Hades. ¿Tan aburrido era el inframundo? Hasta ahora, él había creído lo contrario. Nunca había recibido ninguna queja de los sin cabeza, así que suponía que estarían divirtiéndose ahí abajo.

Sin más, se puso de pie de un salto, le tomó la mano, y tiró de ella hasta salir del castillo. Con tantas cosas puestas, ahora el chico sonaba a cada paso que daba.

—¿Carrera? —Le propuso, mordiéndose el labio inferior.

Aparte la mirada del espejo a el y me reí por lo bajo asintiendo — Muchísimos, solo en el dia de hoy deje atrás mas de media docena — Dije sin vergüenza alguna encogiéndomelas de hombros.

Y la mayoría de cosas que había hecho habían sido en mi encierro en el Olimpo anual, ahí era donde había comido ciertas cosas o visto otras, pues con mi padre cabron poco tenia o veía en el inframundo. Había mucho, si. Pero no al alcance de mi mano, mas bien lo poco que conseguía ahí era con tretas o engaños.

Cogiendo su mano me deje tirar para salir del castillo — No se a donde vamos asi que el ganador esta claro, pero... ¡Te sigo! — Dije haciendo una sentadilla rápida para estirar los músculos lista para salir tras el.