Ya estáis recuperados, las cicatrices aun están frescas, pero con los cuidados recibidos, todos estáis bastante bien, y hasta los últimos efectos del veneno, ya son cosas del pasado.
Tenéis que pensar en que os puede hacer falta y planear vuestro siguiente movimiento, estas gentes no son ricas, ni prósperas, están desesperadas por tratar de salvar su pueblo, pero aun quedan dos importantes amenazas antes de que puedan tratar de volver a la normalidad. Sois conscientes de ello, y sabéis que ahora os toca hacer algo, o decirles que tal vez esta sea una empresa demasiado grande para vosotros.
Preparativos y en marcha hacia la siguiente misión. O bien, decirles que tal vez no podáis continuar. Lo que queráis pero ya ha terminado este descanso.
Vuestro turno.
Es normal que un grupo de jugadores que no se conocen, algunos ni conocen el juego, tarden en cohesionarse y trabajar en equipo. Para eso son los primeros combates, y habéis elegido con sabiduría ya que las arañas, a pesar de su veneno, o tal vez por la parálisis que ocasiona, son el enemigo más permisivo. Los orcos pueden ser algo más complicados, ya que aunque no son muy listos, si más que las arañas. Y el ogro u ogros, podría haber varios, es de lejos lo más difícil, siendo el reto de la aventura.
Os recuerdo algunas cosas, tal vez debería haberlo hecho antes.
Vuestra vanguardia la tienen que formar los guerreros, Brom y Magni, no Tandas si puede evitarlo, ya que el ataca a distancia, pero en caso de necesidad puede ponerse con un escudo a frenar el avance.
Madelina es una clérigo y esta debe estar cerca de la vanguardia, de hecho puede estar en primera línea, pero esto tiene el inconveniente de que si resultará herida o muerta, no podría curar a nadie.
Lydon no es de primera línea, emboscar, obtener información y en combate retirarse rápido de la primera llínea, por ejemplo tras haber emboscado.
Y Timel nunca debería estar en primera línea, es la más débil, con poca vida, y sin armadura. (Y hoy me la ha liado escribiendo en mitad de la actualización).
Mensaje de Timel que tengo que colocar fuera de la actualización.
Aunque algo inexperta en cuestiones de convaleciencia Timel se ofreció para ayudar con los heridos. La elfa aprovechó el tiempo además dedicando momentos a la reflexión y autoevaluación, dejando a un lado los derroches y la algarabía que la caracterizaba; aunque sin dudar con la misma sonrisa y actitud jocosa para levantar el ánimo de los heridos.
En ocasiones durante esos días bajaba a comer algo y los ojos se le iban tras las cervezas que siempre parecían rodear a Brom, la muchacha solo suspiraba y volvía a sus quehaceres algo sorprendida de encontrar satisfacción en ello.
Para cuándo ya todos estaban en pie, o más bien reunidos alrededor de la mesa planeando la próxima expedición y recapitulando sobre lo sucedido Tímel se mantuvo al margen pues realmente ella no era una estratega militar ni de batallas; lo suyo siempre había sido apuntar de lejos y pumpum… asunto resuelto
Levantó la mano agarrando un poco el antebrazo de Brom para que mantuviera sus cabales cuando las emociones parecieron embargar al enano, riendo cuando Lidon comento lo de las canas.
Luego asintió con Madelina y Tandas, ciertamente ella también sentía culpabilidad igual que Magni por fallar sus conjuros; pero así de caprichosa era la magia.
Levantó la mano tímidamente como pidiendo la palabra.
-Yo no tengo idea de batalla ni estrategias militares pero si se que aunque el inicio fue algo torpe y no supimos coordinarnos se que estamos aquí gracias al esfuerzo conjunto. Estoy segura que en las próximas expediciones lo haremos mejor.
Sus dedos repicaron sobre la mesa un momento.
