Partida Rol por web

Tenían razón las estrellas.

Capítulo tres: Papeles.

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23/03/2013, 17:39
Director

Por fin Facundo se lleva a Martín o a la inversa al interior del comedor. Quedáis afuera  la luz de un sol que corre hacia el horizonte, sin ya ningún operario de la finca que pueda estorbar o espiar vuestros movimientos.

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14/04/2013, 12:43
Director

Notas de juego

¿Y bien? :P

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14/04/2013, 16:25
Josep Gallofré

Bueno, antes al revisar los exteriores. Encontré una puerta muy disimulada. Que llevaba a un cuarto de herramientas. A su vez estaba conectada con una habitación llena de legajos.

No tuve ni tiempo ni luz para revisarlo todo. Pero creo que había información útil sobre la finca. Sus dueños, y quizás las cosas que sin duda han venido pasando.

El gallego va andando rápido mientras da un discurso en un volumen de voz muy flojo.  Casi cuesta escuchar lo que está diciendo por los dos hombres que lo siguen.

En un momento dado, da varios pasos hacia atrás, como si volviera sobre si mismo, y se para frente a una puerta.

Tras un rápido vistazo. La abre y os increpa a entrar en ella rápidamente con movimientos de los brazos.

Notas de juego

Ya estoy de vuelta en casa. Ale hoop

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19/04/2013, 09:55
Director

Habéis atravesado el pasillo entre los edificios hasta llegar a la entrada a los apartamentos, en cuya recepción hay un mostrador y, tras él, una puerta. Esta es la que Josep quiere abrir, pero ¡vaya! Ahora está cerrada. El dueño no ha podido ser, ha estado comiendo con vosotros...

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19/04/2013, 13:14
Josep Gallofré

Que extraño. Hace un rato estaba abierta. Bueno, pues habrá que entrar, por .- Hace una pausa dramática nada dramática-. la puerta secreta del jardín.

Así que nuevamente encabeza la comitiva de camino a la “puerta secreta”. Que verdaderamente es todo menos eso. Pero que suena mucho mejor si se la llama así.

Lo que esta claro es que es el que mejor a aprovechado el tiempo desde que habían llegado. Pues ya tenia pistas que seguir. O no.

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20/04/2013, 16:37
Ernesto Crocce

La cara de Ernesto no reflejaba más que seriedad. Si tenía algún pensamiento particular sobre la particular incursión en la que el catalán paranormal parecía haber incurrido, y a la cual ahora mismo los estaba alentando, se lo guardó para sí. Miró la puerta y los intentos de Josep por abrirla, que redundaron en la nada, y después cómo hablaba de una puerta secreta y no se sabía bien qué otras cosas. El hombro le dolió, aquel dolor punzante de la vieja herida de cicatriz demasiado reciente. No, no le gustaba en absoluto pensar en traspasar el marco hacia un infierno bajo tierra, como lo había hecho en aquel puto pueblo perdido de España, como le habían obligado a hacer en algún puto lugar de Argentina cuando lo habían secuestrado.

Pero menos le gustaba dejar que ellos se metieran de cabeza a la barbarie, sin estar ahí. Por lo que sólo pronunció unas palabras determinantes.

Mostranos, a ver.

Y lo siguió hacia donde los llevase, mirando de reojo que Camestres los siguiera. Sólo faltaba que lo perdieran.

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27/04/2013, 22:46
Director

Josep os lleva tras de los edificios de viviendas, a un jardín con piscina que muestra una vista estupenda de las montañas y de unas cuadras alejdas del resto del complejo residencial. Y ahí, cerca de la piscina y tras de unos arbustos, de tal manera que no sea fácil de observar a plena luz del día y menos aún ahora que el sol es más mortecino, hay un rastro, un sendero que va pegado a la pared. Siguiéndolo, llegáis a una ventana no sólo cerrada, sino pintados postigos e incluso cristal del mismo color que la piedra del edificio: sin duda pretendiendo camuflarla. La pintura os impide ver qué hay dentro.

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28/04/2013, 12:36
Josep Gallofré

Bien, hemos llegado. Sin duda, estamos ante algo importante. Pero habrá que usar todo nuestro ingenio para llegar a la verdad.

El gallego intento volver a pasar como la primera vez. Como si el ya haber pasado por allí le otorgara algún derecho a hacer las cosas primero.

Pero estaba animado. No solo había hallado algo el primero, sino que seguramente fuera algo increíble, que mereciera la pena.

