Partida Rol por web

- ¿Pero que...? ¿Estos dos bichos también serán un GF? Si son monstruos; no los he visto en los bestiarios que he ido estudiando... - - Ferrer lo tuyo es la retaguardia ¿cierto? Ocúpate del apoyo y el ataque a distancia, Edna; ataca conmigo en el frente, si me ahorras algún golpe se agradecerá, ya sabes que mi recuperación es más lenta de lo habitual, y yo... Si puedo tampoco les dejaré respirar... Intentemos que no nos acorralen... ¡El de los matorrales! ¡Si no vas a hacer nada, sal corriendo de aquí!...

La que gritaba parecía más agresiva, ¿o ese grito solo era para sustituir el tamaño del otro? - si tenéis algún GF y por ello algún enlace que poneros hacerlo a toda velocidad, no creo que esos dos esperen. Intentaré frenar al de 3 metros, ¿Edna podrás con el otro? Tercer si ves que puedes inmovilizar a alguno en un momento u otro, no dudes, un golpe menos siempre se agradecerá.

¡Ya tenemos rumbo! le digo a mi compañero cuerpo a cuerpo.

Raven ¿Tienes rango de disparo efectivo desde aquí? Le pregunto antes de dirigirme hacia el objetivo. De ser así intentaremos distraerlo desde tierra para que puedas actuar con más libertad. 

Atacad con elementos de Hielo o Agua si podéis. A menos que tengáis una estrategia mejor, nosotros iremos entrando y saliendo del combate simultáneamente para usar magias y cadenas de golpes para distraerlo mientras es abatido a tiros. Digo enlazando mis escasas magias hielo como ataque elemental para intentar potenciar mis golpes.

Sí - respondo mientras preparo mis ataque de hielo y ajusto el rifle para empezar a golpear desde aquí.

Esta vez voy a tener que convocarte.

Creo que lo mejor serán los ataques elementales - coincido con mi compañero.

Baja intensidad mis cojones.

Tus dos compañeros asienten, pero no escuchas nada ya que los dos monstruos lanzan un rugido.

El de tres metros salta por los aires, cruzando una distancia de unos veinte metros, aterrizando a poca distancia de donde estas.

El otro golpea con el hacha la casa, destrozándola en un solo segundo, lanzando por los aires los cascotes. 

El combate empieza.

Intentas revisar mentalmente lo que has podido leer sobre monstruos... Pero no recuerdas nada específico sobre este... No te suena de nada...

Aquel monstruo desciende y, de un aleteo, lanza varios ladrillos y cascotes por los aires, haciendo que algunos se tengan que cubrir la cara.

Los otros grupos se ponen en guardia y empieza a moverse para poner a los civiles a salvo.

Al momento, de otro aleteo, se acerca a vosotros a toda velocidad.

Clarens se coloca en guardia y, con un rugido, el combate comienza.

Al ver a la criatura posada en el suelo pienso en las posibles opciones que pueden plantearse ante nosotros. 

¡Intentaré provocarlo para que nos ataque a nosotros y no a los ciudadanos mientras los evacuan! ¡Si ataca con ese aliento de fuego en área habrá victimas! ¡Intentemos forzarlo al cuerpo a cuerpo! La prioridad sin embargo es alejar a los civiles y con ello en mente me lanzo al combate sin miramientos con una cadena de golpes.

Además así veremos de qué esta hecho. 

Aun recordaba su combate con mateus, a duras penas había sobrevivido con ayuda de Edna, esta vez tenía algunas magias decentes pero preferiría no necesitas utilizarlas, seguía siendo una guerrera más física que mágica, seguía sin encajar del todo en Trabia.

Cogió y soltó aire, apresurando su primer golpe, no iba a dejarse amedrentar por el tamaño, pese a que realmente era un poco aterrador, tirarse contra unos bichos de semejante talla.

Quizás se dejó impresionar en exceso, sus movimientos no fueron los más precisos del mundo, pero el monstruo de 3 metros le esperaba

Me coloco detrás del muro de la azotea para aprovecharlo a modo de cobertura y descargo el primer disparo de rifle al cuerpo del lagarto aprovechando la vinculación con mi GF para darle el mayor poder posible al ataque de frío.

Que esto funcione.

Respiro antes de apretar el gatillo, dejando que mis pulmones se vacíen y esperando entre latidos para mayor precisión. Cuando la polvora estalla por el cañón del arma vuelvo a coger aire y observo el resultado.

Sigue.

Mientras los soldados retroceden para dejaros espacio, el combate comienza.

Ferrer, vuestro compañero, saca de uno de sus pequeños estuches un conjunto de cartas que sujeta con la mano como si fuera a jugar una partida.

Coge una de ellas y la lanza al suelo mientras grita:

-¡Prisa!

La carta brilla y parece "meterse" en el suelo y agrandarse, colocándose justo debajo de él. Sobre la imagen surge un reloj cuyas manecillas empiezan a acelerar.

El siguiente en moverse es el monstruo de tres metros, que alza su hacha y la hace girar sobre su cabeza.

Sin pensarlo, salta hacia delante, directamente a por ti.

Alzas los brazos a toda velocidad y notas como el hacha golpea tus brazos. La fuerza de aquella criatura te hace retroceder, haciendo que tus pies derrapen por el suelo, desplazándote unos cuatro metros sobre el pavimento. 

Tus músculos gimen por el esfuerzo y los notas arder como si te los estuvieran prendiendo fuego. Pero aún así, logras mantener la posición.

