Motivo: Poción a Raith
Tirada: 1d8
Resultado: 7(+1)=8
RAITH 6/27
El golpe había estado duro y pensaba que me costaría la vida, pero conseguí resistirlo.
Raith no corrió la misma suerte. Le vi caer inconsciente bañado en sangre. No podía hacer nada por el ya que mi enemigo se acercó a mi dispuesto a continuar la acción.
Era mi oportunidad de atacarle y acabar con el.
Motivo: Ataque soldado 2
Tirada: 1d20
Resultado: 2(+5)=7
Motivo: Punto de accion (repetir ataque)
Tirada: 1d20
Resultado: 2(+5)=7
Gasto un punto de acción para repetir el ataque
Mis peores presagios se hacen realidad en cuestión de segundos. Uno tras otro, Raith y Edirél son sometidos por nuestros atacantes, a pesar de asestarles terribles golpes.
Mucho me temo que sin nuestro aguerrido amigo humano, no lograremos salir victoriosos de la emboscada y todos terminaremos corriendo la misma suerte. Por fortuna, Shanna parece compartir mi opinión y reacciona con rapidez a la situación, acudiendo en auxilio de nuestro campeón.
Failin y Threkor también están en apuros, pero yo no puedo prestar mi ayuda a todos a la vez. ¿O sí? Piensa, Alhandra, piensa... Tenemos pociones curativas suficientes para todos, pero antes de usarlas necesitamos librarnos de nuestros atacantes.
Por un momento me planteo la opción de aterrar a todos, eso paralizaría el combate pero corro el riesgo de asustar tanto a aliados como a enemigos. Así pues, opto por una actitud más conservadora, reforzando todavía más las defensas de Raith con el objetivo de volverle invulnerable a los ataques de nuestros enemigos.
Gasto un punto de acción para acelerar infusión y reducir el tiempo de lanzamiento de 1 minuto a un 1 asalto. [véase E.C.E., pág. 46]
Uso la infusión "mejora de armadura". Descuento del fondo común 50 po en concepto de componentes materiales. Imbuyo la armadura de Raith con la aptitud "de Invulnerabilidad", que le confiere al portador una RD 5/mágica [véase G.D.M., pág. 218]. Ignora los primeros 5 puntos de daño que reciba con cada ataque excepto aquellos que provengan de armas mágicas.
Khala seguía absorta en el combate, escucho el grito de Shana, pero no podía mirar a la muchacha ahora, de todos era la que menos tenía que estar ahí, la más inocente y seguramente la que más había perdido en todo este viaje, si perseveraban ganarían y Shana podría volver a la civilización y llevar la vida de una chica normal, si era capaz de comportarse como tal claro.
Con ese pensamiento en mente la espada doble empezó a girar en las manos de la cambiante, como un remolino de acero la hoja dio un fuerte golpe sobre el esqueleto, sin dar un respiro giro las hojas sobre su cabeza para bajarlas sobre el guerrero que acosaba a Raith, el tipo no lo vio venir y en cuanto subió la afilada hoja de nuevo no pudo ni hacer un amago para esquivarla.
Motivo: Ataque Esqueleto
Tirada: 1d20
Resultado: 16(+5)=21
Motivo: Ataque 1 Guerrero
Tirada: 1d20
Resultado: 16(+5)=21
Motivo: Ataque 2 Guerrero
Tirada: 1d20
Resultado: 19(+5)=24
Motivo: Critico?
Tirada: 1d20
Resultado: 20(+5)=25
Motivo: Daño esqueleto
Tirada: 1d8
Resultado: 6(+3)=9
Motivo: Daño guerrero 1
Tirada: 1d8
Resultado: 7(+3)=10
Motivo: Daño guerrero 2
Tirada: 1d8
Resultado: 5(+3)=8
Uso punto de acción para hacer un ataque extra.
Toma critico, el tío se come 26 de daño, vamos despejando la zona.
Mi anterior error no me resto ímpetu para volverme contra él. Mis compañeros tenían la parte más complicada, así que tenía que deshacerme de este rápido para poder ir a ayudarles.
No podía distraerme y mirar hacia donde estaban mis compañeros. Si lo hacía, mi enemigo podría vencerme. Sólo podía hacer una cosa, así que ataqué
Motivo: Ataque
Tirada: 1d20
Resultado: 19(+5)=24
Motivo: Daño
Tirada: 1d6
Resultado: 6(+3)=9
Motivo: Daño critico
Tirada: 1d6
Resultado: 4
EI!!! Crítico
No solo no había conseguido eliminar limpiamente a mi enemigo, sino que al mismo tiempo habían conseguido alcanzarme una vez mas, si llegan a ser dos tampoco lo hubiese notado. Siento como las fuerzas me abandonan y regreso a ese lugar oscuro que últimamente también había llegado a conocer, el vacío.