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04/05/2013, 21:54
Ernesto Crocce

La cara de Ernesto se mantuvo en su lugar, como la piedra del edificio y la simulada de la ventana que habían terminado alcanzando. Aún así, era imposible dudar que lo que a Josep le parecía la ventana hacia el paraíso, a Ernesto le resultaba la puerta abierta a una fuente inagotable de problemas. El redactor se mantuvo hierático, no, frunciendo el ceño durante un largo rato evaluando la abertura que evidentemente nadie quería que se encontrase, y la reacción del catalán paranormal, posiblemente sopesando los pros y los contras de sacarlo del forro del orto antes que hiciera una verdadera violación a la propiedad privada.

Sin embargo, al final, no intentó detenerlo. Sólo habló, mientras buscaba la linterna y comprobaba que funcionase.

Y después de esta ventana, ¿qué hay? ¿Ya entraste por acá?

Notas de juego

No llego a entender bien a través de qué está intentando pasar Josep. ¿Es la propia ventana, o qué es?

En todo caso, si Josep llega a pasar, Ernesto lo va a seguir, con cuidado de que Camestres también lo haga.

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04/05/2013, 22:05
Josep Gallofré

Si, ya antes pase por aquí. Es como un cuarto de herramientas. Pero tiene acceso al lugar donde se guardan todos los documentos importantes del lugar.

Y sin duda, donde están las respuestas a lo que está pasando aquí fuera.

Y así de lapidario sonó el catalán, cuando explico lo que había al otro lado, seguramente no hubiera una mierda de interés, pero sin embargo, él lo veía como si dentro estuviera la panacea.

Notas de juego

Ya me diran si entro ahora, o tambien esta bloqueado el paso

 

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08/05/2013, 22:36
Director

Abrís la ventana y uno por uno vais pasando al otro lado, entrando en un lugar oscuro como la pez, acentuado por las ramas de vegetación de fuera que impiden que entre suficiente luz.

Las estanterías abarrotan esta habitación que os muestra la luz de la linterna. Son estanterías recias, viejas, donde se amontonan velas, botes de pintura, cajas de cartón llenas de papel de periódicos atrasados, herramientas de jardinería viejas y algunas cajas más en el suelo llenas de ramitas de arbusto. Una sola puerta estrecha permite abandonar este lugar hacia el interior del edificio. El olor es una mezcolanza que parece concordar pero no es fácil de agrupar en una respuesta. Cera. Pintura. Hierba seca. Papel. Humedad. Óxido.

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12/05/2013, 22:41
Ernesto Crocce

Ernesto frunció el entrecejo. Aquellos olores no le traían buenos recuerdos, ni había modo humano de que pasaran por sus sentidos sin que los recuerdos se gatillasen en su mente como una ametralladora descontrolada. Sobre todo, ese. El óxido. Y la humedad. Y con la humedad, la sombra, y con ella la oscuridad, y el no saber sí día o noche, el olor a electricidad y la suciedad. Todas las cicatrices dolieron acompasadas a un mismo estímulo, y tuvo que quedarse en el marco, no, en el marco, sí, poniendo en orden su cabeza antes de poner un pie más en lo que podría haber sido su celda.

- Esto parece el taller de alguien - ofreció, por decir algo, a pesar de que seguía serio como una estaca - Aunque seguro es fácil darse cuenta. A ver los diarios.

Había encendido la linterna, e iluminaba con ella los alrededores, buscando rastros de vida humana. Por dentro, los olores seguían socavando su fuerza y ellos, siempre ellos, seguían gritando por siempre y nunca en su memoria. Fue a la pila de diarios y se fijó, luego, si tenían algún patrón que indicase alguna lectura sesgada, digna de un humano y no un depósito.

- Tiradas (2)

Notas de juego

Ernesto primero busca rastros humanos, que denoten la presencia habitual o no en los indicios del entorno. Detalles, esas cosas fuera de lugar en un mero lugar como un depósito. Luego registra los diarios, por sí le dicen algo.

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16/05/2013, 09:22
Director

En efecto, el suelo tiene pisadas y frecuentes, el lugar se usa a menudo pero no permanece limpio precismente por los materiales que almacena y los trabajos que se deben hacer aquí. Las pisadas muestran zapatos de hombre, pero de un par de estilos, uno de ellos mucho más abundante.

Los periódicos Ernesto los desecha rápido, son antiguos y las noticias, locales, no parecen aludir a nada de lo que pudiera interesaros, al menos con los datos que tenéis hasta ahora.

