-Tenéis mi agradecimiento y la gratitud de mi casa- dice la dama Elaydren-. Soy consciente de lo que habéis pasado para conseguir este esquema.
El Yunque Roto se encuentra medio lleno. Os agitáis en vuestras sillas de madera debido al cansancio y al dolor que se acumula en vuestras extremidades. Llegasteis al amanecer. Allí os recibió el agente de Elaydren y os pidió que descansaseis hasta que llegase la dama. A pesar de tenerlo todo pagado apenas probasteis bocado antes de retiraros a descansar. Varias horas después os sentís casi igual de cansados, pero mucho más satisfechos.
El posadero pone sobre la mesa varios platos de comida y diversas bebidas. Elaydren os entrega a cada uno un saquito con las 150 m.o que os debía.
- Sobre el tal Jarem, si es que aún seguís interesados en él, creo que en los próximos días recibiré una importante información sobre él. Mis agentes trabajan bien, y rápido.- Hace una pausa antes de continuar. Por lo que veis medita bien sus próximas palabras-.Si queréis...comprobad cada cierto tiempo la estación de mensajería de la casa Sivis, en la torre Barmin. Puedo dejaros allí un mensaje urgente en cuanto sepa algo. O por si surgiese algún otro trabajo.
Educadamente os pregunta si puede ayudaros en algo más. Threkor le pregunta sobre el mapa que encontrasteis en la Forja...Elaydren lo estudia durante unos minutos. La veis fruncir el ceño en su esfuerzo por concentrarse.
-Es extraño...-os dice al fin-. Muestra varios símbolos crípticos repartidos por lo que parecen ser antiguas descripciones de un territorio ahora dividido entre las Tierras Enlutadas y Darguun. Pero si os soy sincera...Desconozco el significado de estos símbolos. Pero no soy ajena al misterio que envuelve este lugar...
Os explica que esas tierras son un misterio. Antiguamente Las Tierras Enlutadas fueron el Reino de Cyre. Durante la guerra este Reino se llevó lo más crudo del conflicto. Un día, sin previo aviso, una explosión arcana de origen desconocido barrió todo el país sumiéndolo en la oscuridad. Una nación entera desapareció en un abrir y cerrar de ojos.No quedó nada que no estuviese corrompido. Hay quien dice que, tras varios años, los campos de batalla están sembrados de muertos...en perfecto estado de conservación. Inalterados. Toda la región ha quedado sumida en una niebla.
Tan sólo los goblins y otras razas goblinoides, os sigue contando Elaydren, fueron capaces de asentarse cerca de esta desolación. Crearon el reino de Darguun. Pues este mapa muestra una zona entre estos dos lugares. Os pide que lo conservéis.
Bebe un trago de su copa...
Threkor. Me he tomado la licencia de interpretar que tu personaje le preguntaría sobre el mapa. Si tuvieses algún inconveniente lo cambio.
Y, como no, la última palabra en esta historia la tenéis vosotros. Tras escucharos ella y su agente abandonarán la posada. Podéis poner vuestro último post en esta partida. Aunque, mucho he de temer, que no sea la última de vuestras aventuras...
La comida y la bebida del Yunque Roto me saben a gloria después de las penalidades que hemos sufrido. Después de escuchar nuestro relato, mi prima lejana afirma que es consciente de cuanto hemos pasado pero yo albergo serias dudas al respecto. Hemos estado tan cerca de la muerte en tantas ocasiones... Sin mis amigos, los nuevos y los viejos, jamás hubiera logrado llegar siquiera a la forja olvidada, cuanto menos escapar de allí con vida y con el artefacto que se nos envió a buscar.
Ese tal Jarem me importa tan poco como el extraño mapa de las Tierras Enlutadas, pero me guardo para mí esas opiniones. Lo que de verdad me interesa es obtener información sobre ese Señor de los Filos y no dudo en interrogar a Elaydren al respecto:
―Obtuvimos esto de uno de los forjados que nos atacaron durante el descenso hacia la forja ―digo, poniendo sobre la mesa el mensajero definitivo―. ¿Qué puedes decirnos de esta... cosa? Yo nunca había visto nada semejante. Parece alguna clase de constructo acoplable pero no sé qué es exactamente.
Trataré de sacar tanta información como pueda pero dejando claro que no tengo intención de desprenderme de este artefacto a no ser que me ofrezcan a cambio una suma más que justa a cambio. Estoy comenzando a sentir cierta fascinación por los forjados y creo que tal vez pueda serme de utilidad en el futuro.
Quito de mi ficha el "Contrato con Elaydren d'Won" y el "Esquema de la forja olvidada de la casa Cannith".
Añado el dinero de la recompensa.
Descuento 100 po como componente material para lanzar en el futuro un conjuro de "identificar" sobre la varita.
No habíamos tardado mucho en llegar al Yunque Roto o al menos a mi me lo había parecido, puede que el hambre y el ansia de poner mis labios sobre una jarra de cerveza hubiese espoleado mis piernas. Ante una mesa con esos manjares, no presto mucha atención a nuestra anfitriona, aunque si que cojo la bolsa de dinero que nos tiende y la guardo entre mis ropajes. Mis compañeros estaban mas interesados en sacar información de lo encontrado...yo les acompañaría en pos de riquezas pero me daba un poco igual donde me metieran para conseguirlas. Pero de algo dicho por la dama Elaydren si me quedo, podría tener trabajo para nosotros.
- Si el trabajo se paga bien contad conmigo. Digo mientras sigo engullendo comida como si mañana tuviese que pagarla de mi bolsillo.