-¿Que qué vamos a hacer? ¡Pues divertirnos, hermano! ¿O acaso crees que me voy a quedar quieto, a pesar de la guardia que haya en este lugar? ¡Si no son mas que obstáculos!
Mientras avanzaba junto a su hermano, sonreía y parecía cada vez mas y mas activo, como si de un momento a otro pudiera romper a correr o saltar y desaparecerse de allí.
-Seguro que encontramos cosas que hacer, si tanto miedo te da la seguridad.... cobarde.
Aquello lo había pronunciado a sabiendas del efecto que podía llevar consigo. Era menester ver si con ello lograba pincharlo un poco.
Os encontráis en la inmensa sala central del ala izquierda del zepelín.
Es una gran estancia de unos cincuenta metros de longitud por treinta de anchura, está decorada de un modo muy lujoso y llamativo. Varias estatuas adornan el lugar junto a una carísima moqueta y hay además, una gran lámpara de araña en el techo. Hay tres filas de cómodos sillones que dejan paso a dos amplios pasillos laterales.
Las puertas del fondo del pasillo son recias construcciones de roble tallado donde hay dos guardias, uno en cada puerta, luego en la puerta por donde habéis venido se encuentran otros dos guardias custodiando la entrada al Gran Salón.
Enumerando desde arriba para abajo la fila de sofas de la izquierda que hay libres, sólo la fila 3 y un asiento.
Enumerando desde arriba para abajo la fila de sofas centrales que hay libres, sólo la fila 2.
Enumerando desde arriba para abajo la fila de sofas de la derecha que hay libres, sólo la fila 7.
Por si lo dudan se encuentran en la gran sala que viene indacada con un 1.
Una mejor vista de la sala en la que os encontrais.
Mi arma… no me gustaba dejar mi arma, aun que no había necesidad de que me reconocieran ó algo por el estilo, me lo repetía mucho; había viajado por muchos lugares y estas ciudades siempre eran suntuosas, pero siempre me arrancaba una sonrisa ver a las familias sin sufrir las penas de los pueblos.
La verdad tanta emoción empezaba a tener sus repercusiones , mis ideas vagaban sobre este nuevo invento
Y si es una farsa, los humanos no pueden volar sin magia, como algo inanimado y no mágico puede volar, tal vez no sea tan grandioso.
Si bien eso pensaba mis piernas temblaban de emoción al avanzar por el pasillo a ver la nueva maravilla de los hombres.
-¡Vahh!… cállate- fue lo único que le respondió a su hermano ante aquel insulto.
Luego por fin la presencia de ambos hermanos se suma a la sala central del zepelín. Yreth como gesto habitual ya. Vuelve a visionar la estancia recalcando los lujos que conforman la decoración, pasando de las gentes.
Su mirada alcanza al techo y vislumbra la lámpara de araña. Su surda se dirige al hombro de Ethan y lo zarandea mientras pronuncia llama su atención.
-tío, tío, tío, tío, tío…- señalando con la mano libre y aun continuando el zarandeo comenta emocionado - ahí hay que subirse si o si, ¿apostamos a ver quién lo consigue antes de que termine el viaje?- sonríe mientras vuelve su cabeza para contemplar a su hermano y reparar a su contestación aunque ya sabía cuál sería la respuesta.
El muchacho sonrió ante el último comentario de su hermano, ilusionándose como el y acaba gritando de emoción, dando saltos en el lugar.
-¡Joder! ¡Te has vuelto una nenaza!
Tras lo dicho trató de buscar un modo de subir allí, inspeccionando el lugar con las piernas semiflexionadas, ansioso de encontrar una ruta por la que llegar. Sin embargo ya había empezado a correr, aún sin rumbo
Sin mucha afán, Glen hizo lo que le indicaban y entregó el billete de embarque.
Tengo curiosidad por ver cómo van a hacer que este armatroste vuele, piensa para sí.
Contemplando las gentes que se reúnen en el lugar, comienza a analizarlas con la mirada.
Siento la brevedad del post, pero no sé qué más postear pues la situación de mi personaje no ha cambiado mucho :P
Cuanto más te acercas al final del pasillo más gritos de asombro escuchas procedentes de la sala continua.
