Partida Rol por web

El oponente logra evitar el golpe por poco, sus heridas no lo han detenido, sigue siendo peligroso, Mikelus lo sabe, pero no se rendirá, evade el ataque de su oponente, vuelve a tomar distancia y ataca con su lanza, es cuestión de tiempo o suerte para que su oponente caiga.

Thionel reacciona al movimiento de Sir Mikelus y rápidamente le sigue, evitando que el otro caballero pueda golpearle con la enorme lanza. No piensa dejar que le siga humillando con un arma no destinada al cuerpo a cuerpo en un torneo.

Aunque está enfadado, Thionel no se deja llevar por la ira y mantiene la concentración. Girando el martillo, golpea de nuevo al otro caballero, ésta vez en un costado, alcanzando un punto débil y viendo como Sir Mikelus se inclina ligeramente hacia ese lado debido al impacto. "¡ESE ARMA NO ES PROPIA DE UN CABALLERO EN UN TORNEO!¡RENDÍOS O LUCHAD COMO UN CABALLERO DE VERDAD!"

Mikelus ya no está interesado en la victoria, solo ataca con la intención de dañar a su oponente, es consiente que su estilo de lucha es descuidado, exponiéndolo a  ser golpeado con facilidad, sin embargo Mikelus no siente ninguna amenaza en su oponente, este no demuestra ninguna  sed de sangre, mi deseo de matar y se limita a lanzar golpes con la ingenua actitud de buscar su rendición. Mikelus es un guerrero táctico, ha encarado la muerte muchas veces y considera la actitud de su oponente ingenua y absurda, si este duelo fuera una batalla real, ya estaría muerto.
Mikelus prepara su lanza, toma distancia y arremete contra su oponente.

Su contrincante parece realmente furioso, lanza los golpes con saña, con dureza, buscando hacer daño. Thionel se da cuenta que el combate ha pasado de ser un combate en un torneo donde se busca la gloria y el honor de la victoria a un combate donde lo que se busca es dañar gravemente al otro contrincante. Sir Mikelus se está poniendo serio. 

Thion duda que el interpelado le escuche, así que deje de gritarle y se concentra en el combate.

Durante unos segundos no se oye otra cosa que los golpes de los contrincantes, el arrastrar de pies y sus jadeos al coger aire para imprimir más fuerza a sus golpes. La gente que contempla el combate se ha quedado muda durante unos momentos, al parecer, también se han dado cuenta de que las cosas se han puesto más serias. Tras esos segundos, al unísono, vuelven a rugir, aplaudiendo y animando. Al fin el combate es lo que ellos esperaban. 

Thion vuelve a interponer su escudo en la trayectoria de la lanza y con un golpe sordo la aparta de sí hacia su izquierda, a la vez que avanza y entra de nuevo en la guardia del caballero contrario. Lanzando un golpe en diagonal, de arriba a abajo ésta vez, trata de alcanzar el hombro izquierdo de Sir Mikelus, pero el golpe es irrisorio... se ha acercado tanto que ha golpeado con el mango del martillo sin causar ningún tipo de daño.......se oyen abucheos de una parte del sector del público y una exclamación de sorpresa de la valla protectora, desde la zona donde está la hermana del caballero....

La aptitud agresiva de Mikelus ha presionado al oponente de forma efectiva, su oponente no logra agarrar el ritmo para atacar y su último intento fue  muy endeble. Ignorando todo lo que le rodea, Mikelus solo se concentran en atacar con su lanza, pero la férrea defensa de su oponente le ha impedido lograr otro golpe limpio.
Poco a poco Mikelus empieza a recobrar la calma, serenando su mente, pero aún guarda en sus recuerdos aquellos días de soledad y desprecio de su familia, Mikelus siempre ha odiado a los nobles, a pesar de ser un noble,  no estaba interesado en torneos y ni ganarse el favor del duque, pero fue Algus Malganis el que lo persuadió, lo convenció que este torneo encontraría buenos oponentes, aunque Mikelus había forjado confianza con él, no era tonto, sentía que algo no andaba bien, pero no le dio demasiados rodeos, accedió venir al torneo, pero Mikelus no encontró los desafíos deseados, una vez más, es víctima del menosprecio y la discriminación de los nobles, que interfieren en su duelo, imponiéndole límites a sus habilidades.
Pronto Mikelus regresa en sí, su oponente sigue refugiándose en su escudo, en su mirada se observa perplejidad, acaba de entender, que esta dejo de ser un mero espectáculo, esto una batalla real.
Mikelus toma distancia, con firmeza y determinación se ataca con furia a su oponente, no le interesa ganar su tonto torneo, si no enviarle un mensaje a los nobles, de que Mikelus destruirá a cualquier oponente que se le crucé. 
Mikelus golpea y acierta, su lanza por fin logra impactar, causando daño serio a su oponente, un buen golpe, que alegra el espíritu estoico de Mikelus.

