Partida Rol por web

Podremos mirar en la cocina,alguien estará preparando la cena y nos podrán informar y con un suabe contoneo de caderas me dirijo hacia allí. Este tiempo de descanso me ha venido fenomenal, he podido dormir algo despues del baño y mi cuerpo vuelve a estar vivo.

Diego entrecierra los ojos extrañado al interpretar que el brillo podía proceder de unos prismáticos, le recorre un escalofrió por la espalda. Apoyo la cámara sobre su hombro y usa el zoom hacia el brillo para ver si puedo ver algo mas claro.

La ducha y la siesta habían hecho maravillas. Casi se me había olvidado el hecho de que estábamos en medio de ninguna parte, para rodar algo que no tuviese nada que ver con lo que se suponía que íbamos a hacer.

Mientras pienso esto, es como me reúno con el resto de la gente con dos dedos de frente, y que decidió ir a descansar.

Pero es cuando Ernesto comenta lo que le dijo su contacto sobre este sitio, cuando digo—. Espera... ¿Qué es eso de que asustan a la gente? Yo sólo había oído que decían que esto estaba embrujado o algo así, pero no que se dedicasen a asustar a la gente.

- Pues... es lo que me dijo el ayudante ese. Como se llamaba... Jorge? - tras una pausa para pensarlo Facu continua - Nos dijo que "era lo que debían contarle a los clientes", pero que en realidad eran boludeces. Que las contaban para mantener interesados a los clientes pero que en realidad eran mentira - agrega antes de mirar con curiosidad a Kike - Pero... a que viene esto, si tu estabas allí? - completa tratando de entender porque el extravagante vestuarista aparenta haberse olvidado de lo que oyo

Tus pasos te llevan primero al edificio de los alojamientos, donde más probable es que te encuentres con las visitas. En efecto, suenan voces del interior, de la recepción, donde tienen una improvisada reunión...

Por desgracia, el zoom no te permite ver tan lejos como para distinguir rostros, pero sí confirmar que se trata de dos personas, ¿un hombre y una mujer? Permanecen en esa posición un par de minutos más y se vuelven hacia atrás, marchándose por el lado posterior de la cresta montañosa desde la que vigilaban.

—Ah sí, es cierto. Parece que aún no me he despertado del todo de la siesta —respondo a Facundo, tras refrescarme la memoria—. Entonces, vamos a ver qué hace el resto. Tenemos trabajo aquí...

En efecto, son ellos. Algo estan hablando de fenomenos extraños pero que en realidad son una boludez, un invento para turistas... algo asi, no se les escucha muy bien.

Entonces la puerta se abre y salen a la calle. Justo te da tiempo a hacerte a un lado para evitar que parezca que estabas espiando.

Al salir a la calle siguiendo a Alica, os encontrais alli con Martin, el emplado de la finca. Parece que se dirigia precisamente a este edificio.

-Ah, Buenas tardes! ¿Han podido descansar algo? Iba a ver si necesitan alguna cosa, si todo está en orden en sus piezas.

Risueño y alegre, oliendo a jabón y a agua de colonia fresca, Martín parecía más un joven atleta de vacaciones que un empleado cumpliendo con sus obligaciones.

- Todo bien - contesta Facu con soltura antes de entrecerrar los ojos y comentar - Viene bien tener a un local, con nosotros. Justo estábamos hablando de las historias de fantasmas. Jorge nos comentó que eran, mas que nada, exageraciones... espero que sea así. Todos sabemos que los fantasmas no existen, pero... - el locutor deja la frase en el aire, esperando ver la reacción de Martín ante su comentario

Desde donde estás, puedes ver también que tus compañeros han salido del edificio de los dormitorios, al menos algunos de ellos y están hablando con alguien, crees que podría ser Martín.

Al ver que se retiran de repente

-Mmmmm haca pasa algo... la pregunta es, ¿le meto paranoia a Ernesto o me hago el boludo? Mejor me voy a hacer el boludo por lo que me consta pueden ser dos ornitologíos

Al ver gente conocida a la lejanía me pongo en caminos hacia ellos

-¡Jajajaja! ¡Historias de fantasmas, qué boludez...!

Martín había soltado la carcajada con toda su simple sinceridad, y potencia. Pero se frenó cuando vio que Facundo estaba hablando en serio.

Debí suponer que el tipo no podía marcarse una joda...

-Er... no, señores, nunca escuché nada de fantasmas acá. Bueeeeno, hubo alguna queeeja, ya sabés, Facundo, gente que escucha algún ruido raro y ya salen con que ven fantasmas arrastrando cadenas. Jeje. Y escuché algo de un delito, o algo así, pero de eso sí que no sé nada más, sólo que corrió el rumor. Aunque yo llevo poco tiempo trabajando acá, algo se me puede haber pasado.

- Así que poco tiempo... debimos haberlo supuesto. - comenta el locutor, meneando la cabeza y aparentemente desentendiéndose de su interlocutor. Por un momento parece que va a agregar algo más respecto a su observación, pero finalmente decide cambiar de tema

- Tenés idea donde anda Ernesto? Deberíamos empezar a organizar la filmación y las decisiones las tiene que tomar el... para eso le pagan como Jefe - se explica - Quizás alguna escena "disfrutando" las habitaciones, o comiendo... o caminando por los jardines. Aunque quizas para eso mejor que lo hagamos de día. Lo unico que nos falta es tropezarnos con algo, jeje -

—Sí, son ideas fantásticas, Facundo. Pero yo no estoy tan seguro de lo del día. Al fin y al cabo, cuando se descansa es por la noche... Bueno, o no. Creo que deberíamos de rodarlo todo de día o de noche. Sí, comienzo a visualizarlo... —comento al locutor tras su último comentario.

Tras esto, añado—. No obstante, para eso necesitamos al resto. Venga, vamos a buscarles...

Chicos, dejaros de fantasmas y busquemos al resto del equipo como dice Kike-y volviendo la vista a Martín- ¿Sabes por un casual donde está el jefe?- y dejo que el flequillo me caiga sobre el rostro dandole un aire de misterio que espero le guste.