Al parecer al fin tus ojos podrán ver la máquina con la increible capacidad de poder volar por el inmenso cielo.
Solo faltan unos pocos pasos más antes de traspasar la puerta, tras la cuál el mundo tal y como lo conoces cambiará, aunque de eso eres desconocedor aún.
El magnífico zepelín se encuentra delante tuyo.
Ves que el zepelín se encuentra en un inmenso patio interno del edificio, las paredes del patio están llenas de ventanales donde mucha gente observará el despegue. Por una puerta cercana ves a varias personas con trajes rojos y dorados llevando carritos con equipaje hacia el zepelín.
La alfombra roja ahora se divide en dos y cada una se dirije a uno de las alas del zepelín. Justo donde se bifurcan los caminos hay un hombre que va indicando a la gente a cuál dirigirse tras un breve vistazo a los billetes de embarque.
Alcanzas la bifurcación de la alfombra roja y delante tuyo se encuentra el encargado de ir indicando a los pasajeros a cuál de las dos alas del zepelín han de dirigirse, si al de la derecha o el de la izquierda.
Entregas el billetes de embarque y tras revisarlo, susurra unas breves palabras:
-Billete de embarque de clase alta.
Te lo entrega de nuevo y te indica que has de seguir por la izquierda e ir hacia el ala izquierda.
Sigues hasta aproximarte al ala izquierda del zepelín, con cada paso con el que te acercas parece aún más impresionante la máquina voladora.
Se trata de un descomunal zepelín de tres cuerpos unidos entre sí por cuatro largas pasarelas de metal. Toda la escturtura está bellamente tallada de un modo tan aerodinámico como ostentoso, que trata de imitar el estilo de los regios navíos del principado. Las dos barcazas laterales están destinadas a los viajeros y sus camarotes, mientras que en el cuerpo centrl se encuentra la bodega de carga y el puente de mando.
Te pones a la cola para subir.
Tras darle un breve vistazo al billete de embarque lo parte en dos pedazos de diferentes tamaños. El de mayor tamaño lo mete por la abertura de una ranura de la caja dorada que tiene a su lado en una mesita, el pedazo pequeño te lo devuelve; en el viene indicado el número de camarote que te ha sido asignado.
-Por favor guardelo hasta final de trayecto, es posible que se lo puedan volver a pedir una vez a bordo y también para si necesita reclamar algún objeto que pierda y no se percate de ello hasta encontrarse fuera del zepelín una vez estemos en Arkángel.
-Bueno ya puede pasar a bordo del zepelín.
Con una mano extendida hacia atrás te invita a subir a bordo.
Subes la pequeña escalerita de madera que han puesto para que los pasajeros puedan subir con facilidad a la altura del zepelín.
Al entrar al zepelín entras en un pasillo en forma de "L" por donde otra alfombra roja te va indicando la dirección que debes seguir. A ambos lados en las paredes de madera hay varios cuadros con paisajes exóticos. En la pared de la derecha una puerta de hierro gruesa donde supones que se encuentra la maquinaría que hace que el zepelín pueda surcar los cielos.
Un poco más adelante antes del cruce hacia la izquierda siguiendo la alfombra roja, dos guardias están en otra puerta, la cuál tiene una pequeña ventanita circular por donde ves que se va al cuerpo central del zepelín tras recorrer un breve y peligroso paseo por un puente que une el cuerpo central con el ala izquierda.
Tras cruzar y seguir la ruta en la pared de la izquierda hay una puerta en la que se puede leer claramente en Latín, Ogashima y Jashú las palabras Baños y justo delante tuyo unas puertas dobles abiertas de par en par con de nuevo otros dos guardías a cada lado te dan paso a una sala muy amplia, llena de asientos en los cuales sentarse y disfrutar de las increibles vistas; ya que en las paredes de los lados de la sala se encuentran ventanas. En la izquierda puede verse perfectamente las paredes del edificio por el que habéis entrado y a muchisima gente observando el zepelín desde el mismo edificio por balcones y ventanas abiertas. A la derecha podéis ver el ala central y parte del suelo si te acercacas lo suficiente.
