Mientras poco a poco me iba elevando a la vez que generaba una extraña sombra sobre la heróica pareja, una ruidosa descarga de estática invadiría el ambiente, siendo mi cúpula la causante de aquello

Con movimientos grotescos y compulsivos poco a poco mi figura se mostraría frente a ellos, jugando una evidente mascarada sobre mi verdadero estado... aunque todas las partes sabíamos bien la verdad de cual era.

Ahhhh con que quieren que Monologue...

   Solo... para comenzar a zarandear agitando toda mi estructura... tal vez por que me estaba ahogando por la extraña situación o por simple agotamiento... o, por que en verdad hubiera algo mas.

Unas... ultimas palabras... 

  Y cuando agarrara el momentum adecuado... separar el hilo de mi cupula, presipitando con toda velocidad sobre los héroes a la vez que mi bocina terminaba por exclamar.

No solo los heroes lo pueden decir.

Tras haber analizado el Quirk de las telarañas con insistente atención, Azara sintió que... LA ESTABAN ELECTROCUTANDO -AY!... - fue un chispazo nada mas, pero se sintió igualmente. La telaraña traspasaba la electricidad!! -No me importa! no ha sido para tanto - el capullo estaba casi roto, que era lo importante.

La araña volvió a hacer de las suyas, creando un enorme hilo del que colgaba cual Wreking Ball desde el borde del techo que había justo a nuestro lado. Era intimidante -Oh-oh... - con Cooki hizo algo... parecido... pero del revés - cuidado Hen! No creo que la araña pueda curarse ahí dentro... pero tampoco creo que sea inmune a todo! - especialmente tras sentir el chispazo y haber analizado bien las telarañas. Miré su arma y le miré a él... era su momento. Su momento de probarle a los profesores que era un héroe.

Y mientras Shiroi seguía tratando de romper el capullo-trampa que me envolvía, Azara se quedó mirando a la bola-araña. Preguntándose qué le llevó a acabar en éste punto de su vida, recordando sus palabras dolidas... aunque... era difícil ver a través de un enorme capullo gigante que se balanceaba amenazante sobre nuestras cabezas.

Debía haber confiado en su instinto de que pausar la batalla solo traería desgracias. Claro que nunca se habría imaginado que Artifacne se convertiría en una bola de demolición y empezaría a elevarse ominosamente por encima de ellos, amenazando con un ataque que podría resultar fatal.

Se giró hacía Azara, su primer instinto era el de agarrarla y llevársela con él a un lugar más seguro. Pero la albina parecía atada al suelo, antes de llevarsela tendría que romper sus ataduras. Chasqueó la lengua, intentando pensar en algo qué hacer.

Su segundo instinto fue el de volver a dedicarse a pegar a la araña. Si tan solo consiguiera paralizarla, o terminar de derrotarla, todo volvería a ir bien. Estaba dispuesto incluso a correr y saltar para seguirla arriba, allá donde fuera, antes de que terminara de alejarse de su alcance. Y en el caso de que nada fuera posible, de la peor de las situaciones, sabía que se interpondría entre Azara y ña enemiga, dispuesto a desafiarla con su sable y su escudo.

Sin esperar ni un instante más aquella araña se zarandeó y saltó encima de Hen Re y de la aún atrapada Azara Karve con la clara intención de aplastarlos a ambos en un movimiento suicida que, ciertamente, iba a ser el último de aquel combate para algunos de ellos... de hecho, el único que se "libraría" sería Cooki.

Pero, casi por instinto de protección, Hen Re se pondría en medio y alzando aquel estilete electrificado, lograría empalar a la araña, sin dañarla por el apuñalamiento, pero dejando que la electricidad terminara por freírle los pocos circuitos que tiene aún intactos...

Y no solo eso, siendo capaz de, con sus propias manos, aguantar el peso el tiempo suficiente como para redirigirla a una zona despejada, lejos de la inmovilizada Azara Karve, la cual apenas podía ver a traves de la tela semi-translucida lo que ocurría a su alrededor.

¡BATALLA A FINALIZADA!

¡DERROTA!