Partida Rol por web

Regreso al Hogar.

Regreso al Hogar.

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15/10/2021, 01:49
Director

El pequeño guijarro se iluminó en mitad de la oscuridad solo para demostrar algo que la mujer ya sabía: la oscuridad no era natural. La ausencia de luz generaba oscuridad, por supuesto, pero había algo más mezclado con la natural negrura de una cueva; algo denso que mitigaba el brillo de su gema.

Hubo algo más preocupante que atenazó el corazón de Inphie. Hasta ahora, cuando rezaba para obtener un milagro, porque pequeño que fuese, una parte de ella viajaba hasta la fuente de luz para tomar prestado una porción de su poder. Gracias a ese préstamo las personas marcadas como ella eran capaces de realizar proezas en nombre de la iglesia. La fuente era el Dios Único, el dios del Sendero Luminoso, la Luz Sagrada, el Gran Libertador. Poseía muchos nombres pero solo un camino recto para seguirle.

Esta vez, al tomar el poder de la fuente no percibió la grandeza de la misma, sino su ausencia. El trono estaba vacío. Tras él había dejado una estela residual, que era de la que se había nutrido para obtener el poder necesario para obrar el milagro. Pero no había nadie en casa.

La fuente se había apagado, el manantial se había secado. El hecho era terrible, pues solo podía significar una cosa. Su dios se había marchado. O había sido consumido como todo lo demás en el cataclismo de fuego.

Notas de juego

A efectos prácticos significa que, una vez agotes los usos de tus hechizos, no podrás recargarlos cuando duermas porque el Dios Único ha desaparecido. Al menos, hasta que descubras que ha sucedido y ver si tiene solución.

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17/10/2021, 00:09
Kelgar Stalsson

El truco del guijarro luminoso le hizo alzar las cejas sorprendido, pensando en que quizás fuera verdad que el Señor estaba ahí escuchando sus plegarias. Y que quería un poder así para no tener que cargar antorchas.

La larga explicación de Ilia hizo que la mirara mientras hablaba, fijándose en aquellas facciones que tanto le recordaban a Tayla. Embobado, casi no se había dado cuenta de lo que había dicho, así que simplemente se encogió de hombros.
Luego Cecil dijo que quería explorar el camino por el que había mandado a Benson él solito.

Vale, pues eso nos deja una única opción. ¡Vamos! pronunció, con ganas de avanzar de una vez.

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19/10/2021, 18:01
Uther Brannagan

Uther se quedó pensativo cuando el Rostro le consultó por su generación.

- Pues no lo sé con certeza, amable Rostro, pero creo que ronda la veinteava. Si os sirve de información, la mía es la casa regente en la actualidad, anteriormente no era así. ¿Conocisteis a mis antepasados? Si luego tenemos tiempo, os preguntaré sobre ellos. Creo que ahora hay interrogantes más urgentes, al menos para nosotros.

Escuchó con atención todo lo que tenía para decir.

- Pues es muy alentador escuchar que hay magia más poderosa que la de nuestros captores, eso quiere decir que se los puede vencer. ¿Sabéis quien os dotó de vida? 

La información que les había dado era invaluable. Intentó recordar cada detalle, todo sería útil. Uther no se rendiría. Quería reunirse con su esposa y su hijo, si aún estaban vivos. ¿Habrían muerto? Algo de lo que dijo el Rostro lo hacía dudar.

- Creo que Jim se refiere a que antes de que fuéramos trasladados aquí vimos como el mundo se consumía en cenizas, aunque dejaré que él mismo lo confirme. Eso me hace reflexionar según lo que habés dicho. ¿Y si el mundo no acabó? Si lo que desea el amo de este lugar es ponernos a prueba, experimentar con nuestros miedos y compartir su vida, lejos de todo lo que una vez conocimos, ¿No sería un buen primer paso hacernos creer que todo aquello no está más?

Pensó en el "eco que no muere" y el interés que podía tener quien los había encerrado en él. La conexión parecía bastante clara, aunque al no tener más datos, calló por el momento.

- La batalla y la muerte... -pensó en voz alta, refiriéndose a quienes habían bajado por el pasadizo. Por ahí no está la salida, ¿verdad? -quiso confirmar. Si así era, debía dar aviso, y hacerlos volver.

- Jraxas, cuéntanos, ¿qué has encontrado? -quiso saber.

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19/10/2021, 19:54
Jraxas el Mancillador

El pequeño diablillo escuchó muy interesado a la roca parlante, sin duda era una criatura fascinante y según decía la magia en su interior debía ser abrumadora, entonces se giró brevemente hacia los dos humanos presentes.

Pues nuestro nuevo amigo ya ha contado gran parte de lo que he averiguado, he hablado con el cara pájaro, en su interior odia aquello en lo que se ha convertido, odia a su amo y anhela la libertad. Pero la magia que lo ha retorcido es poderosa y su correa muy apretada, las dudas apenas florecieron un instante antes de desaparecer. En cuanto a lo de torturarnos psicológicamente, pues no lo sé, parece que la idea de su amo es encontrar a sus iguales inmortales, y para comprobar si somos nosotros tiene que destrozar y recomponer nuestros cuerpos, o algo así. Vamos, todo alegría y diversión.

Entonces se giró de nuevo hacia la roca parlante.