Al fondo de la sala hay dos puertas y en cada una se encuentra apostado un guardia.
Te encuentras en la inmensa sala central del ala izquierda del zepelín.
Es una gran estancia de unos cincuenta metros de longitud por treinta de anchura, está decorada de un modo muy lujoso y llamativo. Varias estatuas adornan el lugar junto a una carísima moqueta y hay además, una gran lámpara de araña en el techo. Hay tres filas de cómodos sillones que dejan paso a dos amplios pasillos laterales.
Las puertas del fondo del pasillo son recias construcciones de roble tallado donde hay dos guardias, uno en cada puerta, luego en la puerta por donde habéis venido se encuentran otros dos guardias custodiando la entrada al Gran Salón.
Enumerando desde arriba para abajo la fila de sofas de la izquierda que hay libres, sólo la fila 3 y un asiento.
Enumerando desde arriba para abajo la fila de sofas centrales que hay libres, sólo la fila 2.
Enumerando desde arriba para abajo la fila de sofas de la derecha que hay libres, sólo la fila 7.
Por si lo dudan se encuentran en la gran sala que viene indacada con un 1.
Una mejor vista de la sala en la que os encontrais.
Si te quieres colgar sobre la lampara de araña que hay, hazme una tirada de saltar, para ver si logras alcanzarla, xD.
Y si es una apuesta para ver quien llega antes, tirad por iniciativa, atletismo y luego saltar.
Luego si queréis que mole más el salto, podéis hacerlo con una tirada de acrobacias más estilo.
Exportado el reto, recibe una réplica. Y como esperaba Ethan comienza a buscar la forma de conseguir superar todo aquello que considere un modo más de medir sus capacidades o lo que es lo mismo divertirse.
Yreth no iba a ser menos. Iniciado los movimientos de su hermano actúa casi con la misma rapidez, como si sus conciencias estuviesen conectadas y ambos supiesen que iba a suceder. Ya solo dependía de la suerte…
Tirada: 1d100(+110)
Motivo: Iniciativa
Resultado: 77(+110)=187
Tirada: 1d100(+70)
Motivo: Atletismo
Resultado: 8(+70)=78
Tirada: 1d100(+55)
Motivo: Saltar
Resultado: 62(+55)=117
Tirada: 1d100(+70)
Motivo: Acrobacia
Resultado: 61(+70)=131
Tirada: 1d100(+25)
Motivo: Estilo
Resultado: 37(+25)=62
Trato de no mostrarme sorprendida… en serio no debería estarlo… ya he volado por los cielos… pero aun así… esto es producto de las manos humanas, no puedo detectar fuentes de nergia, mana ó zeon. Una inspección mas profunda seria sospechoso.
Trato de mantenerme en la fila sin que se descubra mi curiosidad, pero al percatarme que la gente se muestra mas curiosa que yo me relajo un poco y pienso sobre esta… herramienta para volar… creo que alguien la había llamado maquina.
A momentos trato de encontrar el engaño, es muy grande para volar, mas bien parece una roca voladora, a no se que sea de aire, pero el aire no sostiene a las personas… de ser así todos podrían volar, tampoco se veían alas escondidas, nada, absolutamente nada me decía que esta cosa volaría de manera natural. Pero durante todo el tiempo una parte de mi sabia que volaría, las manos del hombre prometían un milagro a la altura de las deidades mismas.
No pude evitar pronunciar en voz alta.
-Con esto el hombre esta a tan solo unos pasos de ser dios
Glen se adentró por fin en aquella mole voladora. Alcanzó una enorme sala llena de sofás y buscó un sitio libre algo apartado. Decidió sentarse en la fila de sofás de la derecha, en la séptima fila que estaba libre. Se acomodó en el sofá acariciando con la mano la textura del mueble y miró por la ventana a las gentes que observaban el aparato desde los balcones. A continuación centró su atención en los viajeros que se encontraban más cerca. Había personas de todo tipo, desde las típicas familias ricas hasta misteriosos individuos de extraños ropajes.
