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HLdCn - El claustro divino

Dia 7- El cantar de los cantares

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29/06/2012, 17:27
Demiurgo

Nuevamente,un resplandor rojizo inundo la estancia y la discusión entre el Señor del Vino y el Rey de los Muertos se corto. Una espiral azulada conformada por extraños símbolos se alzo trayendo,consigo,a aquel Juez,Jurado y Verdugo que es Demiurgo el cual miro,inexpresivo a su próxima victima. Sin mediar palabra,sin avisar,se lanzo contra Anubis y clavo un brazo en el pecho del Dios Chacal,un chorro de sangre negruzca salio disparada manchando la pared. Demiurgo fue a retirar la mano del cuerpo fallecido de Anubis y,simplemente,no pudo.
El cadáver comenzó a convuslionarse...era una risa,una risa macabra del Señor de los Muertos del cual emanaba una bruma negruzca que subia por el brazo de Demiurgo.
Al fin...estúpido Demiurgo, al fin me eligieron como tu victima. Dicho esto se arranco la mascara clavandosela,en aquella cara amalgama de 1000 rostros distintos.
Solo necesitas definirte... Dijo riéndose histérico mientras trozos de carne caían de su rostro,de sus brazos y cuerpo volviéndose volutas de humo oscuro. El Demiurgo gritó y todo retumbo mientras su típico color verdoso iba se oscureciendo,corrompiéndose,hasta el rojo sangre.
Su forma fue cambiando,definiéndose, tomando otra, una por todas conocida. Con su báculo y sus nuevos ropajes solo alzo la mano hacia delante y gritó lanzando por los aires a todos los presentes.

Ya he obtenido mi objetivo. Ahora aquí sucumbiréis todos. Yo soy el nuevo DIOS.

Alzando una mano uso sus poderes mentales para alzar a Dioniso en el aire,el cual tenia un par de dientes rotos.

Y tu has sido una molestia desde el principio Dijo apretando la mano y el señor del vino grito como nunca habíais escuchado gritar a otra deidad,su cuerpo se comprimía poco a poco dejando caer un reguero de sangre al suelo

Hermano,basta por favor! Gritó una asustada Bastet,que se abrazaba a un brazo de su padre que negaba resignado

Y tu cállate,sucia traidora. Es cómoda la cama de ese griego? Vergüenza debería darte venderte por un poco de éxtasis
Escupiendo al suelo apunto el báculo contra su hermana

Y ahora yo te enseñare modales Apunto su báculo hacia la felina y una bola de la misma tonalidad salio disparada hacia ella reduciéndola a cenizas y desplegando una nube de humo denso.
Mientras Anubis se reía y torturaba a Dioniso los demás no podían hacer nada para frenarlo. Embutido con el poder de Demiurgo nada podía frenarlo

Detente! Grito una voz totalmente distinta a la anterior,la nube de ceniza roja torno en dorado y se reunió tomando la forma de un león. El humo se disperso a gran velocidad y los demas podian ver una nueva entidad

El poder de Demiurgo no tiene nada que hacer contra mi,soy tu sangre si tu te fortaleces yo también lo hago Gritó aquella voz distorsionada que se asemejaba a la de un león.

Alzando su nuevo bastón, Ra,Atenea y Ares comenzaron a brillar con la misma estela dorada que Bastet
Y con la esencia de los muertos yo te detengo Sentenció mientras comenzó a cargar contra el Chacal.
Luz y oscuridad chocaron durante unos instantes en una esfera dual de ambas tonalidades. La negrura de la maldad comenzo a extenderse,cuan vetas de mineral,por la luminosidad de Bastet forzándola a retroceder.
En ese momento el hechizo se completo y los otros Dioses resucitados se tornaron en cadenas doradas que rodearon a ambos dioses por igual.
Una espiral azulada surgió de la piedra rosetta atrapando a Anubis que gritaba cosas ininteligibles.
¿Querías ser Demiurgo? Dijo Bastet Ahora comparte su destino! Con un nuevo empujón de luz Anubis fue succionado a la piedra rosetta junto con los resucitados dejando en la estancia solo un polvo brillante,de pura energía,que caía sobre los demás dioses supervivientes.

Estos,sin mediar palabras,o con algunas lagrimas simplemente se marcharon mientras que una viña gigante se extendía por el edificio sellándolo para siempre.
Los Dioses se fueron ignorando algo muy crucial. La mascara del chacal seguía en la estancia,algo escondida por los escombros y el resplandor rojizo de sus ojos no se había extinguido...