Resolución Turno 219
¡Ástomer! Loado sea Beorn. ¿Y los demás? ¿Necesitáis ayuda? Soy Drustan. Aún invisible.
La voz surgió del aire en el caballo que tenía las riendas sujetas en el aire.
Ástomer y Elhoram podían verse subidos en sus caballos. Quedaban dos jumentos sin jinete por lo que uno de ellos debía llevar dos personas.
Los ruidos de batalla habían desaparecido sustituidos por gritos aislados. A parte de ello sólo faltaba esperar.
Drustan: A partir de ahora escribe por aquí.
Recuperasteis 5 caballos al final, ¿no? Si me he equivocado avisadme para corregirlo.
Recordad destinatarios. No pongais a Zigur
Resolución Turno 219
El erudito calló sus gritos y se desplazó lo que pudo. Se centró en el poder de los Valar gesticulando para enfocarse y terminó gritando en la antigua lengua.
Desapareció para volver a encontrarse en otro sitio. Tardó algunos segundos en verlos. Los caballos estaban a unos cincuenta metros al norte de donde había aparecido. Suspiró satisfecho, era momento de escapar.
Motivo: Teleportacion
Tirada: 1d100
Resultado: 42
Motivo: Orientación
Tirada: 1d100
Resultado: 73(+25)=98
El hechizo sale.
Todavía faltan por los valar encomiendo a mis compañeros a su protección, ¿Drustan como están tus heridas, puedes aguantar?.
Ástomer puedes asomarte por el montículo para ver que ha sucedido , debemos de saber a que se debe este silencio.
Turno 220
- Aguantaré amigo mío. - Responde el beórnida transmitiendo en su voz la sonrisa que llevaba desde que recuperó su libertad.- ¿Sabeis cómo podría volver a mi estado normal? Invisible no puedo llamar a mi halcón.
Turno 220
Me dirijo al monticulo ante el comentario de Elorham e intento ver que ha ocurrido con los orcos y si nos siguen tras haber galopado durante largas horas y puesto tierra de por medio.
Motivo: percepcion
Tirada: 1d100
Resultado: 23(+65)=88
Resolución Turno 220
Ástomer, Drustan y Elhoram siguieron esperando mientras nada hacía ver que sucediese algo. Quien mirase al grupo sólo vería al rohirrim y al montaraz y dos caballos más. Pasó un minuto tenso en el que nadie sabía muy bien qué hacer. El barullo del campamento orco había disminuido bastante. Finalmente los orcos debían haberse organizado.
Después, cerca de ellos, Laufinwë les habló sin alzar la voz. El elfo había llegado sin hacer demasiado ruido pero no se le veía por ningún sitio. Subió a un caballo y de nuevo las riendas del jumento se sostuvieron en el aire. Había traído el equipo perdido y es que los orcos habían guardado todo empaquetado en el mismo sitio. No había tiempo de sacar nada de allí pero era una buena noticia. No se encontrarían totalmente indefensos si les sorprendían.
He conseguido llegar. Hice ruidos para que me siguiesen en otra dirección.
Esta vez era la voz del erudito que se subió al último caballo. Adronath no llegaba. Drustan y Laufinwë confirmaron que el dunadan estaba herido en la pierna. Era sin duda quien más tiempo iba a tardar en llegar. Eso si tenía la suerte de que no le cogiesen.
Pasó otro largo minuto antes de que finalmente llegase el dunadan, gruñendo debido al esfuerzo de forzar la herida. Tuvieron que compartir dos de los caballos. Sólo habían recuperado cuatro jumentos después del combate y habría que tener cuidado de no cansarles en exceso.
Los orcos podían haber seguido la falsa pista de Zigur o no pero el caso es que no les habían detectado todavía. Era momento de cabalgar hacia la libertad.
Estáis aproximadamente en donde he marcado en el mapa. (La x marca el lugar :))
Último post antes de cerrar la escena. No volveré a hacer escenas paralelas y que una influya en la otra. No sí puedo evitarlo. Ha sido un verdadero lío.
Por fin estabamos todos. Adronath y Zigur tardaron mas en llegar, uno por la herida y el mago por intentar despistar a los orcos. Buena idea, pensé.
- Tenemos que salir de aquí cuanto antes, podemos dirigirnos al este y buscar el vado de los Ents, quizás al otro lado del Entaguas podamos descansar y dar reposo a los caballos, no nos conviene cansarlos mucho.
Zigur, creo que tu pesas menos que el resto, puedes compartir tu montura con Adronath y cambiar de caballo cada hora para no fatigar siempre al mismo.
Motivo: buscasendas
Tirada: 1d100
Resultado: 9
Master, distancia a caballo hasta el vado de los Ents??
** Puedo usar el sortilegio de Buscasendas*; el montaraz adquiere un esquema mental de la situacion y rutas de uno o todos los caminos en un radio de 1500 metros. Este sortilegio solo puede usarse al aire libre.
*No sé si es necesario hacer tirada (espero que no, xDD)
Resolución Turno 220
Bien tu eres nuestro guía Ástomer, nadie mejor que tu conoce el terreno, en cuanto a ti miré al dunadan debo de mirar esa herida en cuanto hayamos salido del peligro no es bueno cabalgar así, y acto seguido saqué un trapo y le hice un torniquete en la herida para que aguantara algo la hemorragia. Espero que sea suficiente para poder cabalgar hice un gesto asintiendo y después monté en mi caballo para seguir al montaraz.