El siguiente es el más grande de todos, teniendo una velocidad increíble para tratarse de una criatura tan grande.

En su caso va hacia ti con decisión, alzando también su hacha antes de descargarla sobre ti.

Por suerte, Edna aparece a tu lado y abre su paraguas.

Puedes escuchar un potente impacto, pero la chica aguanta con el arma en alto, deteniendo el ataque.

-¡Aparta!

Grita alzando de un movimiento seco el paraguas, haciendo retroceder al monstruo. Tras esto cierra su arma y, como si fuera un bate, le golpea.

Pero el monstruo apenas retrocede.

-Es duro... -escuchas que dice la chica.

Mientras los otros equipos se ocupan de los civiles, vosotros os enfrentáis a aquel monstruo.

-¡Intentaré provocarlo para que nos ataque a nosotros y no a los ciudadanos mientras los evacuan! ¡Si ataca con ese aliento de fuego en área habrá victimas! ¡Intentemos forzarlo al cuerpo a cuerpo! Además así veremos de qué esta hecho. 

Tras decir aquello, Hayner se lanza al ataque.

La criatura, desde sus cinco metros de altura, observa al muchacho. 

El puñetazo del estudiante golpea con la fuerza de un cañonazo a ese monstruo y, con el retroceso, gira el cuerpo para golpear con el otro brazo que suena con la misma fuerza. Gira sobre si mismo y lanza un tercer ataque, con una patada le golpea.

La fuerza de los impactos, de la pura velocidad, habrían destrozado a una persona normal. A aquel monstruo parece no afectarle.

Raven, desde su posición sobre el tejado, pone el ojo en la mirilla y dispara.

La bala surca el aire y penetra en el monstruo con precisión. Que, al igual que antes, no parece sentir.

Clarens, con una espada en cada mano, las clava en el suelo mientras grita:

-¡Prisa!

En el suelo aparece un reloj cuyas manecillas empiezan a acelerar.

El monstruo ruge y no se amilana ante los ataques.

Lleva la cabeza hacia atrás y parece tomar aire, tras lo cual la lanza hacia delante y de su garganta surge un torrente de aire que golpea con fuerza todo lo que encuentra a su paso.

-¡Cuidado! -escucháis que dice Clarens.

El chico coloca las espadas delante suya e intenta bloquear el viento; Hayner salta a un lado, colocándose detrás de un coche para que este absorba el impacto; mientras que Raven se cubre tras una cornisa de un edificio. 

Aprovechando que el propio monstruo ha puesto distancia con nosotros debido a su ataque convoco la magia "Electro" contra el.

¡Si los ataques físicos no logran provocarte... Haré que seas tu quien desees que luchemos cuerpo a cuerpo! ¡ELECTRO! 

Digo lanzando mi magia contra el monstruo.

- ¡jod...! - exclama sin acabar la palabra por educación, sus hombros temblaban y notaba los nervios a flor de piel, el impacto vibraba en su interior como si rebotara de la piel a los huesos y viceversa. Ni siquiera le había podido atacar, como podían esos mastodontes ser tan rápidos... Las casas ya estaban reventadas, y se le pasaba por la cabeza invocar a Mateus, no quería que Lamuh hiciera otro boquete en el suelo, y si las cosas se ponían difíciles le invocaría a lo lejos por tal de evitar que sus compañeros fueran afectados, tal vez en alguna ráfaga de armamento que les diera un margen.

Por el momento cogía aire con dificultad añadida por el impacto que no esperaba, tenía que ser más rápida... Más fuerte, más... Más todo. Apoyaba su cola en el suelo buscando el equilibrio perfecto, tomando un rápido aliento. Habían pasado de ser responsables de evacuación a contención, y lo peor era no saber cuanto tiempo tenían que frenarlos.

Logrando el equilibrio necesario, soltó el aire de golpe volviéndose a lanzar, si podía lanzaría a uno contra el otro, intentándoles estorbar, aunque temía esos golpes.

Vuelvo a probar, ya que ahora mismo no puedo usar mi GF.

Dadme espacio para soltar a Shiva.

El combate seguía su curso.

El monstruo se encontraba luchando cuerpo a cuerpo con Hayner*, mientras que Clarens se encontraba a media distancia con respecto a ellos. De todos, el más alejado es Raven, en uno de los tejados armado con su rifle de francotirador.

-¡Si los ataques físicos no logran provocarte... Haré que seas tu quien desees que luchemos cuerpo a cuerpo! 

Escucháis que grita Hayner dirigiéndose al monstruo, tras lo cual junta las manos y, de ellas, empiezan a brotar descargas electricas que se van acumulando hasta formar una esfera.

- ¡ELECTRO!

Al gritar de nuevo, lanza las manos hacia delante y de ellas sale un rayo de pura electricidad que golpea de lleno al monstruo. 

La electricidad recorre parte del lateral de su cuerpo pero no es suficiente para derribarle. Aún estaba demasiado entero.

-¡Darme espacio para invocar a Shiva! -escucháis que grita Raven en la distancia.

La yema del dedo roza el gatillo y el arma susurra como un gato ante una caricia.

La boquilla del arma ruge y una bala surca el aire y golpea de lleno al monstruo creando un pequeño agujero en una de sus alas.

Clarens, desde la media distancia, señala con las espadas hacia delante y grita:

-¡Libra!

La magia surge de sus armas e impacta sobre el monstruo, siendo ahora él quien le tocaba actuar.

El gigantesco enemigo abre la boca y lanza una dentellada