Partida Rol por web

La nave cortó la fina atmósfera del planeta Kuvoth, a toda velocidad, y sus costados se incendiaron por la fricción. Dentro de la cabina, nada cambió, pero la tensión aún se palpaba. Si lograban aterrizar y ponerse a salvo, tendrían menos que temer. Doce Jedi en tierra firme serían un rival formidable para cualquiera, y seguro que no se atreverían a seguir con el ataque.

Pero justo en el momento en que varios padawan llegaban a esta conclusión, notaron una sacudida muy fuerte y la nave escoró violentamente a babor.

- ¡Cuida...! -se oyó gritar a alguien, y después estallaron varios instrumentos a bordo de la cabina. Las alarmas comenzaron a gemir, mientras todos podían ver cómo el cielo adquiría un tono marronáceo a través del cristal reforzado, y la orografía del planeta aumentaba de tamaño con rapidez.

Caían en barrena hacia la superficie, y habían perdido el control. Cada segundo pareció transcurrir como si fuera una década, y lo saborearon mientras sus cortas vidas pasaban frente a sus ojos. Con un esfuerzo desesperado, y sin duda recurriendo a la Fuerza, la maestra Pallan'dari tiró de los mandos de la nave y enderezó a duras penas el morro... pero demasiado tarde. Los padawan pudieron ver durante una fracción de segundo cómo la nave dejaba atrás montañas y colinas, dirigiéndose hacia un valle de arena. Después...

¡¡¡CRASH!!!

Todos notaron la sacudida más violenta que pudieran haber imaginado, vieron un destello blanco mientras sentían cómo los cinturones de seguridad les oprimían el pecho hasta el punto de casi romperles las costillas. Luego, todo se volvió negro y ya no notaron nada más...