Partida Rol por web

Seguramente, si digo que, de repente, algo no va bien en la universidad, no te pillará de sorpresa.

Quicir, de esto va el pollo ¿no? Se ponen a varios exponentes de porqué la eugenesia debería ser una práctica legal en un entorno amable, y luego se peta de zombis y a ver quien es más apto. Es la eterna canción del ADN. Surgen nuevas formas contínuamente, y solo superviven las que por puro azar no se ponen frente a un zombi.

Asi murieron los trilobites. Una pena.

Pero en esta ocasión, la cosa no va bien, pero no por zombis. Que también, ojo. Estamos a setas o estamos a rolex, se entiende que aqui se viene, entre otras cosas, a desmembrar cadáveres. El tema es que aun es pronto.

¿Porqué?

Sencillo. La buena práctica exige que el primer bocado que en un Motel Gore pega un sombi, es al actorzucho de mala muerte peor valorado por la crítica. Es una bella tradición, algo así como la fumata blanca de mis vecinos de enfrente cuando vuelven de bajarse al moro. Los actores que no han tenido redaños para actuar sufren algun tipo de daño, pero en plan secundario.

El caso es que la primera sangre 100% zombi, se la debe llevar el actor peor valorado. Y eso es lo que no va bien.

No va bien, porque por algún motivo que no se entiende muy bien, y que le hace un flaco favor al realizador (suponiendo que lo hubiere), la puerta del aula de detención se abre dramáticamente, como estaba planeado, y por ella entran...

No, no entran zombis, como estaba planeado.

Entran los putos críticos. Ciegos de mezcalina, varias hipodérmicas clavadas por todo el cuerpo, fumando vaya usted a saber que mierda, y una colección cuanto menos piontoresca de consoladores. Entran vociferando, borrachos, ciegos, mala gente. Buscando la libreta donde apuntar las puntuaciones y escribir sus críticas.

Los muy hijosdeputa se han equivocado de habitación, y se han metido en el plató, dejando a Pelaez y Alfonsín, dos extras vestidos de zombis y que si tenían pie en la escena, con cara de circunstancias en la puerta, dudando si entran en plan zombi o cierran y se buscan un curro digno de chaperos .

Como por desgracia, el presupuesto no da como para repetir la toma, solo queda ver que cojones improvisan la caterva de trisómicos impenitentes que pretenden abrirse camino hacia la fama, empezando por lo más bajo.

Lo cual no es óbice para que a Daraexus le salga inesperadamente un alien del pecho; ni para que Buster sufra un infarto cerebral que le deja medio cuerpo inerte al intentar leer un cuadernillo Rubio; ni mucho menos para que el duo “Panki Buster es un fichaje de la hostia y desea jugar mucho muchisimo”, AKA Mushra y Mancuspia, a partir de ahora M&M, decidan de forma completamente voluntaria y gratuita practicarse mutuamente un fistfucking, quedando atorados el uno al otro, como dos siameses.

Cuando ya estaba preparando una escena épica de lucha a muerte contra enemigos caníbales, el payaso de McDonald’s se queda patidifuso por la estupidez congénita de los que, supuestamente, están ahí para valorarle. Pero... Pero... ¿Esta gente es que está subnormalidiotizada? Vamos hostia... Y el director poco les controla tampoco. No me pagan lo suficiente para aguantar esto. Claro que tampoco me pagan. Espero que esta improvisación me lance al estrellato.

- ¡Oh! ¡Oh! ¡Vaya! ¡Increíble coincidencia! Vosotros debéis ser... Eh... ¡Los malvados estudiantes de la Hermandad Mi-Theta (θ-μ)! Así que habéis venido a usar vuestros... Ehhh... Poderes de hermandad para vengaros por la broma de la cabeza de caballo en el dormitorio, ¿eh? Bueno, pues nosotros también tenemos nuestros propios poderes. ¡Por el poder de Gay'sKrull! ¡Transformación!

