Aunque deseaba sodomizarla como le había prometido por no haber acatado mis órdenes hasta vencerla en un combate, decidí que podía hacerlo más tarde, ahora mismo y tras haber preparado correctamente su miembro, quería que hiciera su trabajo, así pues tras dejar todo lo que estaba haciendo y besarla apasionadamente para que sus jugos y los mios se mezclaran en nuestras bocas, añado:
-Enséñame como sabes usar eso que tienes, hazme gozar y no dudes en vaciarte dentro de mi, llevo deseándolo desde que te vi- tras esto soy yo la que me tumbo sobre aquel improvisado colchón y me abro de piernas para ella mientras con mi mano empiezo a acariciar mi clítoris como si la estuviese tentando. La lujuria se extendía por mi cuerpo y la materialicé en una sola frase- Párteme en dos.- dije mientras la miraba con lujuria y aun saboreaba las últimas gotas que habían salido de su miembro y que reposaban en mi boca.
En cuanto tu dedo salio del culito de Ahri, se la vio visiblemente aliviada ya que nunca haba sentido nada por aquel lugar. Al verte postrada ante ella y con las piernas abiertas, Ahri se relamió los labios degustando los fluidos que habías depositado en ella y se acercaba a ritmo pausado con una mano en su miembro como si fuer aun arma.
-Tania...mira que eres traviesa. Deja escapar una risita. -No te quejes si luego no puedes caminar bien querida. Coloca la punta del miembro entre tus piernas y la pasa lentamente, haciendo que se lubricara con tus propios fluidos.
-Que aproveche...Dice sonriendo a la vez que empieza a hacer presión y hace el gesto de querer tumbarse encima de ti. Al principio a tu sexo le cuesta ceder ante tamaño miembro, pero por suerte eras elfa y estaba preparado para la corrupción. Antes de llegar a una cuarta parte del miembro ya te notabas llena y con las paredes de tu intimidad bien ensanchada, pero el avance de Ahri no se detuvo hasta llegar a la mitad de su miembro. Se volvió a relamer los labios y se coloco un dedo entre ellos. -Que....apretada estas....quiero saborearte enterita.... Va moviendo su cadera a la vez que las colas te rodean para que no te escapes de sus embestidas. -Quiero...mas....que sensación...me encanta.
Cuando me tumbé y ella se colocó sobre mi no daba crédito a lo que veía, tumbada desde mi posición fue cuando contemplé las verdaderas dimensiones de su "arma", el deseo que sentía me hacía empapar, jamás lo había hecho con semejante tamaño y aunque mi sexo era amplio y se adaptaría, no sabía donde llegaría mi límite. Aquella sensación de poder alcanzar mi límite me excitaba aun más, me encantaba romper los límites, era algo superior a mí. Con una sonrisa añadí:
-¿Yo traviesa? Pues debe ser que aun no me conoces bien...- poco a poco introdujo su miembro en mi, cuando pensaba que ya no podría más y que me partiría en dos si seguía, ella continuo, y para mi sorpresa, mis límites o lo que yo creía que eran mis límites, se abrieron aun más ante mí, y el placer desbordó, era esa misma sensación de estar completamente llena lo que me hizo alcanzar mi primer orgasmo, empecé a contraerme por completo, y si mi sexo estaba lubricado, tras mi corrida lo estaba aun más, era como una forma que tenía mi cuerpo de aceptar aquel miembro, quería más y más y solo lubricando lo suficiente conseguía que entrara con cada empujón de Ahri un poquitín más. No pasaron ni treinta segundos cuando volví a tener otro orgamos devastador, no me había recuperado del primero y el segundo llegó superponiéndose al primero mientras no dejaba de gemir.
Aquella maldita Ahri me había hecho desearla tanto que había desaparecido parte de mi deseo por sodomizarla y modificarse por seguir siendo penetrada, era tal la sensación, quería comprobar mis límites, pero los orgasmos se sucedían uno tras otro, no solo por el factor del tamaño tan brutal e irreal de su miembro, sino por el factor psicológico de romper mis límites internos.
-No pares, trátame con cuidado pero intenta con cada empujón ir un poco más allá- dije mientras me trataba de recuperar del último orgasmo.
