Partida Rol por web

Abro los ojos y le susurro a Haka:

- "No conozco a esos maestros Jedi, pero son poderosos en la Fuerza y no detecto corrupción en ellos..." -
 

 - Lo mismo digo... - Añado, con respecto a comentario de mi hermano Jedi. - ... De todas maneras, una explicación por la que no los conozcamos es que podrían ser Caballeros Imperiales.

Con cara de que no me gusta mucho el asunto, suspiro asintiendo al fin

Esta bien, ahora no podemos dejar de contestar sin más ya que no han venido hasta aquí para marcharse sin más.

Abro el comunicador para responder

Aquí Senesfra, les recibimos. Han llegado pronto. Siento no conocerles por sus nombres, forman parte de la orden jedi?.

Las voces responden a través de la radio de inmediato:

 - "Sefresna, acá el Maestro Deerman Oneero. Somos Caballeros Imperiales enviados por su Majestad, el Emperador Roan Fel para investigar una serie de transmisiones. Se recibió una hace varios días de parte de Gerry Langren en la que se pedía ayuda. Hace unas horas se captó otra de un Padawan de la Orden Jedi con asunto de máxima urgencia. Como deben saber, Orinda está en espacio Imperial y ambos mensajes nos permiten inferir que algo sucede y que la Orden Jedi está involucrada. La Orden Jedi no tiene jurisdicción en espacio Imperial nada más que para asuntos diplomáticos. Hemos sido enviados a investigar que sucede con la colonia. Estamos rastreando su posición en este momento y descenderemos pronto."

El canal sigue abierto.

 - Curioso, no hicieron nada ante la petición de ayuda, pero en cuando se enteraron de presencia Jedi, vinieron disparados... - Pensé, sarcástico, mientras escuchaba el mensaje.

Habia permanecido callada al lado de Haka sin entender muy bien porqué discutían, la ayuda de dos maestros jedi sería inestimable contra aquel sith. Sin embargo allí todo el mundo desconfiaba y no se equivocaban, resulta que los recién llegados eran caballeros Imperiales, protectores del Imperio que no tardarían en politizar los sucesos de Orinda si tomaban parte.

- Ahora la hemos hecho buena... - murmura ladeando la cabeza ligeramente.

Cierro la comunicación tras la despedida del maestro.

La idea de tener a los imperiales husmeando no me hace ninguna gracia. No hagamos ninguna referencia a nuestra misión ni al senado. Por desgracia ya es tarde para ocultar la involucracion de la orden jedi. Necesitamos una tapadera pero no seran faciles de engañar. Gaheris y Cobain acudisteis a la llamada de langren al encontrados no muy lejos y tratarse de un amigo personal pero no habéis sido enviados oficialmente por la orden, el resto pertenecemos a la colonia.

Si nombraste a los Sith no dejaran pasar el asunto fácilmente, apresuremonos a poner algo de normalidad en la colonia, que la gente reanude sus actividades de investigación y evitemos que esto parezca un campo de batalla.

Al escuchar hablar de Imperio, Rogboor gruñó amenazadoramente. A su mente regresó el recuerdo de las cadenas en sus muñecas, las palizas, la pérdida de sus compañeros y amigos... el ser tratado como poco más que una bestia. Nunca le había gustado que tras la derrota del antiguo Imperio, se hubiera permitido existir a un reducto que acabaría dando lugar al actual Imperio de Roan Fel. Si por él hubiera sido, el Imperio y todos sus allegados hubieran perecido de la más sucia y cruel de las maneras.

Y ahora, por cortesía de ese padawan metomentodo y respondón, dos Caballeros Imperiales iban a presentarse en Sefresna a asomar su hediondo hocico. El wookie desvió la mirada hacia el joven Gaheris, haciendo una mueca de desagrado, y tras ello gruñó en dirección a Haka:

- ¡Brruuarghhh wrruuuggrrrth! ¡Whrthhuuuurrgg maaargttu grruuuarg!*

Me siento apurado por el devenir de los acontecimientos. Es obvio que mi compañero de Orden ha cometido un grave error, pero de nada sirven ahora las recriminaciones.

Por otro lado, las órdenes de Haka no me agradan en absoluto. Me disgusta tener que mentir, es algo que siempre se me ha dado muy especialmente mal.

- Sería mejor decir que la llamada de socorro que recibieron de Sefresna no era tal, - explica dubitativa - sino un fragmento de transmisión en el que ofrecían ayuda a los jedi, que atacados por carroñeros espaciales, casi fueron destruidos. - continua diciendo mientras mira alrededor - Eso explicaría la nave siendo reparada y sacaría de la mesa la supuesta necesidad de ayuda por parte de la colonia. - suspira un instante tras coger aire - La segunda transmisión interceptada, la de Gaheris, era una comunicación con el templo Jedi, en la que explicaban el ataque sufrido, que estaban siendo ayudados aquí en Orinda y que cuando la nave fuese reparada volverían a retomar su misión de buscar actividad Sith en la galaxia... - se encoge de hombros levemente - Creo que con esta historia todos los cabos quedarían atados y los imperiales se marcharían contentos. - vuelve a mirar a todos - Lo que hace falta es que alguien con labia se lo venda, yo no soy buena mentirosa, así que seguro no me creerían...

