Ferro volvió a atacar con su espada y en esta ocasión impacto de lleno al orco haciendo que saltase sangre y vísceras de piel verde lanzados por los dientes en movimiento de la hoja de su espada sierra. Ese ya no sería una amenaza para nadie.
El otro estaba claramente superado en número y después de un golpe con la culata del rifle de Hunter y un último disparo de Wedge, finalmente también cayó antes de poder causar más daño aunque el artillero prácticamente se lo tuvo que quitar de encima al desplomarse el horrible xeno.
Todo había terminado, los enemigos estaban muertos y tan solo Ceneka había resultado parcialmente herido, aunque nada demasiado grave.
Aunque os cuesta después de la emoción del combate volvéis a dormir y seguís con las guardias esperando ver el amanecer sin más contratiempos.
Finalmente se hace de día y os preparáis para una nueva jornada de viaje esperando encontrar ya ese puente, estáis tardando mas de lo esperado y no estáis del todo seguros de llevar la ruta correcta, con un poco de suerte volveréis a la ruta y no habréis perdido demasiado tiempo, en caso contrario quien sabe donde podéis estar en estos momentos...
Motivo: Daño de Hunter
Tirada: 1d10
Resultado: 6(+1)=7
Orco10: 8 + (7-6) + (10-6) = 13 de daño MUERTO
Orco12: 9 + (14-6) = 17 de daño MUERTO
Hunter, estas usando un rifle y no puedes disparar con el en combate cuerpo a cuerpo, solo con pistolas, así que asumo que usas la culata del rifle para atacar, en ese caso tienes un bono de +20 a la tirada de ataque por 3:1 y por lo tanto tu ataque impacta, tiro yo el daño.
El que quiera hacer algo que lo diga y el que quiera recargar que me lo avise, ya no lo daré por hecho.
Ferro, tírame navegación superficie
- Gracias por la ayuda muchachos.
Antes de ir a dormir me compruebo las heridas. Desmonto la pistola sacando el posible casquillo defectuoso y la vuelvo a cargar. Recojo el rifle y le cambio el cargador.
Biggs ayudó a su hermano a sacarse al Orko de encima. Tras eso, le ayudo a levantarse tirando del brazo, y mirandolo, silencioso. Comprobando si estaba bien. Al acabar su comprobacion, alzó el dedo pulgar, como pregunta silenciosa, si estaba bien, o no lo estaba. Solo cuando confirmo que todo iba bien, se tomo el lujo de estirarse, mirar a sus compañeros, y señalar a el y su hermano, y mostrando cinco dedos, afirmando que habian hecho cinco bajas.
Miró a a Korlo, y repitio la pregunta. Alzó el dedo pulgar para ver si estaba bien o no, y luego, volvió la vista hacia el cañon, del cual saca la caja de municion vacia, para cargar una nueva, por si acaso. Y despues de eso, comprueba el estado del arma y si el sistema de punteria es correcto, ya que le extraña errar tanto. No tarda en conciliar el sueño, entre ronquidos, agarrado al cañon de asalto... posiblemente imaginando que es una femina con un bonito uniforme de la guardia imperial.
Cargo el cañon.
Tras el combate Korlo se sentía decepcionado, no había sentido el fervor de la batalla de la manera que a el le hubiera gustado, ensartando a un poderosos orko con su cuchillo de combate.
Después del combate se cercionó de que todos estuvieran bien, al final habían acabado con el enemigo a golpe de espada y disparos a bocajarro. Le indicó a Biggs una gran sonrisa y tras ir al bosque a dejar un poco de el, se acostó para continuar la marcha al día siguiente.
Callidon escupió a los cadáveres de las bestias verdes. Toda una muestra de respeto para sus adversarios. -El Emperador es mi guía, que su enorme y divina polla mee sobre vuestros cadáveres.- Como epitafio no era lo más digno, pero nadie contradiría sus palabras.
Hecho esto, repasó el equipo, como de costumbre, y situándose junto al sargento, con maravilloso saludo digno de cualquier manual de infantería preguntó - Amenaza eliminada, Señor. ¿Quiere comunicar novedades a la base, Señor?. Señor.- finalizando nuevamente con otro hermoso y fantástico saludo marcial. La forma en que Callidon pronunciaba "señor" y saludaba tan efusivamente rayaba la cordura.
Todo ha acabado y me muerdo la lengua para no ponerme insultar a todo el mundo. Los orkos han llegado y aunque no ha salido del todo mal la cosa, no nos lo podemos permitir. No insulto a nadie porque he fallado más que un ciego...
-Mañana será un nuevo día...joder...
Dicho esto, duermo todo lo que puedo...
En el siguiente día, me mantengo descontento, intento estar más concentrado y echo ojeadas al Sargento para ver las caras que pone mientras intenta dirigirnos. No tengo muchas ganas de hablar, la noche me ha pasado factura, pero espero que se solucione pronto...
-Vaya panda de mierdas han mandado a esta misión...si tenemos suerte, encontraremos los jodidos depósitos cuando estén vacíos...