-¿Sobre eso no sería mejor siempre irnos por el lateral que no de frente? Y aprovechar a los de distancia como Tandas o a mi, que tengo un número limitado de hechizos, uno cada vez,dicho sea de paso tenerlo en cuenta, antes de lanzaros a golpear lo que sea que haya.
Miro a Timel -No soy un experto y no se mucho de magia, así que hablo sin saber, pues tampoco se que hechizos posees, aunque te he visto en acción, no se si puedes hacer lo que digo- le sonrió, su semblante serio no solía durar -¿puedes aprender o adquirir nuevos hechizos? es que nos vendría bien algunos en área, más cuando van a ser varios enemigos-
Tímel levanto la diestra contando con los dedos como una niña chiquita.
-Tengo...flechas ácidas(3) e invisibilidad(3)pero baaaa cada uno me chupa la mita de mi poder mágico. Luego tengo el projectil magico, dormir, armadura de mago y curar heridas leves.
Miro hacía Brom cuando decía esto último, luego continuó hacía Tandas guiñando un ojo retomando el tono jocoso y jovial de siempre.
- Por lo demás algunos trucos bajo la manga que no me llevan usar magia
Levanto los dedos simulando tocar agarrar algo en el aire y uno de los cubiertos que usaban se movió, mientras el sonido de un perrito ladrando sonó debajo de la mesa. La elfa solto una carcajada mientras soplaba para extinguir la lumbre en la vela sobre la mesa, inmediatamente chasqueo los dedos y una chispa convertida en lumbre volvió a encender la mecha.
-Trucos como dije. Mover cosas ligeras, hacer sonidos, una llama pequeña. Ahh y si hay magia en la zona pudiera sentirla.
Algo abatida apoyo el torso en la mesa cruzando las manos y escondiendo el rostro .
-No es cuestión de cuántos hechizos más pueda aprender es que si no tengo magia para potenciarlos es como si no los tuviera.
O A veces no me salen.
Refunfuñó esto último algo más bajo mientras levanta un poco la cara espiando a medio ojo entre la maraña de pelo que se desparramaba sobre su rostro y hombros.
Tengo 6en poder mágico
Asintió sonriendo antes el despliegue de trucos de la maga y negó -Bueno, bien usados, nos pueden se muy útiles, así que esta bien, quizás algún truco... pueda servir para distraer- sopesaba las habilidades de todos, para ver la mejor manera de proceder para la siguiente misión, la de los orcos, no iba ha ser nada fácil.
- Bueno, bueno, bueno... no dejaremos que nos vuelva a pasar entonces - dijo Lydon intentando rebajar el tono de seriedad del grupo.
Y diciendo eso, sacó su flauta de su bolsa y se puso a tocar una alegre melodía...
—Gracias —le dijo Madelina a la mujer cuya presencia trajo un poco de aire fresco a la situación. Esta vez la hermana sanadora sí que tomó más comida y que antes y se dedicó a disfrutarla, ya que luego de tanto trabajo su cuerpo necesitaba reponer fuerzas, sin embargo trató de solo consumir lo necesario porque sabía que mientras estuvieran amenazadas las personas de Farton no tendrían abundancia de recursos.
Cuando llegó el alcalde con las terribles noticias, la pelirroja bajó la mirada por unos instantes. —A pesar de todas las dificultades, creo que la batalla contra las arañas nos trajo aprendizaje y también resaltó lo que se nos da mejor a cada uno; esos orcos sin duda suenan peligrosos, pero tengo fe en que juntos lograremos erradicarlos. El mal no debe prevalecer —mencionó apenas terminó de hablar el alcalde, y es que a pesar de todo ella quería creer en que podrían cooperar una vez bajados los ánimos, ya fuera por conseguir el dinero o por ayudar a las personas. Llegado el momento de impartir justicia lo más importante era mantener la firmeza… o eso fue lo que Madelina aprendió de la última batalla.
