Partida Rol por web

Ciertamente lo que todos ven los deja asombrados, hay una especie de hueco hecho de cemento en el prado. Estan seguros que la semana pasada no estaba ahí. El hueco, esta lleno de muñecos, basura, y objetos extraños.

_{(ven todo exactamente como esta en la imagen, es decir que todos esos objetos estan al frente de ustedes)}

Los muñecos tienen una expresión extraña. Parecen descuidados. Como si algun niño o niños los hubieran dejado abandonados ahí. Tienen un olor extraño...

Esos muñecos me dan miedo. Dice Veronica abrazada a su hermano.

José corrió a coger a su hermana, ahora ya más calmado, cuando ésta pegó el grito. Dirigió sus ojos a donde miraba la pequeña e inmediatamente se tapó la nariz, aunque seguía respirando por la boca.

- Buuh, que olor más raro.... - Echó a su hermana para atrás, protegiéndola. - No te acerques, Veve. Hay unas tijeras y podrías cortarte. Que raro.... - Buscó un palo con el que poder remover todos aquellos trastos. - Ésto no estaba aquí, ¿verdad? - Lanzó una mirada intrigada a sus amigos, pero en sus ojos había un ligero brillo debido al reciente descubrimiento - ¿Rafaela? ¿Mateo? ¿Lo habéis traído alguno de vosotros?

- No... -respondió Mateo intrigado y confuso-. Parece una tumba de juguetes...

Con su mirada fue recorriendo toda la escena. Se percató de que había una caracola gigante, quizá podría dársela a Vero para que pasara el mal susto. Las caracolas no cogen olores, ¿no? ¿o sí? Quizá fuera mejor no tocar nada de ese sitio, además... por la colocación que tenían los objetos, era... como... si... faltara algo en la parte izquierda que había movido lo pesado a la derecha...

Fue la última en llegar, ya que todos habían salido al encuentro de Veronica,pero cuando vio todos los juguetes y los objetos se hizo paso para estar la primera.

Ala...no, yo no he traido nada de esto...Su vista se fijó en los muñecos, que tenían muy mala cara, eran muy feos. Pero nome extraña que estén abandonados, son muy feos...y huelen a pis de perro La cara de asco que puso no tuvo desperdicio.

Anda...se fijo en la hucha que había en una lateral, estaba entera, eso significa que puede que tuviese algo dentro...y si era dinero...con dinero se compran chuches

Una hucha!! Se acercó por el lateral y le dio fuerte para tumbarla a ver si sonaba con su espada matadragones, vamos, su rama.

-¡¡QUE PESTE!!

grita al llegar al lugar y ver la caja de los juguetes, mientras se tapa la nariz con dos de sus deditos. Se acerca, al lado de rafaela, sentandose en cuclillas, para verlos mejor.

-Estan rotos.

Agarrando las orejas del conejo, extrayendolo, sin destaparse la nariz.Lo sujeta como si sus dedos fueran pinzas.

-Que feo. Es un conejito muy feo, y huele muy mal.Uff, pero peste. Que asco.

Apartandolo, y poniendo cara de asco.

El que dijo que era una tumba de juguetes no se equivocaba, aunque ¿si un niño abandonó ahí los juguetes, quién haría una caja de cemento para meterlos adentro?, y ¿qué olia?

Rafaela con el palo pincha la hucha y cuando cae de lado suena como si hubiera monedas adentro,  se emociona y se da cuenta que podra comprar dulces si la rompe. Curiosamente ve que hay un martillo cerca.

El olor extraño de por si es una mezcla agria apestosa, pero con un toque dulson, no es agradable, pero a pesar de ello y de lo extraño de la situación, ustedes siguen intrigados por la presencia de los juguetes. Ciertamente eran de madera, no eran comunes, el conejo si era un peluche común, pero el rostro no lo haría muy popular entre los niños.

Noelia toma la oreja del conejo y lo aleja, es un peluche, pero nunca había visto uno con tanta mala vibra, sin embargo al retirar el conejo algo muy raro sobresale, ese objeto circular que se escondia.

Con el movimiento, los otros juguetes  caen a un  costado dejando ver de que se trataba.

Era raro y daba miedo. Veronica se abraza más a su hermano cuando nota ese craneo en piedra..muy raro

- Vaaaaayaaaa. ¡Como mola! - exclamó José sin poder contener la emoción de descubrir todos aquellos "misterios". Abrazó a Verónica y la alejó un par de pasos de la tumba, susurrándole al oído. - Tranquila, Veve, tu quédate aquí atrás, ¿vale?

Sonrió a la pequeña y volvió a la tumba, sentándose de cuclillas. Entonces ahogó un grito de sorpresa y dijo.

- ¡Fijaos! ¡Es como un puzzle! - dijo de nuevo con brillo en los ojos. Pero su sonrisa se transformó al momento en una mueca de decepción. - Pero faltan un par de piezas... - expresó, mientras señalaba los huecos negros.

Miró a un lado y al otro y removió entre los juguetes para ver si encontraba algún tipo de pieza.

- A ver si.....

esto tiene dinero! Igual dentro están las piezas que faltan!! O quizás estuviesen debajo de os muñecos, pero ella quería saber que había dentro dela hucha,así que moviendose por un lateral la agarró para poder ver si podía abrirse, y si fuese así, ver que había dentro.

Esto huele muy mal, seguro que eran de unos niños que no lo querían. Soltó una carcajada observando de reojo la calavera.

Manteniendo el conejo suspendido con una de sus manos agarrando las orejas, y sin destaparse la nariz, mira lo que acaba de aparecer.

-¿Que es eso?¿un puzzle? que raro y feo.Mira tiene un perrito dibujado, y una ratita.

Mirandolo fijamente, las piezas que señala verbalmente..

-No me gusta, no me gusta.

Repitiendolo sin cesar.

-José no lo toques, dejalo ahí.

No me gusta nada, es muy feo. Dice ella temerosa sin hacer mucho. vámonos, vámonos.

Ciertamente parece un rompecabezas. José de manera intrépida comienza buscar entre las cosas, mientras Rafaela trata de mirar si la hucha tiene dinero. Noelia, Verónica y Mateo están pendientes, no hacen nada. Mateo parece petrificado, no tiene ninguna actitud frente al nuevo hallazgo.

José comienza a buscar en la caja, y su acción establece una cadena de eventos que hela la sangre.

Cuando el comienza a buscar, y a mover objetos, buscando..

Los ojos de la muñeca parpadean.

José y todos los que se han dado cuenta dan un paso para atrás aterrorizados...

Y, en ese momento se escucha un sonido suave....

Psssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssssss

De la boca de la calavera sale un vapor verde, y eso es lo último que recuerdan.