Partida Rol por web

Lágrima Hechicera: El descubrimiento

Glenders

Cargando editor
11/01/2013, 01:13
Director

Notas de juego

¿Por qué no habías posteado hasta ahora? :S

Cargando editor
12/01/2013, 11:58
Cassandra

Albergue

Por suerte, parece que el soldado sabe bien lo que le espera si sus contactos se enteran de que la han zarandeado y parece que eso ha hecho que los soldados dejen tranquilos a los inquilinos y sobre todo a ella. Tiene cosas que hacer y no puede estar perdiendo el tiempo en cosas como hacer besar el suelo a un soldado. 

-Eso cambiará tu trato hacia mí? He tenido que usar mi nombre - aunque sea falso, piensa - para evitar que esos soldados hagan daño a estas personas, pero estoy de peregrinaje y eso es lo único que no he podido dejar atrás. No creo que sea nada malo - aunque sea mentira todo lo que estoy contando, vuelve a pensar.

Cargando editor
12/01/2013, 23:08
Joseph

| ALBERGUE |

Había algo que no me encajaba en todo aquello. Tenía la posibilidad de tener en su poder todo tipo de lujos con los que yo solo podía soñar, y sin embargo había decidido descansar en un albergue por asuntos de peregrinaje. Lo que más me extrañaba es que, con su condición, lo hiciera sola. Probablemente en su casa tenía criadas a su servicio durante todo el día y varios guardias que custodiaran la casa contra los ladrones, ¿por qué ninguno le había acompañado?
- Gracias, Charlotte- le dije, pues en parte tenía razón. No importaba lo que hubiera extraño en ella, gracias a su nombre habían dejado en paz a los forasteros que se hospedaban en el albergue-. Bueno, querrás ver la ciudad o descansar en los aposentos, ¿verdad? Yo debería volver al trabajo, si no te importa-.

Cargando editor
13/01/2013, 13:05
Cassandra

Albergue

-Me quedaré a descansar -pero antes de entrar en la habitación se gira - Por cierto... ¿hay baño en la habitación? Me gustaría asearme un poco... 

La verdad es que su aspecto es un poco sucio, seguramente la tierra del camino que se ha levantado al cabalgar sobre su caballo. No es el aspecto que debe tener una mujer en una cena o en una comida, o para pasear por la ciudad. Además, ponerse la muda limpia sobre un cuerpo lleno de mugre, no es de lo más higiénico. Quizá no tenga dinero para gastar más de la cuenta durante su viaje, pero aun le queda un poco de decencia.

Cargando editor
14/01/2013, 12:57
Joseph

| ALBERGUE |

No pude evitar soltar una pequeña carcajada cuando preguntó por el baño y le dediqué una sonrisa antes de contestar.
- No disponemos de baños... Pero sí encontrarás una tina en tus aposentos para poder asearte- le respondí, haciendo una pequeña reverencia antes de marcharme-. Un placer, Charlotte.
Me encaminé de nuevo hacia la recepción para esperar allí nuevos forasteros. Pocas eran las plazas que quedaban libres para poder hospedarse en el albergue pero muchos eran los forasteros que acudían desde muchas ciudades diferentes de la Tierra Media.

Cargando editor
15/01/2013, 12:31
Cassandra

Habitación - Albergue

Se despide de Joseph dándole las gracias y entra en la habitación, cambiando la expresión de su rostro. Se van a enterar su padre y el rey cuando les pille. ¿Cómo consienten que alguien como ella tenga que hospedarse en un albergue que no tiene ni un baño, aunque sea comunitario? ¿Cómo se supone que atienden a la gente en ese lugar? En teoría van a una posada a descansar del largo viaje y el baño es un buen lugar para desprenderse de parte del cansancio. No entiende como alguien consiente que sus inquilinos se echen a la cama sucios de polvo y sudor.

Se desprende de sus ropas quedando como los dioses la trajeron al mundo y comienza a asearse con el agua de la tina y a quitarse la roña adherida a su piel.