—Lo de tomar una aproximación más furtiva me parece algo que podría ayudar mucho, señorita Timel, también el utilizar los trucos como posible distracción. Hasta donde sé los orcos podrían ser más organizados y peligrosos que las arañas, pero tampoco son tan listos, ¿no? —claro que hablaba solo de lo que había escuchado, no con experiencia personal. —Yo también sufro de energía limitada aunque solo me dedique a canalizar la luz. Mi fuerte es curar, pero tengo la bendición y la capacidad de materializar una suerte de escudo, aunque para eso necesito estar lo más cerca posible de quien lo vaya a recibir —quizás ya lo sabían, más remarcarlo podría servir y dado que hablaban de habilidades le pareció correcto aprovechar la oportunidad.
Luego de eso no participó mucho más aunque se mantuvo atenta tanto a lo que decía el alcalde como a lo que pudieran expresar sus compañeros. Escuchar a Lydon “el músico” de nuevo con su humor, a Timel demostrando sus trucos o incluso recibir una que otra mirada de Tandas eran signos de que la recuperación iba por buen camino, cosa que contribuyó a levantarle un poco la moral. La sanadora también recordó a la hermana superior diciendo que nunca debía de claudicar sin importar lo difícil que se viera el camino, pues como una antorcha ella que era representante de la Luz Divina debía llevar la misma a donde fuera. Su cuerpo debía resistir el dolor, pero eso solo lo lograría manteniendo su alma impoluta.
Cuando terminó de comer Madelina agradeció en general y luego se levantó de la mesa, pues ahora que el grupo parecía volver a estar en funciones seguramente pronto habría que partir a la acción de nuevo, y para ello debía prepararse…
Escuchar las palabras del alcalde lograron molestar a Magni, les había costado recuperar el río y ahora todo había sido destruido nuevamente. Ya sentía que su sangre hervía y deseaba cortar un par de cabezas orcas con su hacha y machacar torsos con su martillo.
—Volveremos con buenas noticias —le dice al alcalde antes de que este se levante de la mesa—, los orcos no les darán más problemas. Lo juro por mi oscura barba que se bañará con la sangre de esos hijos de las cavernas.
Ahora debían prepararse para enfrentar la próxima tarea, conseguir mejores armaduras o cualquier otra cosa que los ayudara a mejorar sus habilidades en combate.
Luego comiendo lo que le ofrece la posadera muy amablemente, ve los intentos de los otros por bajar la tensión que se ha generado gracias a las imprudencias del combate anterior. Pero ya era historia pasada y debían enfocarse en erradicar al clan de orcos que fastidia a la población de Farton.
—vallamos por algunas mejoras para nuestras armas y armaduras. Quizá encontremos algún arma especial que nos ayude en las batallas que se avecinan.
POSADA
Miraba a una y a otro y vuelta a empezar, malhumorado y ceñudo.
-"Para entrar en combate hay que saber luchar, no es ir a dar un paseo por el campo. Si nunca habéis luchado o no tenéis experiencia, es mejor que lo digáis; así sabré a lo que me enfrento. Yo os puedo enseñar, por lo menos a sacar vuestras mejores habilidades... si queréis." Les respondí.
Seguí escuchando y me tranquilicé un poco, pero el comentario de Tandas volvió a encender en mi la cólera enana que trataba de mitigar... aunque los litros de cerveza no me dejaban...
-"¿Que yo fallé? Niño, porque eso es lo que eres para mi, creo que el único que no perdió la compostura, sabía cuál era mi cometido y estuvo al frente de la refriega todo el tiempo fui yo. Si YO no hubiera aguantado tanto, todos los que estabais detrás mía hubierais caído en dos asaltos. Si hubieras concentrado los disparos sobre una sola araña, no tendría tres arañas heridas atacándome, si no una o dos... ¡HUMMMM!" Repliqué.
Cerré los ojos y respiré hondo, para intentar hablar con la voz más calmada.
