ACTO I
Tras descansar en la mansión Baranova por unos días, los reportes informan de una gran concentración de soldados en el lago Tera, en la zona Oeste de Dalaborn. Siguiendo las indicaciones de un viejo diario élfico encontrado por Elyviel en un refugio abandonado, nuestros héroes llegan a la conclusión que si han hallado algo bajo el lago, es posible que sea un lugar donde poder encontrar el Cielo Nocturno y con ello una cura para Gala, la maldición de Phyan o salvar al pueblo de Elyviel.
El grupo se dirige allí y de camino, Draek contacta con Tuxu, un ser que se hace llamar el Guardián del bosque, quien le dice que tenga cuidado con el lugar a donde su grupo se dirige y con el mal que se encuentra en las profundidades del lago. A todo esto, Phyan lleva varios días teniendo sueños vívidos para los que no encuentra explicación, pero que parecen conectados de alguna manera con lo que mora bajo el lago Tera.
ACTO II
Tras infiltrarse en el campamento conformado por soldados del rey Elías y escuadrones de Tol Rauko, os hacéis con un navío élfico que de manera autónoma, os sumerge a las profundidades del lago, hasta llegar a la gran oscuridad de las frías aguas (resulta que el navío es el mismo que Elyviel invocó para navegar el lago hacia el castillo de Deniessil). Cuando emergéis de nuevo, un largo rato después, os encontráis ante la ciudad secreta de Exor, una ciudad erigida en la oscuridad de una bóveda excavada en la roca de kilómetros de diámetro bajo el lago.
Tras recorrer los exteriores de la abandonada ciudad e informarse con diferentes documentos, diarios y libros pertenecientes a antiguos visitantes de Exor y los desaparecidos soldados enviados a explorar, comprenden que la ciudad fue maldita con una terrible maldición que la ha asolado hasta la destrucción de toda la civilización de los Volantianos (ciudadanos de Exor). Descubrieron además que para poder llegar al centro de la ciudad tendrían que abrirse paso entre criaturas deformes y violentas hasta alcanzar las murallas interiores de la ciudad, pero sin poder usar ningún tipo de magia, pues parecía que la guardia de la ciudad, los Quiebrasoles, seguían velando por hacer prevalecer la ley bajo las órdenes de su comandante Mayshen.
Al atravesar las murallas, descubrieron que Phyan se encontraba poseído por una antigua ciudadana de Exor, que llevaba viviendo dentro de él durante toda su vida, y es quien le había otorgado sus poderes de transformación. Para proseguir su aventura en el interior de las murallas, se hospedaron en casa de la Familia Bonetti, la señora que mora en el interior de Phyan, la cual les guía a través de la ciudad para que encuentren la forma de acceder al Kronen, el centro neurálgico de la ciudad, donde creen que se encuentra la última semilla del Cielo Nocturno.
ACTO IV
Para conseguir acceder al interior del Kronen, necesitan convertirse en representantes de los gremios que reinan en la ciudad, los cuales exigen atravesar duras pruebas de gran pericia e ingenio. Todos son capaces de superar las pruebas y acceden al interior del Kronen, donde Phyan tiene una visión del debacle de Exor, propiciado por la avaricia del hijo de una de las familias, quien asesinó a los representantes de todas las grandes familias, gremios de la ciudad y a la propia Sacerdotisa, encargada de salvaguardar el Cielo Nocturno, el cual alimentaba a la ciudad y permitía la vida bajo tierra.
Durante todo este tiempo, Raj sufre varias pérdidas de conocimiento, e indica que alguien o algo le habla desde las profundidades de Exor, advirtiéndole de la necesidad de liberar la ciudad de algo que no es capaz de entender. Por otro lado, Draek conoce al Kami Kalais, guardián de Exor, el cual le envía unos mensajes crípticos sobre qué debe hacer en las próximas profecías que están por llegar...
ACTO V
Tras abrirse paso derrotando a los guardianes del Kronen y al corrupto cuerpo de la Sacerdotisa asesinada, consiguieron huir de la ciudad junto con la nueva semilla del Cielo Nocturno, la cual requirió el sacrificio de Phyan, quien no murió gracias al poder de Eliana Bonetti (el espíritu que moraba en el interior de Phyan) quien se liberó para reencontrarse con su hija, la Sacerdotisa asesinada.
Al huir de Exor, la hermandad de los Siqs les ayuda a volver a la mansión Baranova, la cual se encuentra en llamas a la llegada de los héroes ...pero eso ya es otra historia...