Yo he visto el palacio, una parte al menos, porque está protegido por magia. En cuanto pones un pie en su interior inevitablemente te pierdes, da igual en que dirección vayas, es un truco que ya he visto antes en algunos lugares del infierno. Pero lo interesante es que el palacio parece brotar de la propia roca que lo soporta y en esa misma roca es donde estamos encerrados, así que realmente podría decirse que estas conectado al palacio. Lo mas curioso de todo es que dicha roca parece estar viva de alguna forma y tu eres una roca viviente, así que dime Nimrock— Dijo sonriente al hacer el juego de palabras con el nombre escogido por el niño. —¿Eres tu la roca viviente sobre la que se posa el castillo?

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20/10/2021, 10:34
Inphie Lightborn

Mientras esperaban al androide Inphie tuvo un momento para pensar en lo que acababa de sentir. La desolación se apoderó de su corazón y no pudo ocultar en su rostro una preocupación que iba más allá de temer por su propia vida. Un miedo que superaba con creces al que cualquier bestia, demonio o brujo habría podido causarle. Se acercó al pedrusco luminoso que ella misma había bendecido, lo recogió del suelo atesorándolo y lo guardó.

Se acercó a su compañero de profesión y le susurró cerca del oído. No pretendía ocultar sus palabras del resto del grupo, pero temía pronunciarlas en alto -El alcance de estos eventos es mayor de lo que esperaba. Ten cuidado si necesitas recurrir a las plegarias, es posible que no todas sean escuchadas- Miró a su compañero a los ojos unos segundos mostrando en su mirada el miedo que recorría su alma.

Se tomó unos segundos de silencio mirando a la oscuridad para recomponerse y poco después el chico de Lerwig empezó a impacientarse.

-Si, no deberíamos permanecer aquí más tiempo- Miró el camino que había seguido Cécil y luego se encaró al opuesto para comenzar la marcha. No parecía que el posible fallecimiento del hombre de hojalata le importase realmente, pero aún así su voz se quebró levemente al pronunciar las palabras -Que el Señor se apiade de su alma-

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21/10/2021, 00:29
Director

—Por supuesto estaré encantado de mantener una buena charla con vos sobre sus ancestros, majestad, aunque como habéis dicho no es el momento adecuado para vosotros. Puedo mascar el peligro en el aire. Ñam, ñam, ñam. Este sitio no ha cambiado nada entre duermevela y duermevela.

El rostro se arrugó ante la siguiente pregunta del rey, intentaba recordar.

—Desconozco el nombre de mi creador. Mi memoria de aquel entonces no era tan buena como ahora. Digamos que es una capacidad que he ido desarrollando con el tiempo. Tengo varios recuerdos fragmentados; unas palabras mágicas, un anillo, ciertos aromas, pero nada más. Imposible saber quién era la persona que me creó.

El rostro volvió a arrugarse, esta vez por inquietud. Las palabras de Uther revelaban que algo terrible había sucedido en el mundo.

—Esas palabras me preocupan. Tengo la teoría de que nos encontramos en una realidad mágica, puede que hecha a medida, lejos del mundo conocido. Nuestro captor viajar entre dicha realidad y el mundo que conocemos para extraer a sus víctimas. Por supuesto no estamos hablando del raptar de meros aldeanos, con todos mis respetos por ellos. Él busca gente excepcional y el rapto de este tipo de personas de categoría puede levantar suspicacias. Por ello solo extrae, secuestra más bien, individuos cuando una catástrofe los rodea. Si hay una guerra, raptar un capitán, un héroe o un general es sencillo, los darán por muertos, perdidos o caídos en manos el enemigo, no habrá más preguntas. Igual que si hay un alud, o, en vuestro caso ¿Qué fue?

Allanah se tomó la libertad de intervenir y de contar de manera bastante gráfica la destrucción del mundo por medio de la llama.

—Eso es nuevo, incluso para mí. El fin del mundo, si es cierto lo que decís. El fin de la sociedad, las civilizaciones, la cultura, el progreso, e incluso la divinidad y la magia.

Se quedó mudo y pensativo, aunque no duró mucho.

—Una catástrofe de tal magnitud permitiría a nuestro captor obrar a su antojo, pudiendo secuestrar a sus objetivos sin levantar sospechas de su entorno. Quizás por eso hay tantos de vosotros aquí. Pero no descarto la teoría del rey. Todo podría ser una ilusión, un engaño para poneros a prueba. Ese casaría bastante con su forma de actuar, vaya.

 El rey siguió hablando. Su última pregunta, la más inocente, les trajo una sorpresa.

—Oh, no, de hecho la salida se encuentra precisamente por ese camino. Pero para ser justos, sería como atravesar un campo de batalla. Abajo se está librando uno de los experimentos de nuestro captor. El sujeto es Krueger. Lo conocí hace seis años en el mismo lugar que nos encontramos ahora. Krueger provenía de las tierras baldías de Kaher-Sorren, un paraje barroso y hostil donde los recursos sin limitados y el pillaje, el robo, el secuestro y las espadas mercenarias son la única manera de ganarse la vida. Krueger nunca fue muy diplomático. El único motivo por el cual se prestó a ayudar a los otros prisioneros fue porque le prometieron que habría guerra. Y la hubo —suspiró, resignado —. Todos sus compañeros murieron, solo quedó él. Se hacía llamar el mejor guerrero del mundo. Y puede que lo sea. Su ansía por el combate, su amor por las armas, le mantuvo vivo. Nuestro captor vio algo que explotar. ¿Cómo llevas al límite al mejor guerrero del mundo? Le buscas un rival a su altura. Y, si no existe, lo creas.

