Partida Rol por web

-Si maestro. Partiré enseguida. No le decepcionaré.

Todo el cansancio y el dolor de las heridas desaparece al recordar el lugar donde crecí con mis compañeros. La idea de volverlos a ver con sus armaduras y de reencontrarme con el Guardián me parecía aun un sueño. Mientras me dirijo al barracón a recoger mis cosas, la vista del campamento que había llegado a convertirse en mi hogar me deja unos sentimientos encontrados. Tal vez fuera la última vez que pisaba este sitio.

Una vez Ryu hubo recogido sus cosas salió a despedirse. No había muchos amigos allí, aunque sí algunos conocidos. Y Niomes estaba todavía inconsciente.
Krotus se le acercó sin que se percatara, para ser un tipo tan grande y gritón podía ser discreto cuando se lo proponía.

Ryu, ya eres un Caballero de Atenea. Nadie te podrá quitar eso nunca, salvo tú mismo. Ten cuidado ahí fuera.

Tras esas palabras, el enorme guerrero se dio la vuelta y empezó a gritar a los soldados.

Venga panda de gandules, esto no se va a limpiar solo.

El joven lo miraba de una manera que no sabía explicar, y fue sorprendido por otra persona. El cocinero, o Caballero del Crisantemo.

A pesar de la dureza del entrenamiento, Krotus jamás permitiría que os pasase nada malo durante el mismo. Lo de Septos le supo muy mal. Y apunto estuvo de ir él mismo a acabar con los bandidos, pero teníais que crecer.
Cuidate ahí fuera Ryu, te esperan grandes pruebas. Duras, peligrosas, imposibles. Como a todo Caballero que se precie. Pero no me cabe la menor duda de que podrás con ellas.
Que Atenea te guarde.