Lo bueno de este lugar es que para tí el tiempo era relativo, y vivir o terminar de morir quedaba en manos de tus compañeros. Siento como alguna especie de líquido se vierte por mi garganta y que la oscuridad se empieza a transformar en luz. Abro los ojos y veo el rostro de Shanna sobre mi, aun sigue el combate por lo que oigo mas que por lo que veo.
- Mierda, he vuelto a caer.*
Threkor: siento ser yo portador de malas noticias pero aun tienes que hacer la tirada de confirmar el crítico.
* Cuando me conteste a 1 cosa el master termino de escribir.
Desde mi posición, veo como las garras de Khala abren profundas heridas en uno de los mercenarios que me habían tumbado, por mi experiencia .... lo mas seguro es que fueran heridas mortales. Sigo tumbado cuando siento como una nueva oleada de energía proveniente de Alhandra, recorre mi armadura. Tras esto, me levanto tambaleante* y me apresto de nuevo al combate.
- Ya estoy de vuelta. Es un segundo lo que tardo en sopesar el peso de mi espada y descargarla sobre uno de los soldados que nos atacaban.
Motivo: Ataque poderoso (2) soldado 4
Tirada: 1d20
Resultado: 15(+5)=20
Motivo: Daño
Tirada: 1d10
Resultado: 1(+4)=5
* Como hablé con el director; retraso acción tras Alhandra y me sumo al combate (si no me tumban claro).
Para el soldado de la Garra que acaba de herir a Failin es una sorpresa ver como aquel hombre mayor se desliza hacia su derecha ganándole la espalda. Ahora tiene a un lado al guerrero, el cual ha bebido una poción, y al otro lado la molesta presencia de aquel carretero. Sin embargo la daga sigue sin encontrar un hueco en su armadura. Tiene que acabar con él lo antes posible y romper aquel flanqueo.
Khala presencia como la desesperada princesa, con sus mejillas recubiertas en lágrimas, se lanza a socorrer al guerrero. Decidida a no dejar que ninguno de los dos sean atacados de nuevo por aquellos sectarios, la exploradora se revuelve violentamente contra aquellos enemigos. Con un grito terrible golpea el estoque de Edirel, aún hundido en el cráneo del esqueleto, provocando que la calavera se fragmente en decenas de pequeños fragmentos. El no-muerto queda convertido en un muñeco ciego cuya cabeza queda reducida a su mandíbula inferior. Cae al suelo pataleando.
Con un rápido giro el otro extremo de su arma se convierte en una estocada penetrante que alcanza en el vientre a uno de los soldados que acosaba a raith. La sorpresa por este ataque se refleja en su rostro al mismo tiempo que un reguero de sangre le recorre la barbilla.
Por detrás de todo esto Threkor recupera el equilibrio. Su agilidad es superior a la fuerza bruta del soldado de la garra esmeralda y no le cuesta mucho dar una certera punzada en el pecho del sectario. Este cae al suelo fulminado de forma inmediata. El elfo se acerca al resto de sus compañeros ya que sabe que los próximos segundos serán decisivos.
Alhandra reacciona con rapidez a pesar de todo lo que sucede a su alrededor. En estos delicados momentos sabe que una mala decisión puede significar el final para todos...Y son decisiones que deben tomarse en pocos segundos. De nuevo coloca su mano sobre la espalda de Raith y se concentra en su armadura. Debe olvidar los temblores y el tacto caliente de la sangre del guerrero si quiere concentrarse en una tarea que habitualmente le llevaría un tiempo del que no dispone. El esquema material de su armadura queda imbuido de una nueva propiedad, una resistencia extraordinaria a los ataques mundanos.
Para el guerrero esta situación no es nueva. En muchas ocasiones anteriores se ha encontrado al borde de la muerte, al borde ser asesinado por otros como él. Y en todas aquellas ocasiones ha creído que morir no era la peor de las situaciones. Pero siempre le ha enfurecido la idea de morir de rodillas. Hoy no piensa cambiar de opinión...
Contra todo pronóstico uno de sus pies se planta firme sobre el terreno y , como si de una marea lenta e incompasible se tratase, el guerrero se pone en pie una vez más. Los dos soldados apenas creen lo que ven. Incluso miran a sus manguales en un intento de comprender porqué aquel guerrero no está ya muerto. Desesperados aprovechan para atacarle una vez más cuando el guerrero se pone en pie. Pero ambos golpes chocan contra el escudo de ese al que llaman Raith; y su escudo es ahora una montaña sólida contra la que golpear es inútil.
Raith golpea de arriba a abajo a uno de ellos. Aunque el soldado intenta detener el golpe no puede evitar que sus brazos se rompan y que un profundo tajo aparezca desde la nariz hasta la boca del estómago...
