Partida Rol por web

   Minharath podría excusarse en la luz tambaleante del cetro mágico de Vatra, en que entre la emboscada de otro forjado y de los amigos del mercado no sabía para donde apuntar y se había quedado a medias, o con cualquier otra excusa, pero eso no frenaría la mordaz lengua de su hermana, así que debía contratacar.

   -Ei, que yo al menos no me he quedado a las puertas de la muerte en las últimas 24 horas...-

   Vale, después de esa frase, más le valía acertar o las pullas de Héri durarían hasta que se apagase la llama de plata. Recargó la ballesta tras su hermana y con un elegante giro, se situó frente a ella, respiró, apuntó y disparó.
 

Albioness bajó rápidamente las escaleras para ver como se desarrollaba la pelea, llegó justo para ver como Minharath disparaba su ballesta, aunque el virote había conseguido herir al cambiante, fue solo una rozadura sin importancia.

Vatra por su parte se interpuso en el camino de uno de los cambiantes, pero se le notaba distraido, algo que le pasó factura, pues a la hora de ejecutar su ataque la espada terminó golpeando el suelo en vez de a su enemigo. El cambiante aprovecho que había bajado la guardia para golpearlo con su garra, provocandole un fuerte dolor

Como quiera que el tunel parecía no ser tan angosto dado que sus compañeros le sortearon, Erwyn corre hasta situarse tras Albioness y lanza de nuevo un ataque con su honda, mientras Selene se lanza a derribar al cambiante situado al lado de Vatra.

veo que nuevamente el joven pelirrojo sigue metiéndose solo en aventuras peligrosas y muchas veces hay que sopesar si son viables o no...... pero que estoy diciendo si un enano es el primero que se mete en una pelea dandole igual si tiene ventaja o no.

corro hacia Vatra y me coloco a su lado, por lo menos espero que estos seres se asusten o que no le usen para afilar sus uñas, como si de una corteza de arbol se tratara...

-¡Bien hecho hermanito!
Dije con una sonrisa que se me borró al ver que el enano se ponía frente el cambiante sin atacarlo, y tras eso suspiré, apunté con la ballesta esperando no fallar al tener tantos obstáculos entre el enemigo y yo, respiré y disparé. 
 

Gardi corrió hasta colocarse al lado de Vatra al ver que éste era herido, con su hacha pretendía ayudarlo a acabar con aquellas personas. 

Héri sin moverse del sitio y teniendo mucho cuidado de no herir ni a su hermano ni al enano, disparó su ballesta, el virote salió directamente hacia el cambiante clavandose en su garganta, la joven encapuchada que habíais visto en la planta superior cae muerta al instante

"Quizás debería" se dijo para sí mismo, a sus adentros, mientras empezaba a tomar cierta rutina particular en él. Había ocasiones, en las que sin buscarlo, dejaba de percibir momentáneamente su entorno, demasiado centrado en algo. En éste caso, aunque le tildasen de loco, estaba intentando escuchar su espada. Un leve siseo, apenas audible, llegó a sus oídos. Fue todo cuanto necesitó para saber que no estaba solo, y aunque sus sentidos en verdad podían ver y oír como sus compañeros de equipo se encargaban del otro cambiante, el cual caía muerto, la parte más intensamente consciente de Vatra, seguía sumido en trance.

Como acción reacción a la herida recibida, dio un paso hacia atrás, aunque no lo parecería, sino que, mientras movía su espada, durante unos breves instantes la sujetó con una mano, oscilándola, mientras con la otra, a la par que entonaba unas palabras de poder, se palpaba la herida, buscando la sangre caliente que emanaba de ésta. En un rápido gesto, pasó dicha mano por la hoja, mientras habló - Mae*- dijo, aunque parecería que le hablaba a su espada. Y realmente era así. A su voluntad, palabras de poder se escribieron a toda velocidad a través de la hoja de la espada, runas de voluntad, fuerza, y fuego, la expresión de sus pensamientos y sentimientos.

-Albedo- fue su siguiente palabra, momento en que las runas brillaron en una serie de tonos escarlata, evaporando la sangre de Vatra, a la par que la hoja se teñía en llamas agresivas, mientras él instintivamente daba otro paso hacia adelante, deslizando su hoja, buscando cortar, calcinar y procurar que no quedasen más que restos del otro cambiante. Sus ojos, carentes de una pupila definida, sólo mostraban el trance al que se podía llegar cuando llegabas a los límites de dos ramas opuestas. Mantener la absoluta concentración del combate a la vez que mantienes la absoluta concentración para formular hechizos.