Thionel ha dejado de seguir los pasos rápidos del caballero y se limita a cubrirse con el escudo y tratar de alcanzar el cuerpo del contrincante con el martillo. Esto es en serio, tiene que poner los cinco sentidos, no puede contenerse. El adversario está enfurecido y debe acabar cuanto antes con la pelea. 

Lo ve retroceder, adelantar el cuerpo y lanzar una estocada, muy rápida, baja el escudo y la para, pero cuando piensa que el otro caballero está retrocediendo el arma y da un paso adelante para atacar, Sir Mikelus da un rápido y fuerte volteo a la lanza y le clava la punta en la pantorrila, causando un desgarrón en la pierna, por donde empieza a manar sangre en abundancia....

"Arrhhh....por Kiri-Jolith......¡no me rendiré!" pronuncia Thionel con los dientes apretados. Con un golpe de izquierda a derecha, aparta la lanza con su escudo y tras una temeraria maniobra de giro, alcanza a duras penas a Sir Mikelus en el brazo derecho, golpeando con fuerza. 

"¡Lo alcanzé por tercera vez! ¡He vencido!" grita Thionel mientras levanta el arma al cielo....

Mikelus logra un impacto, su oponente está herido pero su tenacidad le da merito, este saca fuerza de su voluntad y lanza su ataque de respuesta, logrando impactar en el expuesto Mikelus, el golpe es fuerte, lo hace retroceder, pero aún está en pie, pero se da cuenta, de que ha acumulado bastante daño, por sus imprudentes ataques, su brazo se le entume, ya no siente la mano, pero aunque no la sienta, aún puede sostener su lanza con firmeza. Para Mikelus la batalla no ha finalizado, su oponente sigue en pie, de nuevo toma distancia y ataca con su lanza, no tiene deseos de detenerse, la batalla sigue.

Thionel mira hacia la zona de los jueces y a punto está de costarle un disgusto. Ve como ellos mueven la cabeza diciendo que no y que todo el mundo sigue jaleando y gritando. En el último momento se da cuenta que se ha equivocado y rápidamente levanta el escudo con mayor firmeza poniendose de nuevo en posición de combate, cuando ve a Sir Mikelus retroceder otra vez, más lento, aún aturdido y levantar la lanza con sus enormes brazos para atacarle. La distracción de Thionel le ha dado tiempo para recuperarse del golpe y tomar distancias. Thion desvía por poco el ataque, y rápidamente, adelantándose y entrando de nuevo al cuerpo a cuerpo, lanza un nuevo golpe en un arco abierto de derecha a izquierda y de abajo a arriba, dirigido ésta vez al interior de la pantorrilla izquierda de su enemigo, dispuesto a terminar el combate de una vez.

"Menos mal que nadie puede ver debajo de mi casco...¡debo de tener la cara más roja que mi sangre! Mira que equivocarme así.....¡qué vergüenza!"

Los movimientos aturdidos y lentos de su contrincante propician que Thionel pueda golpear, esta vez sí, en el punto deseado. El impacto da de lleno en el interior del muslo de Sir Mikelus y ésta vez Thionel no se relajará hasta que oiga a los jueces detener el combate.

Enhorabuena a los 2 habeis terminado el combate

De nuevo el ataque falla, Mikelus sufre por el daño y le cuesta impactar, su oponente por su parte, recupera los alientos, lanza su ataque y de nuevo impacta, el golpe es fuerte, el caballero se tambalea, pero es terco, ignora el dolor y se lanza de nuevo al ataque, con firmeza sostiene su lanza, ha recibido varios impactos, ataques que normalmente esquivaría, pero decidió abandonar su estilo de combate por una más burdo y  anticuado.

el combate ya habia acabado, podeis calcular nueva puntuacion con los resultados

Thionel escucha las trompetas que anuncian el final del combate y suspira aliviado, parece que esta vez sí, lo ha logrado. Mira de reojo para cerciorarse durante un momento hacia los jueces y ve que indican por gestos el final del combate también. La gente comienza a aclamarle y a aplaudir, cuando un fuerte sonido de sorpresa se escucha.

Va a bajar el escudo aliviado cuando, gracias al sonido (un fuerte "OH" proveniente del público) de repente ve que Sir Mikelus arremete contra él de nuevo, atacando con su lanza en un claro intento de herir de nuevo. Con un par de pasos hacia atrás y bajando el escudo, esquiva fácilmente el ataque del caballero.

"¡HEY! ¡YA HEMOS ACABADO! ¡PARAD! ¡DETENEOS!"

Thionel retrocede ante el ataque de Sir Mikelus y permanece alerta, totalmente a la defensiva. A voz en cuello, le grita al escudero del caballero negro:

"¡ESTO NO ES LEGAL! ¡MAGO, DETENEDLO!"