Partida Rol por web

Raras, señor? - por la mente del sargento cruzo la imagen de Dodson aullando mientras le explotaba la cabeza de forma inexplicable - A que se refiere? Algun tipo de nueva arma enemiga?

¿Cosas raras, señor? ¿Armas secretas?

El mayor niega con la cabeza.

- Simplemente informen si ven algo raro - dice cortante y hace un gesto para que abandonéis la sala. El adjunto os acompaña fuera dejando claro que la entrevista ha acabado.

El adjunto al mayor guía a la compañía hacia el sótano de la casa, donde se guardan los suministros. Una gran habitación abierta llena de cajas vacías que da cierta sensación de no haber nada. A pesar de ello señala a una esquina donde perfectamente colocados hay cajas con abundante munición, un kit médico completo, diez granadas, un bazooka con tres cargas y el último satchel de explosivos que debe quedar en toda Bélgica.

- Por favor, cojan todo lo que necesiten - dice el cabo mientras coge un pizarrín para anotar lo que os lleváis.

Johnson camina despacio hacia la munición, sin hablar. Sin mirar ni siquiera el bazoka, se acerca al satchel, lo examina detenidamente comprobando que todo esté en buenas condiciones y como quien recoge la fiambrera con el almuerzo lo mete en su mochila. Coge una granada y la coloca en la cinta de su uniforme, coge una segunda, pasea la vista alrededor, como contando y también la añade a su munición.

Tras comprobar que la munición de su arma reglamentaria también está completa vuelve a su sitio y de camino mira a los ojos del Sargento: ¿Hay algo en su Biblia y en sus citas que explique lo que todos vimos?

Estoy listo, señor. salvo porque yo no debería estar aquí si no fuera porque tengo que estar aquí.  

Hank se dirige al bazoka que ha ignorado Hayden. Lo levanta y lo examina detenidamente. Se lo lleva al hombro ensayando que dispara, a través de la mirilla, se imagina que ve una columna de panzers que avanzan confiados hacia él, ignorantes de su presencia. 

-Bang! dice en voz baja mientras en su imaginación se desarrolla la escena en la que hace estallar el infierno entre los blindados alemanes.

Con una sonrisa de satisfacción se cuelga el arma a la espalda y busca munición con la mirada, pensando cómo cargará con ella.

-¿Cómo llegaremos hasta el tren?¿Iremos en jip o andando?

Como una mañana de navidad... - dice Showalter amargamente al ver que apenas son restos con los que equiparse y viendo claro que la misión va a consistir más en improvisar sobre la marcha que otra cosa.

Su mirada fue hacia el satchel pero Johnson fue más rápido que él y ya lo estaba guardando en su mochila.

¿Está seguro que sabe manejar bien eso? - dijo elevando la voz ligeramente, habiendo comprobado que el compañero era duro de oído. Casi parecía estar usando ese tono que usaría con el abuelo en la cena de navidad cuando le pregunta si le ha gustado el puré.

Mientras Buster recuerda al típico sobrino jugando con el rifle de aire comprimido recién desenvuelto del papel de regalo, él decide coger munición y un par de granadas, antes de que venga otro también a levantarle los objeto explosivos.

-Vaya, necesitaremos matar algunos granaderos  nazis, aqui no hay municion de Kar-98.-

Dice Alberto inspeccionando el almacen.

-Pero seguro que le doy un buen uso al kit medico.-

Se dirige al sargento; -Sarge, wi nid kil grenadiers, ai nid quei 98 amo.-

- Me temo que tendrán que andar hasta la estación. No tenemos vehículos disponibles - aclara el cabo mientras se acerca a un lateral de la habitación. Allí coge un rollo de papel grande y lo despliega en una de las mesas. Es un mapa topográfico de la zona, en él esta marcada la estación y se puede apreciar que esta rodeada por esvasticas nazis. -  Esta es la situación al último informe. La estación esta a unas 10 millas de la ciudad. - mientras habla señala varios puntos en el mapa.

¿Está seguro que sabe manejar bien eso?

Pues no es precisamente con lo que más me gusta jugar. Si me das a elegir, teng... tenía muchas opciones mejores en Boston. Pero sí, sé qué debo hacer con ello y cuando, aunque yo que tú mantendría tu blanco y tierno culo a cubierto cuando me veas abrirlo llegado el momento.

El grupo recoge el material y se dispone a andar hacia su destino...

Espero que no le falle el pulso... - murmuró nada convencido de que el abuelete fuese a manejar la carga mejor que él*.

Fatty tomó munición en abundancia, quería masacrar nazis, y un par de granadas.