El combate debía ser feroz, a juzgar por los sonidos que le llegaban. Erwyn decide avanzar para ayudar a sus compañeros, situándose donde tiene una buena visual de tiro y no entorpece las acciones de los demás* y lanza de nuevo un ataque con su honda.

Teniendo más márgen de maniobra, voltea el arma un par de veces con el ángulo necesario y el aire zumba con la velocidad que el jóven imprime al proyectil, que vuela hacia su enémigo.

En perfecta sincronía Selene se ha lanzado a derribar al cambiante, para llegar justo tras el impacto.

Albioness sentía verdadera ira al notar como la batalla parecía estar por terminar sin su participación. Mas aún, uno de sus compañeros parecía estar herido simplemente por llegar primero al frente lo que la hizo sentir aún mas indignada que antes y decidió lanzarse a apoyar a su aliado.

La joven corrió veloz hasta llegar a espaldas de sus compañeros donde, sin detenerse, se escurrió graciosamente entre ambos con un paso de pivote por su espalda, manteniendo su espada entre ella y el transformista de modo que para cuando la chica quedo posicionada frente al enano, su espada ya había tomado su posición en la guardia preferida, Posta di Fenestra, desde donde la chica atacó con un tajo corto y rapido de su arma.- ¡Castigale Themis!- dijo la chica con fuerza al soltar el golpe.

Albioness sin creerse que el combate estuviera pasando ajena a ella, se situó en un costado del cambiante que quedaba en pie, con su espadón trazó un arco rajando casi en diagonal a su enemigo, el cambiante cayó al suelo muerto.

Sin enemigos a la vista, seguís vuestro camino hasta una escotilla de metal, incrustada en el muro del túnel y grabada con runas arcanas, debe ser la puerta sellada de la que Elaydren os habló. En medio de la escotilla, un reluciente círculo de mithril representa el mismo icono que el diario de Bonal Es el antiguo símbolo de la casa Cannith, que antecede a la fundación del mismísimo reino de Galifar: un estilizado yunque y un martillo

La chica limpió la sangre de su espada y la enfundó sin perder de vista el fondo del pasillo, como para asegurarse que nadie mas viniera. Una vez que se aseguró que nadie venía se giró hacia Vatra y se acerco bastante preocupada por su herida.- Vatra ¿Verdad? sientate por favor y dejame revisarte. ¿Te sientes mareado? ¿Duele mucho la herida?- La chica dejó caer una lluvia de preguntas sobre el joven espadachin, a pesar de que ella solía lucir molesta cuando menos, en ese momento, estaba realmente preocupada.
 

Despues de ver que estabamos bien y los heridos tratados, avanzamos en nuestro camino hasta llegar a una inmensa puerta, LA EXCLUSA. 

Inmensa, de mithril y con un hermoso y labrado sello con forma de martilllo y yunque, una creacion de un maestro orfebre, impresionante.

Paso un rato mirqndo aquella maravilla  y despues de disfrutar de la obra de arte

señores y ahora que? Nos dijeron en algun momento como abrir esto o nos dieron una llave o pone algo en el libro?

Ah otra cosa recordarme cuando volvamos que tenga una conversacion con cierto trasgo, sobre lo que pasa cuando mandas a alguien a una emboscada

Observó a Albioness tratando las heridas del hechicero decidido a intervenir si podía aportar algo a los cuidados que esta le dispensaba. Intentaba evaluar la herida para ver si unos simples vendajes servirían o debía emplear la magia.

Una vez finalizó el combate, Vatra no tardó en recuperarse sobre si mismo. Cesado el encuentro, su conciencia regresaba para sí, momento en que empezó a notar el dolor agudo en su hombro, fruto del ataque recibido. Escasos segundos después, fue abordado por la alguacil con preguntas, a lo que respondió - Sería poco honesto decir que no me duele, pero saldré de ésta - le dijo, sonriendo un poco buscando quitarle un poco de preocupación, mientras guardaba a Albedo en su funda. - No estoy mareado, gracias, solo escuece. Tendría que limpiar la herida y vendarla, pero eso quizás podría llevar más tiempo del que tenemos- añadió, mientras observaba al enano quejarse por la puerta.