»La criatura que creó tiene un solo cuerpo pero da la impresión de que son muchos y de que se puede multiplicar. Es voraz, inteligente como un animal de presa con instintos asesinos. Nuestro captor siempre está poniendo a prueba los límites entre la vida y la muerte, para ello trastocó los cuerpos tanto de su creación como de Krueger, encerrándoles en una mazmorra particular, para que pudieran pelear una y otra vez, hasta que uno se alzase con la victoria. Pero uno no puede perder, es el mejor guerrero del mundo. Y el otro no puede morir. Así que llevan peleando años ahí abajo. Meterse entre ellos es llamar a los problemas. La criatura devorará todo lo que tenga a su alcance. Respecto a Krueger, no sé cómo le habrá afectado todo ese tiempo de lucha continua. En cualquier caso, él ama la contienda, la batalla. Para él su encarcelamiento es lo más parecido a un paraíso.

»Oh, ya, me olvidaba. El núcleo de la criatura se encuentra tapando la única grieta que hay en la roca. El núcleo del ser es algo muy diferente a su cuerpo. Es débil y carnoso y aunque también puede defenderse de forma letal, es mortal. Encontrad el núcleo,  dad muerte a la criatura y encontraréis la salida.

Dicho así parece fácil, claro. No creo que lo sea. Y tampoco sabemos cómo actuará Krueger. La criatura sirve como dique para sus ansias de batalla. Sin ella, no sé de lo que es capaz.

Les miró con su regia expresión, preocupado.

—Tened cuidado.

Escucharon a Jraxas. Allanah no perdía detalle, Jhafar estaba sumido en un denso mutismo. El muro agradeció la conversación. Aceptó la pregunta del diablillo con una sonrisa.

—Yo no estoy ligado a esta roca ni a este lugar, pero gracias por suponer que soy algo más. Desconozco si vuestras afirmaciones son veraces o no, pero no creo que la roca que nos rodea sea un ente vivo, un sintiente o un durmiente. Después de tantos años me habría dado cuenta pero, bueno, supongo que puedo estar equivocado. Mi capacidad de investigación es hacia dentro, hacia mi conocimiento y recuerdos. Para mi desgracia no puedo salir tras esos muros para ver qué hay de verdad en este mundo.

Notas de juego

Adelanto el turno para que la conversación sea más ágil. No te preocupes Lordazzun que sigues teniendo tu momento para preguntar y charlar.

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21/10/2021, 02:36
Jim

Fascinado por la criatura que habitaba en el muro, el movimiento de las rocas que formaban sus labios y sus antiquísimos ojos, Jim no pudo si no dejar, sin interrumpir y con una sonrisa pintada en su rostro, que la estatua sin nombre se explayase hablando, preguntando, tan deseosa de hablar y comunicarse como si realmente, tal y como aseguraba, hubiese estado muchísimo tiempo sin hacerlo. 

Jim miró a sus compañeros temporales de infortunio con ojos risueños cuando el muro empezó a contar que era inalterable, buscando en ellos cierta complicidad en el sentimiento de maravilla que le embargaba.  

Pero, por supuesto, los adultos que conformaban el grupo: Reyes, demonios, nobles e inmortales, parecían estar por encima de la sorprendente experiencia de encontrarse con un muro parlante.  Jim, consecuentemente, intentó ponerse todo lo serio que puso. Se dispuso a escuchar y asimilar con gran intensidad todo lo que iba diciendo, de manera que su fértil imaginación le permitiese llegar a alguna solución en la que nadie hubiese pensado, deseoso de sentirse útil, valorado.

Um — se decepcionó ligeramente al saber que ponerle un nombre no era tarea tan fácil. Su cálida alegría ensombrecida por un destello gélido en sus ojos cuando el 'sin nombre' explicó que Jim no tenía el suficiente poder para ponerle uni  —Pues habrás olvidado tu nombre, pero todos tienen uno. Miró a Jafhar, que había discutido acerca del poder de los nombres con Cécil, hace lo que parecían ya horas. ¿Como les iría a los que habían descendido hacia las entrañas de éste inmundo lugar? —O eso creo. A menos que —reía — seas más antiguo que las palabras. 

Se retorció intranquilo al oír acerca de la verdadera naturaleza del hombre pájaro.  Y la descripción de lo que buscaba el dueño de la fortaleza le pareció más cruda, burda y material que aquello que su imaginación le había susurrado hacía ya un rato. El amo del calabozo no buscaba nada en el interior del corazón del alma de la gente que capturaba.  Solo le interesaba la carne.  