-No voy a parar querida.... va diciendo Ahri sin dejar de mover las caderas pausadamente, tomándose su tiempo en disfrutar como se iba llenando de tus fluidos cálidos haciendo que en mas de una ocasión gimiera dulcemente casi en tu rostro. - Me encanta sentir como te vienes en miembro. Una de las colas rodea tu nuca para acercarte a ella, besándote largamente, jugando con tu lengua dejándote casi sin aliento.
Aun jugando contigo, las colas te levantan abrazándote la espalda y sentándote un poco encima de Ahri. Aunque ya no eras capaz de tragar mas miembro, tu cuerpo tenia un limite y ese era la mitad del miembro de la kyubi. Meterse mas seria hacerse daño ya que golpeaba duramente tu útero. -Ñaaaaaa.... La lengua de Ahri se separa de tu boca con un hilo de saliva uniéndolos.- Me voy a venir Tania.....asegurate de bebértelo todo..... Sonríe picaramente mientras sujeta tus brazos y mueve las caderas con bastante velocidad, lamiendo todo tu interior con cada embestida de su miembro. Antes de que pudieras darte cuenta, una oleada de fluidos inundo el poco espacio que quedaba en tu sexo, obligando al miembro a salir de tu interior después de hinchar tu vientre ligeramente, pintando de blanco parte de tu cadera y dejando reposar el miembro aun erecto en la entrada de tu sexo dispuesto a mucho mas mientras se lo permitieras. Ahri jugaba con su propia lengua con su mano cargada de fluidos, extasiada por el sentimiento de venirse y te miraba medio fundida en su propia lujuria. -...Me.....encanta........
Jugueteaba con su lengua con sumo gusto mientras notaba sus embestidas contra el fondo de mi vagina golpeando incesantemente mi útero sin llegara resultar doloroso, sino todo lo contrario, aquella sensación era de lo más placentera, jamás ningún hombre me había llenado completamente y de forma de suave y dulce. Sus colas me hicieron cambiar de posición y ponerme encima suya para poco rato más tarde vaciarse en mi interior, fue tal su chorro de semen que tuvo que sacar parte de su miembro para permitir introducir sus fluidos en mi interior.
Con una gran sonrisa mientras no dejaba de acariciar y besar sus labios, se me ocurrió una idea, jamás la habria intentado pero estaba en pleno extasis y me había dejado cercana a otro orgasmo así que quería probar otra cosa, quería pervertir aún más a aquella Kyubi, hacerla un poco más corrupta. Poco a poco fui sacando su miembro y contemplé con decepción como al terminar de sacarlo por completo de mi interior, gran parte de su semen caía sobre ella, pues estaba debajo mía.
-Vaya que mala que fuí, te ensucié, déjame limpiarlo- dije mientras con una mirada de picardía lamía sobre su cuerpo y tragaba cada gota del semen que hacía pocos segundos estaba en mi interior mientras no dejaba de mirar a sus ojos. Una vez echa esta labor dije:- Ahora debes tener mucho pero que mucho cuidado- dije mientras volvía a tomar la posición pero esta vez aprovechando que su miembro estaba completamente chorreando de sus fluidos, lo apunté a mi ano, era enorme, pero esperaba que con lo mojado y escurridizo que estuviera puediera con algo de paciencia adentrarse en mi interior, quería enseñarle el placer del sexo anal y poco a poco traté de introducirlo, quizás con suerte, aquí no tuviera el tope de mi útero, sin embargo debía tener mucha más paciencia.
La kyubi se quedo medio hipnotizada al verte hacer aquella limpieza de su blanca piel, incluso llego a acariciarte la cabeza cada vez que te acercabas a su miembro. Se sorprendió bastante al verte apuntarlo hacia tu culito, pero no te detuvo y simplemente se acomodo mejor para que entrara con mas facilidad.
-Ahora te lo quieres comer con esa entrada? Comenta medio suspirando por la excitación, dejando que sus pechos subieran y bajaran con su respiración. -No te vayas a hacer daño Tania..... Las manos de Ahri sujetaron las tuyas, haciéndote sentar, mientras tu culito se iba dilatando mas y mas con cada centímetro de miembro que entraba en tus entrañas. Al principio se resistía, al igual que tu sexo, pero no importaba la resistencia ya que el dolor se diluía casi al instante por el torrente de placer que ejercía el miembro de la kyubi al golpear y rozar tu culito. Parecía imposible llegar mucho mas lejos que en tu vientre pero el miembro había desaparecido prácticamente en tu interior antes de darte cuenta, ayudada por al lubricacion previa que le habías dado. Ahri jadeaba con fuerza al sentirse devorada por completo y podías sentir como tu recto era lubricado nuevamente con parte de los fluidos que expulsaba la kyubi.