 - No tienen que saber nada de los Sith, no los mencioné en abierto. Una vez que contacté con el templo, ellos establecieron una conexión segura y los Imperiales no pudieron escuchar el resto de nuestra conversación. La idea de Nina es buena, quitando la parte de nombrar a los Sith... - Respondí con tranquilidad, teniendo cuidado de que nuestra conversación no se oyese por la radio.

Escucho a nina pero mi rostro señala varias cosas que no acaban de encajar.No creo que sea posible engañarles de esa manera, que la colonia ha tenido problemas es evidente, la transmisión de Langren era clara y los cuerpos de los bichos se amontonan ahí fuera. La clave no esta en negar lo evidente sino en hacerles ver que la situación esta bajo control y su intervención no es necesaria.

La cuartada para los jedis que proponeis no aclara porque estaban por aquí, recordar que no tienen jurisdicción y no deberían estar aquí.

- "Al margen del hecho de que no deberíamos de estar aquí, y de que las repercusiones diplomáticas con el Imperio tal vez ya tengan difícil arreglo, hemos de considerar la opción de decirles la verdad y pedirles ayuda. Tienen una nave operativa y pueden establecer un efectivo bloqueo orbital en caso de que el último enemigo al que debemos afrontar trate de escapar." -

 - Una misión de exploración de entrenamiento, que se vio interrumpida por un ataque de merodeadores. Tuvimos que aterrizar en la colonia porque era el único sitio perteneciente a la Alianza más cercano... - Propuse tranquilamente.

 Luego escuché la propuesta de Cobaine y respondí:

 - No creo que el Sith se vaya con su misión sin terminar. Por lo que se de su orden, no se toma a bien los fracasos. Lo mejor es tratar de convencerles de que nuestra situación aquí es un acto involuntario y nos iremos en cuanto nuestra nave esté lista...

-No me gusta el imperio -dice Balael-. No me gustan sus agentes, ni su gobierno, ni su particular modo de ver las cosas. En especial su particular modo de ver las cosas. Preferiría no estar aquí cuando esos dos tipos aterricen.

- "Son más poderosos que nosotros en la Fuerza, Padawán Ordo. Quizá no sea sabio ni juicioso intentar siquiera engañarles o mentirles. Las mentiras son las herramientas del Lado Oscuro, y estos Caballeros Imperiales no están en ese lado de la Fuerza." -

Langren escucha la discusión y entiende lo compleja de la situación. Da una idea, aunque probablemente es la que todos han pensado pero nadie quiere mencionar:

 - "¿Y si les matamos? Ponemos los cuerpos en su nave y la hacemos estrellarse. Lo pintamos de accidente mecánico y para cuando manden a alguien de nuevo a investigar, ustedes habrán acabado con el que queda y se habrán ido. Nosotros nos encargaríamos del resto y de no dejar evidencias que comprometan a la Alianza y a la Orden Jedi."

La idea tampoco termina de gustarle pero la verdad es que pocas posibilidades más realistas tienen. Luego continúa:

 - "Les estamos totalmente agradecidos. Les debemos todo al Senado y a la Orden Jedi. No nos importa mancharnos un poco las manos por quienes lo han hecho por nosotros. Cuenten con nuestro apoyo para lo que sea que decidan hacer."

Luego se sienta un momento a descansar mientras sigue escuchando.

 - Así que, según tú, lo mejor es iniciar un conflicto diplomático entre la Alianza y el Impero, ¿no?. Sobre todo cuando los Sith están implicados... Por cierto, ¿la nave que derribamos no era de origen Imperial?. - Le pregunté, molesto, por su actitud. Desde luego parecía que este tipo necesitaba entrenar más y trabajar su personalidad, dada su actitud - ... Puede que no vengan a ayudarnos precisamente, si les han ordenado que no averigüemos la existencia de los Sith. Ante la duda, será más seguro para esta gente no contar lo que sabemos.

 Al escuchar la propuesta de Langren, negué con la cabeza:

 - No, no somos asesinos. Confiemos en que se crean nuestra historia, o al menos que no puedan demostrar otra versión que la que le damos.

- "Puedo guardar silencio ante un engaño, si es que el noble señor Bel-Iblis lo juzga estrictamente necesario e imprescindible para nuestra misión. No aceptaré ni toleraré una traición ni un asesinado despiadado." -

Miro con recta severidad a Langren.

Rogboor miraba a un lado y a otro escuchando las distintas ideas de los presentes. Por un instante, detuvo sus ojos en el joven Gaheris, que mostraba su indignación con las palabras de su compañero jedi. Iniciar un conflicto entre la Alianza y el Imperio... Curiosa acusación viniendo del responsable de la comunicación que había hecho aparecer a los perros del Emperador Roan Fel... Harto de tanta palabrería sin resultado, el wookie dio media vuelta y se dispuso a abandonar la habitación. Él no era el jefe de la misión ni un filósofo adorador de la Fuerza; cuando le pagaran más, tomaría él las decisiones.

Los Caballeros Imperiales bajarían a la superficie pasara lo que pasara, así que dejó a sus compañeros para que siguieran con su estéril diatriba, no sin antes despedirse de Balael con un suave y escéptico bramido.