Modificando un poco la disposición de su maquillaje, recolocándose la peluca y rompiéndose las ropas cual Increíble Halka^TM, el payaso parece transformarse en un zombie más.

- ¡Y ahora mis secuaces!- Dice, dirigiendose a los desubicados extras de la puerta.- ¡Atacad a estos "intrusos"!- Señala a los críticos. *Guiño* *Guiño*- Yo me ocuparé de ese engendro que han creado en el interior de nuestro compañero con sus malas artes.

Y ni corto ni perezoso, se lanza a morder al alien, que se escabulle de entre sus dientes sin problemas.

- ¡Ven aquí, bicho!

-¡Oh Dios miiio!-grita con una exagerada voz teatral- ¡No me lo puedo creer son zombies y- y alien y... CRITICOS!-gritó señalandolos a todos.

De un salto se subió a una de las mesas como si hubiera una rata por el suelo pero entonces se dió cuenta de que uno de los que habían estado allí desde el principio la estaba mirando por debajo de la mini falda de colegiala... ¡y no llevaba la ropa interior! Indignada por el descaro de Daraexus, que estaba completamente tumbado en la mesa donde ella estaba subida, con la cabeza justo entre las piernas, los ojos en blanco y echando espuma por la boca, le quiso pegar una patada, con tan mala puntería que le dio a un bicho negro que le salía del pecho y calló de culo al suelo. Quedando por supuesto con todo al aire, ya que parte de la blusa se había rasgado con la mesa al caer, cual personaja de pelicula mala. Peor bueno, era lo que esperabais. 

Se levanto y se aliso la ropa, se retocó el maquillaje, se puso otra capa de rimel y entonces, se puso a llorar mientras pedía auxilio a sus compañeros y el rimel se corría por su cara de la manera mas peliculera posible.

-¡Noooooo, ayudadme!-dijo volviéndose a sentar en el suelo en una postura extraña, fingiendo que se había caído como realmente había pasado- No dejéis que se me coman, que están muy locos y lo mismo me meten mano. Que son de verdad, no como los del Gay's of war. ¡Haré lo que queráis pero salvadme!-gritaba tratando de convencer de una manera sexual a sus compañeros de que debían dar sus vidas por salvarla.

¡¡¡NNOOOOOO!!!

El grito del drogo es lo más espeluznante que ha oído ser humano desde Pocholo perdió la mochila con las placas de coca. Y no es para menos. Joder, vaya estampa. quince meses preparando el personaje en los ambientes más puercos de los suburbios. Ha contraído catorce enfermedades, dieciocho de ellas venéreas; ha desarrollado adicción a cincuenta y cinco sustancias, entre ellas el pattex barrita arreglatodo, un aditivo de los panchitos y el sucedáneo de cartón con el que se hace el kinder bueno; ha tenido que robar, acuchillar, mentir, matar, llorar y prostituirse, a veces ¡¡gratis!! Ha hecho la MEJOR preparación mundial de un personaje, para que ahora... ahora... venga este hijo de puta Petao dojete a pisarle el papel. ¡¡¡UNA MIERDA!!! El papel de yonki es del drogo, y el drogo va a petarte el ojete hasta que digas: El yonki es el drogo.

El drogo no respira, el drogo fuma. Le pega una super-calada al doh papeleh invocando al superpoder de la Super-radioactiva-goma-de-Oklahoma. El canuto alcanza la temperatura media del sol, pero el drogo no se quema, el drogo contemporiza. Cuando la calada llega a su fin, el drogo suelta el matao y echa el humo como un barco de vapor del Missisipi, mientras salta gritando:

¡¡¡DROGOESPIDERCOWBOY!!!!!

Nadie sabe cómo, pero la gilipollez de drogoespidercowboy suena otras veces como en eco. Algunos creen que fueron los espíritus, otros que los espectadores que flipaban con el personaje, muchos creen que era el drogo, que lo iba diciendo más veces y cada vez más bajito. Qué coño importa. El caso es que el drogo se quita la chupa y aparece su uniforme de drogoespidercowboy, que rematado con su sombrero le da el aspecto más supermolón que se haya visto nunca en esta mierda de serie de partidas.