-Se....siente...demasiado...bien....No....puedo contenerme. Casi por instinto, Ahri se levanta parcialmente para atacar a tus pechos con su lengua y manos, masajeandolos con algo de fuerza para evitar venirse casi de inmediato.
Sentía como empezaba a corromper a aquella Ahri, dentro de poco me pediría que la corrompiera por completo pero quería que fuera por propia voluntad, quería mostrarle lo que la corrupción traería a su vida. Me sorprendí a mi misma cuando aquel increíble miembro se alojó completamente en mi recto, lo notaba como si me atravesara por completo, en la boca del estómago, el tamaño era sin lugar a dudas lo mayor que había introducido en mi recto, y me encantaba aquella sensación de estar repleta.
Cada milímetro que descendía sobre su enorme miembro y se iba incrustando en mi recto gemía cada vez más, lo que en un principio era dolor se transformó en un placer indescriptible, jamás pensé que entraría, así que cuando finalmente mis nalgas chocaron contra su vientre de nuevo y miré no pude evitar una sonrisa lujuriosa. En ese mismo instante contemplé como Ahri estaba apunto de venirse en mis entrañas y para distraerse se puso con mis pechos, estaba apunto de dejarla ser, pero tenía claro que aunque aquello estaba en mi recto, era yo quien dominaba la situación, así pues no dude en apollarme con mis piernas en el suelo y empezar a levantar y a bajar haciendo sentadillas, en un principio lento hasta casi sacarlas, para dejarme caer poco a poco:
-Jamás tuve algo tan gran clavado en mi culo, se siente divino....- dije mientras gemía como una perra en celo, para volver a bajar mientras iba aumentando el ritmo, al final casi que me dejaba caer y me empalaba yo sola, además de que su lubricación era muy intensa y empezaba a salirse de mi recto- Sabes que puedes intentar aguantar, o llenarme de nuevo las entrañas de tus fluidos... Ojala pudieras disfrutar tu también de esto, lo que ocurre es que tu recto no está suficientemente preparado como el mío, son muchos años de práctica- dije mientras con otra mano me tocaba sin parar mi clítoris estaba apunto de llegar de nuevo.
Ahri apenas podía contenerse, en el momento en que tu cadera subía y bajaba para degustar el miembro de la kyubi, sus labios no cesaban de gemir. Ya no era capaz ni siquiera de atender tu pecho, extasiada por el sentimiento y la necesidad de venirse cuanto antes. Pero Ahri aguantaba todo lo que podía, incluso notabas como su miembro se hinchaba en tu interior, aguantándose para continuar disfrutando de tu cuerpo.
-Tania....yo también...quiero.... Comienza a implorar Ahri sin dejar de gemir, dejando que su aliento inundara tus mejillas ya que se encontraba media abrazada a ti. -P...Pero no por detrás....te quiero sentir.... La mano de Ahri separa ligeramente sus labios, los cuales ya expulsaban fluidos como si de un manantial se tratara. -Aquí...
Con una ultima vez que bajaste la cadera fue suficiente para que Ahri se viniera después de un gemido mas largo que el resto, inundando tu recto de fluidos. Podías sentir como no solo se adentraban en tu vientre, también hinchaban ligeramente tu estomago por el torrente de fluidos que aun emanaba del miembro de la kyubi. Parecía que al ser criatura mágica se recuperaba casi de inmediato. Ahri cayo al suelo agotada después de aquella sesión de sexo y del placer que había sentido en su miembro. Con los ojitos vidriosos y su mecho moviéndose inquieto, recuperando el aliento te miro con un dedo en los labios. -Ñaaaa....no me arrepentiré de seguirte querida.....si siempre sera así..... Aunque habías intentado ser tu la que dominaba y controlaba la situación, la mente de Ahri no podía considerarte mas que una compañera igual, por el momento no superior a ella como domina.