Entonces escucháis un crugido. Pasos, son pasos sobre vosotros, en el piso justo superior del edificio.

- Tiradas (2)

Notas de juego

Una tirada de Percepción con Arquitectura os permitiría saber qué hay justo encima, además de lo que queráis hacer el resto mientras Ernesto registraba.

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19/05/2013, 05:49
Raúl Camestres
Sólo para el director

Notas de juego

Ya ni me acuerdo como era el sistema, pero Camestres hará dos cosas (que describo en el orden en que tuvieron lugar):

1. Ojear los diarios que desecha Ernesto en busca de noticias que le llamen la atención. Esto no tiene que ver necesariamente con el objetivo del equipo en Bariloche, sino más bien todo lo contrario. Pueden ser hechos bizarros, novedades completamente intrascendentes de la zona, el horóscopo (Camestres es Libra) o hasta las tiras cómicas.

2. Cuando se produce el ruido, permanece quieto y atento a lo que ocurre.

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20/05/2013, 00:02
Ernesto Crocce
Sólo para el director
- Tiradas (1)

Notas de juego

No tengo arquitectura, así que tiro sin ella.

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20/05/2013, 23:34
Josep Gallofré

En cuanto siente los ruidos de pisadas sobre él, se teme lo peor, la parca ha venido a buscarlos, pero tras volver a meter el corazón dentro del pecho, escucha atentamente.

No, aquello no era del más allá, todo lo contrario, era del más acá. Y no debía de haber nadie sobre sus cabezas, no ahora. Todo aquello era muy…

Se centro tenía que saber que tenia encima, y porque había alguien allí. Aun no habían llegado a lo gordo de su investigación.

- Tiradas (1)
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01/06/2013, 14:20
Director

Ah, sí, justo encima, deducís, están las habitaciones, en concreto las de vuestro equipo, así que deben ser los compañeros, ya regresados del almuerzo, que se estén aseando o descansando.

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01/06/2013, 14:22
Director

Bueno, pues hay algo muy curioso en los periódicos, la verdad. Dando un repaso casi aleatorio, como solo Camestres sabe hacer, encuentra que determinados anuncios han sido recortados en los diarios. Todos ellos, anuncios de contactos. No, nada de prostitución o relax, sino contactos románticos o quizá arreglos para obtener la nacionalidad: "Señora venezolana, 32, cariñosa, busca caballero, preferentemente argentino, para relación estable"; etc. Los recortes faltan, por lo que es imposible saber qué ofrecían exactamente, pero ahí están.

Cargando editor
02/06/2013, 00:15
Ernesto Crocce

- Mirá vos - dijo Ernesto, mirando todavía al techo en la posición en la que se había congelado - Parece que estamos abajo de las habitaciones. Lo cual es... interesante.

O no, quizás sólo el hecho de estar encerrado, con el olor a humedad, a polvo y a óxido, le estaba levantando en la mente fantasmas viejos de un pasado que no quedaba nunca atrás. Dejó el diario que tenía en la mano en el mismo lugar del cual lo había sacado, y miró a Josep.

Se nota que es un lugar al que alguien viene asiduamente. O dos personas. Fijate que las pisadas son todas grandes, pero de zapatos diferentes - señaló, apuntando con un dedo al piso - Mi teoría, acá seguro entra mucho el flaco este que acabamos de conocer, y quizás también Andrés de tanto en tanto. Lo que me llama la atención es que almacenen tanto diario viejo. Es claro que debe haber algo que hile todos estos, pero yo no lo veo - frunció las cejas, y terminó mirando a su alrededor - A ver. Decías algo de los documentos importantes del lugar, pero, ¿dónde? Me imagino que no te referías a esto.

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07/06/2013, 21:51
Josep Gallofré

Durante unos segundos que fueron eternos, los ojos del especialista miraron sin ver al hombre que le hablaba.

Si, si.

Se apuro a decir.

Claro que hay algo mas, tras esta puerta, hay un lugar con todo tipo de documentos de empresa, seguro que aquí podemos encontrar los motivos de que nos hayan mandado traer.

El ya sabía que pasaba, lo sabia dentro de su alma, mas allá de cualquier pensamiento racional. Pero aun tenían que descubrirlo el resto. Poco a poco.

Vamos.

Y tras esto, el viejo catalán abre otra puerta, que lleva hasta una nueva dependencia.

Notas de juego

Me des ubique, y mira que he tardado en contestar. Sorry.