Turno 221
PNJTizado
Debemos ir a Lorien. Debemos buscar refugio allí si es que queremos tener alguna posibilidad de salir con bien de esta. Mucha suerte hemos tenido en este rescate y probablemente nos seguirán el rastro.
Era extraño escuchar su voz salir del aire pero el tono era el del erudito a quien todos conocían.
El montaraz se concentró unos segundos y al alzar el rostro parecía mirar al infinito. Su serio rostro recordaba los antepasados de otros tiempos, henchido de sabiduría y serenidad.
Mientras te mantengas concentrado podrás orientarte perfectamente en un radio de 1,5 km a tu alrededor y encontrando el trayecto más rápido hacia donde quieras dirigirte.
Al mirar la herida te das cuenta de que ya ha recibido algún tipo de tratamiento. Una serie de trapos muy apretados mantienen el músculo en su sitio. A pesar de lo burdo los trapos mantienen el músculo desgarrado en su lugar.
Cada seis horas debe aflojarse la ligadura y volver a apretarla para que la sangre circule sin impedimento. Tal vez tus oraciones puedan ayudar a acelerar la cura.
Lanzando dos sortilegios en cuanto tengas tiempo (ahora no, porque te podría llevar varios turnos y no sé si los querréis perder) el músculo y los tendones deberían recuperarse en unas horas completamente.
Turno 221
El beornida carraspeo ante las palabras del erudito.
Zigur lleva razón. Deberíamos perder el rastro de los orcos y curar nuestras heridas.
Tras una pequeña pausa continuó con titubeos en la voz.
Loríen es buena idea pero antes deberíais saber que Tumladen ha muerto. No sufrió.
Finalizó consternado
Posteo desde móvil y no puedo montar bien los mensajes. Voy a estar un tiempo sin internet en casa.
Editado por el master: Para poner bien los diálogos
La noticia de Drustan me sorprendió. Ya sabía de los riesgos de nuestra misión, pero siempre era motivo de tristeza la perdida de uno de los componentes de la compañía.
- Rezaremos por nuestro compañero, pero ahora, más que nunca debemos partir y llevar el mensaje a su destinatario. Que la muerte de Tumladen no haya sido en vano!! digo a modo de subir la moral del resto
Tras esto, cierro los ojos y tras concentrarme unos segundos, los abro mirando en dirección al este. Seguidme, y sin volverme espoleo al caballo rumbo al Entaguas para cruzarlo y bordearlo hacia el norte en dirección a Lorien.
Vi como el vendaje que apretaba la pierna del dunadan estaba bien hecho aguantará en cuanto paremos te sanaré. De repente escuché las palabras de la muerte de Tumladen ¿no podemos rescatar su cuerpo? cuando veo al montaraz encaminar su marcha un momento debemos de... y me tuve que montar en mi caballo para seguir la marcha de mis compañeros. Aunque me costaba aceptarlo Ástomer tenía razón, sino partíamos enseguida morirían más de los nuestros...
Resolución Turno 221
Adronath no dijo nada. Aunque soltó algún gruñido debido a su pierna. Los orcos les habían mantenido vivos y a él le habían cuidado la herida de modo cruel pero eficaz. Todavía recordaba aquella escoria apretándole el vendaje, satisfecho de causarle daño con sus manejos. Le habían curado para no tener que retrasarse por su invalidez.
Los orcos caminaban largas distancias a gran ritmo y estaban espoleados de algún modo extraño pues no tenían por costumbre tomar prisioneros. Peor aún, de algún modo habían sabido buscarles y perseguirles. Estaban avisados. ¿Acaso tenían oidos en el concilio? Cavilar sobre aquello era perturbador.
Hok llegó volando y alegremente se posó en el hombro del beórnida, mordisqueándole la oreja de modo cariñoso y satisfecho, agitando las alas y dando pequeños graznidos de júbilo.
Primero desenterraron el mesaje donde Zigur lo había puesto y luego, diestramente guiados por Ástomer, avanzaron lo más rápido que pudieron dadas sus condiciones y el tener que compartir caballos. Alternaron aquellos que llevaban varios jinetes para cansar a todos por igual y cabalgaron al trote un tiempo y al paso cuando los caballos mostraban señales de cansancio. De un modo o de otro avanzaron durante seis horas antes de osar tomar un respiro.
El montaraz había conseguido de algún modo encontrar el modo de avanzar con rapidez y sin desviar el rumbo. Conforme las sombras se alargaban llegó el momento de parar para dormir, evitando hacer fuego para no ser detectados se veían abocados a comer comida fría o trozos de carne curada que algunos llevaban. Había sido un verdadero golpe de suerte que encontrasen el caballo que llevaba el equipo o de otro modo se habrían visto obligados a comer lo que pudiesen cazar o las piedras del camino.
Laufinwë había conseguido recuperar el equipo que les habían arrebatado y que los orcos habían juntado en una gran manta que ataron después con un fuerte nudo. Tal vez al despertar el día pudiesen ver si estaban cerca del río o no pero la humedad del aire hacía intuir que no estaban demasiado lejos ya. Se sentaron, cenaron y se dispusieron a descansar agradeciendo a los Valar haber escapado de momento y por los pelos de aquella peligrosísima situación.
Los que habéis sido capturados debéis quitaros cualquier equipo que sea comida o dinero, se lo han quedado los orcos.
Los que habéis sido capturados debéis apuntaros un punto de destino por haber escapado de los orcos.
FIN DEL CAPITULO II