Después de tan sanguinolenta batalla contra los malditos xenos bastardos, revisé el estado de mis compañeros y posibles heridos, y descubrimos que se nos daba mejor de lo que nos parecía, aunque el bosque ayudo mucho a la causa. Suerte que esos pieles verdes son tan tontos que corren hacia nosotros sin piedad hasta que mueren. Aun así la cosa estaba volviéndose complicada, dos ataques de orkos en nada de tiempo era señal de que algo mas grande iba a pasar y seguramente esos bidones estén mas asegurados de lo que pensábamos.
Aun así me dispuse a recargar las balas de mi rifle el cual ha ayudado tanto y ayudé a montar el tinglado donde íbamos a pasar la noche y montando guardia rotando. Cuando se hizo de día, hice mis plegarias al emperador y me mantuve atento para ver si nuestro sargento decidía nuestro último movimiento.
Finalmente, despues de una larga sesión de podar el bosque en el que nos encontramos, conseguimos liquidar a los orcos que nos habían descubierto. Observo como Callidon le da la el último adios a los verdosos recitando una bella frase - Preciosas palabras soldado.... eres un gran poeta... ¡¡¡porque lo que se dice del tema de disparar.... ¡¡¡¡MANCOS!!!!!!!! habéis tenido suerte de que mi sierra tuviera ganas de sangre verde, sino un solo orco os hubiera dejado como estos amasijos de carne verde - les comento a mis soldados mirándolos todos uno por uno con la mirada soltando centellas que impactan sobre todos. - Os quiero ver revisando todas las armas y haciendo recuento de munición mañana a primera hora, ahora debemos de descansar que mañana puede ser peor que hoy - Callidon se coloca junto a mi haciendo un saludo perfecto - No avisaremos a la base, porque lo único que se me ocurre decir es que cuelguen al armero de los webos por no revisar ni una puta arma. Asi que a descansar. -
Me dirijo a montar un pequeño catre para poder pasar la noche lo mejor posible, pero no sin antes de preocuparme por el estado de salud del cabo - Soneka ¿todo bien? ese orco te ha pillado en bragas - y una vez todo listo, me dispongo a descansar todo lo que puedo.
Comienza a levantarse la mañana y compruebo mi pistola y la recargo debidamente - Hay que estar preparados para cualquier contingencia que se presente..... que seguro que se presentará - Cuando termino de preparar mi arma, de cargarla y de guardarla en su sitio, recojo y me dispongo a guiar a la plebe en nuestro camino hacia el puente que deberemos controlar. Ágilmente, observo a mi alrededor y busco el camino correcto - Vaya, parece que el descanso me ha sentado bastante bien, estoy más espabilado que de costumbre..... puede que el ataque con la sierra y el baño de visceras verdes que me pegué anoche me ha sentado de maravilla - pienso mientras voy dirijiendo a mis hombres. - Chicos, la formación de costumbre y ojito con las emboscadas y demás patrañas ¡os quiero atentos a todo! -
Motivo: Navegacion de superficie
Tirada: 1d100
Dificultad: 37-
Resultado: 20 (Exito)
Navegación de superficie aprendida y con +10. Usease, el intelecto + el modificador = 37 de dificultad. ¡¡es la primera vez que lo consigo en toda la partida!! jejejejejeee.
Hombre alguna mas sacastes, que el modificador para tu tirada no te lo he dicho para que no estes del todo seguro de si sacas o no las tiradas.
Todo había terminado. El orco que se nos echo encima había sido muy rápido y casi no me dio tiempo a reaccionar, por suerte para los que estábamos cerca, el sargento uso bien su espada sierra.
Ahora me preparo para pasar la noche. Recargo el arma y la limpio y preparo para la acción. Después, me duermo envuelto en pesadillas que no me dejan descansar todo lo que quisiera.
A la mañana siguiente, sin decir una palabra, con cara de cansancio, sigo a mis compañeros en busca de ese maldito puente y esos malditos depositos.
Observo la culata de mi arma tras golpear al orko.
Si que son duros estos cacharros.
Con los huesos hechos polvo, me dirijo a descansar lo poco que me queda de persona. Antes de conciliar el sueño, recargo mi arma y me la dejo cerca mia.
A la mañana siguiente me levantó y con un ánimo alicaido sigo a mi unidad y no adentramos en el terrreno en busca de los depositos.
Con esa ultima tirada del sargento, el lunes, espero, pongo post con vuestra llegada al puente asi como un mapa para que podais decidir vuestra estrategia de ataque, que este combate no os pillara por sorpresa y sereis vosotros los que os lanceis como locos :P
Podeis seguir hablando o comentando lo que querais.
- Estoy vivo sargento, como poco. Eso hace que no pueda quejarme.
Si la lucha contra estos bichos solo había consumido parte de nuestra munición la verdad es que no puedo pedir mas.
- Habría que hacer un recuento de munición para ver que tal andamos, creo que la gente del monitorum ando un poco escasa con la entrega de baterías.