-"Básicamente así fue, el ultimo sucesor al trono se vio en dificultades y rindió el castillo a mi, por así decirlo, digamos que la conquista se llevo a cabo con dinero- dije mirando al pequeño- eres bastante curioso y eso me gusta, tu inteligencia me hace acordar a la de los caballos, los pura sangre criados en Kentucky son sumamente listos y curiosos, tengo varios comprados y la ciudad se llama Lexington, porque no tomas ese nombre?"-
Nerviosa miro hacia las ventanas. Estamos perdiendo demasiado tiempo en esta discusión estúpida. ¿Qué más da quien sea el rey? No deja de ser un estúpido humano capaz de utilizarnos y vendernos a su propio interés. Ese trono debe pertenecernos a nosotros, las gárgolas.
Carraspeo mi garganta para llamar la atención de los presentes. - La cuestión de los nombres podrá debatirse en otro momento - indico, para pasar a mirar directamente al humano - ¿Qué es lo que quieres de nosotros? Había llegado hace muy poco a este mundo, pero ya había aprendido que, como siempre, las actuaciones de los humanos funcionan a través de intereses e influencias. Es hora de dejarnos de tonterías e ir directos al grano.
-"Nada a decir verdad- le dije a la mujer- que sigan cumpliendo su papel como guardianes de este castillo, como hicieron durante generaciones, aunque comprendiendo que este castillo ya no esta en las tierras antiguas, no es mas de un rey y que este mundo ha cambiado muchísimo con los años- mire hacia la ventana- noto que ya esta amaneciendo, podemos continuar esta conversación al anochecer, ha sido una larga noche para todos"-
La menuda gárgola se sorprendió al escuchar las palabras de aquel hombre. Disculpa, dijo tratando de ser educado pues pensaba que todo eso se debía a un mal entendido. ¿Pero estás comparando mi inteligencia con la de un caballo? No creo que sea así, pero he de decirte que algunas gárgolas podemos ser más inteligentes de lo que te piensas. No todos somos bravos guerreros, ni pura fuerza y músculos. Otros tenemos desarrollado este músculo. Dijo mientras se daba golpecitos con su garra en la sien.
Espero que sepas distinguir la diferencia. Y no veo la razón de ponerme un nombre, ahora que tú puedes llamarme como te de la gana. Para eso eres humano, siempre hacéis lo mismo...
- Que estemos dispuestos a proteger el castillo, si lo hacemos, no significa que protejamos y luchemos por quien habita en él. Eso debe quedar claro - contesto a las palabras del humano ignorando los comentarios de Lexington. Ahora no hay tiempo para disputas de ese tipo. Miro también hacia el exterior inquieta. Sin decir ni una palabra más, echo a andar hacia la salida. Al pasar junto a Goliath, me giro hacia él, esperando su reacción. - Es hora de marchar
Di un pequeño rugido,no me gustaba todo esto.
- Vayamos a descansar,mañana podremos hablar con más tiempo.
- ¿Marchar?.- susurro algo desorientado, no sabia si querian dormir alli o no. Miro a Hudson, el era el lider despues de todo.- ¿Dormiremos aqui? Conozco un sitio mas seguro... y aun no se si fiarnos de el es bueno.
Me acerqué más a las gárgolas de modo que solo ellas me escuchasen.
- Dudo que sea tan idiota de atacarnos,después del interés que tiene en nosotros.Además,este es nuestro hogar,y deja ya de cuestionarme Goliath,hoy no ha sido tu día.
Goliath resoplo, no podia contradecir al lider.- Lo siento.- murmuro como disculpa mientras sus pasos se dirigian a las almenas donde solian dormir. Al pasar junto a Demona la miro deseando estar solos un momento que no tenian pero tambien temiendo que les traicionaran de nuevo.