-"Vamos a ver, para que os quede claro. Os daré un par de directrices básicas de combate: Magni, Madelina y yo somos carne de cañón, y debemos de entrar en liza en vanguardia. Para eso llevamos recias y duras armaduras, no son modelitos de pasarela. Además, nuestra querida sanadora nos puede curar si somos heridos. Ya por detrás, escudados por nosotros tres, estaríais Timel y tú, Tandas, lanzando hechizos y flechas sin parar. Y ya por último, el escurridizo Lydon puede ocultarse en las sombras para atacar furtivamente o por la espalda a nuestros enemigos. Es así de sencillo. Y lógicamente, hay que atacar con todo en un combate y no guardarse las fuerzas para el final. Al principio del mismo, es vital disminuir los oponentes lo más rápido que se pueda, así son menos ataques que recibimos." Dije envalentonado al hablar de luchar.
Paré un momento y bebí un largo trago de cerveza, ya que se me había secado la boca.
-"Podéis hacer caso de mis consejos o seguir luchando a vuestra manera, pero si es así, no creo que volvamos ver amanecer otra vez..." Terminé diciendo.
Me levanté y me fui a orinar, que tenía la vejiga a reventar. Aunque me llevé un par de pastelitos para el camino, de los que trajo Marga, la posadera. Al volver, el alcalde se había acoplado a la mesa. Las palabras de Timel siempre lograban tranquilizarme y esa sonrisa pacificadora, aún más. Aunque nunca se lo diría, la habia tomado mucho cariño a la joven elfa y me estaba despertado sentimientos harto olvidados, los de un padre con sus hijos... hijos perdidos en la noche de los tiempos... Poco a poco fui relajándome y anestesiando mi mente con más cerveza. Debía de volver a esconder esos recuerdos de antaño.
-"Bueno, siempre hay una primera vez y esta ha sido la vuestra. A ver si habéis aprendido algo de todo ello. Con el dinero conseguido, intentar mejorar vuestro equipo, que siempre ayuda. Hoy terminaremos de descansar y de hacer las compras y mañana temprano partamos de nuevo hacia el embarcadero, desde allí cruzaremos el rio hasta el otro lado, al bosque de los orcos. Hay que encontrar ese monolito y el lugar donde acampa esa chusma." Dije en alto, finalizando con un gran erupto.
No os lo toméis a mal, pero es que Brom es muy cascarrabias, xD! Puede que acabéis hartos de él... Jajajajaja.
Tras haber pasado varios días en la posada de Farton, todos estáis completamente recuperados. Habéis discutido en que no se hizo bien en el combate con las arañas, y todos sois conscientes de que tendréis que ir con más cuidado, ya que los orcos pueden resultar un enemigo más peligroso.
Tras desayunar temprano, os disponéis a emprender el camino hasta el bosque ocupado por los orcos (1), en cuyo centro habéis escuchado que parece haber un extraño monolito. Desde la posada hay dos posibilidades. La más cercana es pasar el puente y alcanzar sin mayores dificultades el bosque. La otra consiste en ir al puerto, que ya os han dicho que ha vuelto a ser destruido por los orcos. Y si allí no encontráis ninguna embarcación, el viaje se alargaría hasta que encontréis un vado por el que pasar el caudaloso río.
Lo primero que tenéis que decidir es el camino que andaréis hasta llegar al bosque.
Vuestro turno.
Aquellos que hayan querido comprar algo de equipo básico, que lo indiquen en su post. Que se descuenten las monedas y añadan el equipo en su personaje. Tened cuidado con no sobrecargaros, aquellos que lleven más objetos que sus puntos de fuerza, tendrán dificultades para moverse.
Mirando un viejo mapa de la zona, me di cuenta que la ruta más rápida para ir al bosque era cruzar el puente que había cercano a la posada y marchar después hacia el norte. Este hecho se lo comuniqué a los demás, para que decidieran por dónde ir, aunque ya me imaginaba que cada uno tiraría por un lado distinto...
