No, no había funcionado. Si no hubiesen aparecido los lobos, Pícara se hubiese dedicado a golpear los árboles hasta que se hubiera cansado (poco probable) o se hubiera quedado sin ellos. Seguramente, si el "cabras" no tuviese dónde saltar, no tendría escapatoria posible, y podría hacer que sus ojos mirasen el interior de su fea cabeza cornuda.
¡Joder! ¿Dónde está Cíclope o Gámbito para quemar los árboles? pensó en voz alta, pues la solución a su problema era simple. Que todo ardiera, y así el "cabras" no tendría más remedio que dejarse ver. Si había más animales agresivos por allí, no tendrían más remedio que quemarse. Todo eran ventajas.
Resoplando, dejó al árbol tranquilo, que en su infinita paciencia seguro que se lo agradeció. Se giró y miró a los lobos. Bueno, mejor dicho, miró al lobo que parecía querer devorarla.
Cuidado, cariño, que me estás comiendo con los ojos y seguro que te siento mal soltó una de sus típicas frasecillas. No todas las iban a decir el cara-red y el loco de las pistolas, ¿no? Salió corriendo hacia el lobo y le intentó sofocar sus necesidades vitales de un buen sopapo en los morros.
Tirada oculta
Motivo: Superfuerza
Tirada: 1d100
Dificultad: 5-
Resultado: 13 (Fracaso)
La espera volvió a ser tan larga como la última vez, el narrador parecía querer dedicarse a otra cosa que no fuera matar a los personajillos que sus jugadores habían creado. Sí, vale, matar a Spidey es un placer que debería ser mucho mayor que el de la Vida Real TM pero no se podía tener todo en esta vida. Así que, mientras que Thor también parecía tener cosas mejores que hacer, y ya de paso jugarse su permanencia en el juego éste de Zodiaco, el resto se dedicaban a enfrentarse a los primeros malos de Zodiaco.
Y para sorpresa del narrador y ya de paso el resto de miembros, las cosas empezaron a salir bien, que digo bien, ¡muy bien! Lobezno la había empezado a liar, como de costumbre, estaba tan cabreado porque el anciano les había dejado tirados, que se lanzó contra uno de los lobos cercenando su cuerpo en dos partes. Para cuando se dio cuenta, con el otro brazo había cercenado el cuerpo de otro de los lobos. Y en cuanto se puso de pie, uno de los lobos se abalanzó contra él, y se clavó las garras de adamntium de Logan. Sin que los demás se dieran cuenta, y no solo los demás, sin que él se diera cuenta también, Lobezno había acabado con tres de sus congéneros. Y es que, efectivamente, Gandalf le había mosqueado mucho, por suerte el anciano no había estado ahí presente, porque lo mismo ni hubiera podido contarlo.
El siguiente en reaccionar, y para disfrute del director fue nuestro querido y maravilloso Spidey, que con su asombrosa puntería, no solo falló contra el lobo, si no que su red fue a pegarse a un árbol, y como el hombre-araña era tan fuerte, logró arrancarlo de raíz, con tan mala suerte que al lanzarlo por los aires le golpeó en toda la sesera. El pobre y desgraciado Peter, perdón, desconocido, (no vayamos a desvelar su identidad secreta), se dio tal golpe que cayó de bruces quedando a merced de los lobos que aún resistían.
Y entonces llegó Masacre, que tal y como indicaba su nombre, es que Deadpool no me mola, se lió a tiro limpio contra todos, y sí, parece que Kami en el fondo en un blando, haciendo una terrible masacre. El encapuchado disparó contra dos de los lobos que se abalanzaban contra Spiderman. Les pegó unos cuantos tiros y alguno que otro dio en pleno cráneo de los animales. Así el verborréico arácnido, pudo respirar tranquilo porque aún podría seguir abanzando hacia la siguiente casilla. Y así Masacre ya sabía que Spidey le debía una. Y que seguro que podría usar a su favor.