Si, es lo que dice Sir Jor.. Uther — contestó asintiendo. —El mundo ardió en una ola de fuego. Yo creo que... él — desvió la mirada, como cuando iba a decir algo que no iba a gustar —Tiene prisa por conseguir lo que busca. Más que antes.  Y por eso ha matado a todo el mundo, menos a nosotros, de una sola vez 

El aspecto algo sombrío del niño mejoró con las noticias de Jraxas. Había hablado con el hombre del paraíso, encontrado un laberinto encantado y deambulado por un pasillo de roca viviente.  Mucho más emocionante que esperar aquí hablando con las piedras, extinguida ya la excitación inicial de ver una cara pétrea parlante. 

Yo quiero subir al palacio — ¿Por donde has entrado, Jraxas? Yo creo que allí estaremos más seguros.

Notas de juego

Luego añado reacción a lo de Krueger, que esta parte ya la tenía escrita.  

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21/10/2021, 23:58
Director

No habían avanzado y ya habían perdido a uno de sus miembros. El lugar era extraño. Poseía vida propia, palpitaba con toda aquella baba rodeándoles. Era como adentrarse en un esófago, en las cavidades carnosas de una enorme bestia. El hedor seguía presente, supurante, azotando sus narices. Tolerable pero imposible de olvidar. Testigo maldito que les recordaba que la muerte les rondaba. No la digna y gloriosa, ni la mansa y plácida, la más burda muerte, la que te llevaba a la putrefacción y al olvido.

Decidieron moverse. El camino que había tomado Cécil indicaba peligro. No se atrevieron a investigar los ruidos de batalla. Prudencia y miedo se daban la mano. Adoptaron una formación para moverse.

Al frente iba Kelgar, el arma desenfundaba en las manos. Sus pisadas eran pesadas, el metal de su armadura replicaba a cada paso. Sus escos se perdían en la oscuridad. Tras él, Ilia, cauta y temerosa. El olor la molestaba más que a nadie. Ella podía percibir el sonido mejor que los otros. Por todos lados escuchaba como deslizaba aquella extraña baba. Le ponía de los nervios.

Yakshini había visitado pozos infernales y mazmorras de tortura, alguna suya, que tenían incluso peor aspecto que aquel. La oscuridad no le desagradable, tampoco el hedor. Ella era una criatura de amor y muerte. Se sentía como en casa.

Cerrando el paso iban los inquisidores, vigilantes, atentos, las armas prestas. Las palabras de Inphie había sonado descorazonadoras. Ellos debían llevar la luz a la tiniebla. Pero la tiniebla era allí ama y señora, gobernaba el entorno, ahogaba la luz de las antorchas como trataba de ahogar sus esperanzas.

Sus pasos generaban ecos que no iban muy lejos. El sonido era amortiguado por la sustancia semilíquida que resbalaba por las paredes. Cada vez había más. En el techo, goteando, en el suelo. Evitaron dos caminos que estaban encharcados con la intención de evitar pisar aquella sustancia. Sentían el peligro rascándoles detrás de las orejas. Pero no había más que oscuridad y esa sustancia. Los sonidos de pelea se alejaron hasta resultan inaudibles. Pasaron a escuchar el golpeteo profundo de sus corazones y sus respiraciones, algunas contenidas.

 

Tras una caminata no tuvieron la sensación de haber avanzado. La roca caverna era irregular pero parecía no tener fin. Kelgar se detuvo. Nada había cambiado, el paisaje seguía siendo el mismo. Pero percibía peligro. Ilia fue la primera en advertirlo. Lo escuchó. La gelatina se estaba moviendo. Y lo hacía por todos lados. Sobre sus cabezas, pero sobretodo a su alrededor.

La sustancia gelatinosa empezó a aumentar de volumen. Por todos lados empezaron a alzarse columnas del aquel compuesto. Burbujeaba y hedía, se estaba tornando negra, opaca. Ganaba cuerpo, presencia, más solidez. Los cercó, impidiendo su avance. O era magia, o estaba vivo.

Empezó a definir sus formas. Cada bulto empezó a cambiar. Al principio la masa era humanoide, con largos brazos y un rostro que se alargaba y que terminó por abrirse en dos mostrando dos poderosas mandíbulas repletas de dientes sombríos que si parecían ser sólidos. Sus brazos, gruesos y fuertes, terminaron rematados en garras de cuadro dedos, afiladas como cuchillos. Escamas, había escamas sobre la piel. Dos ojillos rojos, brillantes y malévolos se colocaron en la parte frontal de la cabeza draconiana dotándola de una inteligencia animal y perversa. Carecía de piernas, ya que estaba unido a la gelatinosa sustancia de la cual parecía nutrirse.

Había decenas, en el suelo, las paredes y el techo, rodeándoles. Gruñían como una jauría de perros rabiosos. De sus mandíbulas, ahora regias y fuertes, capaces de chasquear y partir un hueso por la mitad, babeaba la misma sustancia que los había dado la vida.

Se movían con rapidez, flotando sobre el mar de babas que había en el suelo y las paredes. Algunos de ellos eran más altos que el bárbaro, otros poseían el torso exageradamente largo, superando con creces el tamaño de un caballero montado. Todos eran robustos, de aspecto consistente. El negro de sus escamas no reflejaba la luz. Dientes, garras. Hambre. Gruñían, apretaban los dientes con ira. Se habían formado a su alrededor, rodeándoles. Ahora tenían hambre. Estaban a punto de lanzarse sobre ellos.