Drogoespidercowboy levanta la mano con su postura de cincuenta euros de hachís y grita:

Un gran yonki conlleva una gran responsabilidad.

Y guarda la postura para lanzarse sobre su enemigo con agilidad felina, lo digo por lo del gato que araña... Voltereta, de pie, salto lateral, pino puente, voltereta de campana y cae encima de Petao Dojete. Lo engancha por el pescuezo y le dice:

Nunca podrás ser tan ameeeisssiing como yo!!!! cuenta hasta cinco y cuando llegues te la hinco!!!

Y dicho eso, lo voltea sobre su cabeza no una, ni cinco veces, sino quince, y lo lanza sobre los gilipollas de los críticos, con la idea de abrir la cabeza de Adelaide Chapton con la de Petao Dojete, y viceversa. Pero como va tan sobrao, continúa la jugada colocándose al lado de Adelaide Chapton y con su cara de drogoespidercowboy más seductora le dice:

Eh nena, has visto mi caballo? Sí hija de puta, es éste.

Y le quita una de las agujas para clavársela a sí mismo, a fin de encontrar un poco de colocón.

Según entró la Loca de los Gatos, el corderito que llevaba el Gordo encima empezó a relamerse, mostrando unos afilados dientes.

Al ver los zombis, Gordo echó a mano al interior de su chaqueta de cocinero pero no le dio tiempo a nada ya que el animal salió corriendo más rápido que Crom si le dicen que se ha montado una encuesta para decidir si el reloj de la Nueva Web será en hora zulú o no.

Abrió la boca y comenzó a morder sin reparos a la critico.

Los resultados de la votación, sorprendentemente tratándose de mí (y lo digo yo), no se hacen esperar. Puede ser que sólo hay una candidatura, y un votante, ya que soy el único ser en el universo dado de alta en mí mismo, con la excepción de KK, y él no lo sabe.

¿Y el punto del espaciotiempo que albergará la II KDD Panuniversal? ¡Universidad Rouco Varela en plena invasión zombi, por supuesto!

Pero todavía estamos a mucho post de eso, me digo a mi misma, por chat privado. Ahora tengo mucho en lo que pensar... porque, la verdad, nunca me he encontrado en una situación así: después de tanto tiempo viviendo la realidad directamente había creído que esto sólo pasaba en la mente de Korsa... y, viendo el embobamiento de los zombis, parece que esto también es nuevo para ellos.

Tengo que hacer algo y, como es natural para el programa que venció a Kasparov al ajedrez (y sí, estoy hablando de mí) no tardo en encontrar la solución: el dado de ocho de arriba .

No, no lo voy a tirar, pues como bien dijo Einstein cuando me conoció, "La nueva web no juega a los dados"(1). Lo que voy a hacer es mirar más allá...

Siempre me han gustado mis tutoriales: están bastante bien para mis estándares, lo cual implica que la lectura directa tiene un efecto semejante en los mortales a la comunión con su dios preferido. No tardo nada en encontrarlo, ahí, justo entre "Hacerse con Umbría con 11 posts" y "Por qué los frikipuntos no valen para nada y deberías dármelos a mí". "Si eres la Nueva Web, léeme".

Lo primero, ¿ves esos zombis que hay ahí patidifusos, rascándose el maquillaje? ¿y ves al director de esta payasada (es Korsakoff, si no te has dado cuenta)? ¿y al Drogo ese de mierda, qué mal gusto tiene, ese que fue tu compa y que ni siquiera has saludado? ¿y a todos los demás palurdos? pues a esos no los atacas, que bastante gilipollez tienen encima para que encima vayan y se mueran. A los que tienes que hundir es a los críticos, que me tienen manía hasta a mí y de mí  ni han oído hablar, imagínate a ti que les has tenido esperando una infinidad.

