Partida Rol por web

Balafor vio como Ilun se alejaba del grupo.

Eh Ilun!! Donde vas? tenemos una mision que cumplir y seria muy util contar con tus habilidades arcanas. Vanga, vayamos a descansar y luego nos ponemos en marcha por el camino del cementerio.

La hechicera conocida como Mágica de Hechizo piensa por unos segundos y luego hace un encantamiento sobre el fimir. Un rayo sale disparado de su cayado y alcanza al monstruo hipnotizado, cubriéndolo por unos segundos de una extraña luz. El fimir duda por unos momentos, pero dice luego:

- ¡¡Ahora Mágica ser mi amiga, mi otra amiga!! ¡¡Yo obedecer a Mágica!!

Mágica susurra a otro personaje:

- Le he hecho un hechizo suplementario. Ahora me obedecerá a mí y no a Ilun, al menos por ahora. Por esto no hemos de preocuparnos... o no por el momento. Procuremos que el hechizo no se rompa.

El contratador se despereza un poco la espalda, se levanta de la roca de donde estaba sentado y dice:

- Lo siento, ya he esperado demasiado. Parece que nadie quiere hacerme ninguna pregunta más. Y no voy a esperar ni un minuto más, no. Me marcho ya mismo. Conservad bien el pergamino con mis indicaciones. Mucha suerte con el resto de la misión. - Señala a una cercana colina - Y allá detrás de esta pequeña colina está el cementerio; no es muy grande pero tiene su tamaño. Recordad: tenéis que atravesarlo, ¡¡no podéis rodearlo!! Y tras el cementerio está el pueblo del jefe orco Argon a quien debéis matar, tras cruzar el cementerio; también hay un pueblo fronterizo con una tienda para comprar material, lo encontraréis fácilmente tras cruzar el cementerio. Sobretodo, procurad que ningún orco os vea más temprano de la cuenta. Y no digo nada más. Recordad que podéis consultar el pergamino siempre que queráis. ¡¡Mucha suerte campeones!! ¡¡Espero volver a veros algún día!! ¡¡Chao!!

Y el contratador, sin decir nada más se gira, os da la espalda y, en la oscuridad cada vez más creciente, mientras Mágica le hace un gesto de despedida, le veis cómo se dirige al pueblo, a corta distancia, como cruza tras una esquina y desaparece de vuestra vista.

No parece que tiene ningún sentido ahora ir a buscarle. La ciudad no es tan pequeña y no tenéis ni idea de a donde puede haberse ido (él no dijo a donde se iba). Quizá entre en algún edificio, puede que viva en la ciudad misma. Además, probablemente se ofenda si viera que en cierto modo lo perseguís en contra de sus indicaciones. Mucho me parece que es mejor continuar la misión e ir rumbo al cementerio...

Sólo el destino sabe si lo volveréis a ver...

En estos momentos un pergamino suelto va cayendo del aire hasta el suelo. ¿De donde debe haber caido? Quizá nunca lo sabréis... En todo caso, Max lo recoge y lee en el mismo lo siguiente:

"Felicitaciones!! Habéis superado con éxito la primera etapa de la misión. Ahora toca la siguiente, la del cementerio... Que los hados del destino os protejan, os hará falta!!".

Y, sin ninguna ironía, aquí mismo se acaba esta etapa de la misión... pero la aventura aún continua...

¡¡Muy buena suerte para el resto de la partida, jugadores míos, incluido el nuevo reciente!! Según como vayan las cosas, puede que esta muy buena suerte os haga mucha falta, no digo más...

FIN DE ESTA ESCENA.