Partida Rol por web

Kingpin se pone en pié y saca de su bolsillo un sobre largo, lo abre y vuelca su contenido en la mesa, de el cae unas llaves y unas tarjetas, -"Hay una llave para cada uno y una tarjeta con la dirección de vuestro piso franco, está situado a una manzana del banco, en el apartamento hay un teléfono libre, que podréis usar para comunicaros conmigo, pero solo conmigo y nadie más, sino dejará de ser una línea segura... también disponéis de todo lo que tiene una casa, tv, PC, nevera con comida , etc... pero os aviso, que no es para que vayáis de vacaciones, es un punto de encuentro y trabajo, e intentad no dar mucho el cante, no queremos que nos descubran antes de la operación, si no hay más preguntas me retiraré y esperaré vuestras nuevas buenas..."-, el poderoso magnate se queda plantado a la espera de alguna pregunta para retirarse...

-Muchas gracias, por mi parte este seguro que no le defraudare.- Agradezcon un un asentimiento la informacion y las llaves que Kingpin nos proporciona. Tomo mi copia, una de las tarjetas.- Señores, en 49 minutos y 20 segundos aproximadamente estare en el piso franco, ali podremos seguir  discutiendo los terminos de la operacion.

Me pongo la chaqueta, y salgo por la puerta direccion a mi casa. Hay mucho que preparar...

Me dirijo a mi apartamento mientras pienso en todo este asunto en el que me habia metido. No acababa de convencerme el participar en una operacion tan visible, pero las ventajas era palpables. mas me preocupaba las intenciones asesinas de algunos de mis compañeros. No es que me preocupe matar a alguien cuando haga falta, pero se que un reguero de cadaveres, incluido algun super, es algo que no suele pasar desapercibido. Y mi plan para vengarme de toda esa chusma superheroica aun no esta tan avanzado como para poder permitirme que me descubran... Habra que ser cuidadosa.

Tan pronto llego a mi apartamento, empeizo a recoger el material de trabajo que confio necesitare: algunos de mis ordenadores personalizados, aparatos de vigilancia y municion y un slenciador para mi pistola, asi como el traje de "faena". Lo guardo todo en un par de maletas y me dirijo al piso franco, procurando entrar cuando no halla mucha gente mirando.

-Me referia a daño civil- dijo con una voz mucho mas seria que la usada normalmente. Para él entrar de dia o de noche era indistinto, tanto una como otra tenia sus ventajas y desventajas, solo habia que saber usar las primeras y evitar las segundas. Escucho con atencion las palabras de Kingpin para luego recoger una de las llaves y la tarjeta, tenia todo muy bien planeado, lo cual no le sorprendia-. Ok, ire de civil- miro al hombre planta medio segundo y luego a Samuel-. Sera interesante, no lo dudo- y luego agrego un poco mas alto para todos-. Muy bien, nos veremos en nuestra base.

Bien , nos veremos luego en el piso franco para seguir trabajando en el asunto . 

Dijo Samuel tras haber escuchado atentamente la conversación y recoger la llave del piso franco . 

Blackhole , ¿ te llevo o me llevas tu en el coche ? . 

Dijo el final con tono picaresco a su compañero para recordar los viejos tiempos de camino al piso franco por breve que fuera el viaje teniendo en cuenta sus dones . 

-Vamos en mi coche, evitaremos todo el trafico. Primero a mi casa que tengo que quitarme esto- señalo su traje, que tanto trabajo el dio-. Luego iremos a nuestra base.

En un par de minutos llegarian a su apartamento, con suerte las cucarachas se esconderian al encender la luz y encontraria ropa normal para ponerse. Hasta encontrarian algo de pizza sobre la mesa... las cucarachas habran dejado algo.

Tomo una llave y tarjeta, dandoles vueltas entre los dedos unos instantes. Luego fueron al fondo de uno de los bolsillos de la gabardina. Recogió el negro maletin y se despidio del anfitrion con voz neutra. 
-Perfecto. Hasta pronto, señor Frisk. 
Mientras desandaba el camino a su auto, consideraba sus posibilidades y tambien las opciones de este emprendimiento. Tenia que ver como encajarian en su proyecto, eso lo primero. Evaluar su calidad, compromiso, resistencia... Se entretuvo haciendo estos calculos mientras conducia sin prisas hacia la direccion de la tarjeta. Todo lo que necesitaba lo llevaba ya consigo. Todo lo que queria... bien, eso tenia que verse todavia. 

Me acerqué y cogí la llave y la tarjeta. Guardé esta última en uno de los plieges de mi cuerpo y la llave empecé a hacerla girar entre mis dedos.

Todo parecía muy sencillo, ¿lo sería realmente? Estaba seguro que no. Menos mal que contaba con algunos ases bajo sus... hojas.

Kingpin, tengo una pregunta muy importante. ¿Ha puesto abono también en esa casa? De alguna manera tendré que alimentarme, ¡jajajaja!

Se que terminaría desquiciando a los demás, pero era lo divertido.

Sopesó a sus compañeros. Todos parecían serios, pero alguno tendría que reír. ¿Qué sería de ese trabajo si nadie se reía?

Aquella casa era una verdadera oportunidad para él, a pesar de que lo que fuera a hacer no estuviera dentro de sus pensamientos. Pero al fin y al cabo quien algo quería algo le costaba. Así que sin decir nada tomó las llaves y las tarjetas y se fue en dirección al piso franco que le indicaron. Al menos aquella noche tendría un techo bajo el que dormir.