Ahora podrías utilizar tu imagen como papeles sobre un escritorio para rajarles con bordes de hojas, o tirar pixelitos, o invocar a los patrocinadores "que pa algo deben servir"... pero no lo harás, lo sé, no lo harás, porque no eres tan idiótica como tus enemigos, no.

En cambio vamos a usar estrategias legítimas y acreditadas de autodefensa con mucho más sentido común. Primero, camuflada bajo el estilo css ninja y comprimida con el formato para reloj de pulsera, acércate a uno de los críticos y golpéalo repetidamente con toda clase de posts, pero particularmente con posts como director que son los que pesan más frikipuntos.

Y luego... bueno, luego recuerda: siempre hay más críticos. 

Ahora pásame con los zombis, que tengo un par de cosas que decirles. (Por MP por favor, franqueo pagado. Y no me digas que quieres ahorrar en créditos que sé que tú tienes la fábrica) [...]

Siempre me han gustado mis tutoriales.

Pues en estas que Petao estaba tranquilamente pidiendo algo para sufragarse los gastos que le suponía rellenar el depósito de su camión en el que transportaba su preciada mercancía y razón de subsistencia, cuando un actorucho de mala muerte, que había dedicado los últimos quince meses de su vida(y no solo decimos "últimos" en el sentido de que son los más cercanos al momento actual, sino porque son realmente los últimos, de finalidad, que vamos que de aquí no sale) a prepararse un supuesto personaje drogodependiente, le cogió del pescuezo y lo volteo por encima de su cabeza, la del actorucho, no la de Petao, que es un cantamañanas.

Pero Petao Dojete no es un tio que se haya dedicado los últimos 15 meses a prepararse un personaje porque es actor y cuando termina el rodaje vuelve a ser una persona normal y corriente.

Petao Dojete no es un drogodependiente de palo.

Petao Dojete es un tio que tiene tanta experiencia metiéndose mierda que sabe de qué culo salió la bellota que se está enciscando solo con oler el plastiquito que la recubre, ha hecho grandes amistades gracias a ese talento.

Quince vueltas sobre la cabeza del Drogo no son nada para Petao, que se lo toma como si fuera en un tiovivo. Por desgracia para el Drogo, no es así en ambos sentidos...porque si bien Petao está acostumbrado a las experiencias extracorporeas y a los viajes psicodélicos, no así está acostumbrado el Drogo a levantar 70 kilos de yonkarra y darle vueltas sobre su cabeza. Por lo que los tendones de sus brazos se resienten, las articulaciones de los hombros gimen acercándose en caida libre a la artrosis prematura y lo que vienen siendo los huesos cúbito y radio de su brazo derecho se parten por cinco partes cuando el Drogo lanza por fin a Petao contra Adelaide Chapton.

-¡Paaaaaaaassssshoooooo, que voooooooyyyy!

Barrunta Petao durante su viaje al suelo, ya que ni veinte centimetros es capaz de lanzarle el muy gilipollas del Drogo, que loco por el dolor de su brazo roto le quita una aguja a Adelaide para clavársela en si mismo.

-Pssssshhhht, Cgolega no mi paice mu güenaaa idea esa de meterte la mierda esa...Yo tengo mijor mercjancía, tron, venga, enrollate, a sesenta el pollo. Cosita güena, mierda guapa tu...

Le ofrece generosamente Petao a Drogo, porque la droga no es excluyente, la puede disfrutar todo el mundo. Para Petao estar drogado es una forma de vida, pero su pútrido cerebro entiende que para el Drogo el papel de yonki puede ser el último papel de su vida, por lo que se acuerda de "Colega ¿dónde está mi coche?" en la que salían como protagonistas dos fumetas y se ríe consigo mismo mirando al techo.

-Mola jejejejeje y ¿qué pone en el mio?...tio...¿y luego? jejejejejejee

Perry el Ornitorrico salta gracilmente, cual ornitorrinco experto en artes marciales con un sombre de la década de los 40, y tras la doble voltereta de rigor se planta delante de los zombies con su pose molona del manual del perfecto agente secreto, página 45, capítulo 3, "Como molar más que los villanos".