El compañero del soldado grita a pleno pulmón. Sabe que su muerte está próxima y que morirá sirviendo a su orden. Y la mejor forma de servir a su orden es matando. Se revuelve como el animal herido que es y golpea con furia a Khala en la cadera. La exploradora siente un dolor inhumano como si la hubiesen partido por la mitad.
Esto aún no ha terminado.
Motivo: Ataque de Failin
Tirada: 1d20
Dificultad: 17+
Resultado: 8(+4)=12 (Fracaso)
Motivo: Confirmación crítico Threkor
Tirada: 1d20
Dificultad: 17+
Resultado: 2(+5)=7 (Fracaso)
Motivo: Ataques de oportunidad a Raith soldados 2 y 3
Tirada: 1d20
Dificultad: 20+
Resultado: 1(+3)=4 (Fracaso)
Motivo: Ataques de oportunidad a Raith soldados 2 y 3
Tirada: 1d20
Dificultad: 20+
Resultado: 6(+3)=9 (Fracaso)
Motivo: Edirel tirada D100 por moribundo
Tirada: 1d100
Dificultad: 10-
Resultado: 43 (Fracaso)
Motivo: Ataque A Khala
Tirada: 1d20
Dificultad: 16-
Resultado: 17(+3)=20 (Fracaso)
Motivo: daño a Khala
Tirada: 1d8
Resultado: 3(+1)=4
Khala, no pierdes el punto de acción del segundo ataque.
TURNO 4
SHANA 21 12/12
FAILIN 19 (7 de daño)
KHALA 15 21/25
THREKOR 10 11/17
ALHANDRA 6 17/17
RAITH 5 6/27
EDIREL 5 -2/20 ( moribundo)
ESQUELETO 1 ( destruido)
ESQUELETO 2 ( destruido)
ESQUELETO 3 ( destruido)
ESQUELETO 4 (destruido)
SOLDADO 1 ( muerto)
SOLDADO 2 ( 10 de daño)
SOLDADO 3 ( muerto)
SOLDADO 4 ( muerto)
Uno tras otro, nuestros adversarios son sometidos bajo los golpes de mis aguerridos compañeros. Solo uno de ellos es capaz todavía de presentar batalla pero está claro que sus fuerzas se encuentran tan mermadas que no durará mucho. Máxime cuando he convertido a Raith en un combatiente virtualmente invulnerable.
Por lo que a mí respecta el combate ha tocado ya a su fin aunque nuestro último enemigo no se haya dado cuenta todavía.
—Retírate, Failin —le pido al carretero—. Esto está ganado.
Su ayuda ha sido inestimable hasta el momento pero ahora solo nos falta un revés de la fortuna para que sufra un percance fatal y nos quedemos atrapados en este lugar de pesadilla.
Los enemigos se reducen como el trigo ante la hoz, un golpe más y todo habrá acabado, la espada doble sigue trazando molinetes en el aire para terminar con el guerrero, en el primer golpe por poco se me escapa de las manos, pero la furia por la torpeza hace que agarre con una fuerza aún mayor el arma y la hunda en el humano.
- Os debisteis ir cuando podíais malditos!
Motivo: Ataque 1
Tirada: 1d20
Resultado: 1(+5)=6
Motivo: Ataque 2
Tirada: 1d20
Resultado: 20(+5)=25
Motivo: Critico?
Tirada: 1d20
Resultado: 7(+5)=12
Motivo: Daño
Tirada: 1d8
Resultado: 4(+3)=7
Un 1 y un 20 la magia de los dados.
Khala descarta detener sus ataques por el dolor y arremete aún con más furia contra el soldado de la garra. Avanza sobre su derecha mientras que Raith avanza por su izquierda. El rápido movimiento descoloca la defensa del soldado que duda durante un segundo.
Esta distracción es aprovechada por Khala quien lanza dos rápidos tajos. El primero se pierde en el aire pero el segundo corta uno de los brazos del soldado. Este apenas nota más que un pinchazo. Intenta golpear con su mangual sin darse cuenta que ha caído al suelo con el resto de su extremidad. Raith lanza su tangat en un violento movimiento de siega paralelo al suelo. La cabeza del soldado cae por detrás del cuerpo del sectario de la garra...
Tardáis unos segundos en daros cuenta de que no quedan más enemigos a vuestro alrededor. Estáis convencidos que escuchasteis el galope de un caballo alejándose. Aún así no podéis evitar pensar que el vampiro pueda aparecer en cualquier momento de las sombras que os rodean.
Edirel está tirado en medio de un charco de sangre. Su cuerpo está irreconocible. Su cara y ropas están cubiertas de una gran cantidad de barro rojizo formado por una desagradable mezcla de sangre, polvo de las Tierras Enlutadas y fragmentos óseos de esqueleto.
-¡Voy a por el carro!- grita Failin aún con la daga en la mano y con el cuerpo tensionado.