Cargando editor
17/01/2013, 00:13
Director

| JUGADA MASTER |

Mientras Cassandra se aseaba en sus aposentos escuchó a una mujer en el jardín del albergue, en el patio donde se encontraban las puertas de todos los aposentos. Su voz era suave y sosegada, dulce y embriagadora. Cassandra no pudo evitar escuchar parte de la conversación que parecía mantener con Joseph.
- [...] Tu dueño decidió venderte y yo he sido la que te he comprado... Quiero que hagas algo por mí antes de darte la libertad, quiero que me acompañes- le decía la mujer, aunque Cassandra no había escuchado la primera parte de la conversación.
- ¿Qué? Pero... Si éste albergue es...- empezó a decir Joseph pero la voz se le quebraba. Parecía disgustado por aquella noticia. Hubo un silencio de varios segundos.
- Éste es el pergamino que ha firmado, demostrando así que eres de mi propiedad. No voy a obligarte a trabajar como ha hecho él. Te puedo asegurar que el futuro que te tengo preparado es mucho mejor, pero debes acompañarme- decía aquella mujer. Por su tono de voz debía ser una mujer joven y de clase alta, pues hablaba con mucha elegancia.
Antes de que pudiera escuchar lo que Joseph debía decir, un pájaro blanco entró por la ventana de los aposentos de Cassandra. Tenía un trozo de pergamino atado a una de sus patas, alguien le había enviado una misiva:

"Querida hija,
La persona a la que debías vigilar se marchó de Glenders antes de que tú llegaras. No sabemos si sospechaba que iríamos en su busca o simplemente ha sido una casualidad. Tampoco sabemos dónde ha ido pero los guardias de las ciudades van a ser interrogados y se harán investigaciones en todos los lugares donde se puedan hospedar los forasteros. Cuando regreses al castillo te lo explicaré. Ten cuidado y vuelve pronto.
Te quiere, Jairon."

Cargando editor
19/01/2013, 17:40
Cassandra

Habitación - albergue

-Maldita sea - murmura al leer la nota de su padre.

Qué clase de incompetentes forman parte del ejercito del Rey... ¿es que solo vale ella o qué? Esta gente se sienta en los cobertizos de la guarda a jugar a los dados y a beber y ni se enteran de lo que pasa a su alrededor, ¡ni aun poniéndoles un aviso frente a los ojos!

Rompe el papel y lo tira. Se viste con la muda limpia y se acerca a la puerta al escuchar a una mujer discutir con el trabajador del albergue... ¿cómo ha dicho que se llamaba? Bah, no es algo muy importante en esos momentos, teniendo en cuenta que no le sirve para nada.

Abre un poco para ver que está sucediendo.

Cargando editor
20/01/2013, 00:39
Director

| JUGADA MASTER |

Cuando Cassandra abrió la puerta de sus aposentos para intentar averiguar qué sucedía vio a una mujer muy bella hablando con Joseph, el joven del albergue. Aquella mujer pertenecía claramente a la nobleza, su elegante vestido azul marino de terciopelo así lo indicaba. Tenía una amplia falda y un corpiño muy ajustado, con un amplio escote. Su larguísima cabellera rubia estaba recogida en una extensa trenza que caía libremente por su espalda. Sus orejas, su cuello y sus dedos estaban adornados con hermosas joyas. Sin duda era rica.
- Vamos, tu dueño ha preferido venderte a seguir teniéndote aquí... Alguna razón tendrá. Sólo puedo decirte que te necesito para mi próximo viaje y debemos salir de Glenders- decía aquella mujer con la máxima elegancia posible.
- Pero yo no puedo irme de aquí... En mi vida sólo he aprendido a atender a los forasteros, ¿qué trabajo me espera con vos?- preguntó Joseph, entre apenado e intrigado.
- Aquí no puedo decirte nada más. Deberás acompañarme y una vez lleguemos a mi casa te lo diré- dijo la mujer, dando por finalizada la conversación.
Joseph se quedó en silencio durante unos segundos y asintió con la cabeza. Probablemente otro de sus compañeros ocuparía el puesto de recepcionista en el albergue pero al joven se le hacía extremadamente raro no volver a estar allí. No sabía si regresaría a Glenders y por eso miraba el lugar con tristeza, despidiéndose.
La mujer parecía tener prisa de modo que colocó una de sus manos en la espalda de Joseph para animarle a caminar hacia la salida, decidida a marcharse de allí lo más pronto posible.