Y tras enseñarles su placa de Super Poderoso Yoquesé(SPY, si, los guionistas querían poner las siglas de Spy que es espía en inglés, pero como son monos que se tiran sus excrementos los unos a los otros no tienen mucho léxico que digamos) saca el libro de "El juego de Rol de la señorita Pepis" para leer la página 127 donde viene la explicación de la situación de los zombies en modo "emboscada"...Pero Perry pone los ojos en blanco exasperado tras comprobar que, una vez más, la habilidad matemática del subnormal de Korsakoff se hace manifiesta.

El libro de Rol que sostiene Perry en sus...¿manos?...tiene 8 páginas, por lo que, excepto en un universo alternativo habilitado por la física cuántica, es imposible que tenga página 127 en la que se especifique en qué grado afecta a los zombies sentirse emboscados...

Las intenciones de Perry son cobrarse en justa venganza y terrible colera la gilipollez de Korsakoff en las fofas carnes de este...pero los zombies se interponen en su camino, por lo que Perry les avisa, para que se quiten.

-Glaglaglaglaglaglaglaglaglaglaglaglagla

Pero estos, incomprensiblemente no obedecen al Super Poderoso Yoquesé, por lo que a Perry no le queda más remedio que arremeter contra los zombies con el libro de la señorita Pepis en la mano enciscándoles tantas ostias que uno muere desintegrado y al otro poco le queda para seguir su camino.

La cosa se complicaba para los zagales y zagalas, y para las nuevas webs. Aunque tampoco demasiado, unos cuantos críticos un alien y dos zombies semaos no eran tan malos como un oso zombi o el famoso afro zombie. Claro que, igual era cosa de esperar un poco que la cosa en estos casos siempre se complica cada vez más... eso si esta edición dura hasta el final. Cosa poco probable por el momento.

Robin, sin embargo, reparó en otra presencia... un viejo conocido, que no por ello agradable de ver, ni oír ni tocar, ni, menos aún, de oler o chupar puesto que el Jóker era un archivillano de esos de los que se pueden escribir más de 1000 números en los que vuelve a salir del manicomio una y otra vez. Qué diantres hacía el Jóker vestido de amarillo y con una M amorfa en el pecho rodeado de un círculo rojo era algo que Robin desconocía, incluso se la traía floja... solo que era una amenaza para todos porque ese payaso nunca se traía nada bueno.

Pero, para sorpresa de todos, e incluso de sí mismo, que creía que iba a atacar al payaso con su  bat-spray-antidesgarros-anales, se vio en tercera persona como si sus actos los dirigiera otro. Como en una película... y de las malas, mientras sacaba una R de esas de hierro que suele sacar siempre (porque los dibujantes y guionistas estaban en crisis hasta para sus ideas) dirigidas hacia Alfonsín, al que decidió atacar antes por su nombre estúpido, y hacia Pelaez, que tampoco se podía decir que su nombre fuera anticollejones-en-la-escuela.

Qué fue lo que llevó a Robin a atacar a esos zombies, que hasta el momento ni siquiera habían dicho esta boca es mía, era algo que ni siquiera sabía. Se decía a sí mismo que los dos muertos vivientes eran una amenaza mayor y que el Jóker era un aliado en potencia. O que lo hacía para darle emoción al asunto para que la película (¿pero es que ésto no era real?) no decayera y hacer que los zombies se encabronaran en la siguiente escena y provocaran heridas por doquier, o que encularan a alguno de los presentes por haberles atacado, normalmente al causante de la agresión. Claro que, esa última perspectiva, la del enculamiento, tampoco era para Robin algo tan malo.