 

Notas de juego

Cada uno, tirad 1D4. Ese será el número de criaturas que os mira a vosotros. Eso quiere decir que si Ilia saca un 2 y Cyriak un 3, habrá dos criaturas pendientes de Ilia y 3 de Cyriak, en total 5. Las criaturas tienen diferentes tamaños, pero son grandes, van armadas con garras, son escamosas (negras como la oscuridad) tienen ojos brillantes y dientes afilados. Draconianos, en apariencia, o sombras de ellos, todos unidos a la masa de gelatina que hay por todas partes. Buena caza.

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22/10/2021, 00:10
Director

—Más antiguo que las palabras —rumió el Muro —. ¿Por qué joven Jim? ¿Es que te trae algún recuerdo?

Jafhar se dio por aludido cuando Jim lo miró.

—Todo ser vivo debe tener un nombre. Creo que su fortaleza radica precisamente en su nombre. Y por eso lo desconoce. De saberlo, nuestro captor seguramente podría aprovecharlo para debilitarlo. Por eso uno nunca debe decir su verdadero nombre, a no ser que esté dispuesto a matar a aquel que lo escucha —terminó algo sombrío, sumiéndose en profundos pensamientos, simas oscuras y siniestras que había dentro de su cabeza.

Jim arrojó una teoría, plausible o no.

—El Creador, nuestro captar, es más ducho creando que destruyendo. Aunque destruye a la vez que cree. Desconozco cuál es el límite de su poder, pero otorgarle tal masacre sería ponerle a la altura de los dioses. Y no he visto nada divino por aquí —rumió sus palabras una vez más —. Pero necesito meditar sobre ello.

—Vaya, Jim, tienes una imaginación muy fértil —terció la mujer.

—De nada sirve divagar sobre lo sucedido en nuestro hogar. No hasta que logremos salir de aquí. Los problemas de uno en uno. Tendremos tiempo de asimilar lo sucedido, y de estudiarlo, una vez logremos regresar al hogar —cortó tajante el hombre del desierto.

—Cierto, creo que ahora tenéis problemas más urgentes que resolver.

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22/10/2021, 12:39
Kelgar Stalsson

A medida que avanzaban, Kelgar comenzó a tener una desagradable sensación.
Era como si aquel túnel le oprimiera y le costase horrores dar cada paso. No le gustaban los lugares cerrados, y aquel era uno de los peores, si no el peor, de los que había estado.

Pero aún así, siguió avanzando con convicción, pues no tenía otra alternativa.
Una vez estuvieron más adelante, Kelgar notó como si hubiera vuelto al punto inicial… o como si hubiera movido los pies pero realmente no hubiera caminado.

Algo no anda bien… murmuró, notando que “algo” estaba a punto de suceder.

Y la respuesta no tardó en llegar, en forma de babas formando una especie de criaturas ligeramente draconianas.
¡Mierda!
¡Ilia, no te alejes de mí!
gritó sin mirarla. ¿Podrían matar a espadazos a cosas hechas de gelatina?
Estaba a punto de comprobarlo.

- Tiradas (1)

Motivo: Babas

Tirada: 1d4

Resultado: 2 [2]

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22/10/2021, 13:54
Jim

¿Le traía algún recuerdo? No lo sabía. Pero tenía la sensación de que quizás debería hacerlo. Que, de entre todos los cuentos que había leído, todos los que le habían contado, había seguro una leyenda al respecto. Una en el que se narraba como se inventaron las palabras antes de las palabras, los nombres verdaderos ¿Logos?  Era incapaz de recordar, por más que arrugaba el entrecejo intentando, de algún modo, ordenar sus fragmentados recuerdos.  

Para aumentar la frustración que sentía, se sintió doblemente recriminado tanto por el antiguo ser como por Jafhar.  No le parecía a Jim que destruir el mundo fuese tan difícil, después de todo.  Sólo hacía falta tiempo y voluntad y el que habitaba esta fortaleza parecía tener de ambas en abundancia. 

-Pues si hay que salir, empecemos.  Por arriba e intentar hablar con el ave del paraíso o por abajo y quitarle el corazón al monstruo Inmortal.  Me da igual - Jim se cruzó de brazos, sus mejillas aún encarnadas por la vergüenza, humillación, que había sentido.  Pero era un chico duro, de los que se crecían cuando le contrariaban.

-Con él - señaló al rostro de piedra. -Solo podemos hablar de cosas del pasado, de misterios de hace tiempo. Recalcó algo que todos sabían ya, animando al grupo a moverse de allí.  La verdad es que algo en la mirada del muro le ponía nervioso, como si supiese algo de Jim que ni él mismo sabía. -Podemos volver luego y seguir hablando.

-Nuestros amigos, allá abajo - alzó la antorcha. Ya había decidido antes bajar y Jafhar le había frenado. -Puede que estén muriendo ¿Verdad?
 

 

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22/10/2021, 14:31
Uther Brannagan

Uther hizo una profunda reverencia hacia el Rostro.

- Gracias Rostro. Por compartir tu sabiduría. ¿Podemos hacer algo para retribuirte? Si está en mi mano, intentaré cumplirlo, la tuya ha sido una ayuda invaluable.

Observó a sus compañeros. Analizó la situación. ¿Que era lo mejor? ¿Quedarse esperando al carcelero y su misterioso acompañante, o avisar a quienes habían bajado de la situación en la que se encontraban? 

