Partida Rol por web

Me alejé de él al ver la boca con toda aquella sangre saliendo y la cara de loco que tenía

¿Qué demonios..?

Me acerqué al tipo que estaba atacando a los demás para intentar alejarlo de la gente del vagón que huía de él. El tipo había intentado morder al cura así que tenía que mantenerme lejos de esos dientes. No quería que me infectara nada.

Al fondo. Todos al fondo.

La situación pasó de la incertidumbre al caos en apenas un momento. Para cuando volvieron las luces, había personas que se habían transformado, parecían sedientas de sangre. Amaia recogió sus cosas y se puso en pie, agarrándose a una de las barras, mirando a uno y otro lado sin saber muy bien a dónde ir.

El niño parecía asustado y se acercó al hombre que había intentado atender a los heridos. Parecía un mendigo, aunque había dicho que era médico... aquello era extraño, pero el chico le conocía al parecer así que Amaia pensó que con él estaría bien.

Se giró con el ruido provocado por los maquinistas. Literalmente se estaban atacando a mordiscos y Amaia soltó un grito cuando reparó en la oreja que le faltaba a uno de ellos. Ese hombre pidió ayuda a gritos mientras el otro seguía atacándolo sin descanso. Y el tren... oh, el tren seguía en marcha sin nadie que lo controlara. 

Amaia vio otra estación que cruzaban sin detenerse y decidida miró en dirección a la cabina. Alguien debía llegar allí y parar el tren o acabarían todos muertos.