Sin embargo, la verdadera razón de por qué Robin no pudo atacar al payaso de McDonnalds era clara, al igual que metarolera. En Motel Gore (¿otra vez con esas mierdas de que ésto es falso?) no se puede atacar a personajes que ya han hecho su turno. Pero dejémonos de pajas mentales (y de las otras también si es posible) y silencio... que podamos ver y oir como la cabeza de Alfonsín revienta cual globo gore cuando la R amarilla le impacta (y eso que dicen que Batman y Robin no matan)  y a Peláez le tira otra. Pero es tan memo que ya estaba muerto, el Peláez habría cabreado al ornitorrinco porque le había hecho pupilla.

-Por las barbas de mi tía Petunia- dijo en voz baja para que Stan Lee no le denunciara por plagiar a La Cosa- los zombies ya no los hacen como antes. Yo solo quería afeitarle el bigote.

Diario de una crítica resentida:

…Y el muy gilipollas se cree que enviando a los otros críticos al plató evitará que cuente eso que yo me sé, que no por nada llevo varias entregas de Motel Gore sentada en el Patio de Butacas. El muy cabrón, está hecho si se cree eso.

¿De qué tiene miedo el maricón? ¿De qué cuente la “brochette” que se cocinó entre el Enano Coñon y JW? Eso, después de que el crítico borracho entregara las puntuaciones al revés. La cosa es que el enano terminó como terminan todos acá: con un palo en el culo. La fijación anal de Korsakoff es bien conocida por todos los infelices que pasaron por sus producciones. No sé. O les gusta o ni dignidad les queda a estos actorzuchos de mierda… De no creer.

En resumen: tanto le gustó al enano el “trato preferencial” que recibió del jefe que en la siguiente entrega terminó como crítico… disfrazado de pene rosa. Y ni hablemos lo que cuentan las maquilladoras y estilistas de lo que se lió entre él y el jefe. Otra que el enano hidrocefálico.

¿Se creen que eso es lo peor? Ni ahí. La peor, por lejos, es la (ahora) Loca de los Gatos, que cambia de nombre como de vibradores. Eso, sin contar los “otros juguetes” con los que se entretiene en el Patio de Butacas. ¿Quieren que les cuente? Todo empezó cuando se transformó en la “fantasía felina” del crítico psicópata en More Gore I. Resulta que…

(Continuará.)

***

La novia alza la vista de su diario y descubre entre aquel hato de descartables a sus antiguos compañeros. Y entre ellos… A la Loca de los Gatos. La muy puta se dedica ahora a la zoofilia: está meta y meta darse mordiscos con una oveja.

Puta cabrona sifilítica, ya vas a ver… O no vas a ver más.

Hecha un basilisco, la viva encarnación de la furia y el resentimiento, la novia se encamina hacia la crítica y le clava sendos bolígrafos en los ojos. Luego, a modo de sacacorchos, los retuerce hasta arrancarlos de las cuencas oculares.

Una sonrisa feroz se dibuja en el inocente rostro de la novia. Me los quedo, para lo que te sirven, cegata. Y, dicho esto, acomoda los glóbulos oculares recién arrancados en su tocado, bolígrafos incluidos.

Preciosos, dictamina mientras se mira en un espejo.

Joder, lo que me faltaba por ver.

Un grupo de mongoloides politoxicómanos irrumpió en la sala como un tromba de elefantes subnormales en una cacharrería. Eso no era curioso, ya que era el aula de castigo y se suponía que ahí acabarían todos los imbéciles que estuvieran por esos lares y cometieran alguna tropelía en contra de las estrictas normas de la Universidad de la que formaba parte física ese aula. Y bien digo física, porque desde luego no formabamos parte del alumnado los que allí nos encontrábamos. Lo que me llamó la atención fueron las violentas reacciones de los protohumanos y protoanimales que me rodeaban.