En cuanto tuvo un momento, Vatra se acercó a la misma esclusa, observándola con detenimiento. Para su gusto, se podría decir que demasiado labrada para ser una puerta, al menos él no usaría semejante trabajo para ello. ¿Cuando venían si es que venían a hacer mantenimiento qué, a abrir todo el portón? No, debía haber una puertecilla para empleados o algo - Quizás haya alguna puerta oculta, o la esclusa se abra con algún condicionante. Lo digo por el efecto condición-restricción , bastante común en guardas- añadió, pensativo, observando toda la estructura, mientras se quitaba la armadura, para limpiarse un poco la herida ( y la armadura).

-Si fuese yo, posiblemente la condición sería que se abriese ante un mecanismo, y que la restricción fuese un comando para activar el mecanismo. Podría ser algo tan complejo como la sangre de un miembro de la casa- empezó a teorizar, mientras se limpiaba un poco la herida con el agua del odre, y con un paño la limpiaba un poco, sintiendo el escozor -Podría intentar buscar una puerta escondida, o buscar inscripciones arcanas. - dijo con franqueza, mientras seguía haciéndose la chapuza de primeros auxilios.

En poco nos habíamos cargado a los cambiantes, sonreí a mi hermano y señale con la cabeza para que siguiéramos adelante.
No tardamos mucho en encontrarnos con algo que parecía la puerta que nos habían mencionado anteriormente. De nuevo una palmada en la espalda de mi hermano para llamarle la atención, una sonrisa burlona y una frase para picarlo.
-Vamos, yo ya me he cargado a un cambiante, ahora te toca a ti lucirte. 

   Vaya, había acabado bastante pronto.

   Minharath observó los restos del -ahora chatarra- forjado caído casi en los escalones y los cuerpos sin vida de los cambiantes, cuya sangre empezaba a mezclarse con la porquería del túnel. Una pena, pero nada en su lenguaje corporal parecía indicar que pararse a conversar tranquilamente fuera una opción a tener en cuenta.
   

   Hablando de sangre, el mago guerrero se había llevado un buen corte, se acercó para preguntar que tal estaba cuando vio que estaba examinando una enorme esclusa con el sello de la casa Cannith grabado en mithril.

-Vaya maravilla eh? Cuando esto acabe, tal vez deberíamos bajar a fundirla y venderla...- Minharath empezó a pasear de lado a lado de la esclusa mientras miraba a los cadáveres... ¿podría ser?
-Señores, nos han emboscado. Nos han emboscado dos veces. La primera querían el diario y ahora no podían atravesar la esclusa, con lo cual nos han esperado... así que la llave es nuestra... diario,llave,diario...-
Con cautela extrajo el diario de su bolsa y con lentitud fue acercándolo hasta tocar el sello de mithril mientras rezaba bajito para no quedar en un espantoso ridículo.
 

La muchacha se percató de que el druida la observaba con atención y recordardando de que había olvidado comprar vendajes decidió preguntarle.- Tu te llamas Erwyn ¿verdad? Albioness, un placer. ¿Por casualidad no tendras vendajes que me puedas prestar para nuestro compañero? necesitamos al menos detener su sangrado.

-Si, Erwyn, dijo él intentando disimular el rubor de sus mejillas. -El placer es mío.

-Creo que es reacio a recibir ayuda, en todo caso sería más efectivo sanarle a través de sortilegios. Si descansamos un momento, podría hacer algo al respecto, le comunicó a la guerrera de piel de porcelana.

A unos pasos oía murmullos sobre si fundir la puerta de mithril en lingotes y venderla.

Ya veremos el que opina, me siento un tanto responsable del grupo, y me preocupa que valla a empeorar simplemente por que no le guste que lo toquen.- La chica volteó a hacia el murmullo, hablaban sobre una puerta o almenos eso parecia.-De cualquier modo, tenemos que reunirnos con el resto. Acaban con matones callejeros como si nada pero si se les aparece una puerta tienen que formar un parlamento para tomar una decisión. ¿Qué tan dificil puede ser?- La chica entonces se acerco al resto del grupo y se cruzo de brazos mientras los veia pensar en que hacer despues.- ¿Podriamos empezar a tratar empujando la puerta?.