Partida Rol por web

EL POZO MALOLIENTE

Después de valorar la situación en la cámara de los Rayos, decidís volver sobre vuestros pasos y continuar por el pasillo maloliente.

Unos gases con un abrumador olor acre y hediondo inunda toda la sala, los cuales hacen que os lloren los ojos y en algunos casos, como a Homlicore y Pedrusco, echen el almuerzo de esta mañana. La sala en sí, se ha derrumbado en algunas zonas, haciendo que el agua se filtre y creando algunos charcos. En el centro hay un pozo de agua colorida y burbujeante por la cantidad de desechos alquímicos que han tirado en ella.

Aunque la sala está llena de charcos de agua, a algunos de vosotros os llama la atención tres en particular, ya que los identificáis como Lodos Grises, criaturas sin mente que se parecen a charcos y esperan pacientes a que criaturas incautas, pasen por encima de ellos y así poder atraparlas y disolverlas como alimento. Su potente ácido digestivo disuelve con facilidad los metales y material orgánico, pero no piedra.

Homlicore señalo a los lodos.

- Pûedo lanzarles flechas desde el techo, pero no se si les causaré daño. ¿Alguno sabe si el fuego es más efectivo?

Russo enarcó una ceja ante la presencia de los cienos. Recordaba haber leido sobre ellos y no estaba muy convencido de que golpearlos con armas fuera una buena idea. Por si acaso, Russo preparó una antorcha como arma improvisada. No deseaba perder ni su gran clava ni su espadón mágicos luchando contra aquellas cosas.

-Mmmm... esperad un momento a ver si recuerdo algo más sobre estas cosas.

Russo se preparó mágicamente creciendo y casteando su escudo mágico pero, a la hora de ir a arrancar, metió el pie en uno de los hoyos y se fue de morros al suelo.

"Cubrinme un momento ¡Voy a invocar un elemental de Tierra! ¡Lo único que estos seres no pueden dañar!"

Y dicho esto, enciende una vela, y se dedica a danzar y conjurar mientras algo se parece ir formando en la sala

"Ļ̗̘Ȩ̩̥V͙̗̘I̯̼͉T̨̯̣H̠̻ͅM̖͓̫O̙̹̩N͕̱̜G͉̘͇,͇̹̲ ̨̢̭P̡̥̝I͓̤̱A͖͍̥D͎͙͓P̢͓̠H̢̝͕!̢̙̫"
"̢̤̪P̧̺̲I̢̼ͅṞ̳̞ ͚̖ͅZ̭̦̱Į̲̰X̨̼̗L͕̙̼A̝̙̰Y̢͎̯,̤̟̖ ̧̲͙P͍̮̱I̺͈̱A͕̼̗Ḏ̼̖P͎͉̱H̞͖̪!͇̼̖"

"A̢̺͚͙̲̣̝̣̻͍͍͜ͅV̧̡̗̺̘͎̘̻̹͇̣̹̺Ą̨̢̡̢̪͕̗̙͓̠̪͜V̻̤̖̮̦̹̗̝̘̤̼̬͜Ą̡͍̝̘̬̘͍̪̫̠̠ͅG̡̨̢͈̱̝̫̯͈͈̲͜͜O̡͕̥̣̙͉͕̻͈̘̙͍͚!!"

Una forma con aspecto amistoso y de pura roca maciza va formandose, y esas cosas.

Y para cuando termina, le indica que cargue contra un oponente, pero no sin antes darle un empujoncito con su sagrada varita mágica de Colmillo mágico

"Por el poder que me ha sido dado / Zurrales hasta que te hayas cansado"

Viendo Pedrusco, que sus compañeros se preparaban para combatir a cierta distancia..

Yo tengo unos frascos que quizás hagan arder esos charcos.

Comenzáis a debatir un plan para coordinar vuestros ataques y eliminar las tres amenazas de los Cienos Grises.

Lanzáis vuestros hechizos, preparáis vuestras armas y cuando Lini convoca un elemental de tierra atacáis todos.

Lini invoca elemental y utiliza varita de Magic fang.
Pedrusco lanza Fuego de alquimista, entre arcadas.
Homlicore Dispara Flecha.
Zaldur dispara con a honda.
Rocco se lanza con su Gran garrote (te recomiendo que no hagas tiradas de ataque, hasta que se pidan, ya que te puede condicionar otras acciones)
Daranhta varita de proyectiles…

Zaldurr lanza una piedra con su honda impactando el limo azul

Lini cambia de varita, y saca la sagrada varita de "Ataque Llamarada", una de sus armas favoritas.

"¿Sabeis lo bueno de venir de aventuras a una mazmorra hedionda como esta? Que no tengo que controlar mis llamas ¡No hay bosque que pueda quemar!"
"Lo mismo pasa cuando visito una ciudad. La ciudad es de todos y puedo quemar mi parte"

La diatriba gnómica no va acompañada de esa cosa llamada PUNTERÍA, pues la llamita se piedre en una esquina (Ella apuntaba al limo Azul, el mismo al que Zaldurr le disparó su Honda)

¡Lo que no se pierde es el golpe del elemental! Este trata de hacer un Ataque Portazo, con ambas manos, contra el Limo Rojo ¡Y hasta parece que podría retumbar! ¡Que monstruo!

Droogami decide entrar tambien y comienza a rodear al limo Rojo, al que está golpeando Geodude, el Elemental de Tierra. Por algún motivo le da reparo el meterse el cieno en la boca, y procede a darle un garrazo, con cuidado de no destrozarse demasiado.

Entre arcadas, Pedrusco lanzó el frasco de fuego de alquimista... y el brazo no le falló.

Buuurp... por nuestros ancestros. Esta no es manera de cuidar un Dungeon. Habrá que hacer "limpieza"...

Homlicore, algo mareado, disparo dos flechas hacia el mismo limo que Pedrusco.

Nada más aparece el elemental de tierra, realizáis todas vuestras acciones y ataques coordinados.

Lini encanta los poderosos puños de Geodude  y manda atacar tanto al elemental de tierra como a su fiel felino Droogami (al cieno rojo).
Geodude, le teme con todo lo gordo, y hace temblar hasta el suelo.
Droogami, aunque ve lagunas en el plan de Lini, se acerca a lo que parece un charco y le pega un tímido zarpazo con su patita, que al tocarlo, le empieza a quemar y suelta un quejido lastimoso.
Zaldur le mete una pedrada de escándalo a uno de los cienos.
Pedrusco le da de lleno con su fuego de alquimista, pero el cieno parece no inmutarse.
Russo suelta un garrotazo, pero no calcula bien con su nuevo tamaño y le da al techo.
Homlicore dispara una de sus flechas impactando de lleno. Luego ve tristemente, como se disuelve parcialmente...
Daranhta utiliza su varita de proyectil mágico.

Los Cienos, reaccionas a vuestros ataques, y se levantan del suelo, moviendo amenazadoramente unos tentáculos

El Ranger lanzó un par de flechas al mismo cieno de antes.

Russo, engorilado y enfurecido pr su prematuro fallo, agarró de nuevo su garrote y comenzó a descargar golpes como casas sobre el cieno verde.