Partida Rol por web

Zated asintió, no había tiempo que perder. 

El elevador estaba bloqueado arriba, pero había unas escaleras de mantenimiento que permitían subir. Aunque era una buena subida a pelo. Eso si los Jedis no hacian de las suyas, claro.

Finalmente, entre todos y ayudando sobre todo al técnico, el grupo logró llegar hasta arriba del todo. Una vez allí los Jedis usaron su llave maestra para hacer un agujero en el suelo del elevador y salir por allí.

Aparecieron en la sala donde habían derrotado al grupo de sith, de hecho estaban tal y como los habían dejado. Al fondo podían ver la salida que habían obviado la vez anterior. Pero en esta ocasión se dirigieron rápidamente hacia allí.

Al salir al exterior vieron que estaban en una de las plataformas altas. con algunos cuerpos de droides completamente destrozados. Como si les hubieran impactado con cañones pesados. De hecho a lo largo del camino, y en el fondo, había también más trozos de robots. De hecho en varios sitios podían ver como había lo que a todas luces eran impactos de misiles. Las torres antimisiles también estaban destruidas. Desde luego alguien se había estado divirtiendo.

Abajo de todo, en la plataforma de aterrizaje, había estacionada una nave. No tenía muy buena pinta, pero parecía recia.

Mi Neb contempló la fortaleza desde la parte de arriba. 

—Creo que esa es la nave de otros Sith. No sería mala idea romperla con unas cuantas granadas antes de irnos. Pero eso si es que podemos irnos. Porque me parece que necesitaríamos cruzar la montaña para llegar a la nuestra. 

En cuanto Mi-Neb dijo lo de escalar la montaña, Wann la miró y le flaquearon las piernas.

Yo...yo no sé si voy a poder lograrlo.

Se le veía preocupado nada más pensarlo. Y empezó a sudar nerviosamente.

¿Nos daría tiempo a hacerlo antes de que esto explotase?

Viéndose de nuevo al aire libre, el soldado tomó el comunicador para avisar al droide.

- R8, arranca y ven a buscarnos. Estamos en la base enemiga.

Tenía la tentación de llamarle "Rocho" que sonaba bastante a mascota. Rocho, no sonaba tan mal.

- Si nos vamos a pie los sith tomarán su nave y nos reventarán, lo digo porque ya tienen que estar en camino. O la asaltamos para alejarnos en ella o inutilizamos los motores desde fuera y nos vamos.

Mi-Neb tomó su comunicador. Pero Xostun se le había adelantado. 

—Hay otra solución, sí... y con la nave podemos inutilizar la otra. 

Con un poco de suerte... podrían escapar y destruir la otra nave. 

Xostun tenía la idea en la cabeza de hacer algo con la nave enemiga.

- No nos podemos esperar a que llegue R8, los sith podrían llegar antes. Pensad que pueden haber dejado un droide también en su nave y les puede avisar de que hemos salido. Lo mejor es tratar de acercarnos a inutilizarla, con eso perderán la opción de seguirnos o de interceptarnos.

—Piensa el mejor sitio para que aterrice nuestra nave, Xostum, o que no aterrice y se quede estable aquí arriba y subimos*. 

Dicho esto, Mi-Neb se concentró en la nave enemiga, por si sentía algo dentro, en particular algún peligro. 

Mientras el grupo bajaba con el ingeniero, Mi-Neb se concentró en la nave. Allí no había nadie, ni siquiera un droide de mantenimiento u otra cosa.
Así que cuando R8 aterrizó y entraron Xostum fue directamente a las torretas. Con el Jedi a los mandos salir de allí era pan comido, y una nave estática no se podía considerar ni siquiera un blanco para el zabrak. Un par de misiles bien puesto y adiós a aquella nave sith tan fea.
Zated dejó a Wann bien instalado, el cual volvió a agradecer que le rescataran, y fue a la cabina. Todavía tenían que salir del planeta.

Mientras se elevaban pudieron ver la explosión de las instalaciones. Al final habían sido unos minutos más de lo que había dicho el Sith, pero no había mentido con lo de los explosivos. A todas luces Krill habría escapado, y ambos jedis estaban convencidos de que se volverían a encontrar en un futuro. Pero cuando exactamente no podían saberlo.

Una vez fuera del planeta Mi-Neb tuvo que volver a demostrar su buen hacer a los mandos, pues la guerra en el espacio seguía. Pero entre él y R8 lograron maniobrar lo suficientemente bien y saltar al hiperespacio rumbo a territorio de la Republica.

Dias después llegaron a una estación militar donde se encontraba el comandante que había estado asignandoles misiones, junto con la maestra de Zated. Lian Wann fue llevado a unas dependecias con vigilancia, pues tenían que hacerle bastantes preguntas sobre lo que había estado construyendo para el Imperio Sith. Sin duda no sería nada bueno para ellos.

Pero eso ya sería otra historia.

¿Fin?