Cargando editor
22/01/2013, 18:40
Cassandra

Albergue

Cambia su expresión totalmente para parecer una persona amable y buena que ha interpretado hasta ese momento. Cualquier persona que se comportase como su "yo" entraría en la conversación para tratar de salvar a una persona en esa situación. Sale de su habitación y se acerca a los dos que están discutiendo sobre el tema de quien pertenece a quien.

-Que lamentable espectáculo. Un hombre no es un mulo de carga que podáis comprar con dinero. No son esclavos de los hombres si no del destino que los dioses le han impuesto y, aun así, son dueños de él. Dejad de tratarle como si fuese de vuestra propiedad pues una vida no pertenece a nadie salvo a la muerte que nos espera al final del camino. Así pues, pido que os comportéis como la dama que sois y deis la libertad a este hombre. Os hará mejor persona.

A pesar de no llevar joyas tiene el mismo porte que la dama enjoyada hasta las cejas, pues las joyas no hacen a una persona noble y la riqueza material no es lo que hace a una persona digna de un título o de una posesión.

Cargando editor
22/01/2013, 20:00
Lissy

| ALBERGUE |

Arqueé una ceja al ver la reacción de aquella jovencita, sorprendida de que alguien pudiera entrometerse en conversaciones ajenas. Levanté la cabeza bien alto, mostrando así mi elegancia y respeto hacia aquella cotilla.
- Perdone, señorita, pero no es asunto suyo... Y por si le interesa, le pienso dar la libertad cuando viaje conmigo y me haga un favor, pero en realidad no debería darle ninguna explicación ya que éste joven va a estar mucho mejor allí donde me lo llevo que aquí- le dije a la chica del pelo rojizo, sin darle importancia-. Y ahora si nos disculpas, tenemos un viaje muy importante que hacer... Un placer conocerte...- añadí, dándome media vuelta para empezar a caminar.

Cargando editor
22/01/2013, 20:53
Cassandra

Albergue

Sonríe ante la prepotencia que muestra esa dama ricachona. Si cree que con sus gestos podrá imponer, es que es demasiado inocente para saber lo que realmente es el poder. En la mirada Cassandra se muestra una voluntad férrea que niega cualquier intento de sobrepasarla... 

-No sería asunto mío si hablaséis con una voz comedida y en un lugar discreto, pero habéis discutido el tema frente a mi puerta y perturbado mi descanso, así que me siento en la obligación de responder por el joven aquí presente al cual parece que no escucháis. Así pues, os diré que la cuestión no es si estará mejor de viaje o aquí y tampoco si le daréis la libertad tras haceros ese "favor", la cuestión de vital importancia es que este hombre no quiere viajar con vos y quiere quedarse aquí... lo utilizaréis sin tener en cuenta sus deseos, como han hecho todos los demás. Sigo diciendo que debéis recapacitar y quizá iniciar ese viaje por vuestra propia cuenta y probar de lo que sois capaz sin depender de los demás.

 

Cargando editor
22/01/2013, 21:04
Lissy

| ALBERGUE |

Solté una pequeña carcajada sin dejar de ser elegante.
- Ya he recapacitado y por eso me lo llevo. Aunque haya pagado por él lo que hago es pagar por su libertad, ya que su verdadero amo le explota sin intención de dársela, ¿no es cierto Joseph?- le pregunté al muchacho pues también tenía derecho a expresar su opinión. Sabía que no le hacía mucha gracia abandonar Glenders pues era su ciudad natal, pero si me acompañaba le iba a dar la libertad. Podría regresar y con el dinero que le diera por el trabajo podría comprarse una modesta casa para vivir sin tener que servir a los demás. Podría vivir de un huerto o de cualquier otro trabajo, pero no tendría que ser esclavo de nadie.

