Partida Rol por web

Ante los detallados argumentos de Veigur An, Denkan Deng inventa nuevas faltas a la nave y la carga visiblemente irritado.

Cuando Ani Blaze le ofrece pagar una "tasa", Denkan se rasca la frente pensativo antes de decir: Supongo que puedo quedarme en la oficina después del turno y pedir por vosotros los permisos que os faltan. Os ahorraría mucho tiempo y papeleo. No es mi trabajo pero os podría hacer el favor, claro. No seré yo quien eche a perder la fama de hospitalidad de Wayland ... supongo que lo haría por ... 100 créditos galácticos. Tendré que decir a mi esposa que no podré asistir a la eclosión de nuestro hijo pero lo haré por vosotros.

Una cosa más, ¿pensais salir ahí fuera así? - al decirlo mueve su cabeza hacia la cámara de salida que permite salir sin perder la estanqueidad del hangar. -¡Por la nebulosa del cangrejo, sois valientes! El centro meteorológico predice una contaminación muy alta para hoy. Probablemente os abrase la nariz y la garganta antes de que caminéis 20 metros. He visto morir un hombre toser hasta morir. Es una manera muy desagradable de palmar.

Señala un cajón lleno de mascaras con filtros de aire que parecen compradas en el todo a 100- Cojed, cortesía del sindicato Dakhsa
 

~~Tendré que decir a mi esposa que no podré asistir a la eclosión de nuestro hijo pero lo haré por vosotros.

A Veigur se le cayo el alma encima. Era tan bonito poner un hijo... Tener un huevo... Tener un hijo! (*) Eso. No podia hacerle eso al amable (aunque tenia que reconocer que poco brillante, dada la confusion que tenia con la regulacion vigente), oficial de aduanas. 100 creditos! Por perderse el nacimiento del pequeño! Veigur se sintió como un estafador. Y los Dolthasir, si algo eran, era honorables.

Por favor! No podriamos hacerle eso. Si quiere me encargo yo del papeleo. - dijo con pesar. Realmente queria ver la ciudad -  Como hemos hablado, en el fondo y una vez mirado con detalle, son solo un par de cosas menores

A la capitana de la Blazing le parecia un poco cara la "propuesta" del hombre, o pajaro, o lo que fuera, de aduanas. Pero por otro lado acababan ya con aquello y se podían dedicar a lo que habían venido. Luego tratarían de cobrarselo a su empleador. Además, si no terminaban rápido, Veigur acabaría haciendo las reparaciones de todas las naves del hangar con tal de ayudar.

Muy bien. Aquí tiene el dinero de las tasas. Y le estamos muy agradecidos por su favor.

Ah sí. Y felicitaciones por su hijo.

Nunca estaba de más ser educado mientras se pudiera.

En la puerta del hangar hay una cámara estanca que os permite acceder al exterior.

Una vez en la cámara, el interior del hangar queda sellado y se abren las puertas exteriores dejando entrar un aire enrarecido y turbio. Las máscaras proporcionadas con Denkan muestran ser claramente incapaces de filtrar la envenenada atmósfera del planeta y sentís como cada bocanada de aire desciende irritando vuestra tráquea para abrasar vuestros pulmones.