Rocé el éxtasis para quedarme durante unos breves instantes que duró uno de mis mejores orgasmos, sentir como Ahri se corría con su miembro completamente introducido en mi recto, era una experiencia indescriptible, sentí que me llenaba por completo y que iba más allá de mi propio recto. En ese mismo momento en que su pene comenzó a contraerse brutalmente impulsando todo lo que guardaba para mi a gran potencia, mi orgasmo llegó y aunque no me di cuenta empapé a Ahri que estaba debajo mía, perdí completamente la fuerza en las piernas y me empalé por completa, aquello no hiczo sino aumentar aun más la intensidad del orgamos de Ahri y el mio.
Finalmente caí rendida sobre su pecho mientras besaba sus labios, no quería salir de allí, sacar su miembro de mi trasero que tan bien había encajado. Sin embargo sus ruegos me habían exasperado un poco, era yo la que debía de dominarla y me pedía que también quería recibir, tras unos instantes de reflexión en su pecho me prometí que más adelante la castigaría por ello, pero ahora por desgracia la necesitaba para ir a capturar un hada, y no podía permitir perderla cuando nuestros lazos no eran aun suficientemente fuertes.
- Está bien, pero solo por esta vez.- dije mientras sacaba su monstruoso miembro de mi culo y derramaba parte de su semen sobre el suelo pues mi ano estaba tan dilatado que me costaba cerrarlo por momentos. No dude en extender mi miembro, y tras introducir varios dedos en su húmedo sexo para poder comprobar su estado de excitación, introducirselo de golpe a modo de castigo, esta vez no sería suave con ella.
Aprovechando que tenía las dos manos libres, con una de ellas seguí acariciando su miembro sin parar, y con la otra la deposité en su cuello ejerciendo presión para aumentar su excitación, mientras que sin piedad alguna introducía mi pene en su interior y lo sacaba velozmente sin siquiera contemplar la posibilidad de hacerle daño, la volvería usar para correrme pero esta vez a través de mi miembro.
-Poco a poco te enseñaré a respetarme y a tratarme como a tú ama- le decía mientras de vez en cuando le daba alguna bofetada suave cuando veía que empezaba a excitarse.
Con cada bofetada de Tania, Ahri se quedaba mas confundida con sus propios sentimientos ya que no sabia si sentirse ofendida o aun mas excitada por las embestidas de su miembro. Las colas de Ahri se movían como locas abrazando tu cintura y aprentandote mas contra ella, ya que su sexo necesitaba ese estimulo. El interior de Ahri era extraño, mas cálido que a lo que estabas acostumbrada, ademas de que parecía como si se moviera como si tuviera vida propia estimulando tu miembro con cada movimiento que hacías. Al principio te daba la sensación que la kyubi también era virgen por aquel lugar, pero la estrechez que mantenía era propia de su raza ya que no lloraba n gemía por dolor, solo por placer.
-Ñaaa...a....ña.... Gimoteaba Ahri, cada vez que gemía de placer le propinabas una suave bofetada. -Tania....no...me golpees....por...favor... Te imploraba por recibir todo el placer posible. -Quiero....correrme contigo.... El miembro de Ahri no había disminuido de tamaño y dejaba caer los fluidos directamente en los pechos de Ahri, los cuales bajaban por su cuerpo hasta la unión de ambos sexos. Por los fluidos que emanaban del sexo de la kyubi, podías saber que había tenido algún orgasmo, pero ninguno de gran intensidad. Las manos de Ahri acarician sus propios pechos, bañándose en los fluidos de tu anterior corrida y del miembro. -Seré....buena.... Te pone ojitos jadeando.
-Realmente te has portado muy bien conmigo y te trataré como mereces- tras mis palabras quise proporcionarle el máximo placer posible y creía que sabía como podía hacerlo. Así pues embistiéndola de manera brutal y salvaje, dejé de darle aquellas pequeñas bofetadas para que pudiera centrarse en su placer, había contenido sus orgamos durante mucho tiempo y sabía que el que estaba por venir sería uno bien grande.
Así pues con las dos manos agarré bien su miembro y me lo incrusté en la boca mientras que no dejaba de ceder en mi intento de incrustarle mi miembro lo más profundo posible:
- Quiero que te corras por los dos lados a la vez y me llenes también el único agujero que no me has llenado- dije mientras depositaba mi boca sobre la punta de su enorme miembro y movía freneticamente mis manos a lo largo de este. No me faltaba mucho para llegar pero quería hacerlo con Ahrí- Mefff correré contigooo cuando noteee tu leche en mi gargantaaaaa- dije con aquello totalmente incrustado en mi boca mientras me costaba articular palabra. Se había portado bien y se merecía un trato correcto por mi parte.
