Partida Rol por web

-Si, cierto...- Murmura. Se lleva los dedos pulgar e índice al puente de la nariz y lo frota, con fuerza, como intentando que se le pase un dolor de cabeza, que de hecho en este momento es lo que tiene. Todo es cada vez más confuso. Le hablan de una plaga o algo así, una infección que se transmite por los fluidos y que, al parecer, ha dejado la ciudad tal y como está ahora. Craig de repente ha dejado de ser la única cara amiga para pasar a ser un extraño personaje, propio de uno de los episodios malos de Expediente X. Y luego está ese policía, el del perro, que parece un tipo decente, que de hecho cree lo que dice, pero es evidente que no parece tener demasiadas luces. Habla sin tener información, y con las pruebas que dice haber reunido no se podría detener ni a Marylin Manson. Y luego el resto, gentes extrañas... Margaret nunca había sido muy sociable... No le gustaba demasiado la gente, en general. Tardaba en confiar en alguien para algo más que darse los buenos días. Suspira. 

-Es... lógico. Oye, perdona, Craig, pero me he pasado una noche muy larga sin dormir encerrada en un despacho, comida por mis propias neuras, y al salir me encuentro esto... El policía ese me azuza su chucho pulgoso... Hasta me amenazó... En fin, lamento el comportamiento neurótico. Salgamos de aquí, y rápido. Y por ahora, sugiero que no nos separemos. Al menos que tengamos alguien en quien confiar.- Por supuesto, es mentira, pero mentir si se le da bien, así que por ahora es mejor mantener a su colega y a la muestra cerca. Con suerte, incluso podrá quitársela. Pero eso será luego. Parece que algunos se disponen a marchar y no quiere quedarse sola. 

- No te preocupes... lo entiendo... - te consuela

Margaret dibuja media sonrisa. -Gracias.- Dice, en voz baja. -Vamos fuera, no vaya a ser que nos dejen aquí tirados.-