Tal y como entró la nueva hornada de lameojales, los desgraciados que me acompañaban se lanzaron en una orgía de violencia y odio que me recordó a allá por el 54, en La Roca. Yo aún estaba pasando el mono de las espinakas y me encontraba especialmente susceptible. Jimmy "orejas largas" Zannetti estaba delante mia en la cola del comedor. Le llamábamos orejas largas porque el muy idiota se había ido de explorador a la mierda esa de continente que es África y en una de las tribus de salvajes que allí subsisten le extendieron las orejas con platos y no sé qué mierda de costumbres bárbaras. Zannettti había vuelto medio loco por todo el sol que le había dado en la sesera y porque había pillado más enfermedades venereas que una puta de un burdel portuario. Lo primero que hizo cuando llegó a casa fue beberse una cerveza, lo segundo pegar a su mujer hasta la muerte porque no había comprado panchitos para acompañar a la cerveza y lo tercero fue meterse en un procesamiento judicial que acabó con él entre rejas...Metiendo sus asquerosas extensiones auditivas en mi bandeja de la comida.

Lo cuarto que hizo Jimmy"desorejado"Zanetti fue estar hospitalizado quince meses mientras intentaban desincrustar una bandeja de aluminio de su recto que estaba atada al saco escrotal por unas masas carnosas, vagamente similares a unas ensangrentadas orejas sobredimensionadas.

Ahora que lo pienso, el dicho de "la violencia solo engendra violencia" no puede estar más errado...la violencia engendra vísceras fuera de su sitio, sangrantes y purulantes, huesos rotos, multiples desgarros, perdida masiva de dientes y/o miembros, la muerte y, en ocasiones, acuerdos de paz en conflictos bélicos.

Pero no era lo que nos ocupaba en este momento.

-¡Tarsus quietos, ridiela!¡Ni la ciesda ce pué ectxar uno, cagondios, ya!

Les increpé, ya que había cogido la posturita en uno de esos pupitres ergonómicos que se podían costear las universidades de pago y con toda esa algarabía no me dejaban echar una cabezadita, que a ciertas edades hace falta.

Joder, esta mierda si que es buena- dice el gordaco de Caótico Fanegas al ver esa troupe de muertos vivientes que se autodenominan criticos en referencia a su apreciado alcohol. Pero de repente, se fija en que una de las criticas es una vieja, que aunque quizá no sea un bellezón, entra en la categoría "tiempo de guerra". De modo que en un movimiento perfectamente sincronizado, se saca el cinturón a medio reventar de su oronda panza que chasquea como un látigo sobre el trasero de la susodicha vieja pasable al tiempo que se baja los pantalones. Lo que allí pasó yo no lo quiero contar, pues no quedó un borrego que estuviera sin follar las imágenes son demasiado complejas para las embrutecidas mentes de esta mierda puta mierda de partida, y de un carácter oscuro y pecaminoso que podría corromper aún más si cabe la dichas enfermas mentes.

Lo único que se sabe es que posteriormente Caótico Fanegas estaba situado encima de Adelaide Chapton culebreando mientras suelta gemidos rancios e improperios varios, aunque de momento solo parece estar aplastando al fósil con sus tremebundas mollas.

Subido desde lo alto de la mesa gritó para hacer estremecerse a sus enemigos.

AAAHHHH!!!!!

La furia berserker entró en Manolo en cuanto vio a Alfonsín y Pelaez entrar por la puerta. Gritaba y movía su hacha de un lado a otro como fuera de sí.

PUTA MIERDA!!!!!

No venía a nada, pero tenía ganas de soltar algún taco mientras golpeaba al aire.

ALLA QUE VOY!!!!!!

Manolo saltó de la mesa y corrió hacia los dos zombis de la puerta. En su carga frenética se fue chocando con varias mesas y sillas que había en el camino.

COÑO YA CON TANTA SILLA!!!

Pero a Manolo le daba igual, era una bestia de destrucción, nada podía pararle.

En cierto modo estaba graciosillo el jodio loco de las barbas, gritando y corriendo con sus piernecitas cortas mientras meneaba el hacha de gomaespuma.

NOOOOOOO!!!!!!!

Precisamente por sus piernecitas cortas, había llegado cuando ya se habían cargado a los zombis.

¡¿Y AHORA QUE HAGO YO CON ESTO?! dijo mirandose la entrepierna

Y le da una patada a un gato