Partida Rol por web

A medida que te acercas ves bastantes casas medio derruidas por las piedras que lanzaba el gigante pues el pueblo carecía de muralla que le brindase una mínima protección. Cuando entras al fin en Mieles, escuchas claramente quejidos y lamentos procedentes de los numerosos heridos y puedes ver unos pocos muertos.
La impresión general que te da es que llegásteis justo a tiempo pues entre las ruinas sólo se aprecian unas pocas pierdas... el ataque masivo habría significado el fin absoluto del pueblo.

Shi baja de su caballo y dice.
Estal tlaquilos pueblo de Mieles, la amenaza ha sido eliminada.
Mis compañelos habel viajado a cueva de oglos donde telminal de coltal la laiz del mal que los asoló.
Dicho esto atiende con celeridad al primer herido que ve, sus compañeros tardarán en volver y aquí parece haber demasiadas cosas que hacer.

nada más llegar te dispones a curar al herido que te parece que se encuentra en un estado más grave. Gracias a Herioneus, tus esfuerzos permiten que el hombre se recupere aunque eso no termina con tu trabajo pues éste acaba de empezar. Rápidamente te diriges a otro paciente y cuando terminas con él a otro más....

Shi no tiene tiempo para hablar con nadie, aunque no deja de ver quien está a cargo del pueblo.
Intenta ver quien da las órdenes en este lugar mientras atiende un nuevo paciente.
Si nadie está cargo deberé ser yo.

Tras un largo rato de confusión y cierta histeria ves como un humano de edad bastante avanzada comienza a decirle a la gente lo que tiene que hacer y ésta lo cumple sin rechistar. Va vestido con una túnica de color oscuro.. azul dirías de modo que su pelo y barba blancas resaltan más aún.

Terminando de ayudar a quien estaba atendiendo Shi se dirige a aquella persona de ropas azules.
Hace una reverencia y dice:
Saludos noble señol, ve que tu estal a calgo de la olganización del pueblo, yo quelel contale que mis compañelos il en busca de la cueva de los oglos que atacal el pueblo.
Podel estal tlanquilo que el gigante que lanzal piedlas ya lo hemos detluido.

Despacio muchacha, que soy algo duro de oido y me cuesta entenderte..., por cierto mi nombre es Lens un placer conocerla. Me alegra saber que habéis acabado con la amenaza del pueblo, ya nos lo imaginábamos a la vista de que hace bastante que no cae ninguna roca.. Por supuesto, cuando todos los heridos estén atendidos celebraremos una fiesta en vuestro honor, ya que gracias a vosotros.. con suerte no habrá ningún muerto.
Por cierto, perdona mi falta de educación, estos son Fonrul (otro humano con túnica azul, bastante más joven que Lens pero aún así mayor) y Rack (un extraño ser de piel cenicienta, con cola, orejas puntiagudas y un extraño olor que además lleva un tatuaje en la mano derecha que reconoces como de la orden de Kelemvor) dos de mis hombres de confianza.

Tus numerosos viajes te han llevado al pequeño pueblo de Mieles, es un pueblo no demasiado grande con una población humana practicamente en su totalidad que se encuentra a menos de una semana de la capital del reino, Claston. Al principio tu recibimiento no fue demasiado bueno debido a lo extraño de tu apariencia. Sin embargo, tu buena fe y la mentalidad abierta de los habitantes de este reino te han permitido integrarte, hasta tal punto que el alcalde, Lens, te considera desde hace un tiempo uno de sus hombres de confianza. Su apariencia no lo demuestra pero Lens era un mago muy poderoso capaz de maravillosos conjuros (y otros aterradores) aunque hoy en día no suele practicar demasiado su magia.

EL día de hoy amaneció con una lluvia de piedras procedente de una montaña cercana las cuales afectaron a numerosas construcciones del pueblo (ya que este carece de muralla) y a muchos de sus habitantes, a los cuales has estado ayudando a curar hasta la llegada de la extraña....

-Ese... es mi nombre.- Dije con un amplia sonrisa y ofeciendole mi mano, levemente nervioso.- encantado de conocerla... señorita.