- Es cierto que si ha ocurrido o no el fin del mundo es irrelevante ahora. Tenemos entre manos una situación demasiado compleja. A ver, sabemos que el amo del calabozo ha visto en cada uno de nosotros algo que llamó su atención, sabemos que nos pondrá a prueba, si es que no lo está haciendo ahora mismo. Debemos decidir. 

Permaneció pensativo un momento.

- Creo que alguien debe bajar a poner sobre aviso a los demás. He dicho que debíamos mantener la unidad y actuaré en consecuencia. No creo que sea un lugar para un niño, Jim, sugiero que te quedes aquí con Jafhar y Allanah, ya que ellos manifestaron su voluntad de no adentrarse allí. Pero no te detendré, puedes decidir lo que tú quieras.  

Sospechaba que Jraxas haría lo que quisiera, por lo que ni siquiera le sugirió nada.

- Bajaré a buscar a nuestros compañeros de infortunio.

Antes de adentrarse en el pasadizo, buscó algo con lo que marcar el camino, para no perderse, un trozo de roca, de carbón, de lo que fuera. Si no, guijarros para colocar en posibles bifurcaciones. También una antorcha, si había. Antes de abandonar la estancia, dedicó una mirada llena de esperanza a quienes se quedaban, desenainó su espada corta, e inició la marcha.

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22/10/2021, 15:34
Jraxas el Mancillador

Era gracioso ver como los mortales se aferraban a la esperanza, cualquier excusa o sospecha les servía para obviar lo obvio.

Mucho me temo que vuestro mundo ha sido pasto de las llamas, se ha calcinado, vuestros conocidos estarán bien rostizados. Yo también estaba allí y al menos el que era mi patrón en aquel momento se convirtió en un churrasco, de eso estoy seguro. En cuanto a ¿dónde estamos? pues estoy bastante seguro de que Nimrock tiene razón, allí fuera no parece haber nada aparte del palacio y la roca que lo sostiene. Así que diría que esto es un espacio extradimensional creado con magia, como esas bolsas mágicas que tanto gustan a los aventureros, pero a lo bestia.

Sin embargo le sorprendieron gratamente las palabras del niño, tan joven y ya hablaba de arrancar corazones, sin duda el chaval tenía madera.

Lo de salir por arriba está difícil para vosotros, yo me tuve que transformar para poder pasar por los respiraderos y fue el pajarraco el que me hizo volver abriendo un portal con las dichosas gemas. Y lo de marcar el camino no se si servirá de mucho, majestad— Dijo al ver las intenciones de Uther. —Al menos en el palacio las marcas que yo hacía desaparecían en cuanto las perdía de vista, pero no se pierde nada por intentarlo, salvo nosotros, claro está.

Entonces alzó el vuelo para revolotear alrededor del hombre. —Desde luego aquí parados no hacemos nada, os acompaño, aunque soy más útil como factor sorpresa que como combatiente—. En ese momento volvió a transformarse en araña y se dejó caer sobre su hombro.

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23/10/2021, 21:37
Jim

Había un fuego en el interior de Jim.  Lo habían llamado arrojo, valor, determinación. Se habían sorprendido de que alguien tan joven demostrase tanta entereza ante el peligro, que el horror más abyecto no hiciese mella en el ánimo del chiquillo.  Esta vez, enfrentado a un descenso que los llevaría a una duelo eterno entre un loco y un cazador, no era diferente. Por lo menos hasta que el rey Uther dijo que el subterráneo no era un lugar al cual Jim debiera descender.

—¿No es lugar para un niño?- Jim ansiaba que le tratasen como a uno y no como a un bicho raro..  Se debatía entre la incierta llama del combate o la inmediatez de una cálida conversación.  -Esta mazmorra tampoco. Ni el vacío sin llenar que rodea ésta fortaleza.  Poco a poco se iba decantando por seguir con Allanah y Jafhar.  El combate llegaría hasta él, quisiera o no, más tarde o más temprano pero ¿Cuántas oportunidades habría de tener una conversación con ese muro inmortal? Jim no tenía problemas para cambiar de opinión y defender posturas que odiaba hace minutos.

-Perdón, Nimr.. sin nombrehabló con la estatua. No quería decir que lo que dices sea todo cosas del pasado.  Me voy a quedar aquí al final.  Es que he pensado que igual podemos averiguar algo.  Es por eso que habéis dicho de que la fortaleza está sola en este mundo.

Me recuerda a algo...

- Tiradas (1)

Motivo: Rituales. ¿Que conjuro mantiene la fortaleza aquí?

Tirada: 1d100

Dificultad: 95-

Resultado: 10 (Exito) [10]

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24/10/2021, 00:15
Director

—Antaño la gente acudía a mí en busca de consejo. Pasé mucho como muro norte de la Gran Biblioteca de Akkimesh. Cuando me pedían consejo, me hablaban de sus tierras, de sus hogares, de sus gentes. Tenía un marco para ofrecer consejo. Ahora, todo el que acude a mí lo hace en la más absoluta de las ignorancias, pues nadie sabe que hay tras estos muros —sentenció, posando sus enormes ojos en el diablillo —. O casi nadie.

