Partida Rol por web

-Joder, hola chica. Respondió un tanto de imprevisto ante aquel saludo. Ya más calmado le hizo gracia la actitud tímida de la niña que se había presentado al grupo. - Estaba distraído, que susto...

Levantó la mano para llamar la atención de la maid. -Yo tomaré una cerveza bien fría.

Observó a los nuevos un rato y aunque eran peculiares podían ayudar al grupo. Aun así seguía pensando que sin un guerrero o dos que aguanten golpes no llegarán muy lejos. 'Vamos a acabar violados queramos o no, puto juego parece que solo quiere rompernos el culo'. Se quedó pensativo mientras seguían hablando y explicando que habían hecho el primer día. Tenía ganas de enfrentarse al nuevo jefe, quería ver como era y que les tenia preparado. Era simplemente curiosidad por saber. 

La conversación sobre Suzume lo sacó un poco de sus pensamientos y sonrío al oír el comentario de Luka sobre como debía dormir por la noche. -Que imaginación Luka. Ríe. Bueno, lo mio no fue tan peligroso como lo de Suzume. Me encontré con dos goblins con ganas de pegarme con sus porras, de carne y venas, en la cara y corrí como una nena hasta el poblado. Si, me cagué vivo. Pero...joder parecían tan reales... y peligrosos, que preferí volver a ver que estaba pasando. 

Sonreía al recordar sus primeros momentos en el juego y como había huido espantado, mientras escuchaba a los demás.

Razor intentó ampliar un poco la explicación, algo "fogosa" por cierto, de su compañera. -Bueno, cierto es que nuestro grupo está compuesto sólo por clases de combate a distancia, pero justamente esa cualidad es la que nos permitió eliminar a las amenazas más pequeñas del mapa antes de que estas nos dieran alcance, además nuestro reducido número nos permitió ser bastante versátiles a la hora de escabullirnos y evitar enemigos mayores. Recuerda que al no tratarse de una misión per se, no teníamos la obligación de eliminar a ningún mob, al menos claro, volteó sonreído en dirección a Rebeca que así lo quisiera alguno de nuestros miembros, o que estos estuviesen estorbando activamente en nuestra exploración del mapa.- Suspiró antes de continuar. -Aunque me temo que lo de mañana será algo completamente diferente. Sólo espero que los de arriba nos puedan dar alguna información útil antes de enfrentar al Jefe.- Concluyó para llevarse algo de bebida a la boca y escuchar las nuevas interacciones del grupo, mostrándose especialmente interesado por las cualidades raciales de Suzume.

-Suzume, ¿cierto?- Se dirigió a la chica alada. -Tal vez podrías resolver mi curiosidad, ¿Qué tal alto y por cuento tiempo te permiten volar esas alas?- Mantenía aquella sonrisa suya ya tan característica.

Seguía roja a pesar de ser aceptada en el grupo, las palabras de animo de mis compañeros me alegraban muchísimo y me empezaba a sentir aceptada; quizá había encontrado por fin un grupo con el que vivir dentro de este mundo.

Hice caso a Luka y me senté -Con permiso...- dije bajito adoptando una postura encogida, con las piernas juntas y las manos sobre la falda. 

Escuche la conversación sobre la viabilidad de una ausencia de tank "creo que un grupo que cojan el aggro los personajes con mas agilidad si consiguen esquivar la mayoría de golpes y se apartan las alimañas de los healers podemos avanzar de forma segura" eso era lo que pensaba pero no me salia decirlo así que me quede en silencio hasta que Suzume abrió sus alas y esparció un polvo brillante; en ese momento me puse en pie tan rápidamente que tire la silla al suelo, mira con ojos de completa admiración a aquel Ángel y grite: KAWAII!!!! >.<

-P..p...por supuesto señores clientes... Dijo avergonzada mientras se inclinaba levemente y se marchaba durante unos instantes, seguidamente volvió con una gran bandeja, si fuera un mundo real estabais seguros de que se caería pero no lo haria en este. Fue colocando las bebidas encima de la mesa y con la bandeja apoyada en su pecho se dirigió a Rebeca. -Lo lamento mucho señorita pero...aquí no servimos nada de comer solo bebida y servicios... Informo antes de volverse a inclinar y dirigirse a Rei.

-Podría recostarse un poco en el asiento por favor? Enseguida le hago un masaje.

Parecía que todos se habían animado a contar sus propias experiencias cuando descubrieron que el juego había cambiado, lo cual llevó a Rei a recordar la suya propia. -Yo me encontraba algo alejada de la ciudad cuando aparecieron los goblins; en un principio pensé que se trataba de algún enemigo especial o evento hasta que vi que usaban como arma. Por suerte mi stat de defensa no era demasiado bajo así que pude encargarme de los dos que encontré, pero preferí volver a la ciudad antes de que las cosas se pusiesen demasiado feas. -Dijo tras esperar que el resto contasen las suyas propias.

-Supongo que no habrá problema, aunque ver que he quedado como la única con armas cuerpo a cuerpo no es muy alentador... -Contestó a Suzume antes de que la maid volviese una vez más con las bebidas que habían pedido, recostándose tal y como Ririn pedía aunque en su mente estaba rezando por que no sucediese ninguna cosa extraña ante aquella petición.