Libre de las interrupciones de tu mano, Ahri se concentro en disfrutar el placer de ser penetrada por tu miembro y ser atendida en el suyo. Las caderas de la kyubi se movían ligeramente con las tuyas, acompañando cada movimiento que hacías para incrementar ese deseo y necesidad que crecía en su interior. El miembro en cambio ya mostraba los signos de querer venirse ya que se encontraba hinchado.
-Tania....me....me..vengo... Responde Ahri jadeando con algunos de sus dedos en la boca para acallar sus gemidos. Los fluidos de Ahri no tardaron en inundar tu garganta, esta vez con menos intensidad que las dos ultimas veces. Por muy ser mágico que fuera, tenia su limite. Las piernas de Ahri rodearon tu cintura empujándote en lo mas profundo de su vientre mientras sentías tu miembro rodeado por unos fluidos cálidos que parecía que te lamían por dentro. Ahri se estaba corriendo y quería su recompensa.
-Dentro....dámelo dentro.... Jadea Ahri. -Lo quiero...
Sentir como aquel líquido caliente y sabroso se estampaba contra mi paladar y empezaba a descender por mi garganta terminó de excitarme, además note por los fluidos de su vagina que quería recibir también mi corrida, así pues no me hice de rogar:
-Mee coorrooo- dije a la vez que pegaba un último empujón y me vaciaba sobre ella, aquella sensación de correrme junto con el sabor que tenía en mi boca me catapultó a otro mundo, y estuve como unos 10-15 segundos en el éxtasis disfrutando de todas las sensaciones que recorrían mi cuerpo. Finalmente cuando recuperé un poco la cordura vi que se me había espado parte de su corrida por mis labios y no dude en tomarlo con mi mano y volvérmelo a tragar, me encantaba el sabor de Ahri.
Finalmente caí y reposé sobre su pecho abrazada por sus colas:
-Te has portado muy bien, me has llenado todos y cada uno de los agujeros como quería que hicieras- dije mientras sonreía y de vez en cuando besaba sus labios a mi nueva amante.- Descansemos un rato y disfrutemos del merecido descanso y cuando sientas que puedes indicarme el camino nos dirigiremos a buscar a esa hada, aunque yo, personalmente, ya conseguí lo que vine a buscar- dije con tono muy sensual mientras pasaba un dedo por su miembro y recogía parte de su néctar para volver a introducírmelo en la boca. Me acerqué a su oreja y en un susurro casi inaudible le dije- Soy adicta a tu néctar, preciosa.
Los brazos de Ahri te abrazaron de forma cariñosa al igual que sus colas que te cubrían como si fuera una manta cálida y viva. Parecía tranquila después de estar llena ya que su miembro poco a poco iba desapareciendo, encogiéndose hasta convertirse en un clítoris. La lengua de Ahri también se movía dentro de su boquita, saboreando los fluidos que había recolectado junto con cada beso que recibía por tu parte.
-Me volveré adicta también a ti querida. Te besa calidamente dejándote descansar entre sus pechos.
Después de un merecido descanso por ambas partes, abres los ojos y te encuentras limpia al igual que si te hubieras dado un largo baño cálido. Te sentías recuperada de las pocas heridas que habías recibido, la calidez y magia de Ahri te había recuperado. Con una sonrisa picara Ahri te acaricia la cabeza y ríe. -Lista para irnos? Nos tendremos que adentrar mucho en el bosque para lo que deseas. Quizás sea peligroso querida.
Tras levantarme beso a Ahri en sus labios digo:
- No dudes que volvería a montarte como si fueras un potro como hice ayer, pero tenemos cosas que hacer. Tú ya cumpliste tu palabra, y no te obligaré a venir conmigo si no quieres, sabes que mi mundo está lleno de corrupción- realmente solo quería que fuera ella quien poco a poco aceptara la corrupción en su vida de forma voluntaria, que la hiciera suya, como hice yo antaño.
Tras estas pocas palabras y el beso, nos ponemos en camino en busca de mi hada, evitando los caminos en la medida de lo posible y tratando de ocultar mi olor con ojas secas o barro del bosque.
Muy bien, te paso a bosque interior. Si te parece bien continuaremos sin tirar dado si te a parecido mas comodo o mas logico.