Al final, tu gruñidito y la tu actitud de miedo hace que que todos se enternezcan y que un gran suspiro recorra a la concurrencia. Es como si a todos les gustaras. De hecho, algunos preguntan como pueden comprar uno. Asi te llevan aun edificio en el que parecen haber cientificos o algo asi, porque todos tienen cara de gilipollas. Te entregan a uno de ellos y le dicen que eres un animalito adorable pero que no saben lo que eres, asi que esperan que ellos sepan que hacer contigo. Te llevan a una sala contigua y ahi te miman un rato mientras buscan en sus bases de datos. En tanto, por la puerta entre abierta que da al vestibulo ves entrar a tres robot que parecen armados y uno lleva un vestido rosado muy bonito que te quedaría de maravillas a ti.
- En este planeta hasta los que se supone que son listos tienen cara de gilipollas.. es que como puede haber una especie con esa pinta! - Pensé mientras me dejaban sola unos instantes.
Observé a los robots por el rabillo del ojo y eso sí que era gracioso. - Aquí hasta los robots son un poco raros.. ¿ por qué llevarán esas pintas? Lo que no me quedaba tan claro era por qué iban armados, pero como ya no me hacían carantoñas y tenía curiosidad de saber por qué un robot iba vestido decidí escaquearme de la habitación para acercarme a ellos. Al menos, yo iba armada siempre y no lo sabían.
Con todo misigilo posible salí de la habitación y me dispuse a seguir a los robots, intentando de primeras que ellos tampoco me vieran, para saber qué es lo que estaban tramando.