Partida Rol por web

Shanna y Alhandra habían realizado un buen trabajo buscando información de como llegar a nuestro destino, en parte me alegraba de saber que el viaje mágico había quedado eliminado...el dinero no caía del cielo. Según entendía solo nos quedaban dos opciones o el rayocarril o en barco. 

- El problema del barco es el tiempo de partida y lo que nos pueda pasar durante la travesía. El rayocarril...son muchos días en una caravana tras dejar el tren, hay muchas posibilidades de sufrir percances. Yo voto por el barco.

La idea del barco no me terminaba de convencer... pero era mejor que el confiar en una magia extraña y cara, o el largo y tedioso camino en rayocarril y caravana.

-No me gusta pero creo que será mejor ir en galeón, que zarpará en tres días... más cuatro para llegar hace una semana entera... Tenemos tiempo para resolver temas pendientes y aprovisionarnos para este "viaje".

Yo también me decanto por el barco. Creo que tendremos un viaje más traquilo que tener que cruzar con una caravana.

Eso nos dejaba, si al final se decidía el viaje por mar, tres días para estar en la ciudad. Podríamos aprovechar para hacer compras para el viaje, pero después de la huida de Elaydren, no podíamos dejarnos ver demasiado por la ciudad. Era más que probable que se nos estuviera buscando, así que la mejor opción era permanecer ocultos hasta la fecha de embarque.

¿Comemos?

Bien, estaban todos de acuerdo, más o menos, en coger el barco siendo la opción más rápida para llegar a sus destinos. Eso sí, Khala estaba un poco decepcionada, y Édirel había aceptado a regañadientes. A ambos les parecía más divertida la aventura del viaje por ferrocarril y luego por tierra. A Shanna le parecía también un viaje más divertido, estaba de acuerdo con ellos en eso, pero la urgencia de la situación parecía más apremiante.

"Oh, vamos, mis leales escoltas, no pongáis esas caras tan largas." le dijo a Édirel y a Khala, sonriéndoles con cariño y rodeándolos a cada uno del cuello con los dos brazos. "Después de comer nos vamos de compras, nosotros tres. A que os compréis cosillas peligrosas y afiladas de mercenarios. ¡Yo pago! Bueno... yo os pago una parte. ^^U"

Finalmente decidís emprender vuestro viaje  por mar. En la casa Lyrandar sellan vuestros documentos y cartas de crédito oficializando, de esta forma, vuestro pasaje en el galeón EXHAUSTLESS.  

La discreción es vuestra seña de identidad en los días que quedan hasta que zarpe el galeón. No volvéis a tener noticias de la dama Elaydren ni parece que los incidentes en la Estación de correos o en el Yunque Roto hayan pasado a mayores. Al menos nadie os molesta con ese asunto.

Termináis de preparar vuestro equipo y de hacer aquellas compras que consideráis apropiadas para el momento. Sin embargo no podéis evitar mirar hacia atrás cada vez que abandonáis un establecimiento o al acortar por un callejón de la intrincada y vertical ciudad. No queréis convertiros en presa fácil de otro grupo de asesinos venidos de tierras lejanas o autóctonos de la Ciudad de las Torres. También mostráis la mayor de las prudencias con aquello que contáis o con las personas que os rodean en cada momento ya que tampoco estáis dispuestos a ser espiados.

Aunque no estáis muy seguros de haberlo conseguido...  

Máster, antes de irme en el galeón, Edirél aprovecharía para ir a mirar a ver si encontraba algún sitio donde vendieran armas (estoques). También antes de irse iría al Templo del culto de Llama de Plata a informar a Sir Edward Franelhood  y a su madre (Vanessa Bëlazar) de que el trabajo que ha tomado le va a llevar hasta esos lugares, y buscará consejo por si saben algo del lugar.