Hola, mi nombre es Rack, Rack Spade Fischer, un "extraño" clerigo de Kelemvor que ultimamente ha estado viviendo una temporada de felicidad en este pequeño pueblo. Si os digo la verdad, sienta muy bien por fin encontrar un lugar donde la gente puede permitirse tiempo y bondad para conocer a fondo a un pobre tiefling sin carisma como yo, ya ni recuerdo la ultima vez que me puse la capucha para "trabajar". Tal vez por eso haya retrasado tanto mi ida y mi deber como clerigo vagabundo, es dificil decir adios a gente como Lens y sus ciudadanos, y aun mas cuando de repente aparecian plenas rocas lloviendo sobre el pueblo cuando tenias una larga discusion con tu mochila sobre si largarse en pleno amanecer sin decir nada.

-Ha sido una autentica desgracia lo que le ha ocurrido al pueblo, pero es una suerte que preci...- Nada, que no habia manera, siempre la fastidiaba a la hora de hablar con las mujeres. Aunque es cierto, que esta vez tenia razones para estar nervioso, cualquiera lo estaria ante tal belleza exotica y peligrosa.-precisas guerreras como usted pasaban por aqui cerca para evitar una catatosfre aun mayor...¿Digame, que pech...?.- A los ojos, Rack, mira a los ojos.- ¿...Que providencia le han hecho venir por nuestro apacible pueblo?

Shi mira sorprendida a la extraña criatura, es raro ver a alguien de ese tipo cerca de los humanos y más aún verlo como alguien que ayudaba en el pueblo.
Mas bien parecía un demonio o algo por el estilo, pero lo que no parecía era una amenaza así que la mujer lo trata muy amablemente.
Venil viajando con muchos mas compañelos, ellos ilse a una cueva donde habel más oglos, decil que allí podel encontlal a su lidel y acabal con él, con ello telminal con la amenaza.

-Ya veo... Es una desgracia tener que sesgar vidas de esa... manera. Pero a veces es necesario tomar medidas extremas... para preservar el ciclo de la vida y la muerte.- Pense mientras me rascaba la oreja meditativo. No me gustaba aquello de matar como solucion final, pero mi trabajo habia a veces que una muerte rapida y honorable, evitaba un desajuste bestial en el ciclo.- Sin embargo... Tal vez deberia ir al menos a darles un entierro digno y a velar por sus almas en su ascension, es lo minimo que se merecen.¿Por donde dices que esta la cueva de los ogros?

Ilse pol aquel lugal, yo tenel que hacel muchas cosas aquí.
Shi señala la dirección donde se fue el resto del grupo.
Pol cielto, mi nomble es Shi.

Si ya era obvio que la mujer no era de por aqui, su nombre me quito todas las dudas. Me estaba empezando a preguntar que clase de viaje y compañeros tenia esta mujer.¿Quiza una caravana explorando nuevos reinos con los que comerciar? Eso estaria bien, tal vez pudiera preguntarles si han visto rastros de nigromancia prohibida por aqui cerca.

-Si... Bonito nombre... Mucho mejor que no o depende.- Levemente avergonzado por lo que acabo de decir, intento volverme a centrar en los ogros y fijarme en Lens.- Lens, el deber... me llama. ¿Necesitas que cure alguien mas, o puedo partir mientras tu tratas a nuestra... invitada?

Puedes partir muchacho, todos los heridos ya han sido atendidos.. estaremos bien hasta vuestro regreso, algunos hombres empezarán a retirar los escombros mientras las mujeres atienden a los heridos restantes.. ninguno de los cuales está herido de gravedad. No, será mejor que partáis a ayudar a los otros valientes, pues ellos sí pueden necesitaros.. dice Lens mirando de vez en cuando también a Shi aunque habla para Rack

Me estaban dando ganas de preguntarle otra vez si estaba seguro de eso, pero en el fondo sabia que era cierto. La gente se las arreglaria sin mi, siempre lo habian hecho y hasta el dia de hoy no necesitaron especialmente a un clerigo. Era mejor que me hiciera a la idea, o nunca tendria el valor de marcharme.

-Gracias... Lens.- Sonrie contento de que lo entendiera.- No tardare... mucho.

Asi que dicho eso, me fue a mi casa a recoger mi equipo y largarme en direccion a la cueva. Hacia un buen tiempo que habia dejado acumular polvo a mis armas y armadura.

Shi va a buscar su caballo y espera por Rack.
Te espelalé en la salida del pueblo y malchalemos hacia es lugal.

Unos minutos más tarde os reunís en la salida del pueblo y juntos os dirigís hacia la cueva donde crees que encontrarás a tus compañeros.. Os lleva unos pocos minutos pero al fin los veis aún en la entrada de la misma discutiendo que hacer..... como siempre.