Rebeca agarro a la maid cuando volvio excusandose por no servir comida. La sento de sopeton antes de que pudiera marchar a hacerle el masaje a Rei y agarro sus pechos desde atras.

- Ñick ñick ñick! -dice masajeandola con fruicion- El cliente siempre tiene la razon... supongo que me compensaras por ello...

La sirvienta enrojecida timidamente se retorcia sobre ella y tras unos segundos la suelta. Se relame mirandola y le hace un gesto para que siga hacia Rei, hacia la cual se gira.

- Tranquila... nos encargaremos de que solo tengas que dar el toque final.

La exclamación de Ruri le tomó por sorpresa e hizo que se sonrojara. Aunque no estaba acostumbrada a recibir atención, y mucho menos de ese modo, la chica parecía agradable, por lo que le sonrió afable. 

No te sientas mal, Kydu, creo que todos aquí huimos la primera vez... bueno, excepto Rei, ella es mas fuerte que nosotros y puede cuidarse sola, jajaja. La pregunta de Razor la dejó pensativa, se enderezó en el aire y tomó la postura de estar sentada, con las piernas cruzadas y la mano en el mentón.

Ha decir verdad, no lo sé. Llevo desde la mañana volando y no me siento cansada, ni se reduce mi nivel de mana. Sin embargo, nunca volé mas allá de unos 2 o 3 metros. Ciertamente, no sabría cual es el límite, si es que lo hay. No sé si tenga una utilidad real, pero a mi me resulta muy agradable poder volar todo el tiempo. 

En el momento en que Rebeca se puso a Ririn en su regazo para tocarle los pechos, noto que no es que no tuviera, si no que eran muy pequeños. De hecho eran mas unos pectorales redondeados o los que llevaría una niña en desarrollo pero nada parecido a un pecho de mujer adulta. -Lo...siento mucho señora clienta... Dijo Ririn con un ligero sonrojo, los labios entreabiertos jadeando solo con el roce de la ropa sobre su piel antes de levantarse, se podía ver como parte de la falda estaba un poco levantada, llevándose una mano y bajándola suavemente. -P..pero no puede tocarnos si no es para...pedir un servicio...esta prohibido tomarnos de esta manera...asi que si puede no vuelva a hacer eso señora clienta...Si me disculpa...

Se coloco detrás de Rei aun de lo mas sonrojada, apoyando sus manos sobre sus hombros, apoyando su "pecho" en tu cabello mientras sus manos empezaban a moverse. La chica no lo hacia nada mal, sabia donde hacer presión y donde no para relajarte. Conforme iban pasando los segundos, el cansancio abandonaba tu espalda y veíais de tanto en tanto como las manos de la maid tenían ciertas interferencias, como si quisiera hacer algo mas pero por la petición que le había dado Rei no pudiera.

Mientras todos seguían hablando no pude evitar gastar un pequeña broma a Suzume. Saque un cordoncito y comencé a atar la pierna de Suzume suavemente a la silla que tenía debajo. Ala, por si acaso Suzume. Dije esbozando una sonrisa traviesa.

Luego cuando Rebecca agarró a la Maid y se descubrió que era un chico no pude evitar recordar la situación anterior con Rei. Otra vez igual Rei, ¿estás cómoda así? Dije preocupado por ella. Lo que me extraña es que no haya ni una mujer por aqui....Ririn, ¿Todas las camareras son como tu?

No podía dejar de observar a Ruri, era tan monosa y a la vez tan cantosa que cuando gritó Kawai no pude evitar reírme. 

Bueno Kydu, yo también salí por patas, no quería descubrir por mi mismo que es lo que había pasado y la mejor opción era correr hacia aquí. Luego mire hacia al grupo. Y creo que fue la mejor opción claramente.

Me quede un momento pensativo antes de preguntarles a los otros. ¿Que creéis que estará pasando en el mundo real? ¿Pasará el tiempo allí igual de deprisa que aquí? ¿Tendremos un tiempo límite? Sabía que estábamos de celebraciones pero no podía dejar de pensar en ello. 

Razor sólo reía al ver las divertidas interacciones entre el grupo. -Esta Ru-chan no cambia.- Susurró entre risas al escuchar el gran "Kawaii!!" de la pequeña, para luego voltear y percatarse de las nuevas perversiones de Rebeca. -Y tú tampoco, ¿verdad?- También rió, pero con una pizca de resignación en su mirada.

Continúo entonces su conversación con la chica alada. -Sería un desbalanceo del juego si tu habilidad de movimiento racial te diera ventajas sobre las otras razas, pero con todos los cambios que sufrió el código no lo descartaría. No estaría de mas si comprobarás tus "capacidades voladoras" en algún momento. Sólo por estar seguros.- Hizo una pequeña pausa para luego añadir. -Pero bueno, creo que me estoy poniendo muy serio ya, y estamos aquí para celebrar y relajarnos.- Con pícara sonrisa buscó a los músicos del lugar con intención de dirigirse hacia ellos.

-Que quiere decir con que son todas como yo? Se refiere a chicos? Si, en el primer piso somos todos chicos con aspecto de chica. Confirmo Ririn acabando de darle el masaje a Rei antes de hacer una leve inclinación y marcharse a atender otras mesas. -Si no necesitan nada mas, entonces iré a atender otras mesas.