Me andaré con ojo, pensó Glen manteniéndose alerta.
Así que encontró como subir. De un salto se colocaría en una de las paredes para escalar en una caminata vertical hasta la lámpara, realizando desde allí otro salto para afianzarse a aquella lámpara de araña: Todo aquello con su digno estilo, acrobático y loco. Desde que comenzó a saltar, Yreth estaba siempre en su punto de mira. La rivalidad entre ellos, al menos, era sana, y no se mataban por ello.
Así que suponía que los guardias los seguirían desde atrás. Habría que tener mucho cuidado con errar.
Tirada: 1d100(+15)
Motivo: Salto
Resultado: 41(+15)=56
Tirada: 1d100(+45)
Motivo: Acrobacias
Resultado: 34(+45)=79
Tirada: 1d100(+95)
Motivo: Iniciativa
Resultado: 94(+95)=189
Tirada: 1d100(+20)
Motivo: Atletismo
Resultado: 43(+20)=63
Tirada: 1d100(+10)
Motivo: Estilo
Resultado: 21(+10)=31
Tras un rato de permanecer en la cola, al fin es tu turno para entrar.
Un hombre con un gran bigote marrón te observa y sonrie cuando te tiene delante suyo. Lleva un traje de colores rojos y dorados, como todos los trajes que has visto de los que trabajan en el zepelín.
-Es un día soleado, perfecto para volar.
Vuelve a sonreir.
-Billete de embarque por favor.
Permanece a la espera de que hagas entrega del billete de embarque.
A ambos lados de la entrada del zepelín dos guardias llevan consigo unos portaestandartes con el escudo de Gabriel dibujado. Además, llevan enfundadas unas espadas largas en sus cinturones.
Tras darle un breve vistazo al billete de embarque lo parte en dos pedazos de diferentes tamaños. El de mayor tamaño lo mete por la abertura de una ranura de la caja dorada que tiene a su lado en una mesita, el pedazo pequeño te lo devuelve; en el viene indicado el número de camarote que te ha sido asignado.
-Por favor guardenlo hasta final de trayecto, es posible que se lo puedan volver a pedir una vez a bordo y también por si necesita reclamar algún objeto que pierda y no se percate de ello hasta encontrarse fuera del zepelín una vez estemos en Arkángel.
-Bueno ya puede pasar a bordo del zepelín.
Con una mano extendida hacia atrás les invita a subir a bordo.
Subes la pequeña escalerita de madera que han puesto para que los pasajeros puedan subir con facilidad a la altura del zepelín.
Al entrar al zepelín entran en un pasillo en forma de "L" por donde otra alfombra roja va indicando la dirección que deben seguir. A ambos lados en las paredes de madera hay varios cuadros con paisajes exóticos. En la pared de la derecha una puerta de hierro gruesa donde suponéis que se encuentra la maquinaría que hace que el zepelín pueda surcar los cielos.
Un poco más adelante antes del cruce hacia la izquierda siguiendo la alfombra roja, dos guardias están en otra puerta, la cuál tiene una pequeña ventanita circular por donde se puede ver que se va al cuerpo central del zepelín tras recorrer un breve y peligroso paseo por un puente que une el cuerpo central con el ala izquierda.
Tras cruzar y seguir la ruta en la pared de la izquierda hay una puerta en la que se puede leer claramente en Latín, Ogashima y Jashú las palabras Baños y justo delante vuestro unas puertas dobles abiertas de par en par con de nuevo otros dos guardías a cada lado dan paso a una sala muy amplia, llena de asientos en los cuales sentarse y disfrutar de las increibles vistas; ya que en las paredes de los lados de la sala se encuentran ventanas. En la izquierda puede verse perfectamente las paredes del edificio por el que habéis entrado y a muchisima gente observando el zepelín desde el mismo edificio por balcones y ventanas abiertas. A la derecha podéis ver el ala central y parte del suelo si se acercan lo suficiente.
Al fondo de la sala hay dos puertas y en cada una se encuentra apostado un guardia.
Te encuentras en la inmensa sala central del ala izquierda del zepelín.