Le veis alejarse unos pocos metros y contempláis como, a través de una marca corporal, consigue convocar el carro elemental de una pared rocosa cercana.
Motivo: Tirada Edirel
Tirada: 1d100
Dificultad: 10-
Resultado: 77 (Fracaso)
¡Fin de combate!
Edirel a -3.
Mi golpe arrebata la vida del último de los soldados, el enemigo ha caído, pero puede regresar y en el suelo incluso nosotros tenemos un hombre herido. Busco entre las ropas de nuestros atacante por si se diese el caso de que alguno de ellos portase algún tipo de ungüento curativo.
- Si alguien sabe de primeros auxilios que atienda a Edirél, no creo que aguante mucho mas.
Motivo: Buscar
Tirada: 1d20
Resultado: 17(+1)=18
Ahora salen los 17
Al ver caer al último enemigo, giro mi vista hacia el camino. Era inútil que lo intentara. El vámpiro y el resto del grupo estarían ya lejos y sería imposible atraparlos.
Ahora debíamos volver en seguida y planear el siguiente paso. Nos habían robado uno de los esquemas, pero lo más curioso de todo era la mención que habían hecho de un tercer esquema. Nosotros sólo teníamos dos, lo que quería decir que había un tercero. Era algo de lo que teníamos que informar, además de recibir información sobre el esquema de creación.
No nos quedemos por aquí. Seguramente no vuelvan, pero no podemos arriesgarnos.
Con dos golpes de espada termina todo, el humano cae despedazado en el suelo juntando su sangre con la de sus compañeros, mejor ellos que yo pienso, una vez que empiezas a combatir tienes que llegar hasta el final por duro que sea.
El vampiro ha huido por lo que parece, es nuestra oportunidad de salir corriendo de este maldito lugar y no volver, Failin se ha portado con mucha valentía, al contrario que Edirel que se ha dejado dominar por el miedo, pero sigue siendo mi compañero y no hay que permitir que muera.
- Shana aún te queda una poción? No me atrevo a tocar sus heridas, podría ser peor.
Raith registra a los que nos han atacado, puede que encontremos algo útil.
Motivo: Apoyo buscar
Tirada: 1d20
Resultado: 9
Pues no hay ayuda a buscar. Subida de nivel?
Por muy antipático que me resulte Edirél y por muchas que sean las ganas que tenga de orinarme en su cara destrozada en agradecimiento por el cubo de agua que me echó encima cuando íbamos a bordo de la nave de la Casa Lyrandar, dejarle aquí abandonado mientras se muere como un perro no parece muy ético.
Así pues, rebusco en el interior de la mochila de Elaydren y saco de ella una de las dos pociones curativas menores guardadas allí. La segunda que tenemos que gastar en Edirél. Menudo guardaespaldas... ha dado más problemas que satisfacciones al grupo. Estoy deseando que esto termine cuanto antes para poder regresar a Sharn y librarme de su compañía.
Motivo: Poción de "curar heridas leves"
Tirada: 1d8
Resultado: 4(+1)=5
Gasto una poción de "curar heridas leves" del fondo común, de las que nos dio Elaydren.
Alhandra vierte la preciada poción en los labios de Edirel mientras Raith rebusca entre los cuerpos de los soldados de la garra esmeralda. Los restos de los esqueletos no tienen nada de valor encima de sus andrajosas ropas, cosa de la que se alegra el guerrero.
Pero de los cuerpos de los que estaban vivos encuentra 50 monedas de plata, 32 de oro, cuatro cetros solares, cuatro ballestas y 78 virotes. Tres de los manguales siguen estando en condiciones. Al tocarlos los golpes doloridos de Raith parecen reavivarse en cuanto a la intensidad de su dolor.
Khala vigila los alrededores mientras Threkor analiza sus probabilidades de cazar al vampiro. Escasas...
Edirel abre los ojos... Os mira desde el suelo, mira su estoque roto por el golpe de Khala, y está punto de deciros algo.
-Yo...
Sus heridas siguen siendo graves y su estado de salud es terrible. Y, sin embargo, veis en sus ojos vidriosos una herida interior que parece ser mucho más grave que aquellas que sangran en el exterior.
- ¡Señores!-interrumpe Failin desde el pescante de su carro elemental-. Desconozco si a sus señorías les apetece estar ni aunque sea un segundo más en este lugar de pesadilla. Pero por lo que a mi respecta, y con los años que me quedan que son menos de los que ya han pasado, no pienso perder ni un segundo más aquí.- Su rostro ha recuperado la energía. Le veis sonreíros amigablemente con la voz temblorosa por la emoción-. Y esto tengo que deciros... Este viejo imbécil no cobra por llevar a unos buenos amigos...¡Subid!
Y por primera vez en varios días vosotros sonreís también.
Fin del capítulo.