Ya solo quedaban dos de los lobos, y Grover, no nos olvidemos de Grover. Pero entre Pantera y Pícara dieron buena cuenta de ellos. El primero no tardó ni un solo instante en tomar a uno por el pescuezo y romperle el cuello en un momento, y la segunda le dio tal bofetón al último lobo en pie que lo estampó contra el árbol más cercano. Para sorpresa de todos, o quizá no, la sacudida del árbol fue tan inconmesurable, que Grover cayó desde lo más alto del más alto árbol. La caída fue brutal, y el hombre cabra había quedado en una mala posición. Era hora de acabar con él y tomar el ónice, si lograban eliminarlo, podría avanzar y seguir hacia delante para continuar con aquel horriblle juego.
Spidey, tú has tenido que sacar la tirada mala, así me quedo agusto, porque tus compañeros... madre mía... ¡que suerte tenéis!
Poco supo el trepamuros si a Pícara los lobos se la intentaron comer o no, lo que sí supo, fue como a resultado de su habitual “suerte Parker” terminó por comerse un árbol en lugar de sacudir a su presa como la mochila de un niño en su primer día de colegio. -¿Alguien pudo anotar la matrícula de ese camión?- Protesto e inquirió el arácnido a sus compañeros medio incorporándose del suelo y frotándose las cervicales. –***¡Ay!*** Y digo: ¡¡AY!! ¿Soy yo, o hay un puñado de Gatas negras con alas vuelan dándome vueltas alrededor de mi cabeza? ¿De qué están hechos esos árboles? ¿De huesos de Hulk? ¿De Adamantium? –Su cuestionable humor se disparaba automáticamente incluso antes de la recuperación del uso de la razón, y con ello saber que lo peor, por el momento, había pasado, y ésta vez gracias a Masacre que le había salvado el pescuezo si bien no su integridad de orgullo (algo que no olvidaría y que el mercenario bocazas se aseguraría de que así fuese). -¿Tía May, ya hemos llegado?- Bromeó por última vez, levantándose convulso, aparentemente medio ebrio, escrutando el escenario y recordando donde estaban (y el peligro que corrían de no volver nunca más a NY). -¿Quién habría dicho que terminaría echando de menos el bigotito nazi del pelo-cepillo?- Murmuró para sí empezando a preocuparse por el hecho de haber fallado ese tiro tan simple. ¿Estarían fallando en el peor de los momentos sus poderes? ¿Y suponía eso que se estaba muriendo? ¡¿Otra vez?! -*Ay*
El olor de la sangre lo enturbió todo. Llenó todos sus sentidos, y como si fuera droga que llevara a Lobezno a un estadio mayor, apenas se dio cuenta de lo que llegaba a hacer.
Un lobo cayó de manera casi cómica. Sencilla. Las cuchillas hacían muy bien su trabajo. El mejor.
No hubo piedad, no hubo remordimientos. Ni para el primer caído, ni para el siguiente. Ni para el otro.
La supervivencia llamaba, y sólo los más preparados para ella podrían seguir adelante. Y a Logan se le podían dar mal muchas cosas, pero no sobrevivir.
Con la camiseta carmesí, y el corazón latiéndole muy deprisa en su pecho, giró sobre sí mismo contemplando su obra. No, no se arrepintió. Los lobos habían escogido su camino. Lobezno el suyo. Y, como en todos los juegos, sólo un bando puede ganar.
Ensanchó la sonrisa cuando el trabajo se cumplió de manera casi profesional. Los lobos cayeron, y la cabra montesa también. Un deje de orgullo y cierta satisfacción recorrieron el interior de Lobezno. El cabrío se lo tenía merecido por ponerse en medio.
Al ver a Spiderman en tal estado, se acercó a él, y con una ceja levantada le ayudó a poder a andar sin que se desplomara.
-Vamos, coged la maldita piedra, y sigamos- indicó sin mencionar a nadie en particular, dando unos cuantos pasos hacia delante cogiendo a Spiderman por el brazo, pasándoselo por detrás del cuello y así avanzar juntos.
A cada paso que daba, deseaba más reencontrarse con el cobarde Gandalf.