—Un grupo de árboles puede impedir ver el horizonte, igual que una duna puede impedir ver un oasis. No creo que hayáis viajado muy lejos, Jraxas. Vuestros ojos no pueden haberlo captado todo —dijo Jafhar.

—Lo único que podría desear es salir de aquí y ubicarme en un lugar transitado por gente, pero me temo, majestad, que ninguno aquí posee tanto poder —contestó el muro a su pregunta, ya hacía tiempo que se había resignado.

El rey decidió que descendería para avisar a los demás. Jraxas se transformó en una araña. No una normal, sino una fea y horrenda criatura de ocho patas, nueve ojos saltones y una boca torcida llena de dientes pequeños y afilados. Se colocó sobre su hombro.

—Iré con vosotros —dijo Allanah, sorprendiendo a todos —. ¿Cuidaréis del muchacho? —Preguntó a Jafhar.

—Y él cuidará de mí.

La mujer se arrodilló ante él. Olía a jardín y tierra húmeda, un olor agradable. Era más hermosa de cerca, a pesar de rozar la edad madura.

—Seguimos juntos. Nos reuniremos pronto.

—Buena suerte —dijo Jafhar.

—Espero que éste no sea vuestro final —añadió el muro con visible tristeza.

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24/10/2021, 00:16
Director

Se quedaron a solas. Sus compañeros desaparecieron por el oscuro corredor que descendía.

—Y decidme, ese monstruo creado para enfrentar al tal Krueger, ¿Tiene nombre?

—Scolante.

—Interesante — el hombre del desierto se giró hacia Jim —. ¿Tienes algo en mente, Jim? Es buen momento para ponerlo en práctica.

—Mmmm….

El muro rumiaba una idea, la escupió con parsimonia. Dudoso.

—¿Puede ser que nos conozcamos de antes?

—Lo dudo mucho, me acordaría.

—¿Cuál dijisteis que era vuestro nombre?

—Jafhar —respondió el hombre, se ajustó el turbante, su mirada, siempre clara, se volvió turbia durante unos momentos.

—No, ese no era…pero poseía las mismas letras.

Notas de juego

Te falta información para responder a la pregunta que formulas, ya que no sabes lo que es “aquí” exactamente. Es como si buscas adivinar que diligencia llega más rápido a la ciudad de Belgard pero no sabes dónde estás. Podrías estar en la ciudad vecina, en lo alto de una montaña, es un barco, bajo tierra o en prisión. En cualquier caso no percibes ningún resto de ritual mágico, al menos en el lugar donde te encuentras.

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24/10/2021, 00:16
Director

El hedor surgía de las paredes igual que si hubieran emparedado un centenar de cadáveres tras ellas. Un líquido bilioso y transparente resbalaba sobre la roca. Babas, mocos, algo repulsivo y gelatinoso. El olor era vomitivo. Jraxas había olido algo similar, pero en los pozos del infierno, donde se cocinaba a fuego lento a según qué tipo de pecadores, todos juntos y troceados, en una enorme olla. El aroma a putrefacción, y muerte, era similar.

El rey, que había visitado campos de batalla, había olido algo similar durante sus campañas, cuando era más joven. Fosas comunes, campos de batallas tras días de que estas finalizasen, hospitales de campaña. Cuerpos en putrefacción, sangre derramada, muerte. Si Allanah sintió alguna reminiscencia, no lo dijo.

—Será mejor no tocar esas paredes —advirtió.

Encontraron vomito en uno de los peldaños que descendía, reciente.

Tanto el rey como la mujer habían tomado una antorcha. El círculo de luz que formaban  menguaba a cada paso. El aceite de las mismas debía estar consumiéndose, aunque el ojo experto y supersticioso hubiera dicho que la oscuridad estaba ganando presencia, como si quisiera cercarlos con sus propias manos. A Jraxas no le costó nada identificar esa oscuridad como algo mágico, no natural. Sus compañeros tendrían problemas para ver, incluso con las linternas.

Las escaleras terminaron al fin. El paisaje no mejoró. La gruta era más amplía ahora. Una caverna, por lo que parecía, con sus columnas naturales esparcidas por aquí y por allá, con sus oquedades en las paredes y sus simas en el suelo se abrió ante ellos. Un terreno abrupto e irregular por el que caminar a oscuras no era buena idea. La oscuridad era total. Las antorchas que habían traído parecían irrisorias, como navegar en alta mar con una barquita fabricada con palos y cuerdas.

La baba seguía deslizándose por las paredes formando charcos en el suelo. El hedor era más soportable abajo. El techo era elevado y volvían a tener espacio. Suficiente para blandir un arma larga. No percibieron ninguna corriente de aire.

El silencio era total para todos salvo por el lento correr de esas sustancia que se deslizaba sin fin. Jraxas inspeccionó visualmente el lugar, no vio nada ni nadie, salvo esas columnas naturales cubiertas por la empalagosa sustancia. Había tres caminos a seguir, de frente, a la izquierda o derecha. Ningún rastro de sus compañeros, ninguna indicación del camino que podían haber tomado. Todo estaba envuelto en esa densa oscuridad. Como sonido, el goteo, incesante, perturbador. Ahora era más ominoso, más sucio. Una masa viscosa deslizándose constantemente. Era como estar dentro del estómago de una bestia.