Cargando editor
22/01/2013, 21:12
Joseph

| ALBERGUE |

Sonreí a Charlotte por querer defenderme, ya que en realidad no me apetecía en absoluto marcharme de Glenders, pero aquella señora tenía razón. Trabajando en el albergue era un esclavo y debía servir a mi amo siempre que lo deseaba. No ganaba ningún dinero por atender a la gente en el albergue, sólo lo hacía por tener comida que llevarme a la boca.
Si me iba con aquella mujer podría hacer ese trabajo que tanto necesitaba y no sólo iba a obtener la libertad, sino un dinero con el que poder comprarme una pequeña casa y dejar de ser esclavo. Todo indicaba que lo mejor era irme con ella.
- Yo... Gracias, Charlotte, pero quiero recuperar mi libertad y por una vez que me dan la oportunidad no quiero desaprovecharla...- expliqué, encogiéndome de hombros. Había sido un detalle por su parte defenderme con tanta euforia, pero necesitaba ser libre y en Glenders jamás lo sería-. Sólo es un trabajo y por fin seré libre... Podré hacer un viaje y visitarte... Gracias por todo y espero que tu estancia aquí sea agradable, de verdad- le dije a Charlotte, a modo de despedida, haciéndole una pequeña reverencia con la cabeza.

Cargando editor
22/01/2013, 21:27
Cassandra

Albergue

Se acerca a Joseph poniendo una mano sobre su hombro y deteniéndolo un momento. Baja la voz para que solo él pueda oírle y se inclina un poco.

-No te fíes de esta gente, se de lo que hablo. Nunca te darán la libertad... te exprimirán hasta que ya no seas tú y ya no puedas hacer lo que quieres, lo único que te quedará será servirles... y créeme, conozco a este tipo de gente.

Les da la espalda para meterse en su cuarto, pero antes de cerrar la puerta dice unas últimas palabras.

-Buena suerte.

Cargando editor
22/01/2013, 21:43
Director

| JUGADA MASTER |

Aquella mujer sonrió satisfecha al ver que Joseph había decidido viajar con ella y realizar el trabajo que tanto necesitaba. Joseph se despidió de Charlotte con una última reverencia y una sonrisa en los labios, agradeciéndole que se hubiera preocupado por él.
Ambos desaparecieron, saliendo del albergue mientras Joseph lo miraba todo con atención y algo apenado, despidiéndose de lo que ya no volvería a ser su trabajo.

Cargando editor
25/01/2013, 22:54
Cassandra

Albergue

Se acerca las pocas pertenencias que se ha llevado para ese viaje, al fin y al cabo tendría que haber sido una cosa rápida y sin problemas... lo de rápido, seguro, sin problemas ya es otra cosa. Guarda las cosas en una bolsa de tela y se coloca la capa sobre los hombros, al menos ha podido lavarse el polvo del camino. 

Se ata la cinta de la espada al cinturón del vestido y procura que la capa oculte ese arma. Sale de la habitación dispuesta a abandonar el lugar que en teoría tendría que haberle acogido durante su misión. Se supone que el chico que le ha atendido antes ya no estará, así que será más fácil inventarse una escusa factible y que no hagan muchas preguntas.

Cargando editor
26/01/2013, 15:06
Director

| JUGADA MASTER |

Cuando Cassandra salió de sus aposentos ya no había ni rastro de Joseph, ni tampoco de la mujer que se lo había llevado a pesar de los esfuerzos de Cassandra por evitarlo. No porque le importara Joseph sino porque estaba interpretando un papel.
Cuando los trabajadores del albergue la vieron salir le dedicaron una pequeña reverencia con una sonrisa en los labios.
- Gracias por su visita, señorita. Que tenga buen viaje- dijo una joven con la ropa algo sucia y estropeada.
El caballo de Cassandra le esperaba en el pequeño establo del albergue, en la parte trasera de éste. El viaje que le esperaba era largo pero pronto podría estar en el castillo, en sus lujosos aposentos con baño propio.

Cargando editor
29/01/2013, 18:07
Cassandra

Glenders

Ata la bolsa de viaje a la silla del caballo y monta como si nada sobre él, como si fuese algo natural en ella. No le dedica ni una mirada ni nada a los empleados de ese lugar. Tiene ganas de llegar a casa y rodearse de todos los lujos que ella se merece y no tener que estar en un lugar así.

Sale de la ciudad con tranquilidad y cuando ya se encuentra fuera de sus muros espolea el caballo para que inicie su marcha a galope. Quiere saber por qué ha fallado la misión y porque su objetivo no está en la ciudad cuando debería estar.