Móvil u.u
Te lo avisé, perro sarnoso dijo Pícara al ver cómo su fuerza no le había fallado esta vez y el lobo se vio lanzado contra un árbol. Moviendo la cadera hacia el lado derecho, y apoyando su mano derecha sobre ella, usó la izquierda para moverse el pelo justo en el momento en el que el hombre-cabra caía al suelo.
¿Te has roto los cuernos? Creo que te puedo romper algo más... La muchacha salió corriendo hacia él. Una parte de su ser le decía que podía volar y dejarlo caer, pero temía que ese poder no la funcionara del todo esta vez.
¡Dejame salir, zorra asquerosa! ¡Te mataré, te mataré! Miss Marvel había elegido ese momento para gritar dentro de la cabeza de Pícara. Pero ella ya estaba acostumbrada y, en vez de gritar como una histérica o darse puñetazos hasta arrancarse el cerebro, decidió usar la inteligencia de la que a veces se caracterizaba.
¡No dejéis que se mueva! Voy a ver qué oculta en su pequeño cerebro. ¿No quieres un besito? Deja que te de uno Aún así, la joven no se quedó quieta, seguía corriendo hacia su futura víctima.
Tirada oculta
Motivo: Absorcion de recuerdos
Tirada: 1d100
Dificultad: 1-
Resultado: 42 (Fracaso)
Todos los perros murieron con mucho rojo- que conste que en la realización de esta partida SÍ se han maltratado animales. Queda todo más real- y consiguió salvar al lanzaredes del ataque de las bestias. Masacre, indumentado con una armadura de caballero, o al menos eso pensaba él, e imaginándose a Spiderman con un disfraz de princesa- y luego dicen que está loco- se acercó a él, pensando que era una ella.
-Os lo dije, joven dama, Masacre guarda vuestra espalda para que no temáis peligro alguno, sin pedir nada a cambio- no se lo cree ni él, seguro que cuando nadie mira le pide algo obsceno- No tenéis nada de qué preocuparos. Y ahora, si me disculpáis...
Miró a Glover. Pícara le había tirado del árbol y ahora quería para ella toda la diversión- no cuenta con las ganas de matar del Mercenario Bocazas- así que corrió hacia él.
-Hoy, cenamos, Cabraaaaa- sacó sus machetes dispuesto a masacrar te habrás quebrado con el chiste- Y quien parte, se reparte la mejor parte.
Por desgracia, no habían tiradas de iniciativa ni nada parecido- pues vaya mierda de rol- y como Pícara se lo había "pedido" antes, no había nada que pudiera hacer que Masacre fuera el primero en atacar al carnero humano. Y con atacar, me refiero a jugar a que Glover es un puzzle.
Tirada oculta
Motivo: En cuantos trozos se puede trocear una cabra (cuerpo a cuerpo)
Tirada: 1d100
Dificultad: 4-
Resultado: 52 (Fracaso)
Pretendo, obviamente, cortar a cachitos a Glover si no se me adelanta Pícara.
Tras medir fuerzas con el animal, y vencer, Pantera asintió como gesto de respeto hacia su cadáver. Muchas veces había tenido que acabar con la vida de un animal, pero lo hacía cuando no tenía más remedio, ya que respetaba al espíritu de la naturaleza en todas sus formas.
Se giró a tiempo de ver cómo Pícara lanzaba a su oponente contra uno de los inumerables árboles de la zona, que al estamparse hizo caer a Grover, su objetivo.
Como la mujer y el desquiciado mental de rojo se lanzaron directamente a por el fauno, T'Challa decidió subir a las primeras de las ramas cercanas ágilmente, para intentar interceptarlo si trataba de saltar de nuevo.
Tirada oculta
Motivo: Velocidad, Reflejos y Agilidad aumentados
Tirada: 1d100
Dificultad: 3-
Resultado: 52 (Fracaso)
Esta vez Spidey gastó su tiempo en decir unas cuantas tonterías como ya era costumbre en él, y en recuperarse del golpazo que se había dado él mismo con el árbol. Lobezno se acercó hasta él y lo tomó del brazo para ayudarle a seguir avanzando. No esperó a que el resto se hicieran cargo de Grover, sino que dando por hecho que el trabajo había sido finalizado, decidió continuar hacia lo más profunda de aquella selva, confiando en que llegarían hasta donde se había marchado el viejo.