—Sin duda este es el cubil de una bestia extraña —exclamó la mujer, mirando el entorno con curiosidad.

 

 

 

 

 

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25/10/2021, 07:47
Jim

Que Allanah decidiese bajar no gustó a Jim.  La seguridad que, pese a estar totalmente fuera de su elemento, mostraba la noble pelirroja era contagiosa. También le recordaba, de algún modo extraño, a una madre de la que no tenía ya recuerdos claros.

-Allanah - dijo antes de que descendiese. -Llévate mi antorcha. Realmente le serviría de bien poco aquí, si el hombre-pájaro decidía mostrarse.  No hacía falta haber luchado en mil guerras para saber que, sin adultos armados a su alrededor, era imposible que llegase a acercarse tanto como para incendiar la capa del carcelero. 

-Si el ave se me lleva - dijo en dirección a los tres héroes con voz apenas audible, pero con una entereza encomiable - Pues... Bueno, decidles adiós a todos de mi parte. Se que querían defenderme, pero habrían muerto todos. ¿Verdad? Miró al muro al decir ésto. Él habría visto matanzas en muchas ocasiones anteriores, imposible saber cuantas veces. - Si me rindo es más fácil que encuentre una oportunidad. - añadió con una mal fingida seguridad. Sonrió -Eso creo, si. Seguro que encuentro una oportunidad.

 

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25/10/2021, 10:35
Jim
Sólo para el director

-No hay nada mágico aquí - dijo pensativo tras la pregunta de Jafhar.  Su rostro era inexpresivo, lejano y frío como una distante estrella, su humanidad apartada, sustituida por un riguroso entrenamiento místico que no recordaba pero que había hecho suyo, instintivo y reflejo. -No hay trazas de antiguo ritual, no hay auras, filamentos o ecos. Solo hay realidad. Creación, el más alto nivel de la ciencia. Un creador era capaz de condensar, elaborar o fabricar cualquier cosa. Podía usar magia o artefactos para ayudarse pero el resultado final de su arte era inamovible y permanente.  No podía desencantarse ni destruirse, solo transformarse. -Pero no puedo adivinar nada más, sin salir de aquí primero.

Se giró hacia Jafhar. -Nos rendiremos e intentaremos hablar con el dueño de todo ésto. Volvió a tomar otra antorcha cercana, esta vez ya conocía la forma de asirse a los muros y pudo hacerlo con mucha menos dificultad.

Miró al muro, recorriendo toda su extensión con ojos ausentes. Se acercó a su rostro pétreo. Sonreía ahora, curioso e inquisitivo.

-Si estabas al lado de una biblioteca ¿Como llegaste aquí?¿Se construyó esta fortaleza a tu alrededor o te transportaron? Tocó la roca con sus manos. -¿Toda la roca eres tú? ¿Si arranco un trozo del muro, también eres tú? Podría llevar una piedra tuya a otro muro fuera de aquí?¿Podrías transferirte a ese muro? -acarició la roca. Parecía algo triste ¿se compadecía del muro? - ¿O simplemente es tu cuerpo, inmutable e inmóvil para siempre? 

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25/10/2021, 12:34
Ilia

No se esperó la respuesta de Cécil quien decidió partir por su lado en busca de su amigo, ¿Estarían bien? Durante un rato largo intentó escuchar sus pasos hasta que estos desaparecieron por completo en la lejanía a la par que ellos avanzaban por el otro oscuro hueco. Era increíblemente sorprendente como una ausencia podía provocar el silencio más aterrador pues, si bien se sentía mucho más cómoda físicamente al no tener el martilleante sonido de las vocales del autómata, mentalmente era horrible ya que ese hombre había mantenido el tremendo miedo a raya y ahora estaba escuchando el deslizar de la baba, los pasos de todos, la respiración de cada uno con un aumento abrumador. 

En cierto punto Ilia frenó en seco y agarró del brazo a Kelgar para que frenasen todos mientras decía. - Esperad. Esa cosa... La baba, se mueve. Está moviéndose.  No tardó mucho el bárbaro en decir que aquello no andaba bien y efectivamente, pronto se vieron rodeados de viscosas masas que pronto se verían de lo más peligroso. Se aferró a la daga que el bárbaro le había dado y tragando saliva se puso detrás de el, sintiéndose horriblemente observada por una de aquellas criaturas... ¿Qué debería hacer? Ella no era combatiente, maldito collar necesitaba que alguien se lo quitase, ¿Pero como? Solo un esclavista podía hacerlo...
- Agh... Si pudiera quitarme este collar, estas cosas no pasarían. Estaba en un aprieto bastante gordo y aunque le daba cierta seguridad el estar rodeada de gente experimentada eso no le aseguraba su supervivencia, en ese momento era como una humana normal y corriente sin oficio ni beneficio. Qué frustración...

Al final no le quedó de otra que ponerse en la posición más defensiva que pudo, con suerte y estando atenta podría esquivar a la criatura si se centraba en los movimientos de esta y en no atacarle por el momento hasta ver una apertura. 

Notas de juego

Me he imaginado que la tirada que hay en mi nombre en el Off iba dirigida a la criatura que me tocaría? Así que he narrado en base a ello. Las acciones en resúmen serían:
-Ponerse en actitud de defensa para poder esquivar mejor en caso de que la ataque.