- 25? - exclama Jovu el joven exaltado - Esas son todas las fuerzas que la alianza con Albidón se merece? Padre! No necesitamos esa clase de insultos! Déjame llevar a los hombres y que los de Albidón vuelvan a su pueblo. Yo veré de encargarme de los bandidos sin la inútil ayuda de nuestros supuestos aliados.
El hombre de la montaña al ver el exabrupto da un paso atrás, alejándose de la mesa y saliendo del medio. La mesa con el mapa te separa de Jovu el joven y su padre se encuentra a un lado de la mesa, entre ambos.
Miro a su padre por un segundo mostrandole su cara llena de ira antes de voltearse al joven.
“Joven Jove, sabe que lo unico que me evita saltarle ensima y romperle toda su cara es la alianza entre las ciudades. Su padre no podría ni intentar detenerme, el montañes ya eligio lo que hara y esta mesa la puedo sacar con una patada.” Comento con tono amenazante, aunque sin aumentar el volumen de su voz.
“Los 25 que te voy a entregar, valen por varios de tus hombres. Así que no los desperdicies en ordenes estupidas.” Podría aceptar en otro momento ser despedido sin participar en la batalla si habria sido mas educado, pero en ahora la mision era personal.
Motivo: Intimidar al joven
Habilidad: 13
Tirada: 8 (Normal)
- Jovu - dice escuetamente
Se le nota tan irritado como intimidado, sus manos que antes se apoyaban sobre la mesa impulsando su cuerpo hacia delante en actitud amenazadora ahora están a cada lado de su cuerpo. El joven mira a un lado y a otro pero al parecer se siente algo solo ante la posibilidad de tener que defenderse.
- Cuiden sus palabras, y lo digo a ambos - el patriarca habla con seriedad y expresión severa - No permito insultos y aún menos amenazas en mi presencia - entonces te mira a ti - y en cuanto a amenazas a mi propia sangre, suelo vengarlas con actos y no palabras y un hombre dispuesto a amenazar a otro debe estar dispuesto a hacer realidad dicha amenaza. Terminaremos con este asunto de los bandidos y luego solucionaremos aquellas palabras que se dijeron aquí y que no deberían haber sido dichas nunca. No en mi casa, no a mi sangre y no en mi presencia.
Jovu con una señal despide al montañés y cuando este sale vuelve a hablar.
- Serán 250 hombres de Maro y 25 de Albidón, mi hijo los dirigirá y cualquier desafío a su autoridad será condenado con la muerte del ofensor. Dada la pobre cantidad de soldados que nuestros aliados nos proveerán estos no estarán en ninguna posición de autoridad, sin embargo confiando en que su entrenamiento es superior al nuestro se los utilizará como un solo grupo de combate y tendrán la responsabilidad de matar al líder de los bandidos mientras que los hombres de Maro se encargan del resto.
Nuevamente Jovu os mira alternativamente.
- Si la propuesta resulta inaceptable por parte de Albidón entonces agradecemos el habernos ayudado a encontrar a los bandidos y les despedimos como amigos mientras Maro se encarga del problema sin la ayuda de sus aliados.
Lorenzo no baja la mirada, ya que no se arrepiente ni un poco de sus palabras dichas al joven.
No tengo ningun problema con esa sea la tactica para el ataque. Mi grupo obedecera las ordenes dadas sin ninguna queja, se lo aseguro Jovu.comento sin miran en ningun momento al joven Jovu.
Luego me disculparia pero no en frente del chico irrespetuoso. No caeria tan bajo.