Pícara decidió actuar y se acercó al hombre-cabra, se agachó y le dio un tierno beso. Y entonces sus ojos se tornaron en blanco y empezó a sentir cosas que jamás había sentido hasta ese momento. Además el vello de su cuerpo comenzó a crecer a un ritmo vertiginoso y de su cabeza brotaron dos diminutos cuernos. Sin duda, Pícara había obtenido los poderes del primer guardián, pero también parecía haber obtenido alguna cosa más. Masacre sacó sus machetes, o eso es lo que creía él había sacado, porque en el equipo solo había puesto que llevaba katanas y se acercó hasta él. Y haciendo algo poco usual en superhéroes, o en una partida de esta ambientación, Masacre hizo una auténtica masacre, otra vez haciendo el mismo chiste, y descuartizó el cuerpo de aquel híbrido.
En cuanto eso sucedió, todo comenzó a temblar... algunos árboles comenzaron a desplomarse. Cerca de él se encontraba el ónice que debían recuperar, y aquel escenario empezaba a desvanecerse. Muerto el guardián solo quedaba una opción, avanzar o morir. Y eso es lo que hicieron los demás, así que T'Challa debería bajar de alguno de aquellos árboles, pues Grover ya no escaparía.
Lo malo es que aquel derrumbamiento ya se había cobrado a la primera víctima. Tras varios árboles cayendo, una rama había atravesado el corazón de Thor. Aquel al que todo el mundo consideraba un semidios, y aunque ahora Marvel había decidido convertirlo en mujer, no volvería contar niguna historia asgardiana. El hermano de Loki había fallecido de una forma triste y poco común en un metahumano de sus características. Pero así eran las reglas del juego, el que no avanzaba, moría.
Grover es un joven sátiro buscador que dedicaba su tiempo a proteger semidioses, al igual que la mayoría de los sátiros. Sin embargo, el hecho de que no tuviese su licencia de buscador ya antes de traer a Percy al Campamento Mestizo, pudo ser debido a que no tuvo mucho éxito en sus misiones anteriores de traer semidioses.
En algún momento, se encontró con los semidioses Thalia, Luke y Annabeth, que viajaban juntos, y trató de llevarlos a todos al Campamento, a la vez que eludían las fuerzas del Inframundo. Hades, después de enterarse de que había nacido una hija de Zeus, envió perros del infierno y otras criaturas tras ella. A lo largo del camino, Grover cometió algunos errores que les puso en peligro con otros monstruos, incluyendo los cíclopes, que fueron un trauma para Annabeth durante mucho tiempo. Mientras Grover se hacía responsable de los errores cometidos, Thalia le confensó a Percy que la culpa fue de Luke, ya que este buscaba luchar con monstruos al estar enfadado con su padre, a quién conoció en la casa de su madre. Conforme se acercaban a la frontera del Campamento Mestizo, Thalia se quedó atrás y le encomendó a Grover que llevase a Luke y a Annabeth al campamento. Así lo hizo, pero a costa de la vida de Thalia.
Más tarde, Grover fue enviado a la escuela de Percy y pasó el suficiente tiempo con él como para estar seguro de que era un semidiós. Grover fue enviado para proteger a Percy, sin embargo, ambos se hicieron buenos amigos. Con el tiempo, al sospechar que Percy era un semidiós my poderoso, llamó a Quirón, quién se personificó como el profesor de latín de Percy.
En mitad del entrenamiento de Percy, Zodiaco lo secuestró y lo nombró primer guardián y protector del Ónice. Le entregó poderes sobrenaturales, así como la capacidad de saltar entre dimensiones y control de los animales y la naturaleza. A cambio de ello debía proteger el escenario en el que había sido colocado y si lograba impedir el avance de los participantes del juego, lograría volver a su hogar.
