El equipo Dragón Moteado volvió tras los pasos que ya estaban volviendo para desandar lo que previamente habían desandado, hasta las profundidades cloaqueras. Las tortugas estaban terminándose las pizzas, sentadas en improvisados taburetes hechos de ninjas inconscientes.
Los ojos abiertos como platos, se levaron al veros llegar con el paquete.
- ¡Vaya! ¿Quién pidió el extra de cara-cubo? - dice la tortuga de antifaz naranja.
Tras las explicaciones pertinentes, los jóvenes mutantes deciden que la propina no está a la altura del pedido. Se reúnen para hablar entre ellas, y tras unos momentos, se vuelven hacia vosotros.
- Por votación popular, sois los mejores repartidores que nos han atendido hasta ahora. Así que os vamos a dar un extra.
Dicho lo cual, os conceden a cada uno una de sus armas. Una katana de Leonardo para Emer, el bo de Donatello para Hattori y uno de los sais de Raphael para el aclamado cocinero.
Los tres repartidores regresaron a la superficie con la sensación del trabajo bien hecho.
Voy a finalizar esta escena, el reparto está concluido. En cuanto se termine el otro reparto abriré una escena final de epílogo para que podáis contaros batallitas o despediros entre vosotros.