Es una gran estancia de unos cincuenta metros de longitud por treinta de anchura, está decorada de un modo muy lujoso y llamativo. Varias estatuas adornan el lugar junto a una carísima moqueta y hay además, una gran lámpara de araña en el techo. Hay tres filas de cómodos sillones que dejan paso a dos amplios pasillos laterales.
Las puertas del fondo del pasillo son recias construcciones de roble tallado donde hay dos guardias, uno en cada puerta, luego en la puerta por donde habéis venido se encuentran otros dos guardias custodiando la entrada al Gran Salón.
Enumerando desde arriba para abajo la fila de sofas de la izquierda que hay libres, sólo la fila 3 y un asiento.
Enumerando desde arriba para abajo la fila de sofas centrales que hay libres, sólo la fila 2.
Enumerando desde arriba para abajo la fila de sofas de la derecha que hay libres, sólo la fila 7.
Por si lo dudan se encuentran en la gran sala que viene indacada con un 1.
Una mejor vista de la sala en la que os encontrais.
Cuando todos os encontrabáis al fin en el Gran Salón buscando el lugar más cómodo donde sentaros. Las dos personas más alocadas de toda la estancia comenzaban una competición por ver quien de los dos conseguía subir hasta la lámpara de araña que colgaba del techo.
La delantera la tomo Ethan, por unas milesimas de segundo comenzo a correr antes que su hermano. Pero Yreth no pensaba rendirse y logro alcanzarlo en la carrera antes de que ambos saltarán con la intención de aferrar con sus manos una de las tantas partes de la lámpara.
Ethan que había mantenido un buen ritmo no logro alcanzar la lámpara por varios centímetros.
Yreht que había alcanzado a su hermano casi al final antes de saltar, logro rozar la lámpara, pero no consigió aferrarse a ella cayendo como su hermano al duro suelo de madera.
Sorprendido y disgustado, Glen negó en silencio con un gesto de cabeza.
Menuda pareja de descerebrados... pensó tapándose los ojos con la palma de la mano. Espero que no tarden mucho los de seguridad en tomar partido.
Glen apartó su mirada hacia la zona exterior del zepelín otra vez para, a cotinuación, volver a analizar a los presentes dentro del artefacto.
Posteo solo para el director ¿no? Porque se supone que estoy solo y paso desapercibido entre la gente.
Una vez sentada en su asiento, Alyss no pudo evitar dirigir su mirada hacia los dos ruidoso muchachos que competían por alcanzar y trepar por la majestuosa lámpara y cuando ambos dieron con sus huesoso en el suelo, tampoco se esforzó por contener la franca sonrisa de satisfacción que que asomó a sus labios.
Eso por borregos... Y eso que tampoco era tan difícil.
Negando con la cabeza ante infructuoso intento de ambos muchachos, la joven desvió la mirada hacia la ventana, y en particular la multitud congregada para ver alzarse al zepelín. Luego, volvió a pasear su mirada por los presentes en el interior.
Supongo que esto no tardará mucho en ponerse en marcha. Y más vale, o la gente empezará a ponerse nerviosa, y como a todos les de por trepar a la lámpara, esto no acabará bien.
A menos que me digas lo contrario, entiendo que debo marcar a todos los presentes, master.
Sonrió ante lo sucedido, ese pequeño momento de locura juvenil me arranco una sonrisa y borro el miedo y la tensión que sentía sobre este viaje, mire a los dos muchachos que habían hecho tal locura.
Una vez relajada mire con curiosidad todo, desde los armados y aparejos de la nave que extrañamente me recordaba a un barco desde adentro, hasta la gente que ocupaba los asientos. Una y otra vez me preguntaba como podrían hacer que algo tan gigantesco se moviera por los aires, por un momento me sentí de nuevo como aquella niña que compartía las navidades con su hermano.
Dentro de poco… una nueva era iniciara… el hombre demostrara que puede superar a los dioses si controla el vuelo, la era del hombre sobre los dioses iniciara…
marco a todos igual, perdon por la demora pero la modificas ion de la pagina me norteo y no supe entrar por 1 semana