-"... Pues creo que este camino sería el mejor. No tendríamos que cruzar el río en bote ni buscar un vado donde poder vadearlo. Solo cruzar el puente y andar un poco..." Les comentaba.
Ya estaba todo dispuesto para partir, solo faltaba elegir el camino y comenzar a andar.
—Me parece sensata tu idea Brom, y se me ocurre también que antes de partir dibujemos un mapa de la zona, seguro alguien del pueblo puede describir con exactitud qué nos podemos encontrar en la parte del bosque que dominan los orcos y con esa información seguramente Brom podrás armar un buen plan.
Magni intenta buscar una ventaja que les permita soprender a los orcos y con ello evitar gastar mucha energía.
Mucho antes había solicitado unas cuantas dagas para lanzar según fuera necesario y buscó mejorar su armadura esperando que redujera así el daño eventualmente le van a causar las armas del enemigo. Y también facilitó a los demás parte de su oro para que mejoraran su equipo.
Magni compraría unas 4 dagas y mejorar su armadura si fuera posible. ¿Cuánto será el gasto?
Magni tienes una cota de anillos +1 por ser de buena calidad. Para mejorar la armadura tendrías que comprar una cota de mallas y que fuese de buena calidad. Una cota de mallas normal cuesta 75 monedas de oro, de buena calidad costaría mucho más, y en este pequeño pueblo no creo que habría. Pero eso es algo que pasaría de las 200 monedas de oro, y no esta disponible en cualquier sitio.
Tienes una buena armadura, y es +1. Es un caso muy diferente al de Madelina, que iba con una armadura de cuero y es una clériga.
Las dagas las puedes comprar, no recuerdo ahora el precio, es el que viene en el manual.
La elfa aprovechó los días de relajación y mientras algunos de sus compañeros mejoraron su equipo ella los seguía curiosa observando todo, inquieta y traviesa como una niña pequeña; las tardes en la posada se reducían a bailar con la música de Lydon y por supuesto, volver a sacar a bailar al gruñón de Brom. De cualquier forma entre sus visitas a la herrería un día aprovecho para comprar una daga pequeña. Quien sabe y en el futuro podría ser de utilidad.
Cuando el día de volver a emprender el camino llegó la elfa, bastante alta, miró por encima de la cabeza de los enanos para nuevamente curiosear el mapa.
-Asi, si, si. Cruzamos el puente. Que tal vez no hayan barcos en el puerto ya, y si los hubiera seguramente los están utilizando ya. Además, realmente no me apetece mojarme para cruzar el río.
Comentó remilgosa para añadir bajito.
-De todas formas quien ha visto un enano nadando.
Giré lentamente la cabeza y mi ceñuda mirada hacia la bella Timel... y hablando muy bajito también, la dije:
-"Nadie, ni ninguno de los de aquí lo verá. ¡HUMMM! ¡Odio los botes! Así que por el puente iremos..." Escupí.
Algún tiempo antes de partir, incluso de bajar a desayunar, Madelina se alistó con su armadura, su escudo y su maza, pero también con la cruz de plata que llevaba flamas grabadas. La experiencia contra las arañas le demostró que debía ser más cuidadosa y estar preparada para hacerle frente al peligro si llegaba a ser necesario, así que rezó para tener la voluntad y el temple.
Ya en camino hacia la siguiente parte de la misión, escuchó la plática de los enanos y de la elfa mientras caminaba a un lado del camino. Lo que decían parecía sensato —Y al parecer en ese punto no han atacado los orcos o al menos no han dejado tanto caos, a diferencia del puerto que volvieron a destruir —por lo que no se mostró en contra aunque tampoco excesivamente confiada.
Ese día la pelirroja se encontraba pensativa, atenta a los alrededores.
Ya apunté el cambio de armadura en mi ficha. Si debo añadir o quitar algo, Master, dime por favor.
Se cierra esta escena y pasamos a la siguiente, "El bosque de los orcos".