Pícara se llevó las manos a la cara, y se giró para apartarse del hombre-cabra. El cuerpo de éste, al igual que su agilidad, estaba pasando a su interior, pero no sólo eso... Los recuerdos también.
En su interior, una batalla a tres se desató. Miss Marvel parecía haber escapado de su prisión mental, y se enfrentaba a la debilitada Pícara, que evitaba que Grover le clavara sus cuernos
-Estúpida, me has matado, ¡me has matado! ¡Percy estará perdido sin mí!
-¡A mí me quitó la vida! ¡Me has destruído, y yo te destrozaré a tí!
Ambas mentes se acercaban a la muchacha, que se arrodillaba mentalmente, intentando protegerse.
No, dejadme, dejadme, yo no quise, ¡fue sin querer, fue sin querer! Pero la fuerza mental de Pícara era mayor de lo que ella misma sabía. Su cuerpo, lleno de rabia, dolor, culpa y resentimiento, se convulsionó mientras su mente se enfrentaba a los dos infiltrados. Así, a base de golpes, consiguió devolver a su prisión a Miss Marvel. Y Grover le demostró sus grandes y oscuros secretos.
Cuando abrió los ojos, vio el destrozo de Masacre. Se acercó hasta él y le dio una colleja ¡Gilipollas! ¡Él había secuestrado como nosotros, no teníamos que haberle matado! Con que nos diera la piedra era sufi...
Y todo empezó a temblar. Los árboles parecían querer sepultarles. ¡No seréis mi caja de madera, guapos! dijo la joven, golpeando un par de troncos que tenían como misión clavarla como si fuera un corcho. No fue así para Thor, cuyo martillo ya no soltaba las chispas de siempre.
¡Uno menos! Si no queréis ser los siguientes, ¡corred! gritó, tras coger la piedra y salió de allí.
Personalidad 1: Vaya, ya nos hemos cargado a uno, quedan más.
Personalidad 2: ¿Qué dices? Yo me quedo, estamos bailando al son del malo ese, y sus esbirros ni siquiera son tías buenas.
Personalidad 1: ¿Y tú que sabes? Solo hemos visto a uno. El siguiente puede ser una top model.
Personalidad 2: He dicho que me quedo.
Personalidad 1: Si te quedas, mueres, son las reglas.
Personalidad 2: Pero soy inmortal, me regenero. Además, la rubia de minifalda se quedó en el puente desobedeciendo a Zodiaco y sigue viva, que lo sé por el offtopic.
Personalidad 1: Déjate de metaroleo y vámonos.
Personalidad 3: ¿Qué es ese ruido? ¿Queréis callaros?
Personalidad 1: Estamos decidiendo qué hacer. Si morir, o seguir cortando cabezas.
Personalidad 3: ¿Y para esa m&%$ me despertáis?
El debate interno de personalidades, que ni siquiera cesó cuando le dieron una colleja, seguía en su cabeza, pero se ha omitido el resto para no ser cargante- como si no lo fueras ya de por sí- Masacre estuvo a punto de quedarse solo por joder cuando recordó la joya. Pícara la había cogido, la muy pícara, pero Masacre salió tras ella, con los símbolos del dólar iluminando sus ojos.
-Me callo que has cogido la joya si me das un porcentaje de lo que saques por ella.
Tras contemplar el desmembramiento del sátiro, Pantera se lleva la mano a la cara en un gesto de facepalm en toda regla ¿en que demonios está pensando este tío? En fin, creo que su boca es más rápida que su mente, así que todos lo sabemos ya.
Cuando comenzaron los temblores, se deja caer de la rama, que ha dejado de proporcionarle una ventaja táctica y, sin más remedio, sigue a la pareja que había conseguido atrapar al difunto Grover en la dirección que había tomado Gandalf, ¿qué habrá sido de él?
En su carrera, trataba de asimilar lo que había presenciado durante la caída, Thor, un dios, atravesado por una simple ramita, estaba claro que aquel no era un mundo normal, y si alguien tan poderoso como el hijo de Odín había caído con tanta facilidad, T'Challa que era un humano tendría que andarse con cuidado si no quería ser el siguiente...