Tras el fin de la primera aventura , libertad para decidir que hacer .
Después de la misión cumplida, tocaba hacer un parón obligado para ponerse al día con la mujer que llegó con él hasta la Segunda Ciudad. Tsuruchi Ai debía haber conseguido hacienda cerca: La verdad era que no sabía exactamente dónde se había hospedado la muchacha, y, ya que no la habían mandado a la misión con ellos, había desconectado bastante de la mujer.
Así que principalmente trataría de aprovechar el tiempo para buscar a Ai, enterarse de las nuevas, y mandar misivas dirigidas a sus padres y al jefe de su clan, haciendo mencion a la honra que había llevado consigo cumplir la misión que le había sido encomendada con rotundo éxito y llevar la gloria del clan Toku mas allá.
Se que es un post muy cortito, pero como no se donde está Ai (Porque el anterior jugador no me dejó una localización real donde encontrarla) pero si me dejó claro que una de las grandes preocupaciones del personaje es ella, considero necesario este primer paso.
De vuelta ya en la ciudad y con la misión cumplida , decidiste ir al distrito de la mantis en busqueda Tsuruchi Ai ; tras habla un rato con los guardias , estos te indican la casa de la cazarecompensas tshuruchi .
Al llamar , una sirvienta te atiende y te sirve un té mientras esperas a que su señora aparezca . Tras unos pocos minutos , Tsuruchi Ai hace acto de aparición .
Ayaki san , que grata sorpresa ¿ te gusta la casa nueva ? el embajador por fin ha cedido y me la ha otorgado , no aguantaría mucho tiempo mas viviendo en los barracones , necesito algo más de espacio . Perdona , me estoy poniendo ha hablar solo de mi , me enteré que estabas en una misión ¿ como te ha ido ? .
Las viviendas de los samurais son por distritos ( cada distrito pertenece a un clan , la excepción son los clanes menores , donde hay mucha mas mezcolanza incluyendo gaijins y ronins ) . Dificilmente el Daimyo se dedique a leer lo que le mande un subordinado , y el mandamás de tu clan en la segunda ciudad ni tansiquiera es de tu clan , el el representante de los clanes menores , el ambajador para el que estás trabajando ( es como una unión de los clanes menores de manera no formal y a titulo honorífico ) .
Ayaki estaba encantado de haber encontrado a la Tsuruchi: Es mas, le gustaba que hubiese conseguido finalmente una hacienda y asentarse allí de manera al menos estable.
Sentado al estilo japonés, de rodillas, aceptó el te de la sirvienta y esperó a que Ai hiciese acto de presencia.
Finalmente apareció y, sonriéndole con educación, asintió.
-Es muy bonita: Finalmente el embajador ha cedido. Eso es cuanto menos motivo de celebración.
Después de aquello, escuchó a la muchacha y tras ello respondió.
-Era una misión sencilla: Recuperar una pieza importante para el embajador de las manos de unos paganos. Recibí algunos daños, pero curaron mis heridas en el momento.
Comentó, lo mas tranquilo posible.
-Lo peor que llevé fue tener que tratar con cordialidad y refinamiento a todo el equipo que marchamos hacia allá. Te propuse para que nos acompañases en el camino, Ai-san, pero parece que mis peticiones no fueron aceptadas.
Dio otro sorbo a su taza de te y luego sonrió, y siguió.
-Te veo muy bien aquí. Espero que no te debilites con tanto lujo. ¿Has escuchado algo interesante estos días? Al parecer mi misión para el Emperador ha concluido y he quedado sin trabajo. No llevo bien quedarme sin nada que hacer...
No te preocupes por mi , seguiré haciendo mi trabajo igual que siempre .
Dijo con un gesto de mano tratando de quitarle importancia a ese tema en particular .
No se que puede pensar tus superiores , pero tal vez si tomas la iniciativa y vas por tu cuenta y descubres algo interesante pueden agradecertelo verdaderamente ; verás , he escuchado que han muerto un par de etas en las ultimas semanas , solo los gaijins que trabajan como asistentes de yoriki le han dado cierta importancia . Tal vez debería investigar en el poblado eta .
Te sugirió dándote un rumor que había oido , aunque no sería nada nada interesante a menos que hubiera algo oculto tras la muerte de un par de etas .
-Está decidido, pues. No demoraré más la búsqueda de nuevas oportunidades para aumentar el honor de mi clan.
Aun no se levantó. Tenía pensado terminar la taza de te que le habían puesto delante, así que dio otro sorbo y siguió hablando.
-¿Vendrás conmigo en busca de algo relevante que hacer, o tienes otros planes, Ai-san?
Miró a los ojos a la muchacha. Imaginaba que, como caza-recompensas que era, debía sentirse un tanto motivada con la idea de salir a por algo que pudiera darle dinero. A él le interesaba mas el honor, pero ambas cosas eran compatibles.
! Claro ¡ no tengo nada mejor que hacer hasta que mis superiores me llamen .
Dijo primero con efusividad y luego continuó con un tono más normal . Ella también siguió con su té antes de comenzar a hacer cualquier otra cosa salvo fijar de cuando en cuando la mirada en ti .
¿ Prefires que hablemos primero con los gaijin o vamos directamente al poblado eta a investigar ? .
Te preguntó al acabar su té .
-Cuanta más información a nuestro alcance, mejor. Hablemos con los Gaijin y veamos qué información nos pueden aportar.
Comentó, terminando su té a su vez
-Está decidido, pues. Vamos en busca de un poco de aventura.
Sonrió de lado y se levantó tranquilamente. Esperó a que la mujer hiciera lo propio y después la acompañaría, imaginaba que ella sabría mejor que él el camino hacia los asistentes de Yoriki.
-En cuanto terminemos nuestro trabajo, espero que al menos vayan saliendo trabajos mas... Honorables.
No despreciaba a los etas, pero tampoco podía decir que fueran la élite del lugar... De hecho era un trabajo de mercenario de baja clase. Pero si quería ganarse alguna posición para llevar a la justicia a los primeros criminales, debía empezar ensuciándose las manos y metiéndose de lleno en su búsqueda.